Aunque sus pasos eran ligeros y tranquilos, la rigidez y enfado estaban marcados en el sonriendo rostro del Demonio de la Radio.

De verdad, ya no podía con ésa situación. Cada vez las discusiones con su novio era más complicada. Últimamente discutían mucho y siempre era el mismo tema, sobre la vida de modelo del arácnido. Al final pudo desligarse de su abusivo proxeneta llamado Valentino y ahora trabaja en una agencia de modelaje dónde siempre su rostro era la portada de su revista. Esto comparado con su trabajo anterior era maravilloso, sin embargo últimamente la cantidad de ropa que debía usar en sus sesiones de fotos eran cada vez más diminutas y todos los días salía con menos ropa.

Y obviamente eso no pasó desapercibido por Alastor.

El venado le reclamaba a su pareja del por qué no impedía que se tomara esa clase de fotos, a lo que Angel alegaba que él es sólo un trabajador y tenía que hacer todo lo que le pedían, la revista ganaba más dinero cuando él estaba en la revista y las fotos sólo eran peticiones de los fans. Realmente él no podía hacer nada, pero aquella escusa no era válida para Alastor.

Su última discusión fue hace seis días y la araña decidió pasar unos días con su dichosa amiga Cherry hasta que Alastor se calme. Cosa que era prácticamente imposible, pues en esa misma mañana en el encabezado de la revista estaba Angel con sólo una sábana cubriéndolo. A éste paso para mañana estará el trasero del arácnido en todas las revistas.

Se dirigió al vestíbulo como era habitual, pero al pasar frente a la cocina le pareció escuchar unos susurros, por lo que con cierta curiosidad se asomó para ver de quienes se trataban.

Solo eran la princesa y su novia mirando fijamente el celular de la rubia mientras susurraban, como si temieran que las escucharan.

— No creo que esto sea posible, debe haber una explicación— susurró Charlie mirando preocupada la pantalla— Él no sería capaz ¿Cierto?

— Bueno...— la tuerta se acercó más a la pantalla analizándola— A mi me parece que se ve bastante feliz.

— Es imposible. Angel no podría engañar a Alastor— aquello hizo que el demonio quedara en shock ante lo que escuchó.

— Vamos Charlie, sabes que Angel es del tipo que ama el sexo. Ésos demonios siempre suelen engañar a sus parejas— contradijo Vaggie cruzándose de brazos.

El alma del poderoso demonio cayó a sus pies y lo invadió la amargura.

— ¡Pero ambas sabemos cómo son! ¡Ellos dos se aman mucho! ¡No puede ser que Angel haya engañado a Alastor!— replicó la rubia más preocupada.

— A decir verdad. Últimamente no los he visto muy felices, por alguna razón Angel se fue con su amiga para "despejar su mente". Tal vez Angel sólo lo usó como escusa para poder juntarse con el otro.

Éso fue todo.

Alastor se acercó rápidamente a las chicas sintiendo como el shock se volvía una mezcla de miedo y rabia.

— ¿Qué está pasando?— las dos chicas dieron un brinco antes de voltear sorprendida para ver al hombre tras ellas. De la nada se sentían intimidadas por la postura de Alastor.

— ¡A-Alastor!— sonrió nerviosa Charlie mientras apagaba su celular para poder esconderlo— ¡S-si no estás aquí significa que en la recepción no hay nadie! ¡Se-será mejor que lo vaya a atender! ¡Ya-ya sabes! ¡Nunca sabes cuándo llegará un nuevo hospedante!— habló rápidamente la rubia agarrando a su novia mientras retrocedían para irse por la otra puerta de la cocina.

Pero justo cuando llegaron a las carreras al marco de la puerta, el demonio rojizo se materializó frente a ellas impidiendo su paso. Sin embargo esta vez las chicas se asustaron en serio porque Alastor no estaba sonriendo, tenía una mueca de enfado bastante escalofriante.

— Te hice una pregunta Charlotte. Las escuché ¿Qué es lo que sucede con Angel?— preguntó acercándose a ellas basta casi encima, intimidandolas a horrores.

— Y-yo...— tartamudeó asustada la princesa, mirando insegura a Alastor.

