Mientras los muchachos estaban ocupados o haciendo tiempo con lo que estaban haciendo, Rean y Celine estaban frente a Griselda, quien había venido a ver lo que... uno llamaría una sala de confinamiento y de investigación. La mujer lo trajo aquí para poder hablar con él de un modo calmado.

-Si no supiera que eres una devota muy seria, diría que lo trajiste a lo oscuro para hacer cositas...

-Celine...

Rean regaño a su amiga, quien rio un poco. Pero era la mujer quien se sonrojo un poco para soltar una tos. La idea no habría sido mala, sino fuera un ángel.... Oh como extraña la sensación de una buena...

-¿Hermana...?

-¿Eh? ¡Oh si! Lo siento... Esto... Tengo lo que pediste.

Rean alzó una ceja, pensando que ella de seguro tenía algo en la cabeza. Rayos Celine, ahora él es el que ve el buen cuerpo de la mujer tras toda esa túnica. ¿Quién dijo que los ángeles no pueden ser sexis?

El humano tomó el informe que ella tenía en la mano, lo leyó unos segundos. Y cada lectura, de cada informe hecho con los años le daba una sensación rara en el estómago. Como si te dieran de rodillazos en esta zona. Era... horrible.

-¿Es todo lo que dice aquí verdad?

-Cada palabra. Y no creas que no sé que piensas. Es... extraño. Cada muerte, de cada mujer es... similar.

-Si... un rango de 15 a 18... todas mujeres de descendencia de países donde el catolicismo no es fuerte. Todas con... el mismo tipo de muerte. A manos de Grimms. En una misión que era simple, si es que lo vemos así.

-Si, por eso es que me puse a investigar. Tu amigo Jusis es muy bueno en su trabajo. Tiene a varios de los altos mandos comiendo de la palma de su mano. – Ese Jusis... siempre tan hábil en sus actividades. – Pero hasta él dijo que halló algo que no le gustaba nada.

-¿Y es?

-Bueno... Dijo que esta información se la dio alguien que... bueno, te conoce muy bien. Ella dijo que tú puedes entender esto.

Rean miró el papel que ella le dio. Y reconoció la letra y el código... Y un nombre...

-Alejandro VI. ¿Qué tratas de decirme con esto Alisa?

-¿El papa Alejandro VI? Sino mal recuerdo, su nombre era Rodrigo Borgia.

-Si... fácilmente uno de los peores papas en la historia del Vaticano. Un hombre que no sólo tuvo hijos como si fuera un conejo, sino que uso al Vaticano como su propio banco. No era sorpresa para nadie lo que hizo en sus días como Papa, además de todo lo que se le acusó. Desde asesinato, corrupción...

-Violación... - Griselda abrió los ojos, así como Rean. - ¿Esta diciendo que es un mando alto de la Iglesia lo que... hizo esto?

-... Ya no sé que pensar. Al inicio creí que era un simple sacerdote... pero que Alisa me diga que es... alto mando.

Rean sabía que su ex era todo... menos una persona que dé información falsa en relación a asuntos serios de la Iglesia. Es más, poco a poco siente que están desenmascarando algo sumamente importante. Algo que... puede ayudarlos a resolver lo que eran crímenes... ocultos.

-Quiero que me des toda la información de estas chicas.

-Claro... justo acá lo tengo. Espero que podamos llegar al fondo de esto.

Pero la mente de Rean iba a otra cosa... la idea de que estas muertes sean para ocultar lo que es algo horrible, le hace pensar que... si ella se entera de esto, puede que la cura sea peor que la enfermedad.

---

Mientras eso pasaba, en lo que era el jardín del Primer Cielo, donde ya todos estaban reunidos para oír lo que Irina les tenía que decir... Algunas cosas pasaban por mientras que...

Allí Asia experimenta si puede convocar a los cuatro nuevos Dragones con los que acaba de hacer pactos. La chica miró a los cuatro dragones, quienes no parecían estar muy cómodos en el lugar tan brillante que veían.

-Muy bien, Anselmus-san, Cyril-san, Gregorios-san y Simeon-san. Por favor, compórtense cuando estén aquí en el cielo. Y parece que los Ángeles quieren hacer una revisión rápida de todos ustedes, así que sigan sus instrucciones. Dijeron que no ocurrirá nada aterrador, así que no hay nada de qué preocuparse. Así que por favor.... No hagan algo malo. Y no hagan lo que Fafnir les enseñó...

[...... Roger.]

[Afirmativo.]

[Bueno......]

[Dah.]

Varios ángeles que parecían ser investigadores comenzaron a realizar sus investigaciones sobre los dragones malvados convocados por Asia de una manera asustada. La verdad, no los pueden culpar. Pueden parecer dragones, pero tenían una apariencia que daba miedo.

-Me sorprende que pueda controlarlos a pesar de ser producidos en masa.

-No sólo ello... se ve que tienen rastros del Grimm Wyvern. ¿Ves eso? – Xenovia miró donde Weiss señalaba. – Esas protuberancias en sus espaldas muestran que son huesos, que hay algo de Grimm en ellos.

-Pero la parte dragón es más fuerte. Que interesante observación. – Twilight anotó lo que veía de los Dragones. Le hubiera gustado ser ella la que los investigue, pero tras la última vez...

-Yo aún no me creo que ese Dragón amante de las panties lograra convencer a estos Dragones de unirse a nuestra causa.

-No creo que sea eso Yang. – Aki miró a Fluttershy, quien estaba cerca de los Dragones por si acaso. – Fluttershy es el arma secreta...

-Concuerdo nya... Su mirada te hace sentir... que eres peor que un insecto.

-... Onee-sama... vuelve en ti. – Koneko dio un aplauso frente a la cara de su hermana, haciendo que ella vuelva al mundo de los vivos. – Lo que pasó esa vez, es en parte tu culpa.

-¡Solo pedí una hamburguesa! ¡Quería carne! ¡Carne! No tofu...

Todos vieron como la Nekomata parecía estar pasando por un ataque de nervios, uno que Fay y Koneko trataban de calmar.

-Ugh... No la culpo en verdad. Una vez me miró como...

