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Capítulo 5

Ahora mismo, Yuuma y Gusty se encuentran mirando cerca de un puesto que vende artículos para personas, o mejor dicho ponis, tinta, plumas, cajas, etc, mientras que Issei se encuentra metido en una pila de heno.

-Emmm...¿Acaso perdiste algo?- preguntó la pegaso de ojos violetas.

-Estoy seguro de que vi a alguien mirándome y ocultándose luego en esta pila...¿Y si busco y encuentro algún portal que me lleve a otro mundo, universo y eso?- fue lo que dijo el equino castaño asomando su cabeza.

-Creo que así no funciona la cosa- señaló Yuuma.

-Si, es cierto- añadió Issei, antes de ocultarse de nuevo, y después de 10 segundos salió de esa pila, quitándose algo de heno que tenía en su melena.

-Gusty...¿Segura que nadie debe verte?- preguntó la pegaso mirando a la unicornio.

-Ya se los dije...soy alguien importante aquí, si alguien con suficiente conocimiento y atención a los detalles me reconoce...El orden podría alterarse, y no me refiero solo a nosotros- fue la respuesta de la mencionada, levantando un poco la capucha de su túnica, permitiendo ver al menos sus ojos.

-Pero dijiste que ha pasado un montón de tiempo desde tu aparición...¿Segura que no estás exagerando?- preguntó Issei rascándose con su casco la parte trasera de su cabeza.

-No...Además, así estoy bien- dijo la unicornio.

-¿De acuerdo?- dijo Yuuma no tan convencida.

-Saben...Me quedé pensando en algo- dijo el equino castaño apoyando su casco en su barbilla mientras miraba a la nada.

-¿Qué cosa?- preguntaron las 2 yeguas.

-Bueno...creo que ya es obvio, tu perteneces aquí, pero Yuuma y yo no regresaremos a nuestro mundo, entonces, por ahora...¿No deberíamos encontrar un lugar en el que quedarnos?- preguntó el equino.

-El tiene razón...Pero...¿Habrá espacio para albergar a 3 más en este pueblo?- preguntó Yuuma, antes de que los 3 escucharan ruidos, como voces de personas.

-¿Y eso?- se preguntaron los 3 al mismo tiempo, antes de caminar hacia dónde provenía dicho sonido.

Hasta que después de unos segundos llegan hasta dónde alguien está llamando la atención.

Se trata de una pequeña poni, de piel amarilla, una melena y cola, siendo estas de un color rojo claro, ojos naranjas, y cómo último detalle, en su flanco tenía 2 marcas, una de ellas que parecía ser un ula-ula, y la otra parecía un par de platos giratorios.

Durante un par de minutos, esta pequeña poni demostraba sus habilidades con los objetos mostrados en esas marcas, llegando hasta un punto, en el que lanzó un pastel al aire junto al aro y los platos, el aro pasó a partir en 8 pedazos el pastel, los platos cayeron sobre 2 mesas, y encima de estos aterrizaron los trozos de pastel.

Unos segundos después

-Wow- dijo Yuuma.

-¿Que...Qué acaba de pasar?- fue la pregunta que hizo Issei con un casco detrás de su cabeza.

-¿Y qué eran esos símbolos en su parte trasera?- fue la otra pregunta, esta vez por parte de la pegaso.

-Esos son Cutie Mark- fue la respuesta que dió Gusty.

-¿Cutie qué?- preguntó Issei un tanto confundido.

-Dijo Cutie Mark- señaló Yuuma, antes de mirar a la unicornio- ¿Y qué son?

-Cómo dice parte del nombre, son unas marcas que todos los ponis, unicornios, pegasos y alicornios tenemos, y simbolizan el talento que cada uno tiene- fue la respuesta de Gusty- Aparecen cuándo descubrimos eso que nos hace especiales y diferentes a los demás...Aunque a veces podría tomarte bastante tiempo encontrar ese algo.

-Oh ok- dijo Yuuma.

