CAPITULO XVI
— UNA FARSA —
Pasaron días, semanas, un mes, dos meses y Kaia aún no recibía ninguna carte de Regulus. Noto que Peter y Sirius aún recibían de Brook, pero para ella no había nada.
Eso la mantenía preocupada, ¿había hecho algo malo?, estaba segura que no.
Era cinco de agosto y ese día llegarían los resultados de los T.I.M.O.S, Euphemia estaba ansiosa y cada vez que oía graznar alguna ave no tardaba en asomarse por la ventana.
— Ni por los míos se puso así — James dijo.
— Hermano, tu eres caso perdido — Sirius bromeó y James se ofendió fingidamente.
Se escuchó un graznido y lo acompañada un par de aleteos. Euphemia fue la encargada de recibir las cartas y se las dio a Kaia.
— Está también llegó — dijo ella mientras le daba otro sobre a Kaia.
Kaia guardo la otra carta en las bolsas de su vestido y se dispuso a abrir los resultados.
Cuando saco el pergamino lo extendió y comenzó a leer.
TITULO INDISPENSABLE DE MAGIA ORDINARIA
APROBADOS:
EXTRAORDINARIO (E)
SUPERA LAS EXPECTATIVAS (S)
ACEPTABLE (A)
SUSPENSOS:
INSATISFACTORIO (I)
DESASTROSO (D)
TROL (T)
RESULTADOS DE KAIA FLEAMIA POTTER
ASTRONOMÍA: (E)
ARITMANCIA: (S)
ENCANTAMIENTOS: (E)
DEFENSA CONTRA LAS ARTES OSCURAS: (E)
RUNAS ANTIGUAS: (E)
HERBOLOGIA: (S)
HISTORIA DE LA MAGIA: (E)
POCIONES: (E)
TRANSFORMACIONES: (E)
— Mi niña solo ha recibido dos supera las expectativas — Euphemia dijo mientras veía la hoja encima del hombro de su hija. — Que felicidad.
Euphemia abrazo a su hija mientras James recordaba como lo habían reñido a el por sacar un Desastroso en Historia de la magia.
— Felicidades — Remus le dijo y Kaia solo sonrió.
Haber recibido los resultados de sus T.I.M.O.S era una preocupación menos. Ahora tenía la incertidumbre de estar haciendo algo mal por el distanciamiento de sus amigos.
Kaia recordó la otra carta que su madre le había dado y sin pensarlo saco el sobre de su vestido, mientras su madre se dirigía a la cocina probablemente a pegar sus resultados en la puerta del refrigerador, vio el sobre y reconoció la letra pulcra y elegante con la que estaba escrito su nombre.
Estaba un poco emocionada y por eso no se dio cuenta que se le cayó el sobre cuando saco el pergamino que se encontraba adentro.
Hoy a la medianoche fuera de tu casa.
R.B
Ocho palabras simplemente.
Kaia estaba decepcionada pero solo tendría que esperar unas horas para poder verlo. Ese día nuevamente vería a Regulus.
Subió a su habitación y se dispuso a hacer algo para matar el tiempo. Pensó que probablemente podría hacer una depuración de su clóset y así podría darle la ropa a su mamá para que ella la donará.
La señora Potter ya llevaba días diciéndole a sus hijos y los Merodeadores que le dieran toda la ropa que no les quedaba o no utiliza a y que estaba en buen estado.
Después ella la llevaba a casas de albergues u orfanatos que aceptará ese tipo de donaciones.
Durante la tarde, antes de la cena, Kaia se encargo de sacar toda su ropa y aventarla a su cama para después solo regresar al clóset la ropa que seguía utilizando y dejar a un lado la que sería donada.
Cuando termino de acomodar su ropa, se encargo de ahora meter la ropa que sería donada a cajas. Luego llevo esas mismas cajas hacia el vestíbulo de su hogar donde se encontró con las cajas de Remus Lupin. Estaba segura que Hope al enterarse de la acción que realizaría Euphemia se encargo de donar todo lo que fuera posible.