-Si, si... Lo que sea. – Rainbow irrumpió a Ray, quien la miró feo. – Sabemos la capacidad de Fluttershy con los animales, pero Asia... Esa es una sorpresa.

-Por lo que escuché, el nombre de Asia se está extendiendo rápidamente en el mundo de los Dragones. Como una chica que hizo un pacto con Fafnir. Es algo que todos hablan aún dentro de la facción Youkai. – Ayane miraba como Asia acariciaba la cabeza de uno de los Dragones para que no este nervioso. – Si no la conociera, diría que veo a una santa... y eso que no soy católica.

-Es verdad... Por lo que escuché de Azazel-sensei, la fama de Asia-san se está extendiendo entro los Dragones al domar a los Dragones Malvados. Eso es porque solo los seres como los Dioses Corrompidos y los Dioses Malvados fueron los únicos que domesticaron a los Dragones Malvados en el pasado. – Kiba miró a Gasper, quien parecía escuchar algo en su cabeza.

-Balor dice que es algo que es cosa del talento único de ella. Al parecer, nació para ser una Domadora de Dragones. Claro, es conjetura suya al ser sólo parte de quien fue Balor en el pasado. – El muchacho en eso hizo una pausa.. – Y de Fluttershy, lo atribuye a su don repotenciado con el Elemento de la Amabilidad. Aunque ella no haya hecho un pacto, puede tenerlos bajo control.

-Es como lo que hace Rizevim... solo que ellas lo hacen de un modo más... ¿Puro? – Rossweisse no supo si decir esa palabra era lo correcto, porque en verdad duda que de puro tenga que ver el uso de los panties y de hacerte sentir como una basura con una mirada de esa clase...

-Bueno... es demuestra que esas dos están en un área que solos los Dioses han tocado. – Blake miró como esas dos los tenían calmados. – Lástima que no todos podemos hacer eso. Todo lo que se ahorraría en una pelea.

-A veces la lucha es un mal necesario. Creo que eso es algo que hemos aprendido... - Kaori notaba como la Hanyou asentía de mala gana, porque era la verdad. – Ahora... ¿Alguien me puede decir por qué Ruby y Pinkie están sobre uno de esos Dragones?

-¿Cómo...? – Todos pasaron a ver que... era verdad. - ¿¡QUE HACEN!?

-Wow... siempre quise estar sobre el lomo de un dragón. – Ruby parecía una niña que había cumplido su sueño de toda la vida.

-Lo sé. ¡Hay que brindar! Oye Gregorios, ¿Quieres un pastelito?

[... ¿Es rico?] – El dragón abrió la boca, para recibir el dulce... Al probarlo. – [Más]

[¿Qué? ¡Yo también quiero!]

[¡No! ¡Yoyoyo!]

[¡Suéltenme tontos! ¡Es mi turno!]

Ver como los 4 dragones empezaron a pelear entre ellos por el próximo pastel, solo hizo que Pinkie tenga una gota de sudor en la cabeza. Mientras que Ruby miraba el objeto con curiosidad. ¿Tan poderoso era?

Pero en eso, ambas fueron rodeadas por el aura mágica de Twilight, quien las bajó del lomo del dragón, solo para ponerlas frente a ella y Weiss.... Las dos infractoras tragaron saliva al ver la cara de sus dos amigas... Oh no...

-Dejando la masacre que estamos por ver...

-¡AUXILIO!

-Me impresionas Xenovia. – Wow... hablando de corazones fríos....

-¿En qué sentido Rarity? – la muchacha no sabía de que hablaba su amiga. Pero la modista le dio una palmada en el hombro.

-Hablo de tu postulación. Oí que va bien. No pensé que te lanzarías a un puesto tan... responsable como es ese.

-Oh... eso. No es la gran cosa. Siento que me falta aún mucho para lograr mi meta. No soy la persona más encantadora del mundo.

-Tonterías. No te creas menos Xenovia. – Fay le dio a la muchacha un empujón. – En primer año, todos te adoran. Dicen que eres la senpai que todos pueden contar.

-Y que muchos clubs deportivos están de tu lado por el apoyo que les has dado. – Ravel sabía que ese era un factor de peso. – Es más, Rainbow ha hablado con todos estos clubes para tu campaña.

-¡Hey, eso era secreto!

-¡Aaaaawww~! Nuestra marimacho tiene su corazoncito.

-¡Cállate Ray! – Todos rieron al ver el sonrojo de la chica, quien se cruzó de brazos. – Lo hice porque... es lo que un amigo hace.

-Jajaja. Creo que eso es lo que te hace portadora del Elemento de la Lealtad. – Ise acarició la cabeza de la chica, quien se cruzó de brazos e hizo un puchero. – Pero es cierto, solo ten más fe en ti Xenovia.

-Sino mal recuerdo... las elecciones inician el año que viene... las primeras semanas de Enero. Creo que tenemos tiempo para hacer la campaña. Fufu. Por alguna razón me siento emocionada. – Akeno sonrió con algo de malicia... ¿Qué planea esta mujer?

-¡Nosotras ayudamos! – Ruby alzó la mano al pensar que... bueno... - A fin de cuentas, inicio clases el año que viene también.

-Oh, es cierto. Ruby vendrá a nuestra escuela. Eso es bueno... - Rossweisse miró al resto de chicas del equipo RWBY. – Y dos de ustedes irán a la Universidad, ¿No?

-Si... ya pasé el examen que me dieron. Fue fácil...

-Habla por ti... No puedo creer que pase por los pelos... Estoy oxidada...

-Yo seguiré mi línea de trabajo con algunos exorcistas. Los Grimms no descansan.

Weiss habló con su orgullo de siempre, Blake algo molesta por no haber sacado la nota que deseaba y Yang... bueno, no puede pedir mucho de alguien quien no quiere seguir la escuela. Cada quien a lo suyo.

-Jaja. Es bueno ver que al menos tendremos más compañía en la Universidad. No sé ustedes, pero soportar a Akeno y Rarity sin ustedes un año es... Al menos sé que AJ estará conmigo en mi dolor.

-¡Amén por eso hermana!

-¡HEY!