-Oigan...Reanudando lo que estuvimos hablando antes...Aún tenemos que encontrar algo así como nuestro "refugio" temporal hasta que encontremos un lugar dónde quedarnos- preguntó el equino castaño, antes de quedarse pensando un rato y entonces volvió a mirar a sus compañeras- Ya sé, hay que separarnos, así podríamos hacer la búsqueda mucho más rápido.

-De acuerdo- señalaron las 2 yeguas.

-Emmm...¿Quien va con quien?- preguntó el equino.

-Pues...ya que hace un par de días nos dejaste solas por ir a ver algo, sería correcto que al menos quedaras con una de las 2-sugirió Gusty.

-Ya les pedí perdón por eso...Uf...Pero está bien- dijo Issei después de suspirar y mirar primero a la pegaso- ¿Yuuma?

-Mmm...¿Sabes? Será mejor que tu te quedes con Gusty, nunca se sabe si algo pude llegar a pasar- respondió la pegaso antes de elevarse un par de centímetros en el aire, y acercarse al equino- Solo procura no hacer ni pensar nada malo sobre ella ¿De acuerdo?

Entonces, se acercó a el para darle un beso en la mejilla y luego retirarse, dejando al equino un tanto ruborizado.

-¡S-SÍ!- fue lo que dijo Issei a su compañera, quien ya se alejaba, y entonces suspiró antes de mirar a su otra acompañante- Emmm...¿V-Vamos?

-Claro- fue lo que dijo la unicornio, antes de empezar a caminar junto al equino.

Durante unos segundos, ninguno dijo nada, y esto ya le estaba empezando a incomodar a Issei...Lo peor es que no se le ocurría que decir...haciendo que la situación pase de incómoda...a molesta...Al menos para el.

-Rayos...¿Qué digo? ¿Qué digo?- era lo que se preguntaba el equino mentalmente, antes de que escuchara internamente el sonido de su estómago.

-Ehhh...¿Escuchaste algo?- fue la pregunta que le hizo a su compañera.

-Emmn...No...¿Por qué preguntas?- dijo la unicornio.

-N-No por nada...- respondió el equino, antes de mirar a otro lado- Tengo hambre...Y seguro ella también...¿Qué puedo hacer?

-Hola- fue lo que dijo una poni con lentes que se le acercó, haciéndolo detenerse, y le ofreció una bolsa- Escuché el sonido de tu panzita, y pensé que querrías comer algo.

-E-Eh...G-Gracias...¿C-Cuánto le debo?- preguntó Issei con una sonrisa nerviosa.

-Tómalo como un regalo- dijo la poni dejando la bolsa cerca del casco derecho del equino- Adiós.

-Ehhh...¿Adiós?- dijo el equino castaño, antes de mirar la bolsa, para luego abrirla, mostrando un par de pequeños cupcakes- Wow...no sabía que aquí también había de estos.

Entonces, y gracias a la magia de su cuerno, los levitó y corrió para darle alcance a la unicornio, quien ya se había alejado un par de metros.

-Ey- dijo Issei haciendo que ella lo mirara, y notara los 2 cupcakes- ¿Quieres uno?

-Claro...- dijo Gusty usando su magia para levitar uno de esos 2 postres, acercarlo a ella, para luego darle una pequeña mordida- Mmm...Está rico...¿Quien te los dió?

-Emmm...Alguien se me acercó y me los dió...Le iba a preguntar algo...Pero simplemente me dijo una que otra cosa y luego se fue- respondió Issei.

Tras esa muy corta comunicación, ambos continuaron buscando un lugar...Pasaron una hora, luego dos, tres, hasta que llegó la noche.

-Rayos...Parece que casi todo está ocupado- fue lo que dijo Issei.

-Sí...Ese almacén vacío que nos mostraron podría haber servido...Pero lástima...ya había alguien ahí- añadió Gusty.

-Oye...¿En dónde estará Yuuma?- preguntó el equino mirando a la derecha y a la izquierda.

-Aquí estoy- fue lo que dijo la mencionada, antes de aterrizar enfrente de ellos.

