Dos días habían pasado desde que Lys Delacour tuvo un encuentro sexual con George Weasley, no entendía muy bien que le estaba pasando, pero desde ese día su cuerpo estaba demasiado caliente, la mayor parte del tiempo se la pasaba excitada y por más que ella trataba de auto complacerse no era suficiente.

Necesitaba tener sexo, quizá se debía a que anteriormente casi del diario follaba con el pelirrojo y su cuerpo estaba hecho estragos por quitárselo tan de repente.

Pero una parte de ella se alegraba, en menos de veinticuatro horas Yaxley debía de terminar con el estúpido hechizo o ella se encargaría de hacerla sufrir mucho, incluso, si eso implicaba usar su parte veela al máximo, no descansaría hasta traer al pelirrojo a la normalidad.

Soltó un suspiro para entrar al pub, había muchos magos riendo y tomando, algunos parecían perdidos en la inconcina.

En el Caldero Chorreante siempre había gente, rápidamente paso entre las mesas para buscar a su amiga.

Zibelth le mando una carta citándola en el caldero chorreante a las seis de la tarde, ya que al parecer tenia algunos socios para ella.

Froto sus muslos por quinta vez en el día tratando de controlar humedad que tenía entre las piernas, pero no funcionaba para nada, a lo lejos distinguió la cabellera azabache de la Black que platicaba animadamente con un rubio, se acercó a ellos, y su amiga al verla se levantó para ir a abrazar en forma de saludo.

—Hasta que llegas, Lys, pensé que tardarías más — Zib tenía unas grandes ojeras y parecía demasiado cansada, como si algo estuviera consumiendo toda su vitalidad, después le preguntaría si estaba bien, le preocupaba verla así.

—Solo llegue diez minutos tarde — dejo la bolsa sobre la silla vacía en medio de los dos chicos —, buenas noches.

Saludo amablemente al chico que la observaba.

—Buenas noches, no le hagas caso a Zibelth, acabamos de llegar.

La voz del rubio era algo suave, pero con un toque de arrogancia, ahora que lo observaba mejor tenía un buen porte y se sentaba completamente recto. Portaba un traje que parecía demasiado fino provocando que su piel luciera más blanca.

—Él es Draco Malfoy — Zib tomo asiento para presentarlos —, un viejo amigo...

—Y también tu ex prometido, Anirak — Draco sonrió levemente al ver que la azabache le lanzaba una mala mirada y le extendió la mano a Lys —, un gusto.

—El gusto es mío, soy Lys Delacour

Estrecharon la mano y ella tomo asiento en medio de los dos.

—Anirak me ha contado mucho de ti, y de tu asociación — fue directo al grano a Draco nunca le había gustado tomar largas para llegar al tema principal —, trabajo en San Mungo como sanador y lo estuve hablando con mi equipo, estamos interesados en dar una gran aportación a Femmes Survivantes al igual que brindar atención médica gratuita cuando sea necesaria.

—¿Hablas enserio? — Lys parecía sorprendida, nunca espero contar con algo así.

—Claro que sí, considero que es una muy buena causa — el rubio hizo una pausa —, de hecho, otro de mis amigos vino conmigo, también está muy interesado en el proyecto.

Draco Malfoy parecía un hombre muy amable, no entendía porque a los gemelos Weasley no les agrada, Zibelth parecía tener una muy buena relación con él.

—Aquí están las bebidas — una cuarta voz se hizo presente, alzo la mirada topándose con un chico moreno que dejo cuatro bebidas en la mesa —, traje whiskey de fuego y para Zibelth jugo de calabaza como lo pido.

—¿No tomas alcohol? — Lys observo con interrogantica a la azabache que tomaba el vaso de jugo.

—No puedo tomar alcohol, Lys.

—¿Por qu...? — Lys medito todos los síntomas que presentaba la chica Black, al igual el hecho de no poder tomar alcohol y que practicara hacer comida para bebé...un bebé, ella no estaba enferma —...espera un momento — Zib sonrió al ver la mirada de Lys — ¿A caso estas...?

—Lo estoy — confeso con emoción —, dieciséis semanas.

—Al parecer aquella comadreja tiene buena puntería — bromeo Draco con una sonrisa burlona, Zib se sonrojo.

—¡Merlín, felicidades Zib! — Lys la abrazo y la azabache correspondió —...no me puedo imaginar lo hermoso que va a ser.

—Ni yo.

—Mientras se parezca a ti y no a su padre — ahora era el chico moreno el que hablaba —, estará todo bien...