Era gracioso ver como una situación seria, se volvía una charla normal a los pocos segundos. Parecía ser un talento natural de este grupo. Y era algo que ayudaba mucho a que sea más unido. Claro, Rias en eso recordó lo que Sona le contó. Por lo que decidió hablar antes de que se le pase...

-Eso me recuerda. Un miembro del consejo estudiantil actual también participa en la elección. Sona me comentó que Saji se ofreció como Vicepresidente. Dijo que le conviene más apoyar al presidente estudiantil como vicepresidente que ser el mismo presidente estudiantil. – la pelirroja sonrió al recordar como Sona les dio esa noticia. Era una lástima que no podían venir, ella deseaba dejar todo en orden antes de dar un paso al costado como Presidenta.

-Todos sabemos que Saji es un tipo muy solidario, sabe sus fortalezas y debilidades. Pero supongo que significa que él sabe que esa posición le permitirá sacar a relucir su verdadera fuerza aún más.

El Sekiryuutei sabía que la fuerza de su amigo, más que estar al frente en el campo de batalla, era de dar el apoyo necesario en medio de estas para que los demás sean los que puedan sacar a relucir su fuerza real. Lo había demostrado en todas las peleas que habían tenido juntos. Siendo la de Loki, donde salió todo eso a la luz.

-Creo que la persona que se ofreció para convertirse en Presidente fue la Bishop, Hanakai Momo-san. Parece que obtendrá un fuerte apoyo de los estudiantes debido a sus puntos de vista sólidos y por su pasado logro de apoyar al consejo estudiantil desde las sombras. – Irina en eso miró a Rainbow, quien no parecía muy molesta... - Y Rainbow aquí presente no desea que ella y Saji pasen tiempos solos para hacer... tiempo de calidad.

-¡Cállate! – No lo negó. Es más, se ve que todos ya saben de la situación desde hace tiempo.

-No se destaca mucho a simple vista, pero siempre ha estado junto a Kaichou y ha estado observando el consejo estudiantil. Parece que ella se interpondrá en el camino de Xenovia en las elecciones como su rival. – Pinkie, quien tenía un enorme chinchón en la cabeza por lo reciente, dio su opinión. – Aunque tiene su carácter sino mal recuerdo...

-También hay varios candidatos de los estudiantes comunes. Habrá muchos rivales. Eso es... ¿Qué haces Pinkie Pie?

-Estas ardiendo, debo refrescarte... - La muchacha le daba aire a Xenovia, quien tenía una gota de sudor. - ¿Qué? ¿No han visto a Twily cuando esta ardiendo?

-¡Hey! ¡Para que sepas, eso pasa porque mi magia necesita salir! ¡Y no ayuda que me hagas enfurecer Pinkie Pie!

-Con que eso aún pasa a veces ¿Huh? – Sunset sonrió burlona a su amiga, quien se sonrojo al ver que... todos la veían. – Créanme, la primera vez que lo vi... creí que vi una llamarada humana.

-¡Sunset!

-Ok, Ok... creo que podemos dejar de molestarla... por más divertido que sea. – Ise puso su mano en el hombro de Twilight para que se calme. Sirvió. Se sabía que solo su novio era capaza de calmarla en esos momentos. – Aunque... ¿Qué pasará si alguien quien no es demonio gana las elecciones?

-Aparentemente, Rias-buchou y Sona-kaichou tienen muchas cosas en mente al respecto. Bueno, incluyendo esa parte, parece que esta próxima elección será interesante. – Kiba sonrió al imaginar lo que se les venía e Ise hizo lo mismo. Vaya que será divertido.

-A todo esto... ¿Por qué no te metes en esto Ise? – Todos miraron a Yang, quien tenía una buena pregunta. – Eres buen líder, no dudo que harías un buen trabajo.

-Ahm... La verdad... - La rubia en eso sonrió al ver que él...

-No te gusta el papeleo, ¿Verdad?

-... ¿Tan obvio soy? – Todos cayeron al suelo, menos Yang, quien estaba conteniendo su risa. - ¿Qué?

-¿¡En serio!? ¿¡Solo por eso no te metiste!? – Rias se sobó el puente de la nariz al ver que su novio era... - Eres un idiota.

-¡Hey! ¡Soy más de campo que de oficina! ¡Juro que el día en que me siente en una oficina todo el día para morir de aburrimiento será el día en que acepte que mi vida ya no tiene sentido! – El Sekiryuutei hizo un berrinche como un niño, algo que muchas vieron como ridículo.

[Compañero, no ayudas a tu causa. Pero es cierto, yo me aburriría de verte solo ver documentos y más documentos. Ya tuve suficiente con un poseedor que era quien libero a Estados Unidos de las colonias británicas]

.... Historia para otro momento. Todos volvieron al eje central de la conversación, que era Xenovia.

-¡Vamos a ayudarte Xenovia-san!

-¡Igual! ¡Tengo todo listo para los panfletos y lo que será la campaña!

-Espera ¿Qué...? ¡Pinkie, ese era mi trabajo!

-Bueno considerando lo emo que has estado...

-¿¡Qué!?

Asia miró con algo de miedo como Irina trataba de no matar a Pinkie por lo que había dicho. Pero no quitaba que la castaña sonreía en medio de su discusión con la de cabello rosa, algo que Rias notó.

-¿Qué pasó? ¿Tiene que ver con la espada que lleva consigo?

-Algo así... Digamos que al fin trata de ver las cosas de otro modo. Aunque no quita que aún desea justicia por lo que le pasó a su amiga. – Ise notaba que Rias miraba la escena con... pena. – No es tu culpa que todo esto pasara.

-Lo sé... pero si supiera la verdad... no sé, quizás pudimos estar más preparados.

-Hey... ¿Crees que eso hubiera hecho un cambio? Recuerda que el futuro es incierto. Solo queda afrontarlo con fuerza en su momento. No estas sola... Nadie aquí esta sólo.

Rias sonrió a las palabras de su novio, para luego notar como Irina le hacía una llave en el cuello a Pinkie, quien trataba de respirar. Eso era...

-¿No deberíamos detenerla...?