-¿Cómo te fue?- le preguntó Gusty.

-No muy bien...hay una casa que al parecer fue abandonada el año pasado, incluso tenía un cartel que decía "En Venta", pero justo cuándo iba a preguntar sobre ella, veo a un unicornio que con magia lo quitó, lo tiró por ahí, y entonces dijo "Ya está hecho, es suya"- fue la respuesta de la pegaso.

-¿Había alguien con el?- preguntó Issei.

-Una familia, al parecer consiguieron esa casa la semana pasada, y ya no había nada que pudiera hacer, así que decidí regresar- le respondió la pegaso, antes de que los 3 se quedaran en silencio por unos segundos.

-¿Y ahora qué?- preguntó el equino.

-¿Afuera otra vez?- fue lo siguiente que preguntó Gusty.

-Parece que sí- respondió Yuuma, antes de que los 3 suspiraran.

Treinta y siete minutos más tarde

Ahora, los 3 se encontraban fuera de un enorme granero rojo, el cuál tenía una de sus puertas media abierta.

-¿Seguro de que es buena idea?- preguntó la pegaso, en voz baja por si llegaban a escucharlos.

-Sí...además, solo será una noche, no es como si nos fuéramos a quedar toda la vida- respondió el equino, antes de acercarse a la puerta, y empujarla muy lentamente hacia adentro, permitiéndoles el paso- No hay moros en la costa.

Eso lo dijo antes de empezar a escabullirse como si fuera esos personajes de caricatura, hasta que finalmente llegó detrás de varios fardos de heno, y entonces les hizo una señal para que se acercaran.

-Wow...se ven...cómodos- fue lo que dijo Yuuma apoyando sus cascos delanteros sobre el heno en el suelo.

-Mejor que en el que dormimos por 2 días- señaló Issei, antes de dar un salto, rodar como 5 veces, y terminar detrás de otra pila de heno, a unos 3 metros de sus compañeras.

-¿Qué haces?- le preguntaron ambas, susurrando obviamente.

-Es por si alguien aparece...Hay que ser precavidos...Buenas noches- susurró el equino antes de tirarse al piso para dormir.

A Yuuma le causó un tanto de gracia la ocurrencia de su compañero, hasta que un bostezo salió de su boca, y entonces se acomodó para dormir, acción que fue imitada por Gusty.

Unas horas más tarde

En otra parte del granero, hay una poni de piel naranja, melena y cola amarillas descansando plácidamente sobre una cama, hasta que empieza a moverse tras escuchar como pequeños golpeteos en el piso, y entonces abre los ojos, mostrando que estos eran verdes.

-¿Qué cascos será eso?- fue lo que se preguntó la poni, con un acento de voz campestre.

Se levantó de la cama, abrió la puerta de su habitación, y miró por el pequeño callejón, que una luz dentro de otro cuarto, con la puerta a medio cerrar estaba encendida.

Entonces, se dirigió al cuarto, abrió la puerta, e iba a preguntar que sucedía, solo para encontrarse con esa poni con los talentos del ula-ula y los platos giratorios, sin embargo, ahora también tenía un zapato de tap como marca, cerca de sus otras 2 cutie marks, lo que la estaba "obligando" a bailar, y ella no se mostraba feliz con esto.

-¡Ayúdame!- exclamó la pequeña potranca, mientras no dejaba de bailar, girar el ula-ula con su cola, y los platos giratorios en su cabeza.

La poni de ojos verdes trató de hacer que el ula-ula y sus cascos se detengan, pero solo consiguió ser enviada hacia atrás, cerca de la puerta.

-¡Lo siento Applejack! ¡No sé como detenerme!- exclamó la pequeña, mientras en su rostro mostraba un tanto de miedo por lo que pasaba.

-Hay una poni que podría hacerlo- dijo la ojiverde mostrándose seria.

Gusty y Yuuma estaban durmiendo tranquilas, mientras Issei trataba de cerrar sus ojos, pero no lo conseguía.