— Ya muéstrale Charlie— le dijo Vaggie tratando de no verse tan nerviosa— Se enterará de todas formas.

La chica más alta la miró insegura antes de mirar al Demonio de la Radio que empezaba a perder la paciencia. Entonces soltó un suspiro antes de volver a prender su celular y enseñarle el contenido de ésta.

El venado se acercó más a la pantalla para ver de cerca y al ver lo que había, el alma se le volvió a caer al suelo y sus ojos se abrieron como nunca.

Había una imagen de su novio junto a un demonio que nunca había visto. Ambos estaban abrazados y riendo, saliendo de un restaurante bastante relajados.

Sus latidos se empezaron a volver violentos.

— ¡A-antes de que saques conclusión! ¡Debes saber que las columnas de chismes de ésta revista son falsas!— le sonrió nerviosa Charlie — ¡Sacan fotos y escriben artículos sin siquiera investigar! ¡Sólo hacen rumores falsos!

— Casi siempre...— murmuró por lo bajo la polilla.

— ¡Vaggie!— le reprochó enojada la princesa, pero antes de seguirle reprochando, las luces y la pantalla del celular explotaron al mismo tiempo antes de que Alastor desapareciera de su vista.

El demonio de rojo se materializó en el cuarto que compartía con Angel y lo único que hizo, fue empezar a pasearse sintiendo la estática resonando en la habitación. Lo único que pensaba era en la dichosa foto y en las probabilidades de que sea cierto. Si, están peleados y no se habían hablando desde hace seis días, pero eso no es motivo para que Angel lo engañe ¿Cierto? Después de todo incluso para Angel ése era un corto periodo de tiempo.

Dejó de caminar y se quedó mirando a la nada antes de pasar sus manos por su cabeza bastante afligido. Aún si Angel no lo estaba engañando, no tenía idea de quién era ése tipo y el por qué habían salido juntos, otro tema que le quemaba los circuitos era que Angel se veía realmente feliz en la foto, se veía fresco y hermoso como siempre, a comparación de él que se sentía desgastado por todos los días en que no tuvieron comunicación.

Antes de que se diera cuenta, sus manos empezaron a temblar y la inseguridad se apoderó de él. ¿Por qué Angel no le dijo? ¿Por qué se tuvo que enterar así? No sabía nada de él o lo que hacía, no tenía nada de información de ése tipo o el porque ambos se habían juntado...

Una idea se le pasó por la cabeza y antes de  cuestionarse si era buena idea, su sombra se desprendió de él y se fue por debajo de la puerta con bastante velocidad. Esperó unos minutos antes de que su sombra volviera y trajera con ella a Niffty quién ingresó rápidamente a la habitación para posicionarse frente a Alastor.

— ¿Qué sucede?

— Necesito que me hagas un favor querida— Alastor notó la insegura mirada de la pequeña demonio y no tardó en deducir lo que pasaba— Imagino que ya debes saber sobre el rumor que está implicado Angel— la joven bajó la mirada.

— Es lo único que hablan todos— el venado respiró profundo ante ése dato.

— Cómo sea, necesito que busques en ése aparato rectangular toda la información que puedas— Niffty hizo una mueca de preocupación.

— Alastor, la mayoría de cosas que aparecen en internet es mentira. No te va a hacer bien escuchar ésos rumores.

— Al menos ésa cosa debe saber quién es ése demonio— dijo Alastor desganado— Sólo quiero saber quién es.

Niffty lo miró muy afligida, de verdad Alastor se veía triste y él de verdad creía que investigar sobre ése demonio sentiría algo de paz, cuando realmente es que solamente lo hundiría más.

Soltó un suspiro de rendición antes sacar su celular y sentarse en una silla para buscar información del último escándalo. Alastor la miraba impaciente y bastante nervioso, no sabía con lo que se iba a encontrar, pero de verdad esperaba que sólo sean tontos rumores incoherentes.

Una vez que Niffty encontró el artículo, aclaró su garganta antes de empezar a leer.