-Déjalo Blake... Quiere ver esto un poco más. – Ayane sonrió al ver como Pinkie se ponía azul. – Oh, hablando de eso... ¿Qué pasó con el pacto de magos? Ha pasado tanto, que ese tema pasó a segundo plano.

.... Lo habían olvidado... Hasta el punto en que en verdad no habían mencionado lo que habían hecho. Bueno, no los pueden culpar. Lo de los Grimms, lo de Rizevim y demás...

-Kiba-senpai y yo tomamos un pacto temporal...

-Yo no puedo. Innis no me deja hacer un trato con nadie.... ¡A ti te hablo loca!

Koneko miró a su senpai con una ceja alzada, debe de ser molesto tener un ser así todo el tiempo con ella. Pero eso sirvió para saber unas cosas. Kiba eligió un chico, Koneko una chica de su edad... eso era interesante. Pero querían dejar el tema que en verdad no los afecta tanto, para lo central...

Irina notó que todas la veían... como esperando que diga algo. La muchacha soltó un suspiro... uno que solo sirvió para darle más nervios. Miró a donde estaban los Ángeles, haciendo lo que debían con los Dragones. Muy bien, no la escucharan.

-Ok.... Creo que.... Es algo que ya tuve oculto mucho tiempo, ¿No? – Irina se sobó el brazo, un tic nervioso. – Estoy segura que... Xenovia les dijo lo básico. Pero... Creo que es justo que yo les dé toda la historia. De mi amiga quien... murió a manos de un Grimm.

Ok... era hora de escuchar la verdad.

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Por otro lado, debajo de lo que sería el Reino de los Muertos... Lo que era un grupo amplio de Evil Dragons y Grimms, que eran liderados por...

-¿Segura de que este es el camino Cinder?

-Muy segura. Hay que admitir que ese costal de huesos es muy bueno en lo que hace. – La Fall Maiden no le gustaba la desconfianza que Walpurga le tenía. Que da, el sentimiento es mutuo. Pero... - ¿Qué dices tú Croam?

El Evil Dragón miraba lo que era el ejercito de adefesios que estos seres controlan... La verdad, no tiene ganas de hablar con ellos. Es más, no quiere estar aquí. Pero... hace esto para poder hallar su respuesta. El dragón se dio media vuelta para caminar a otro lado, haciendo que las dos mujeres lo vean con molestia.

-Es un encanto de persona.

-Déjalo... recuerda tenerlo vigilado. No podemos confiar en él.

-Si... Por cierto. Me sorprende que Hades nos de paso a esto...

-El Huesudo ese solo desea destruir la alianza. Cree que los demás seres no son necesarios... Para él, solo los Dioses bastan. Por lo que...

-Hm. No importa. Con tal que pueda divertirme.

CInder le tenía que dar su punto a Walpurga. Basta con esto para poder cumplir la misión que tienen. Es más, miró al que era su apoyo mandado por el mismo Rizevim. Se sentía el odio y la sed de sangre que venía del tipo ese. Muy bien, con eso que es pueden lograr abrir las puerta del Purgatorio para poder entrar al Cielo.

Era hora de jugar...

...

Croam caminó unos pasos, hasta ver a Ladon... quien estaba seguro de algo pasaba por la cabeza del poderoso Dragón. Quien superaba a todos los Evil Dragons y de lejos. No sólo eso, parecía tener un modo distinto de pensar las cosas.

-¿Qué te tiene molesto Croam?

-... No es importante. – El Dragón siguió su camino, no sin antes... - ¿Por qué haces todo esto Ladon? Con tu poder, podrías hacer más...

-Porque es divertido. ¿Qué otra razón hay? Somos Evil Dragons, hacemos lo que nos gusta sin importar lo demás. ¿No es por eso que somos conocidos como seres malignos?

... ¿Era eso todo lo que debían hacer? Croam negó con la cabeza y siguió su camino. Siguió caminando hasta poder estar lo más lejos posible de todo esto. Lo suficiente como para... Alzó la vista, notando como Apophis estaba haciendo su parte del trato, sabe que él tiene un plan mayor. No le gusta ser el títere de ese demonio, pero a veces... debes de ser más listo. Y ese dragón lo era. Además de que...

¿Qué era un Dragón en verdad? Hay tantas cosas que en verdad no entiende a pesar de haber vivido tanto. De haber visto el mundo de un modo que no esperó jamás. Estar bajo el yugo de Balor... fue por como se volvió ese Evil Dragon que todos conocen. Ser... ese monstruo que todos temen. Es más, cuando se liberó de él luego de su muerte... es que sintió lo que era ser libre. Ser capaz de tomar sus decisiones, de... poder hacer lo que cree.

Pero lo hizo ver también que, como especie, los dragones aún no son totales. Les falta... No, quizás es él quien no lo ve aún del todo. Por eso es que estaba haciendo esto. El viaje... las peleas... hasta unirse con el idiota de Rizevim. Pero a su vez... Quería ver algo que le diga, cual es el verdadero destino de los Dragones. Cual es su verdadero lugar en el mundo de los Dragones. Esa era su meta... su razón de ser.

Y sabe que aquí, no la a encontrar...

-¿Pensando de nuevo en tus cosas Croam? – el mencionado volteó. Vio al que sería Apophis en su forma humana. De cabello marrón con vestimentas negras... se veía muy joven, casi como él. – Creí que estabas dispuesto a todo.

-¿Qué hay de ti? Pensé que dejarías de jugar con... eso.

-Je. Aun tiene utilidad. El buen doc sabe como hacer... las cosas interesantes. – Apophis miró el cielo del lugar. – Es increíble pensar que.... Un Dios, desea la destrucción de todo.

-Hades es un idiota. Así de simple. Su odio lo ciega. – Croam notaba como Apophis seguía viendo el cielo. - ¿Cuál es tu meta en verdad Apophis?

-.... Ver hasta donde puedo llegar. ¿No te parece estúpido el hecho de actuar como unos bárbaros? No. Somos más que eso. Sin honor, somos lo más bajo que hay. Y los Dragones no somos eso.

Croam sonrió a las palabras del Dragón, quien en verdad era todo lo que no puedes esperar de un Evil Dragon. Es más, puedes decir que tenía su modo simple de ver las cosas.