-¿Ahora sí no tienes sueño verdad?- era lo que se decía asimismo, notándose molesto.

En eso, escucha un correteo, y entonces asoma levemente su cabeza, viendo como esas 2 ponis bajan las escaleras, la de ojos verdes, ahora con sombrero lo hace corriendo, mientras que la pequeña trata de hacer un esfuerzo para no caer debido a que no podía dejar de bailar tap.

-Oh oh- fue lo que dijo en voz baja, antes de agachar un poco la cabeza, pero con la suficiente altura para verlas alejarse, eso sí, pudo notar a la pequeña poni con sus 3 cutie marks- ¿Qué?

-¿Pero qué pasó?- se preguntó una vez esas 2 se fueron, antes de golpearse en la cara con su casco derecho- No es lo importante ahora...¡Vamos! ¡Duérmete!

Por la mañana

Ahora, Yuuma y Gusty avanzan por el pueblo, mirando para todos lados, pues Issei no estaba en el granero cuándo despertaron.

-¿En dónde podrá estar?- preguntó la unicornio.

-No lo sé...y eso ya me empieza a preocupar- dijo la pegaso.

-Hola chicas...¿Qué hay?- fue lo que preguntó una voz detrás de ellas.

-Al fin...¿En dónde estu...? ¡AH!- exclamó Yuuma tras notar el estado de su compañero- ¿Qué te pasó?

El equino tenía su melena desarreglada, traía ojeras, un par de moretones y se mostraba algo desganado, además de llevar algunos rastros de polvo en su armadura.

-Solo pude dormir quince minutos...Mi cuerpo no quería, así que pensé que dar una vuelta en medio de la madrugada podría ser buena idea- dijo el equino forzando una sonrisa- Claramente me equivoqué.

-¿Terminaste dentro de un hoyo o algo así?- preguntó Gusty.

-No...un ave me persiguió durante 10 minutos, hasta que terminé dentro del bosque, y algo salió, me golpeó en la cara y me dejó encima de una pequeña montaña de polvo- respondió el equino moviendo su cabeza para ver si "despertaba"- Aunque no fue tan malo.

-Oigan...¿Esa no es la poni que estuvo deslumbrando ayer con sus trucos?- preguntó Yuuma señalando a la potranca de piel amarilla, quien trataba de avanzar, sin detener su baile de tap.

-Rápido, rápido- era lo que decía esa poni con sombrero vaquero, junto a una unicornio de piel piel lila y un pequeño dragón encima de la espalda de esta.

Pero entonces, aparte de decir algo en otro idioma, marcas fueron apareciendo en su cuerpo, obligándola a realizar múltiples acciones, cómo tocar instrumento, domar a un par de leones, hacer esgrima, escultura, etc.

-¿Pero que.......?- era lo que pensaban Issei y Yuuma.

-Está hechizada- dijo una poni que estaba cerca de ese pequeño dragón.

-Embrujada- añadió otra.

-¡Encantada!- exclamó una última que se unió a esas 2.

-No lo está- señaló el pequeño dragón encima de un fardo de heno, sacándoles un suspiro de alivio a esas 3- Solo tiene una extraña y misterios enfermedad sin cura llamada Viruela Cutie.

-¡Viruela Cutie!- exclamaron las ponis, pegasos y unicornios presentes, antes de salir corriendo y meterse en sus casas- ¡Sálvense quien pueda!

-¿Viruela...Cutie?- preguntó Issei, mientras se recuperaba después de que una poni pasara rápido cerca de el, haciéndolo dar unos giros, y mareándolo.

-¿Qué es eso?- preguntó Yuuma.

-Es una enfermedad que afectó a una población de ponis hace ya mucho tiempo, haciendo que múltiples Cutie Marks aparecieran por todo el cuerpo haciéndote ejecutar todos los talentos que indican- respondió Gusty levantándose un poco la capucha- No hay una cura conocida hasta ahora, pues jamás se halló la causa, y además, así como la epidemia llegó, también se fue.