— A las diez y cuarto de la noche, a las afueras del distintivo restaurante "Eleven Infernal Park", se les vio salir al famoso ex actor porno Angel Dust junto al fotógrafo más codiciado del infierno, Tyco. Nuestros informantes nos dicen que muy posiblemente Angel Dust entró a la misma empresa dónde él ejerce como fotógrafo para poder estar cerca de él — los latidos de Alastor volvieron a alborotarse. Entonces ¿Ése demonio es el que le toma las provocativas fotos a su novio? De la nada sus discusiones tenían más sentidos. El por qué a Angel no le molestaba que le tomaran esa clase de fotos y no hiciera nada para evitarlo— "Es obvio que sucedería" dijo nuestro informante anónimo "Siempre se les veía conversando juntos por horas en el trabajo. Antes, durante y después de las sesiones de fotos. Hubiera sorprendido más que no ocurriera nada entre ellos"— Alastor se cubrió el rostro con una mano. Angel no le contó nada sobre ése tal Tyco, si fueran amigos al menos hablaría de él en conversaciones triviales ¿Por qué escondería una información así?— Nuestros trabajadores siguieron a la pareja hasta un motel dónde ambos ingresaron y no salieron hasta la mañana siguiente— esta vez Alastor se desesperó y se asomó para ver el contenido, cómo si no creyera lo que acababa de escuchar. Pero lo único que encontró fue una foto cómo prueba de lo escuchado.

Angel estaba junto ése tipo ingresando a un edificio con carteles de neón. Esta vez sintió su corazón romperse. Se alejó de la pantalla y se apoyó contra un mueble para no caer. De verdad no podía creerlo.

Niffty lo miró aún más preocupada.

— Alastor-.

— Prosigue— le dijo el demonio con la mirada baja.

Niffty lo miró dudosa, pero siguió leyendo el artículo en voz alta, seguido de los comentarios de los demonios y una vez terminar, Alastor no se sintió satisfecho y la hizo leer más artículos del mismo tema.

Así pasaron las horas hasta que empezó a anochecer, la mayoría de artículos decían lo mismo, pero en algunos había información que hacían a Alastor ponerse más nervioso. Fue entonces que mientras Niffty leía en voz alta, se detuvo estrepitosamente y soltó un jadeo de sorpresa mientras miraba la pantalla sorprendida.

— ¿Qué? ¿Qué sucede?— preguntó exaltado el Demonio de la Radio, pensando lo peor.

— N-no Alastor. Será mejor que no escuches es-. — no pudo seguir pues el venado le arrebató el celular desesperado para observar la pantalla.

"Hace unos minutos Tyco publicó en su Infertwitter los siguiente:"

"Solíamos ser novios"

Los latidos de Alastor se detuvieron en segundos. Quedó en shock por varios segundos.

Angel nunca le habló sobre éso.

Estaba tan atrapado en sus pensamientos que ni siquiera notó cuando Niffty le quitó el celular de las manos ahora más preocupada.

— Alastor, es suficiente. No seguiré leyéndote esto— el nombrado no respondió en seguida. Ciertamente ya no quería seguir escuchando sobre éso.

— Querida, debo pedirte que te retires— le dijo cubriendo su rostro.

La pequeña demonio vio al contrario bastante preocupada, aún así decidió retirarse, ya que Alastor era del tipo que no le gustaba verse débil frente a otros. Una vez que Niffty cerró la puerta, el demonio rojizo se dejó caer sobre la cama y se sostuvo la cabeza entre sus manos.

¿Por qué? Se repetía constantemente. ¿Por qué Angel no le había dicho que está en la misma revista que su ex? ¿Por qué no le contó que estaban volviendo a ser cercanos? ¿Por qué no le dijo que se iba a juntar con él? ¿Por qué no simplemente le dijo que se estaban aburriendo? Se ahogó en la desesperación ¿Angel sabrá del artículo? ¿Por qué no negó los rumores? ¿Por qué no estaba ahí con él explicándole que no era verdad? ¿Acaso le importó poco lo que tenía ambos para que ni siquiera viniera a explicar lo pasó? ¿Acaso recibiría siquiera una explicación? ¿Acaso lo volverá ver? ¿Éste es final de su relación?

Ante ésos devastadores pensamientos, de sus ojos se deslizó la primera lágrima.

.  .  .  .  .

Miró molesto la pantalla observando la foto de él y Tyco en el artículo mientras se encontraba echado en un sillón y leí el título "¿Acaso algo está floreciendo entre Angel Dust y Tyco?".