-Y... tengo una meta personal a parte de lo dicho. Pero... creo que eso me lo reservo para cuando sea el momento adecuado.

-Como quieras.... – Croam sabía que pronto se iba a iniciar el proceso para abrir la puerta. – Te veré luego Apophis.

-... No diré nada. – el dragón habló antes de verlo irse. – Haz lo que debas hacer Croam. No habrá resentimientos. Somos más que eso. Tú sigue tu camino. Aži Dahāka y yo seguiremos el nuestro.

-... Claro.

Croam se alejó, ya decidido a lo que debe de hacer. Es más, era momento de... romper las cadenas y ser libre de nuevo.

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Creo que sería justo por empezar en... el día en que llegue a la academia de lo que era donde se preparaban a los futuros exorcistas. Era lo que uno... llamaría un convento, donde solo se reúnen religiosos y estar forzado a pasar las 24 horas del día ahí. Sin poder hacer más.

Mi primera impresión del lugar fue... que era horrible. Que era un lugar donde uno se puede morir del aburrimiento. Yo... Siempre fui una creyente de la religión, de Dios. Pero siempre sentí que algunas costumbres de estas personas es una exageración. No sólo por lo a veces ridículo que puede ser, sino por lo extremistas que son en sus acciones.

Llegar y notar que todos me veían de una manera que nadie... puede pensar es normal, me hizo creer... No, me hizo entender que no era bienvenida. Era una chica de un país donde se adoran a deidades paganas. Los católicos pueden ser muy... selectivos y muy cerrados de mente. Pero no me importaba en verdad. No había ido a ese lugar a hacer amigos. Sino para entrenar y ser una exorcista. Una que pudiera eliminar demonios y seres malignos. Esa era mi meta tras oír lo que le pasó a Ise-kun.

Pero jamás esperé que... alguien me hablara...

-¡Hola! ¿Eres mi compañera de habitación?

Vi a la chica que estaba frente de mí al momento que entré a la habitación. Se notaba que tampoco era oriunda de Inglaterra. Lo decía por su acento y demás. AL verla mejor, note su color de piel y expresión. Era... una chica de alguna parte de África, eso pensé... No dije nada, porque temía que un comentario sonara racista. Por lo que solo asentí y me fui a la cama libre para dejar mis cosas.

Claro.... Ella no me dejó en paz...

-Oye... Sería bueno que te presentes.

-... Irina Shidou. – La verdad, no quería hablarle. No quería hablar con nadie.

Desde que fui a Inglaterra, me cerré... No era la misma que era de niña. No... creo que solo era alegre con mis amigos, porque con gente extraña... me era difícil. No podía confiar en dichas personas. No podía... creo que era un mecanismo de defensa para no salir herida de un modo u otro. Normalmente servía... Esa vez, no fue así.

-Un gusto. Soy Angelina Shirogane. SI, soy de descendencia japonesa, pero crecí con mi familia en África hasta que ha papá le dijeron que debía de volver...

La oí hablar horas... Horas. No se callaba. Aun cuando yo no mostraba interés en su conversación. Aún cuando no quería hacer amigos, ella se tomó gran parte de la tarde y de la noche de ese día en seguir hablando. Fue... extraño. Y muy molesto.

Creo que ver mi cara en cierto momento, la hizo detenerse. Algo que vi como conveniente. En el mejor de los casos, solo dije que me iba a dormir. Que ella hiciera lo mismo. Que mañana iniciaban los entrenamientos.

Y con eso en mente, nos fuimos a dormir.... Sabiendo que mañana iniciaba todo.

Y vaya que fue un inicio radical. Había oído lo nada amables que eran al entrenar exorcistas. Pero jamás lo había pensado de ese modo. Las primeras semanas, se pudo ver que la vida de exorcista no era para todos. Muchos se rindieron a la semana o al mes. Claro, eran los hijos de varias personas en puestos de importancia en el Vaticano, pensando que por eso iban a tener un trato especial. No era así. En ese lugar, no había nadie diferente... a menos que tuviera talento.

Y ese era mi caso. No es por sonar presumida, pero tras 2 meses de entrenar... había logrado captar lo fundamental. Lo más importante en el arte de combate de un exorcista en general. Con armas de corto y largo alcance... todo lo entendía con solo practicar un poco. Mi memoria motora era tal que... los entrenadores me llamaron una genio. La mejor de mi generación. No le di importancia. No estaba ahí para esas cosas. Solo para aprender lo necesario.

-Eso fue genial Irina... ¿Cómo hiciste eso?

-¿Qué cosa? – Recuerdo que estaba leyendo un libro en mi cama, cuando Angelina me habló.

-Eso... la voltereta con giro para disparar. Todos se quedaron helados.

-Y con envidia. Lo vi en sus caras... - Angelina puso una cara de pena. No la culpaba del resto, pero se notaba en mi cara, de seguro, que odiaba que me hagan mención de los celos de otros.

-Ahm... Si... Wow, que incómodo.

-Si...

-Ahm... ¿Te gusta alguien?

-¿Qué clase de pregunta es esa? – La miré con fastidio. Si... no estaba de humor ese día.

-Yo digo... No es que sea lesbiana para hacer la pregunta, para que sepas.

-Me da igual...

-Sino... ¿Recuerdas ese chico del otro día?

-¿El que se me queda viendo el trasero cada vez que hago una de mis piruetas? Si. ¿Por?

-Bueno... Me pregunto si te interesa pasar un día con él...

-¿En serio? Tiene 18 y yo 14... ¿No te parece un poco extraño? Es más, se ve de lejos que solo desea una cosa y no le daré ese gusto.

-Ok... Wow. Se nota que no eres como las demás chicas.

-¿Y eso que significa? – En ese punto ya estaba molesta. Pero Angelina siguió con sus palabras.

-Que solo piensas en entrenar. Nada más. Vamos Irina. Ya estamos aquí 6 meses y... Nunca haces otra cosa. Todos saben que eres talentosa, pero creen que eres una presumida por mostrarlo todo el tiempo.

-Yo no tengo la culpa que la mayoría de la gente de aquí sean niños que creen que por sus familias deban de estar aquí. Yo vine por una razón... Nada más. Aún con las palabras de mi padre... solo vine para... - Me detuve, al ver que estaba por decir algo fuera de tono. Fuera de contexto.

-¿Irina...?

-Olvídalo... No es de tu incumbencia.

-Oh vamos. ¿No somos amigas?

-¿Amigas? Apenas somos compañeras de cuarto. No necesito amigos en este lugar...

-Pero...

-¡Ya! ¡No quiero hablar más! Solo... Solo háblame cuando te lo pida. No más.

Me acosté, ignorando todo lo demás... incluyendo la culpa que sentía. Pero era la verdad... no fui para hacer amistades. Al menos, creí que con eso me dejaría en paz.

... Me equivoqué.

-¡Irina! ¿Quieres practicar luego de almorzar?

Al día siguiente, me hablo como si nada... y no lo entendía. No entendía el porque seguía tratando de ser amable conmigo. Pero no le dije nada. Pensé que un día se va a aburrir. Pero no fue así. Siguió y siguió... Se notaba que ella... estaba más que segura de que yo le iba a responder en un momento dado. Y tuvo razón.

-¿Por qué insistes en querer hablar conmigo? Ya te dije que...

-Sé que no quieres amigos aquí. Pero... ¿No quieres al menos a alguien con quien hablar?

-¿Y por qué crees que quiero eso?

-Porque se te ve sola...

No supe como responder a ello. ¿Me veía sola? No lo había notado. Pero pensé que era obvio, porque no estaba en el lugar donde había querido pasar mi vida. Estaba en un país que... no era mi hogar. No me sentía en casa, por más que lo intentaba. Por más que quería... No me sentía cómoda. Porque me sentía sola... No, era porque ya no estaba con él.

-¿Era importante? Esa persona en la que estas pensando ahora.

Creo que fue la primera vez desde que la conocí, en que me quedé sin palabras... La verdad, no supe que decir. Y ella me sonrió, como diciendo que me entendía. Que no necesitaba hablar... que no era necesario... Creo que eso bastó para... que yo fuera más abierta con ella.

No fue algo repentino, pasaron un par de meses, hasta que sentí que ella en verdad era mi amiga. Angelina no era como yo... Era promedio en sus habilidades, pero tenía ese modo de acercarse a las personas y de hacer que confíen en ella, que era lo que yo no.... Una líder. Y eso hizo que ambas nos acerquemos más. Porque podía confiar en ella varias cosas que nunca pude con alguien más en años.

Nunca le dije mucho de mi vida en Kuoh, porque era... difícil recordar días que no volverán. Y ella lo sabía, por lo que respetó mi decisión. Yo hice lo mismo con ella, se veía que no se notaba cómoda al hablar de sus padres. Seguro eran temas muy personales, eso pensé...

-¿No irás a ver a tus padres? – Me hizo esa pregunta al poco tiempo que cumplí 15. Ambas estábamos descansando en la habitación, ella como siempre leyendo algo... no sabía que era.

-No. La verdad... no deseo molestarlo con mis cosas. Es más... Ver a mi padre y sonreír, diciendo que todo está bien... no es lo mío. Mentir se me da fatal.

-Pero pudiste mentir cuando dijiste que no habías sido tú la que mezclo el agua de las duchas con tinte negro.

-Tengo mis momentos... - No era raro que ambas riéramos en esos momentos. Era divertido. – Pero si... Mi padre me oculta algo. Lo sé. Solo que... no tengo el valor de preguntarle que. Es como si... cada vez que me ve, muestra culpa. Y no sé porque...

-Hmmm. Quizás es por un regalo que se le olvidó.

-No... Esa fecha jamás se olvida...

-Ahm... ¿Espantó un prospecto a novio?

-No me ha gustado nadie más en 5 años. Y tú lo sabes.

-Vaya... ese chico debió ser muy especial para que aún tras todo, sigas pensando en él.

-Lo era... Pero no sé. Mi papá es raro.

-Todos lo son. Hasta cierto punto. Al menos el tuyo no te trata como si fueras una decepción. – Ahí note como Angelina parecía detenerse, como si notara que... - Ugh... No debí...

-¿Angelina...? – Pude verla temblar, como si... tratara de alejar esa idea de su cabeza. - ¿Qué pasa?

-... Mi papá solo me vio como un modo de ganar puestos en los mandos del Vaticano. Ya sabes... Le hubiera gustado un chico, pero nací yo. Mi madre... Ella ha tratado de estar presente conmigo, pero no es lo que uno cree es ideal. Mi familia... no es lo que yo quisiera. Pero es lo que hay. Y sé que hay cosas peores, pero... quisiera que ellos me vieran por lo que soy.. no lo que pensaron que sería.

En eso pude ver algo más en Angelina. No era una chica alegre porque sí. Era su modo de ocultar su dolor... el de no tener esa vida que pensó. Ella...

-Me hubiera gustado quedarme en casa. Ir a la escuela. Tener un novio... entrar al club de gimnasia. ¿Por qué crees que admiro tus acrobacias Irina? Serías una gran gimnasta.

-¿Yo...? No, que va...

-En serio. Siento que... esta vida, la que tenemos, está llena de sacrificios. Que tratamos de hacer un bien para el mundo. Pero... ¿Está bien odiar una raza entera solo porque dicen que son malos? ¿Es correcto pensar eso?

En ese momento... no lo vi. Pero creo que ella trataba de decir que... no era necesario pelear con seres sobrenaturales por ser sólo órdenes, sino porque debía de haber seres malos entre ellos. Como los hay entre los humanos.

-Por eso... Tal vez sea tonto, pero quiero ver un día... cuando las razas que existen en este mundo no se odien solo porque la otra existe. Que... puede haber paz entre nosotros. Quizás... solo necesitamos eso para darnos cuenta que hay suficiente espacio en este mundo para todos nosotros.

-... Eso sonó lindo. Viniendo de una marimacho como tú.

-¡OYE! Que tus pechos sean más grandes no te dan derecho de.... MMmmm.... ¿¡Cómo puedes ser tan delgada y tener esos pechos!? ¡NO es justo!