—Cállate, Blaise — Zib se separa de la chica Delacour para enseñarle el dedo de en medio, los chicos solo comenzaron a reír.

Lys observo al hombre moreno y lo reconoció de inmediato, se trataba de Blaise Zabini, lo conoció en una fiesta que alguna vez dio Pierre cuando aún no la corría de su casa.

—Por cierto — Zabini la observo fijamente con una sonrisa en el rostro —, es un gusto volverte a ver, Lys, estas hermosa.

—Gracias, me alegro de verte — ambos se saludaron con dos besos en la mejilla.

La vez que lo conoció termino teniendo sexo con él dentro de su vieja habitación, sin duda había sido una muy buena fiesta, no mantuvieron más contacto que esa noche y estuvo bien, en ese entonces a Lys solo le interesaba disfrutar y no tener nada serio con alguien.

Los cuatro estuvieron platicando durante un gran rato con respecto a la asociación, y al parecer contaba ya con tres nuevos socios: Draco Malfoy, Blaise Zabini y la familia Black, al parecer Zib y Sirius estaban comprometidos con apoyar a Femmes Survivantes fuera como fuera.

La velada transcurría tranquila hasta que llego Fred, de inmediato saludo a su esposa, pero no fue como las otras veces, si no que parecía más intenso con el beso que le dio como si marcara territorio, Lys sabía que era por la presencia de Draco Malfoy en ese lugar.

Zib trataba de controlar a Fred, pero el pelirrojo cada que tenía la oportunidad le lanzaba miradas asesinas al rubio que solo parecía querer molestarlo ya que hablaba con la azabache de forma muy animada y a cada rato le decía que algún cumplido causando que el Weasley rabiara.

Lys estaba disfrutando de todo eso, pero de nuevo el calor la recorrió, necesitaba hacer algo para calmarse, se disculpó y se levantó para ir al pequeño baño que tenía el local.

Cuando caminaba entre las mesas para llegar al sanitario, se sintió observada, era una mirada pesada, busco al dueño de ella, pero no se encontró con nadie.

El cuerpo de Lys sentía completamente caliente, como si no pudiera controlarse, su entre pierna quemaba y un alto deseo sexual la invadía. Se recargo del lavamanos que estaba en el pequeño baño, abrió el grifo y se mojó el rostro con el agua helada.

Apretaba las piernas con fuerza tratando de tranquilizarte, inclusive pensaba en cualquier otra cosa, pero a su mente siempre volvía la imagen de ella, follando por lo regular era con George, pero luego la imagen se volvía completamente diferente, solo era a una sombra sin rostro, pero de manos grandes.

Froto sus piernas y pudo sentir un poco de alivio, pero no era suficiente, necesitaba algo más, algo grande y duro...el pene de George.

Se fijó que no hubiera nadie más en el baño, al darse cuenta que estaba completamente vacío se recargo en el lavamanos, está dispuesta a masturbarse en ese momento cuando la puerta se abrió.

—Oye, Lys — el moreno entro al baño viendo a la rubia sobre el lavamanos — ¿Estas bien? Solo saliste corriendo.

La rubia parpadeo durante unos segundos, y de repente él que estaba frente a ella no era Blaise si no George Weasley, Lys ya no tenía control sobre su cuerpo era como si alguien más manejara todo lo que hacía.

Se puso de píe acercándose al chico que solo la veía expectante.

Para Blaise Zabini, Lys Delacour era una mujer demasiado atractiva y sensual con esos ojos de gato llenos de misterio, trago en seco al ver como se acercaba a él, su caminado era lento como si fuera una fiera a punto de atacar.

—¿Lyssane, todo bien?

Ante los ojos de Lys, él que estaba frente a ella era su pelirrojo y no nadie más, de un minuto a otro ella salto sobre él para unir sus labios en un beso demandante y necesitado.

El moreno pareció dudarlo por unos segundos, pero correspondió de la misma forma, tomo su cintura para arrinconarla contra el lavamanos, de un tirón la subió a él, dejo sus labios para bajar por su cuello.

Lys comenzaba a sentirse más húmeda, estaba extremadamente sensible, los besos del chico quemaban sobre su piel, sentía como las varoniles manos de él se colaban debajo de su falda acariciando toda la piel desnuda.

—Sabes muy bien, Lys — musito Blaise, con una mano comenzó a desabrochar los botones de la blusa —... sigues igual de buena que hace años.