— Imbéciles— murmuró enojado— Ya no se puede ni salir a comer tranquilo con los malditos paparazzis. Ni siquiera noté que nos seguían.

— Yy ¿Es cierto?— preguntó Cherry mirando el mismo artículo desde su sillón ubicado en el otro extremo de la sala.

— Demonios ¡Por supuesto que no!— respondió Angel dándose vuelta sobre su espalda hasta estar boca a bajo sobre el sillón— Me conoces Cherry, sabes que yo nunca vuelvo con mis ex— le replicó mientras seguía leyendo el artículo hasta que se le escapó una carcajada— ¡JAJAJAJA! Parece que tu departamento ahora es un motel bebé— la demonio leyó rápidamente el artículo hasta llegar a la parte indicada y empezó a reírse a carcajadas junto con Angel.

— ¡Entonces será mejor que empieces a pagar Angie! ¡Ochenta dólares por noche! ¡Lo quiero hasta el viernes!— ambos amigos empezaron a reír a carcajadas por el artículo.

— Son unos exagerados, siempre exageran la información. Bueno, al menos esto es mejor que cuando me pillaron entrando a la mansión Magne.

— Oh sí, cuando te fuiste a revolcar con nuestro rey— dijo entre risas Cherry.

— ¡Ni lo digas en broma!— le pidió Angel— ¡Me asusté mucho cuando ésos tipos me obligaron a entrar al auto y me llevaron ante la Reina! ¡Joder! ¡Nunca había sentido tanto miedo! ¡Lilith furiosa es peor que estar en la calle en medio de un exterminio! ¡Solamente cuando dije que fui contratado por un trabajador me dejó ir bajo amenazas de muerte!— el arácnido se estremeció de pies a cabeza— Todo por ése maldito ártico que me tomó fotos entrando a la mansión y automáticamente pensaron que el rey había contratado mis servicios. Espero no toparme con la mamá de Charlie nunca más— Angel siguió leyendo el artículo con rapidez antes de detenerse y esta vez molestarse en serio— Ése Tyco, público que antes éramos pareja.

— Creí que habías dicho que Tyco fue uno de tus mejores novios.

— Sí, pero ya no quiero nada de él y ésa publicación sólo aumenta los rumores ¿En qué estaba pensando?— la chica de piel pálida miró a su amigo por unos segundos antes de abrir la boca.

— No quería decirlo, pero cuando trajiste a Tyco aquí y se quedó, él no dejaba de mirarte— Angel bajo su celular para mirar a su amiga sorprendido— Llámame loca pero... Creo que Tyco no quiere sólo retomar una amistad— el chico de ojos heterocromáticos analizó lo dicho antes de bajar la mirada frunciendo el ceño.

— Tiene sentido, fue raro que de un momento a otro me empezara a hablar...— se encogió de hombros antes de bajar la mirada a su celular— Da igual, si se pasa de meloso le paro el carro. Ya tengo novio.

— ¡Oh! ¡Cierto!— alzó la voz Cherry antes de verla preocupada— ¿Crees que tu novio ya sepa de los rumores?— Angel abrió los ojos sorprendido. No había pensado en éso.

Sin embargo se calmó y empezó a analizar esa probabilidad.

— No creo, el artículo sólo está en internet y Alastor en su vida tomaría un celular aunque sea por accidente. No creo que se entere.

— ¿Seguro?— preguntó no muy convencida— Después de todo es el escándalo del momento, apuesto a que más de medio infierno lo sabe— Angel bajó la mirada pensativo— Creo que será mejor que le vuelvas a hablar, o te meterás en serios problemas.

Cherry tenía razón, si por alguna razón Alastor se había enterado, debe estar furioso con él y aún cuando lo amaba, enfrentar la ira del Demonio de la Radio no se escuchaba tan atractiva. Pero, sí Alastor no lo sabía, en todo caso tenía ganas de volver a verlo, ya pasó mucho tiempo desde que vio sus lindos ojos.

.  .  .  .  .

De camino al hotel, más de un paparazzi lo detuvo en la calle para hacerle preguntas sobre el artículo, a lo que solamente los mandó a la mierda o simplemente los ignoró hasta por fin llegar al hotel.