Kaia acomodo sus cajas a un lado y regreso a su habitación, ordenó un poco y después bajo a cenar. Su madre le preparo su comida favorita por las buenas notas que obtuvo.
Kaia sonreía, porque no sabía que más hacer a las felicitaciones de sus padres, y rezaba mentalmente para que la cena se terminará.
Después que el postre se terminó y todos se encargaron de lavar los platos que utilizaron todos subieron a dormir. Kaia se aseguró de colocar su reloj para que sonara un cuarto antes de la medianoche.
Estaba cansada y nomás se acostó cayó en los brazos de Morfeo.
••••
Kaia se sobresalto al escuchar un ruido, pero se quedó tranquila cuando se dio cuenta que era el despertador y recordó que vería a Regulus en tan solo quince minutos.
Se levantó y solo se colocó sus pantuflas y arriba de la pijama se puso un abrigo color beige. Ese día estaba un poco más frío de lo normal.
Se sentó en la ventana y espero que Regulus apareciera. Vio a un chico salir de los árboles y Kaia no tardó en salir de su habitación con cuidado, bajar las escaleras y escabullirse por la puerta de atrás.
Cerro la puerta con cuidado detrás de ella y se acercó a Regulus. El la vio y ella sonrio en su dirección, pefo Regulus simplemente desvío su mirada hacia otro lado.
La sonrisa en su rostro se fue borrando hasta formar una línea recta con su boca.
Kaia se puso frente a el y espero a que hablara. Sabía que algo iba mal desde que evito verla.
— ¿Que pasa? — Preguntó ella.
Silencio.
— Regulus — Insistió.
El chico suspiro.
— No puedo seguir haciendo esto, Potter — Dijo Regulus y Kaia frunció el ceño cuando noto que la llamo por su apellido. El no hacia eso.
— ¿Que quieres decir? — Kaia quería eliminar cualquier duda de su cabeza.
— Llegamos a tanto y no debió ser así.
— ¿Por que?
— Porque no siento nada por ti. Todo esto fue por una apuesta que hicimos Rabastan y yo.
Al escuchar las palabras tan crudas de Regulus, Kaia no pudo evitar sentir un nudo formarse en su garganta.
— Jamás tuve el mínimo interés en ti — Siguió el. — ¿Quién lo tendría?, solo eres la hermana de James Potter. No aspiras a algo más.
Kaia siguió en silencio mientras veía sus pantuflas.
Noto que Regulus dio un paso al frente, quedando así más cerca de ella. Kaia no pudo evitar voltearle el rostro de una bofetada.
— ¿Una apuesta? — Kaia preguntó. — No creo que merezca eso.
— Ni siquiera merecías que te hubiéramos incluido a nuestro grupo. Si nadie quiso estar contigo antes, créeme que nadie lo querrá ahora. — Regulus seguía.
Kaia suspiro y dio media vuelta.
— ¿Brook sabía de eso?
— Siempre lo supo. — Respondió el.
Kaia volvió a darse la vuelta, quedando otra vez de frente a frente.
Alzó su cara y lo miro a los ojos.
— No me vuelvas a dirigir la palabra, ni siquiera te atrevas a mirar en mi dirección.
Regulus separó sus labios dejándose ver sorprendido. Kaia se dio media vuelta y camino hacia el pequeño comedor que tenían en el jardín.
No volvió a mirar hacia atrás ni siquiera para comprobar si el ya se había ido.
Se sentó y subio sus pies a la silla para así abrazar sus rodillas. Soltó un suspiro mientras se dedicaba a observar el cielo estrellado.
No supo cuando tiempo paso ahí, pero cuando se levantó el sol ya se asomaba por el horizonte.
Volvió a entrar a su casa para que nadie se diera cuenta que paso la noche fuera y se dirigió al baño directamente.
Se deshizo de su ropa y se metió a la ducha.
Debajo del agua caliente no aguanto más y se dejó caer al suelo mientras las lágrimas saladas se mezclaban con el agua.
Comenzó a llorar preguntándose que había hecho para merecer eso.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro