Las nubes eran blancas y redondas, solían pasearse por aquel cielo azulado que hace juego con mis ojos.

Los mismos que heredé de mamá.

A diferencia de mi hermana mayor, yo suelo perderme en las cosas más simples de la vida. Apreciando cada aspecto del mundo que me rodea.

La mayoría del tiempo ella se la pasa en la torre, estudiando y practicando hechizos mágicos que papá escribió cuando estaba vivo

Ambas lo extrañamos, pero sobretodo, mamá

La persona que solía odiar

Se que mi pensamiento ha de ser muy juzgado, pero realmente tengo razones por las cuales la odiaba

Cuando nací mamá jamás estuvo para mí, jamás me alimento y mucho menos fue a verme.

La odio por dejarme sola de bebé, siendo mi padre el encargado de cuidarme

Pero después me enteré que mamá tuvo un embarazo delicado, perdió mucha sangre y entró en coma. Casi muere por darme la vida

Aún así, mamá mi odio por ti solo incrementó

A mis tres años mamá jamás llegó para arroparme como lo hacía con Atheia. Yo solía quedarme despierta hasta ver una silueta femenina entrar por la puerta de mi cuarto

Pero nunca llegó

Esas noches solía llamarla mentalmente, recuerdo que le preguntaba a mi padre acerca de mamá, pero solo alborotaba mi cabello y se iba

Cada noche, solía escuchar una dulce voz cantar hasta que logrará esbozar una sonrisa

Recuerdo claramente aquel tacto delicado que subía y bajaba por mi cabello

Recuerdo claramente sentir un calor parecido al de mamá el cual se transmitía con cada caricia cuando yo estaba apunto de entrar al país de los sueños.

Mamá siempre llegaba cuando yo ya no podía verla y abrazarla. Mamá velaba mis sueños sin importarle su salud

Ah, realmente la llegué a odiar cuando me enteré de eso

A mis ocho años empecé a practicar para asistir a la fiesta de cumpleaños del abuelo

Yo quería un vestido rosa como el de mamá cuando hizo su debut, pero a cambio obtuve uno rojo parecido al color de los ojos de papá

Ese día lloré por no obtener lo que quería, no me presenté a la fiesta y me encerré en mi habitación

Esa noche mamá entro a mi cuarto con un trozo de pastel y me lo dió. Me vio llorar y me abrazó hasta poder sentir sus latidos resonar hacia mi

Nos quedamos en silencio mientras me cantaba una canción de cuna y me acariciaba el cabello de la forma más delicada que me podía ofrecer

Yo no reaccione a sus caricias, estaba enojada con ella por haber arruinado la que sería mi noche favorita

No podía ni dirigirle la palabra al saber que me dió un vestido rojo en vez de uno rosa

Lillian, quién cuido a mamá de pequeña me dijo que el vestido que mi madre había mandado a hacer para mí jamás llegó y en su lugar lo quiso remediar con un vestido del mismo color que los ojos de papá

Aún así la sigo odiando

A mis catorce años fue mi debut. Bailé con papá la primera pieza y después me integre al baile en conjunto de todas las que hacíamos nuestro debut

Para mí sorpresa, después de aquel baile tuve muchas invitaciones de jóvenes queriendo ser mi pareja en la siguiente pista musical

Me sorprendió no ver a papá frente a mi mientras ahuyentaba a los "mocosos" que se querían aprovechar de su hija, pero bueno, solo me quedo disfrutar de la fiesta hasta que ya no pude más

Pero al día siguiente mamá y papá ya no se hablaban, ni si quiera se saludaron en la comida.

Al instante supuse que discutieron y claramente tome el lado de papá

Pero Félix me explico que mamá peleó con papá para que yo pudiera bailar con quién quiera

Discutieron y mamá terminó llorando, pero convenció a papá de no acercarse a amenazar a los jóvenes que querían acercarse a mi.

Atheia me comentó que mamá lo hizo para que disfrutará mi noche sin que papá interfiera como lo hizo con ella

Mamá, te odio por haberte peleado con papá.

Llegaron mis 18 años.