Una vez entrar, soltó un suspiro de alivio y siguió caminando hacia el vestíbulo. Al llegar pudo divisar a Charlie y Vaggie conversando con Niffty, pero rápidamente dejaron de hablar al percatarse de su presencia y lo observaron cómo si fuera una especie de aparición. Obviamente le pareció extraño.

— Hey— fue lo único que dijo sin dejar de caminar. Sus miradas lo ponían incómodo, tenía el presentimiento de que lo miraban así por el maldito artículo.

Soltó un suspiro de molestia. Esperaba que de verdad no se hayan tragado toda esa mierda.

Se dirigió a paso tranquilo a su habitación, esperaba que Alastor se encontrara ahí, o tendría que buscarlo por todo el hotel. Mientras más se acercaba a la habitación, se empezó a extrañar al percibir una leve interferencia que a medida que avanzaba se hacía más fuerte hasta que llegó frente a la habitación de dónde salía todo el ruido. A ése punto ya estaba preocupado pensando en que tal vez Alastor si se enteró del artículo y ahora se encontraba molesto esperándolo en la habitación. Se mantuvo frente a la puerta por unos segundos, mentalizandose lo que encontraría adentro, luego respiró profundo para calmarse. No debía temer, después de todo es un mal entendido.

Cuando se dio las fuerzas necesarias, abrió la puerta, pero nada le preparó para ver lo que estaba adentro. La distorsión resonaba en la habitación, pero era una distorsión tranquila, no era cómo la que te rompía los oídos como cuando Alastor se encontraba furioso. La habitación estaba levemente distorsionada y muchos símbolos revoloteaban a su alrededor. En la cama se encontraba su novio, quien estaba sentado al borde con sus codos apoyados contra sus rodillas mientras sus manos cubrían su rostro.

Ése escenario lo desconcertó demasiado, éso no era lo que esperaba ver.

— ¿Al?— lo llamó suavemente. El cuerpo del demonio se tensó al escuchar su voz.

Angel cerró la puerta tras él y se acercó a su pareja con cierta angustia en su pecho.

— Al ¿Estás bien?— preguntó mientras se agacha para estar a su altura y poder mirar su rostro que estaba siendo cubierto por sus manos.

Alastor se mantuvo estático por unos segundos, luego lentamente separó sus manos de su rostro y lo elevó hasta mirar a la araña. Angel soltó un jadeo de sorpresa mezclado con horror. El rostro de Alastor estaba lleno de lágrimas color negro recorriendo su rostro.

Jamás, en toda su existencia, pensó en ver a Alastor así. Incluso prefería verlo enojado que con su rostro lleno de sorpresa y dolor.

— Santo cielos Alastor ¡¿Qué ocurrió?!— preguntó en pánico sosteniendo sus brazos. No podía de verdad creer que estaba viendo a Alastor llorando.

— Tú...— murmuró por lo bajo el venado sin dejar de verse sorprendido al ver a Angel ahí— Estás aquí.

— Si, estoy aquí bebé— le respondió rápidamente acercando sus manos para limpiar las oscuras lágrimas— ¿Por qué estás llorando?

— Angel...— el demonio rojizo lo miró afligido y desesperado— ¿Es verdad que me estás engañando?— el arácnido se le paró la respiración por unos instantes.

— ¡¿Qué?! ¡Por supuesto que no!— respondió desesperado sosteniendo el rostro de Alastor— ¡¿Creíste los rumores?! ¡Alastor yo jamás podría engañarte! ¡Todo lo que leíste es mentira!

— ¿Lo de que ambos están en el mismo lugar de trabajo es mentira?— Angel abrió los ojos sorprendido. Apretó los labios con fuerza antes de responder.

— No...

— ¿También de que ambos fueron novios es mentira?

— No...

— ¿Las fotos que les sacaron fuera del restaurante también son mentiras?— esta vez Angel bajó la mirada sintiendo culpa.

— No— el labio inferior le templó levemente a Alastor antes de hacer la última pregunta.

— ¿Y lo de que ambos terminaron en un motel?— esta vez Angel subió la mirada angustiado.