-¡Espera! ¿¡Que crees que...!? ¡AH!

-¡Déjame tocarlos! ¡Tal vez sean mágicos y me den el crecimiento que necesito!

-¡Aléjate de mí loca! ¡Yo no voy por ese lado!

A pesar de todo, ambas reímos como locas... Tenía una amiga y eso me bastaba. No estaba sola.

...

Con el tiempo, ella y yo nos hicimos exorcistas novatas, ambas hacíamos equipo... Incluso cuando Xenovia se unía a una que otra misión, Angelina era... igual que siempre. Y yo trataba de ser más animada. Al fin sentía como mi yo real podía salir sin... miedo a que me traten de rara o me dejen a un lado. Ya no me importaba.

Pero un día...

-¿Por qué crees que me llamen personalmente? – Me pareció rara la orden. Y Angelina miraba la carta donde... nos llamaban a ambas, pero... a mí me dieron la orden de ir primero.

-No lo sé... Pero no me gusta mucho eso.

-¿Por qué...?

-... Corazonada. – Ella siempre tenía su modo de ver las cosas... algo que se le daba como anillo al dedo. – Hmmm. ¿Sabes qué? Iré yo.

-¿Ah?

-Que iré yo. La verdad, quieres hablar con tus padres de algo, ¿No? Ya tienes casi 16 Irina, creo que sería justo que pases un día con ellos. Con nuestros trabajos, no pasamos mucho tiempo en libertad.

-Hablas como si solo fuéramos... armas.

-¿No lo somos para ellos? – Sabía de que hablaba... solo que... - Anda, ve. Yo diré que surgió una emergencia. No pasará nada. Y si es así, sé defenderme.

-No hables como si fuera a pasarte algo.

La vi reír tras decir ello... era lo normal en ella... Solo que luego, no la vería reír de nuevo.

...

Hice lo que me pidió. Pase unos días con mis padres, viendo el negocio de mi mamá y como papá estaba mejor en su trabajo. Sentí... que habíamos retomado algo de la normalidad que habíamos perdido.

Por eso, cuando llegué a la sede del Vaticano, sabiendo que tendríamos una misión con Xenovia, sentí que iba a ser un gran día. Pero... Cuando vi a Angelina de nuevo en la habitación que habíamos separado antes del viaje... No supe que decir.

Era... ella. Pero vi algo en sus ojos... como si le hubieran arrancado algo. No... No supe como reaccionar. Cuando me vio, me trató de sonreír... pero...

-¿Qué te pasó en la cara...?

-Oh... nada. Solo una caída. – No le creí. Dios sabe que no le creí....

-Mientes.... – La tomé del brazo y vi como se quejaba. – Angelina... ¿Qué pasó...? ¿Te lastimaron...?

-No... Es nada...

-No es nada... ¿¡Que te pasa!?

-¡NADA! ¡No pasa nada! ¡Déjalo! – abrí los ojos con incredulidad. La vi sin poder entender que... pasó. Ella no era la de gritar. Ni en medio de una pelea. - ¡Ya ve a dormir Irina! ¡Mañana tenemos cosas que hacer!

-Pero... - La vi irse al baño, cerrando la puerta con fuerza y ese acto... me hizo pensar que... si había pasado algo malo mientras ella estaba acá sola.

No tuve el valor de insistir. No pude... solo me fui a dormir... aunque pensé que oía a alguien llorar. Creí que era mi imaginación... Como me hubiera gustado haber deshecho esa idea.

....

Cuando nos reunimos con Xenovia al día siguiente en el Coliseo... la misión era simple. Era... matar a un Stray. Nada más. Algo de rutina... Pero Angelina estaba como ida. Le hable a Xenovia que pensaba y... ella tampoco estaba segura. Por lo que me arriesgue en... hablarle una vez más.

-Angelina... ¿Estas...?

-Irina... Siento lo de ayer. – la vi con la espada que siempre usaba en mano, la cual temblaba por alguna razón. – Es sólo que... no supe como responder. Así que...

-Oye... No pasa nada. Sé que... me dirás lo que pasa cuando estés lista. Solo necesito que... confíes en mí Angelina. Somos mejores amigas, ¿No?

-Jejeje. Es la primera vez que me llamas así... Pero sí, somos mejores amigas. Y eso es algo que no cambiará jamás. – Vi como Angelina parecía contener las lágrimas. Como si... supiera algo que yo no... - Prométeme una sola cosa Irina. Si me pasa algo...

-¿De qué estas....?

-Si algo me pasa... lo que sea... Quiero que sigas siendo tú. Eres una gran amiga. Y creo que todo mundo necesita saber como eres en realidad. No sólo con esa faceta de mujer amable y feliz, sino la que siente dolor y pena de muchas cosas. Por eso... Sé que muchos te van a querer como eres Irina. Como yo.

-Oye... No hables como si te fueras a morir. – La mire con algo de gracia. Es más... juro que me quise reír. Pensé que bromeaba. Como siempre lo hace. Solo que... no vi un tono de gracia en su cara. Y eso me asustó un poco. Pero ella...

-Jaja. Si, hablo como una anciana. Anda, hay que acabar con esta misión para poder volver a Inglaterra. Ya sabes, para poder comer en el restaurante de tu mamá. Hace tiempo que deseo ir a ese lugar. Ya sabes... para probar la sazón de tu mamá.

-...OK. Pero no creas que por eso voy a olvidar lo de antes. Me dirás todo... quiero ayudarte Angelina.

-Lo sé... Ya hablaremos de eso luego. Lo prometo.

... Al final, le creí.

...

Lo que pasó luego de todo eso... es aún borroso para mí. Recuerdo que cuando llegamos a la zona donde estaba el Stray, al parecer, solo vimos rastros de lo que fue el demonio que era nuestro objetivo. Solo vimos... sangre y trozos de lo que fue una vez. En su lugar, vimos lo que parecía ser una clase de serpiente de dos cabezas... No sabíamos que era en esos momentos. Solo que nos atacó sin pensarlo dos veces. Las tres nos vimos forzadas a... pelear como pudimos.