Aquel día sentí que todo iría perfecto. Yo saldría con un joven duque que tanto me gustaba, pero mamá prohibió aquella salida

Me enoje con ella y le grite que la odiaba.

Dure dos meses enteros sin dirigirle la palabra

Atheia entro a mi cuarto y me comentó el porque de la decisión de mamá.

Resulta que aquel joven duque solo quería un puesto dentro de la familia real, pero ya había formado una familia a la cual debía mantener y aún así estaba jugando conmigo

Papá también me lo dijo, claramente me lo expresó en otros términos

[Ah, ese maldito bastardo, hijo de ...]

Jamás lo había visto tan enojado como ese día, pero aún así estaba enojada con mamá

La seguía odiando, cada vez con más intensidad

Ah, tal ves no explique realmente el por qué la odio.

Bueno, eso es muy simple.

[Aethly, mamá siempre te querrá tal y como eres. Seré quien siempre esté de tu lado, por qué eres mi hija y te amo]

La odio por aquellas simples palabras.

La odio por qué siempre se sacrificó por mí, puso mi vida antes que la suya. Yo la pude haber perdido en cualquier momento pero a mamá parecía no importarle.

La odio por ser así.

También la odio por qué hacía cosas por mi de las que yo jamás me enteraba hasta que me lo contaba alguien ajeno a mi familia. Yo jamás supe que era ella quien me cantaba cada noche hasta quedarme completamente dormida

La odio por qué siempre pensé que no me quería, cuando la realidad era totalmente distinta.

No importaba lo cansada que estuviera, ella siempre iba conmigo y me dedicaba un poco de sus valiosas horas para dormir.

Mamá, te odio por ser así, por siempre preocuparte por mi antes de tí.

Ah, pero mi odio no acaba ahí, no, claro que no. Odio a mamá por siempre querer darme lo mejor, la odio por qué a pesar de que yo hacía mis rabietas ella siempre me tuvo paciencia en todo; se que mamá es gentil y muy dulce, pero la odio por soportar todos mis llantos sin sentido.

La odio por qué jamás me expresaba lo mucho que le dolían mis palabras de indiferencia hacia su persona.

La odio porque siempre me mostraba una sonrisa aunque yo estuviera enojada con ella.

La odio por ser tan cariñosa conmigo cuando yo le grite que la odiaba.

Mamá, ¿es que acaso no me pudiste odiar por al menos 5 minutos?

[Mamá te querrá tal y como eres]

Cierto, también la odio por haber discutido con papá. Se que mi padre era muy sobreprotector con nosotras, pero no era necesario pelear con papá porque ese era un problema que yo tenía que discutir con él

La odio por siempre hablar por nosotras sin importarle las consecuencias, incluso si era poner en riesgo su felicidad

La odio por ser así. Siempre pensaba en nosotras antes que en ella, aguantaba nuestros absurdos llantos y aún así nos quería

Jamás nos expresaba lo que sentía o tenía para evitar alarmarnos.

Cuando falleció papá, mamá se mostró como si nada, pero se que estuvo llorando en silencio toda una semana

Recuerdo a la perfección que cada que yo lloraba, ella siempre me animaba hasta lograr sacarme una sonrisa

Pero ella siempre se guardaba las cosas para ella, jamás nos buscó ni nosotras a ella

Supongo que ambas tenemos la culpa.

Pero bueno, ¿ya que más puedo hacer?

Ya la odié por soportar todo lo malo, por guardarse sus sentimientos y fingir estar bien... Pero también la odio porque se fue sin decir adiós

«mi padre se fue antes que ella, supongo que la extrañaba y la llamó para que puedan volver a estar juntos»

Mamá, realmente solía odiarte...

¿Cómo pudiste aguantar tanto y aún así mostrar una sonrisa?

[mamá siempre te querrá tal y como eres. Seré quien siempre esté de tu lado, por qué eres mi hija y te amo]

Aquel amor materno trasciende cualquier sentimiento mayor a él, ya sea odio o tristeza, el amor de una madre siempre será eterno.

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Mamá, yo realmente solía odiarte

Te odiaba sin razón alguna, pero también te amaba como nunca he amado a nadie

[Te amo solo por ser mi madre]