— Bebé éso es mentira ¡Esa foto dónde aparecemos fuera de un edificio es mentira! ¡Ése edificio son los departamentos dónde vive Cherry!

— Entonces ¿Por qué no me dijiste que te estabas juntando con tu ex?

— No lo hacía. Él me evitaba en el trabajo, no me pareció importante decirlo. Solamente ayer me empezó a hablar y me invitó a comer para que podamos conversar. Al final se hizo tarde y me fue a dejar en casa de Cherry, entonces lo invité a entrar y estuvimos los tres bebiendo hasta tarde. A la mañana siguiente se fue temprano. Amor, te juro que no pasó.

— ¿Y por qué no viniste antes?— preguntó nuevamente Alastor volviendo a soltar lágrimas de alivio— No viniste ni me dijiste nada.

Sólo en ése momento Angel pudo ver la agonía de su novio. Las horas en donde se enteró y no había nadie para explicarle lo que pasaba, cómo nadie le podía explicar, decidió buscar las respuestas por sí sólo.

— Lo siento...— murmuró bajo Angel también al borde de las lágrimas por la culpa y la pena de ver a Alastor así— Perdóname mi amor— le pidió con la voz rota mientras lo envolvía en un abrazo— Perdón por no haber venido antes... Perdón por dejarte en incertidumbre.

El demonio mayor también envolvió el cuerpo del menor y lo incorporó un poco hasta que ambos estuvieran acostados en la cama envueltos en un fuerte abrazo.

— Perdóname a mí también— le susurró acariciando su espalda— No fui flexible frente a tu trabajo— Angel negó con la cabeza mientras buscaba su mirada.

— No, está bien. Fui demasiado precipitado y... No te conté la verdad— desvió la mirada preocupado— La verdad es que me están obligando a tomarme fotos así— Alastor abrió los sorprendido.

— ¿Qué?— preguntó incrédulo— ¿Por qué no me lo dijiste?— el arácnido soltó una amarga risa.

— Porque quería arreglármelas sólo...— volvió a mirarlo a los ojos— Prometo ya no volver a ocultarte nada... Seré más sincero— y fue por fin, que Alastor volvió a sonreír.

— Seamos honestos— fue lo último que dijo antes de que juntaran sus labios en un beso. Un beso profundo y lento dónde sus lenguas no se mantuvieron tranquilas.

Mientras beso se volvía más profundo, Alastor sostenía con más fuerza a su novio quién suspiraba al ser sostenido así. Se separaron levemente al tener que recuperar aire y al verse sonrieron tranquilos.

— La próxima vez que pase algo así preferiría que te enojes. Creo que no podré soportar verte llorar otra vez— el venado soltó una risa nerviosa y avergonzada.

— Solamente si no le cuentas a alguien que me viste llorar— Angel sonrió ampliamente.

— Hecho— sus labios se volvieron a encontrar con la misma pasión que antes. Sin embargo Alastor se detuvo al escuchar un "click" y al separarse pudo notar que Angel les había tomado una foto para después empezar a escribir en su celular.

— ¿Qué haces?

— ¿Qué crees? Dispersando los rumores— le respondió sin despegar la vista de su celular— Debo dejar en claro que sólo tengo un hombre en mi vida— dijo antes de apagar su celular para después lanzarlo a alguna parte de la habitación y poder abrazar a su novio— Por cierto, me ayudarás con lo de las fotos ¿Cierto?

Alastor le sonrio ante la mirada sorprendida de Angel, se posicionó sobre el arácnido y lo sometió sobre el colchón.

— Eso es algo que podemos hacer mañana— el arácnido sonrió y antes de que se dieran cuenta, ya habían vuelto a besarse con necesidad y la habitación se llenó de suspiros y gemidos.

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Hola 😅 Lo sé, súper tarde ¿Pero qué se puede hacer?

¿Les gustó el cap? Siento que Alastor haya salido de su personaje, pero antes de que me de cuenta a Alastor le empezó a doler de una forma negativa el tema del rumor y... No sé, quería verlo un poco más sensible. Mostrar que aún cuando es un poderoso demonio, sigue teniendo inseguridad y miedos, sobre todo si se trata de Angel.

Éso es todo, nos leemos... No diré mañana porque no estoy segura :v

Nos leemos pronto 💋