-Wow...eso es algo loco- fue lo que dijo Issei parpadeando un par de veces, recuperando su visión normal, antes de notar como solo ellos 3, la unicornio lila, la poni con sombrero, el dragón y la pequeña potranca eran los únicos que seguían ahí, incluso se pudo oír un sonido de un águila pasando muy lejos, como pasaba en las caricaturas cuándo alguien cruzaba el desierto o el Viejo Oeste.

-Creí haber eliminado su temor la última vez que estuve alrededor- fue lo que dijo una cebra de ojos turquesas llegando con la unicornio y la vaquera.

-Zecora, Applebloom tiene Viruela Cutie- dijo la unicornio señalando a la pequeña potranca, quien ahora usaba una tiza sobre una pizarra- Íbamos en camino para ver si tenías alguna cura.

-Y de repente apareciste...¿Fue tu intuición de cebra?- preguntó la poni ojiverde.

-Mi intuición de cebra no me hizo llegar, fue una flor especial que tenía que encontrar- dijo la cebra mirando primero a esas 2, antes de ver a la potranca, quien ahora con su cola levantaba una pesa, y de verdad que hacía un esfuerzo- Creí tener suficiente para todas las pociones que debía hacer, pero después de la visita de Applebloom de forma misteriosa pareció desaparecer...Applebloom ¿Qué dices? ¿La flor se fue en tus narices?

La pequeña poni iba a responder algo, antes de que otra Cutie Mark apareciera, y la llevara a limpiar ventanas con un par de esponjas.

-Un remedio para su enfermedad traigo en realidad- dijo la cebra antes de sacar algo de un pequeño cesto que tenía- Pues el poder de curar está en las Semillas de la Verdad.

-Entonces...Dáselas ¡Ya!- dijo la poni con sombrero, preocupada por el estado de su hermana.

-Las semillas deben plantarse en la tierra, con la verdad crecerán y la cura...encontrarán- dijo la cebra, dejando confundidas a las 2 ponis- Las Semillas de la Verdad tienen la cura, pero se deben decir palabras...ciertas, y puras.

Entonces, la poni con sombrero, llamada Applejack arrojó las semillas al aire, cavó un agujero, y estas cayeron en el, antes de poner tierra encima, cubriéndolas y también al hoyo.

-Muy bien, listo ¡Qué alguna poni diga la verdad!- exclamó la vaquera, pero todo se mantuvo en silencio durante unos segundos.

Antes de que a su hermana le saliera otra Cutie Mark, la cuál hizo que empezara a girar como un tornado, moviéndose por todas partes.

-Cuidado- dijeron Yuuma y Gusty antes de correr detrás de una casa.

-¿Chicas?- preguntó Issei, antes de notar como la poni-tornado venía hacia el- Ay no.

Y entonces, fue succionado por ella, haciéndolo dar vueltas y vueltas también.

Duraron así varios segundos, hasta que la pequeña decidió hablar, a pesar de seguir girando junto al equino castaño.

-¡WOOOOOOOHHHH! ¡Ya no lo puedo soportar! ¡Soy yo! ¡Lo admito! No obtuve mi Cutie Mark, todas son falsas- fue lo que dijo la potranca antes de detenerse, y arrojar de paso al equino castaño de espaldas contra una casa.

-Quiero vomitar- fue lo que pensó Issei antes de caer al suelo, mientras pequeñas versiones imaginarias de su compañero Ddraig giraban en su cabeza.

-Vamos- fue lo que dijo Gusty apareciendo a su lado, para luego tele-transportarse junto a el a dónde se ocultaban Yuuma y ella.

-Creí que el Deseo de Corazón me ayudaría a obtener lo que más quería, así que cuándo Zecora salió de ahí, preparé una poción especial y puse el resto del Deseo de Corazón en ella- fue lo que dijo la potranca.

Después de que dijera eso, lentamente, en el lugar dónde fueron enterradas las semillas, emergió una planta, muy linda para los que estaban presentes, incluyendo a Yuuma, pues Gusty sabía sobre ella, y, bueno, Issei seguía mareado.