Delacour soltó una risa tonta, seguida de un gemido cuando Zabini acaricio su entre pierna por sobre la braga.

—Se siente tan bien...Georgie — murmuro con suavidad, fue tan suave que el moreno no llego a escuchar.

Blaise bajo lentamente los besos a sus senos cuando la puerta se abrió de un golpe, ninguno pudo reaccionar cuando el moreno salió volando, golpeando en la pared.

La rubia se sentía completamente mareada, como si hubiera tomado demasiado y estuviera ebria, no entendía que pasaba y por qué en esos momentos estaban dos Georges en el baño, uno en el suelo y el otro tenía una mirada llena de ira mientras apuntaba con su varita al que estaba tirado.

—¡¿Qué mierda crees que haces con ella?

—¡Ella lo quería! — Blaise se puso de pie tomando sacando la varita para apuntar al pelirrojo frente a él — ¿Tú quién te crees que eres?

— ¡No te interesa! — Lys escuchaba las voces de los dos George de forma lejana, como si estuvieran en otra habitación — ¡Mantén tus manos lejos de ella, maldito asqueroso!

La rubia veía todo borroso, solo escuchaba voces y luego golpes secos, e inclusive algunos hechizos.

—Lys, vamos — la voz de una mujer se hizo presente —...luces mal, ven conmigo.

La dueña de la voz la ayudo a parar y salir de ahí, lo último que vio fue a George Weasley siendo sostenido por su gemelo, el pelirrojo menor parecía muy molesto y tenía rastros de sangre en el rostro como si acabara de tener una pelea.

La mujer que la ayudaba la hizo salir del Caldero Chorreante.

—Lys, reacciona — trato de enfocar a la persona frente a ella y pudo darse cuenta que se trataba de Zib — ¿Estas bien?

—Creo...no sé qué paso.

—Estabas en el baño, Blaise fue a buscarte, después de un rato escuchamos gritos y golpes que provenían del baño — explico la azabache que abrochaba los botones de la blusa de Lys —, Fred y Draco se adelantaron, cuando yo entre ambos trataban de controlar a George y Zabini.

—¿Zabini? — trato de recordar en que momento llego el moreno, solo recordaba cuando George entro al baño tras ella.

—Sí, Lys, Blaise.

—No sé qué está pasando, Zib, no recuerdo muy bien nada.

—Tal vez el whiskey de fuego ya está haciendo efecto — Zib observo a los hombres que venían saliendo, eran los dos pelirrojos parecían discutir.

—¡No te interesa que hago aquí! — George se acercó rápido a la chica —, vamos— tomo la mano de Lys —, tú vienes conmigo.

—¿Qué? ¡Déjala!

Zib tarto de detenerlo, pero George fue más rápido, dio un pequeño tirón a la rubia para ambos desaparecer de ahí, dejando al matrimonio estupefactos.

Ambos se aparecieron en un callejón abandonado, no había ningún rastro de nadie.

—¿Dónde estamos? — Lys seguían sintiéndose demasiado caliente, pero al menos ya tenía conciencia de lo que pasaba en su entorno, deseaba irse a su habitación en Hogwarts para satisfacerse ella misma.

George no respondió y bruscamente tomo su cadera girándola para pegarla contra una pared del callejón, rozo su erección contra el trasero de Lys, ella soltó un jadeo al sentirlo, estaba tan duro y grande.

—Te voy a coger aquí y ahora, Lyssane — murmuro contra su oído mientras llevaba una mano a su entre pierna, metiéndola por debajo de la falda, el pelirrojo era una mezcla de sentimientos; enojo, ira y demasiada excitación, tanta que su miembro dolía —...ni creas que puedes follar con cualquier imbécil que se te ponga enfrente.

La excitación de Lys crecía al sentirlo tan cerca, necesitaba sentir su polla dentro de ella bombeándola con dureza.

—¿Por qué no puedo follar a alguien más? — la rubia jadeo al sentir como rompía con rudeza su braga —, seguramente tú te diviertes mucho con Katie ¿no? Deberías de estar con ella.

—Tu culo me pertenece — mordió la punta de su oreja —, lo voy a follar tan duro hasta que te quede claro que eres mía, Lyssane, ningún estúpido tiene porque tocarte.

—Dile eso a tu novia — murmuro Lys apretando la pared frente a ella con las manos, mientras gemía cuando George acaricio su clítoris con ímpetu.

Las caricias de George eran como brasas ardientes sobre su piel, sentía derretirse con cada movimiento que daba.