Pero entre la confusión y la incertidumbre, es que no pudimos hacer nada... Estábamos contra la espada y la pared. Heridas y cansadas. Ver como Xenovia quedaba fuera de combate.... Dejándome sola con Angelina...

No sé que pasó... Recuerdo que Angelina dijo algo sobre que... esperaba esto. Por eso estaba lista. Que solo ella debía de... la miré como no entendiendo de que rayos hablaba. Pero solo pude ver como ella parecía crear lo que pensé, era un círculo mágico. No sabiendo desde cuando es que sabía hacer magia... es que pensé que.... Bueno.... Tenía un plan.

Pero jamás se pasó por la cabeza que se lanzaría hacia la boca de esa cosa... Pude jurar que me sonrió una vez más, antes de ser tragada por esa cosa....

.....

Lo siento... Me es... difícil... narrar lo que vino luego. Lo que... pasó después...

Xenovia ya les debió de decir... Que nada quedó de ella... ni de esa bestia... que ahora sé que era un Grimm. Nosotras... Nos dijeron que tuvimos suerte de haber sobrevivido. Que lo de Angelina... fue un accidente... Uno que lamentaban.

Mentira... para ellos, solo fue la perdida de otra herramienta. Una que no podían controlar. Recuerdo lo mucho que me enojé. Recuerdo que... estaba más que segura que iba a hacer algo de lo que me iba a arrepentir luego. Pero... logré tener las cosas bajo control. No podía... actuar de ese modo. No ahí...

Las cosas con Xenovia... fueron algo que tratamos de resolver. No tocamos el tema de Angelina de nuevo en las próximas misiones. Pero ella lo notó... ¿Lo recuerdas verdad Xenovia?

Perdí... mis deseos de mostrar todas mis habilidades, no porque las quisiera ocultar. Sino porque al usarlas, sentía que... podía oírla de nuevo. Animándome o hasta riéndose de lo exagerada que podía ser. Y.. Je... Me siento como una tonta.

Lo de su familia... solo supe que perdieron todo apoyo del Vaticano por algún motivo. No sé cual... trataba de tener mi vida en control de nuevo para preocuparme de otros por más cruel que parezca. Aunque trataba de saber si... había algo más. Si todo fue orquestado.

Llámenme loca, pero... Me parecía muy raro que antes de morir... antes de la misión, Angelina actuara de ese modo. Ella... ella siempre fue una chica de energía. Tan alegre a pesar de mi actitud fría al inicio... Yo... Yo nunca pude decirle lo que ella era para mí. Mi amiga... mi hermana.... La vi morir sin poder hacer nada...

Y aún ahora, lo recuerdo todo... Aun con la cara de alegría que pongo... aún con todo... no puedo evitar sentirme culpable. De que si hubiera sido un poco más fuerte.... Tal vez pude salvarla... De que... aún pudo estar conmigo.

¿Habría sido diferente si yo iba primero esa vez? No lo sé... nunca lo sabré.

---

Irina terminó su relato. Estaba sentada, mirando el suelo con una expresión cansada. Todos viéndola con un claro sentimiento de dolor. De pena... Algunas lloraban al sentir, por las palabras de Irina, lo mucho que esa chica significó para la castaña. Quien rio por alguna razón...

-Siempre lo supe... Que quería de alguna manera hallar un culpable y vengarme... Hacer a alguien responsable de la muerte de Angelina. Que no era una casualidad. Que el mundo no era tan cruel como para hacer que una buena persona como ella, muera de esa manera. Quizás... solo estoy buscando un fantasma. No sé...

Irina no supo en que momento varias de las chicas la abrazaron, ella no pudiendo evitar llorar un poco por el gesto. Pero al mismo tiempo, la hacía sentirse algo mejor consigo misma. Pero... quizás algo culpable, de que era ahora que podía... ser ella misma. Algo que no pudo ser con su amiga. ¿Culpa...? Posiblemente.

Pero la que no era capaz de decir nada era Weiss... Porque... su mente estaba yendo una y otra vez a esa parte en que Irina habló del estado anterior a la muerte de la chica. No quería creer que fuera posible. No quería creer que algo tan cruel ha pasado...

Pero... las pistas estaban ahí. Estaba lo que era la actitud... el daño físico. El daño... psicológico. Y eso la hacía dudar... ¿Debe decirle? ¿Sería una dulce crueldad o un acto de verdad necesaria? ¿Cómo reaccionará Irina al saber que a su amiga posiblemente....?

Blake negó con su cabeza. Como sabiendo que pasaba por la pasa de su amiga. Como... entendiendo cuál era su problema. Porque ella sabía de esas cosas. No porque fue víctima de ese acto tan cruel. Sino porque... había visto a gente, mujeres dentro de White Fang, que había sido víctima. Y eso hizo que ella también reconozca las señales. Pero... ¿Qué debían hacer...?

-Irina-san... Lamentamos mucho lo que le pasó a su amiga.

-No Asia... Es... Una herida que he tratado de tener oculta. Pero... creo que ya va siendo hora de tener que pensar que... si fue un accidente. Que... no hay culpables que buscar.

Parecía ser lo más sensato. Porque... no servía de nada seguir con ese pensamiento. Tal vez era mejor dar vuelta a la página y...

Fue en ese momento, que sintieron un temblor en todo el lugar. Uno que hizo que todos se vieran las caras al no saber que pasaba. ¿Era posible que cierto fenómeno ocurra aquí? No... Había que ser lógico. No era posible.

Entonces aparecieron muchos símbolos de Ángel mientras sonaban y parpadeaban por todo el lugar, lo que informa que algo ha sucedido... algo de suma importancia.

-¿¡Que rayos...!? – Ise miraba el escenario con confusión. Temiendo lo peor... hasta que un ángel de seguridad se dirigió hacia ellos, se le notaba muy asustado y preocupado.

-¡Los Evil Dragons, el Qlippoth nos ha atacado.....!

Esas palabras hicieron que todos se pongan alertas... ¿Un ataque al cielo? ¿Qué clase de locura era esta?

-¡Todos, a la zona central! ¡Ahora!

A las órdenes del Sekiryuutei, todos se pusieron de pie y corrieron a donde debían de estar... al parecer, algo grande estaba por ocurrir. De nuevo.