Sin embargo, la flor solo duró un par de segundos, antes de que la potranca se la comiera, y entonces, cayó al suelo, agotada, mientras todas las Cutie Mark desaparecían de su cuerpo, dejando aliviada a la pequeña.

-¡Applebloom! ¿Ya estás bien?- dijeron 2 pequeñas ponis, una pegaso y una unicornio como de su edad, acercándose a su amiga.

-Excelente, y estoy muy feliz de tener el costado en blanco- dijo la pequeña, antes de que su semblante cambie a uno arrepentido- Pero lamento haber mentido, sobretodo a ustedes...Estaba tan desesperada por mi Cutie Mark, que me dejé llevar.

-Y lamento mucho haber tomado esas flores tuyas Zecora- dijo Applebloom acercándose a la cebra- Creo que no te culparía si no quieres que te vuelva a visitar.

-Oye Applebloom, no seas tontita, siempre serás bienvenida pequeñita- dijo la cebra haciendo que levantara la cabeza- Con cada error, algo nuevo aprenderás, de esa forma siempre mejorarás.

-Applebloom ¿Le escribirías a la Princesa Celestia contándole lo que aprendiste?- preguntó la unicornio lila.

-Con mucho gusto Twilight...¡Spike!- fue lo que dijo la pequeña, primero hablándole a la unicornio, antes de llamar al dragón, quien apareció con un pergamino y una pluma- Querida Princesa Celestia, esperar lo que tu corazón desea puede ser muy difícil, así que tal vez trates de tomar un atajo, pero esa deshonestidad jamás funciona, porque no te ganaste lo que tu corazón desea. La única cura es ser honesta contigo y con todos, y eso es algo que todo lo que todo corazón desea.

Entonces, al terminar, el dragón, aparentemente llamado Spike, enrolló el pergamino, y sopló fuego de su boca, que pareció consumir el objeto, pero un rastro de humo mágico se fue volando en el aire.

-Estoy orgullosa de tí, parece que al final aprendiste la importancia de la paciencia- dijo Applejack acercándose a su hermana.

-Sí, las cosas buenas llegan a los que esperan- dijo la pequeña con una sonrisa, pero 5 segundos después- Bueno, ya esperé suficiente.

-¿Eh?- fue lo que dijo Yuuma, mientras Gusty se reía un poco.

-¿Qué vamos a hacer hoy para obtener nuestras Cutie Marks?- preguntó Applebloom caminando junto a sus 2 compañeras.

-Bueno...para ser una poni que jamás había preparado una poción, realmente hiciste algo potente- señaló la pequeña pegaso.

-¡Sí! ¿Qué tal si tu talento es preparar funciones?- preguntó la pequeña unicornio.

-Increíble, es cierto, vamos a hablar con Zecora ¡Ahora!- exclamó la poni de ojos naranjas, antes de correr hacia la casa de la cebra junto a sus amigas.

-O-Ok...eso si fue rápido- dijo Yuuma riéndose un poco, antes de que su compañero se levantara despacio.

-Mmmm...Oigan...¿Porque veo todo triple?- preguntó el equino mientras aún tenía a esos pequeños dragones imaginarios volando sobre su cabeza.

-Esto si es gracioso- era lo que decía el dragón en su interior.

-Jeje, vayamos a buscar algo de comer, para que luego puedas descansar- dijo Yuuma antes de elevarse en el aire.

-Sí, vamos- dijo Gusty dándole un leve empujón, pero este casi se cae, por lo que tuvo que jalarlo rápidamente para que eso no pasara- Mejor camina cerca de mí ¿De acuerdo?

-Está bien...¿Pero cuál de todas eres tú?- preguntó el equino castaño mirando a 3 unicornios, sacándole un par de risas bajas a sus 2 compañeras.



Y hasta aquí el nuevo capítulo.

Espero les haya gustado, les mando un abrazo psicológico y nos vemos...hasta la próxima.

Cuídense mucho.

Chau, chau.

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