—Cierra la boca, Lyssane — George sentía como sus fluidos le humedecían completamente la mano —, estas completamente húmeda ¿es por mi o por ese estúpido de Zabini?

El pelirrojo tomo sus fluidos para llevarlos en medio del trasero de la rubia, lubricando su zona anal, donde comenzó a introducir lentamente uno de sus dedos. Los gemidos de Lys se volvían más fuertes, excitando al chico

Le gustaba sentir los dedos de George dentro de ella, su libido despertaba cuando él estaba cerca.

—Siempre es por ti, y lo sabes.

George sonrió al escuchar eso, llevo una de sus manos al cuello de la chica para poner un poco de presión mientras la otra la ponía frente a su boca.

—Escúpeme— la voz del Weasley estaba ronca y cargada de placer, la mano sobre el cuello de Lys paso a la mandíbula para acariciar su labio inferior —, hazlo, amor, te hace sentir mucho mejor — con el pulgar abrió levemente el labio inferior de Lys, ella lo pensó durante unos segundos, pero escupió en la palma de la mano del chico —, buena niña.

Su pulgar fue rodeado por los labios de la rubia, que pasaba la lengua alrededor del gran dedo de George causando una escena muy erótica, lo succionaba y jugaba con él. El pelirrojo sonrió para sacar su polla del pantalón y untar la saliva de Lys en ella.

Sin esperar más introdujo la punta en el pequeño orificio de Lys de forma lenta, ella dejo de lamer su dedo para soltar un grito.

—¡Mierda, George!

—Cállate — puso la palma completa sobre su boca para acallar sus gritos, quería escucharla, pero era muy probable que los descubrieran —...sé que te encanta que te folle por el culo.

Movió la cadera penetrándola por completo, esa zona siempre estaba tan apretada y caliente, era lo que más le gustaba del sexo con Lys, su cuerpo parecía reconocerlo y lo recibía muy bien.

Llevo la mano libre al clítoris de la chica para estimularla mientras seguía con el vaivén lento contra su trasero.

Lys mordía la mano de George, quería gritar y gemir, pedir por más, pero era imposible así que comenzó a mover el trasero para que la entendiera.

— ¿Te gusta duro? — aumento las fuerzas en sus embestidas, e introdujo dos de sus dedos en el núcleo de la chica, ella apegaba más su trasero al chico escuchando como los testículos de George golpeaban sus nalgas — ¿Sigues siendo mi perra? ¿Quieres que te coja como a una?

Lys asintió frenéticamente con la cabeza, le encantaba cuando él le hablaba de esa forma, él no dejaba de sonreír y aumento la fuerza, Lys apenas y podía mantenerse de pie, sus piernas comenzaban a flaquear, y en el momento en el que George presiono su clítoris y dio una estocada se corrió de forma sorprendente, el orgasmo fue muy salvaje incluso su cuerpo temblaba.

Ambos se sentían en el cielo, sus cuerpos encajaban a la perfección, estuvieron esperando días por eso y ahora era como llegar al paraíso y bajar de golpe al infierno por el morbo de follar en un lugar público donde cualquiera los podría descubrir.

George la bombeo por unos segundos más, cuando sintió como sus testículos cosquilleaban dio una última estocada con fuerza para correrse dentro de ella, soltó un gemido ronco, saco su pene del trasero de la rubia y la giro para besarla de forma salvaje.

Lys apenas y podía responder su beso de la misma forma, se sentía demasiado cansada, como si su cuerpo comenzara a flotar, de un segundo a otro todo se volvió completamente negro.

Se hundió en la profunda oscuridad en la que una sombra femenina se hizo presente.

"—Eres una maldita perra —escuchaba una chillona voz —, tú...tú me has hecho daño — se quejaba y Lys distinguió una gran mancha de sangre en su abdomen —...pero si yo me muero, ella también..."

Fue lo último que escucho para perder por completo el conocimiento.

(N/T:

¡Hey, bbs! Les dejo otro capítulo, como vieron, hay dos nuevos socios para nuestra Lyssie y George es un maldito celoso aun amarrado, jeje.

Sé que quizá la personalidad de Draco no vaya muy acorde con el Draco del libro, pero estoy tratando de usar a un Draco más maduro y con un cambio de personalidad por redimir sus pecados.

En fin, nos leemos.

No olviden seguirme en ig @gaste.lier, varias chicas me han mandado edits muy preciosos sobre la historia y me encantarían que los viera porque yo estoy enamorada del arte que hacen

Muchas gracias por su apoyo, las tqm)