CAPÍTULO 4
Intenté dormir, pero di varias vueltas en la cama. Los ruidos de la fiesta de Halloween plagaban la ciudad y he de admitir que aquella festividad era mi preferida.
Tenia la imperiosa necesidad de salir, ¿Y si intentaba disfrazarme con lo que tenía en el armario?, un disfraz de bruja no es tan difícil...
Sería una bruja sin gorro, más original...
Corrí al cuarto de baño a maquillarme y que el traje quedara más exacto al de una bruja. Me puse una falda negra larga, unas botas altas del mismo color y una camiseta con un pequeño escote. Entre mis joyas pude encontrar un colgante con una lágrima de cristal de color amarillo; perfecto para el disfraz.
Rebusqué en el bolso para dar con mi pintalabios y me topé con el panfleto que un alumno estaba repartiendo en la universidad.
La fiesta parecía interesante, iban a poner música e iban a contar leyendas de terror de Mistery Spell; quizás encontrara más información interesante.
En cuanto a la programación de esta noche, me parecía interesante el baile de Halloween, parecía divertido.
A pesar de ser profesora, pasé mas tiempo siendo alumna y no puedo evitar sentirme como tal. Sé que la gente se sorprenderá al verme, pero quizás no llame mucho la atención porque mis alumnos solo me habían visto una vez y parecía una estudiante más.
La música sonaba en cada rincón de la ciudad y al mirar la hora me di cuenta de que el baile iba a comenzar.
En el centro del campus habían colocado un enorme piano de cola y un chico pálido ya estaba en posición para tocar. Uno a uno fueron subiendo al escenario y el chico comenzó a tocar.
El idiota que había interrumpido en clase iba armado con una guitarra y tocaba ante millones de suspiros femeninos. Varios coros comenzaron a cantar, inundando el campus de cuerpos bailando y pasándolo en grande. Admito que me contagié del entusiasmo y comencé a bailar; lo estaba pasando en grande.
Mis ojos se desviaron al chico rubio que esta mañana me había intimidado. Estaba tras la batería y estaba disfrazado de vampiro; bastante realista la verdad.
De entre toda la armonía, una voz especialmente chillona comenzó a chirriarme los tímpanos. Una chica enseñando un amplio canalillo con su melena rubia recién planchada al viento bailaba como si de una sala de striptease se tratara; era realmente ridícula.
Pero quizás yo era la única que lo pensaba porque el género masculino parecía hechizado.
"hice mi primer descubrimiento en Mistery Spell, encontré una bruja"
Comencé a reír mientras iba a por una bebida de una de las mesas.
Cuando me giré hacia el escenario, aquel rubio se relamió los labios mientras me miraba y comencé a atragantarme de la impresión, ¿Qué cojones...?
Aquella rubia ponía una y otra vez su trasero delante de aquel rubio con intención de que ella fuera su centro de atención, pero siempre encontraba algún momento para mirarme y eso me ponía nerviosa; yo era su profesora maldita sea, debe tener un poco de respeto.
La actuación acabó y los chicos recibieron una ovación comparable a un grupo de rock y ellos hicieron la reverencia en señal de agradecimiento.
La rubia comenzó a abrazarse con el típico grupito de niñatas que en vez de disfrazarse parece que van medio desvestidas.
Aquel rubio y el pianista los había perdido de vista; es como si se hubieran esfumado. Yo seguía bailando sola con la copa en mi mano atrayendo la mirada de varias personas; mierda sabían que era la profesora.
Pero lejos de incomodar, la gente comenzó a unirse a mí y bailaban a mi ritmo como si yo fuera la anfitriona de la fiesta. No me molestaba, de hecho, era bastante gracioso porque yo nunca me hubiera imaginado bailar con mi profesor de latín de la universidad.
Pero alguien tiró de mi brazo para sacarme del corrillo; era el estúpido de clase.
-Buenas noches señorita Sun, un bonito disfraz, realmente original...
-Gracias-Le dije con tono molesto.
-Me preguntaba si podíamos charlar un poco; es nueva en la ciudad y parece realmente joven para ser profesora.
-Antes de charlar, ¿No deberías decirme tu nombre?
"Eso eso, así sé el nombre del idiota para ponerle notas negativas"
-Me llamo Loan y es un gusto tener profesoras tan bellas en Mistery Spell
Aquel niñato me estaba desesperando y estaba a punto de mandarlo a freír espárragos, hasta que la voz de un chico interrumpió mi retahíla de insultos que tenía preparada.
-Loan, ella es tu profesora; deberías de respetarla. Que ella tenga casi tu edad no te da derecho a tratarla como si fuera tu compañera de clase.
Miré a mi salvador y me topé con aquel pálido pianista; gracias a dios que aún quedan caballeros en el mundo.
Loan se fue escopetado de nuestro lado y sonreí aliviada, al igual que aquel chico de ojos verdes.
- ¿Está bien señorita Sun?-Me dijo con una sonrisa amable.
-Sí, gracias a ti y te lo agradezco, y llámame solo Sun.
-Está bien, ven conmigo Sun y tomemos algo.
Yo sonreí contenta y lo seguí entre la muchedumbre hasta la mesa de bebidas y canapés. El chico se disculpó conmigo y me dijo que esperara allí que iba a traer a su hermano. Yo asentí y comencé a comer; discutir con un idiota siempre da hambre. Pero justo cuando tenía los carrillos llenos, el chico vino acompañado del rubio; el batería que no me había quitado los ojos en toda la noche.
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