La ciudad de Agreas era el lugar donde los Rating Games se llevan a cabo, un lugar de importancia, tanto política como económica. Eso es lo que hace de este lugar, una zona invaluable para el inframundo. Pero no muchos saben, de su valor en lo que habría el pasado, el gobierno de los viejos Maou. En este lugar, yace tecnología antigua. Una que es imposible de replicar con medios normales y actuales, ese es el porque del interés del Maou Belecebú actual en sus investigaciones. Investigaciones que eran limitadas por el propio gobierno y la facción de nobles, liderada por la casa del Gray Rey, Bael.

Ahora mismo, un lugar donde se llevaba una cumbre de magos, para ver cosas que antes no se hubiera podido, era el lugar de una posible batalla. Una que haría que las cosas fueran distintas para el mundo de los demonios.

La barrera que estaba rodeando todo el lugar, hacía imposible el transporte por medios mágicos. Y nadie sería tan loco como para lanzarse hacia esta ciudad, casi fortaleza, por su cuenta. Al menos eso creerían.

El sonido de algo acercándose a la barrera, logrando traspasarla y siguiendo su camino hasta impactar de manera precipitosa al suelo. Rodo varias veces, sin importar que fuera algo de forma cuadrada. El impacto siguió unos metros más, hasta que al fin se detuvo y terminó, de manera milagrosa, de pie.

-Hemos llegado al destino. Salgan con cuidado.

Al abrirse las puertas de la recamara, un grupo de jóvenes cayeron al suelo. Algo que era gracioso de ver, si es que sus caras no eran señal clara de lo que había sucedido.

-Ugh... Respóndanme los vivos... - Ise trataba de tener su desayuno en su lugar mientras se ponía de pie.

-Veo... estrellitas... - Ruby trataba de poner su cerebro en su lugar, pero no ayudaba que sentía el mundo girar.

-Brg... Creo que voy a vomitar... - Weiss se llevó la mano a la boca, no estaba lejos de ello.

-¿Yang? ¿Yang dónde estás?

-Aquí abajo... - Blake bajó la mirada, para ver que acabo sentada en la espalda de su compañera. – Wow... que viajecito. Fue explosivo...

-No es hora de malas bromas... - Rossweisse salió de la recamara, con Kurama en brazos. – Anda Kurama... Camina. – poner al lobo en el suelo y ver como este no podía ir recto. – Oh Kurama, ¿Cómo pude dejar que te metieran en esto?

-Al menos no es abuso animal. – Sairarorg salió de la recamara, algo mejor que el resto. Regulus volvió a su forma de león, listo para lo que sea. - ¿Dónde hemos caído?

-Por lo que puedo ver, caímos en la zona oeste de la ciudad. – Momo sacaba su celular para ver el mapa de la ciudad. – Sip, hemos caído en el lugar perfecto para llegar a donde sea hace la cumbre.

-Entonces lo mejor será darnos prisa. – Yura ayudaba a Nimura a pararse, la pobre estaba tan blanca que parecía anémica. - ¿Estas bien?

-No volveré a volar... No volveré a volar....

-Genial, ya la traumaron. – Tomoe se sobó la cabeza unos segundos, antes de recordar que... - ¿Dónde está Bennia?

-Estaba... aquí... - Reya miró a su lado, para luego ver que, en efecto, la chica no estaba. – Loup ¿Dónde está la enana?

-¿A mí que me ven? Yo trato de recuperar mi sentido de la orientación. – el hombre lobo, al ser parte animal, esto lo afecto mucho. Vaya viajecito.

Pero de repente, del interior de la cámara, Bennia salió hecha una bala. Con una gran sonrisa, como la de un niño que acaba de sentir el placer de subirse a una montaña rusa.

-¡Wohoo! ¡Sí! ¡Que divertido! – La chica apareció al lado de Momo y le dio los cinco. - ¿¡Listos para un segundo viaje!? – Ver la mirada de desaprobación y rabia de todos, la hizo sonreír nerviosa. – Jejeje.... Yo solo decía... y... ahm... Mejor me callo.

-OK... Volvamos a lo central amigos... Tenemos... que hacernos cargo de los que deben estar en esta ciudad. No hay duda que White Fang está en esto. – Ise se acercó a Blake, gracias a la dirección de Ddraig, para luego tocar su mano. – Blake, ¿Por dónde crees que puedan estar?

-Hmmm. – la chica pensó unos segundos, antes de que una idea se le ocurriera. – Si conozco a Ilia, y lo hago, ella habrá centrado todo en un radio de 5 kilómetros alrededor de la zona donde está la reunión. – Blake sacó su listón, el que siempre lleva consigo, para amarrar la mano de Ise con un extremo, y la suya con el otro. – Yo seré tu guía y te diré todo lo que veo.

El Sekiryuutei asintió, podía confiar en ella, sus instintos le decían eso y ellos no le han fallado. En eso...

-Reya, sé que tienes un Sacred Gear artificial, así como Nimura, Tome, Yura y Momo ¿Verdad? Azazel me lo comentó días atrás.

-Si, el mío puede... Oh, entiendo tu plan. – La chica creó varias mascaras con unas sonrisas algo... macabras. – Déjenmelo a mí~.

Scouting Persona, un Sacred Gear artificial que le fue dado por Azazel a la muchacha. Con él, el usuario puede crear una multitud de máscaras flotantes, que luego se pueden usar para actividades de vigilancia como buscar enemigos, recopilar y transmitir información a largas distancias, y también se puede hacer que actúe como un escudo.

-AGH. Son horribles...

-Créelo o no, le queda a Reya.... – Tomoe entendía el miedo de Ruby, quien la miraba con horror. – Solo... ignora la sonrisa... no las veas mucho tiempo. O tu alma será devorada.

-¡Noooooooooooo!

El coscorrón que ambas recibieron por parte de Weiss y Momo, hizo que ambas se soben la cabeza. Estas dos...

-Ok... andando. En silencio. Todos. – Ise dejó que Blake lo guíe, quien dejó que Reya camine al lado de ella, dado que las máscaras servirán como puntos que les permitan ver dónde van y si hay enemigos.

Solo esperaban que no necesiten pelear, al menos que la situación, de por sí, lo requiera. Eso sí, lo mejor será avanzar.

....

-¿Qué ves Reya? – Yura le hizo la pregunta a su amiga, quién se concentraba para poder guiar sus máscaras.

-Por ahora nada, sólo las vacías calles y... ¡Oh!

-¿Viste algo?

-Sip. – Tomoe sonrió al oír algo bueno. – Veo a unos cuantos enemigos en los techos en los edificios aledaños al centro de convenciones. No sólo ello, también veo... que están armados. Si nos ven, será peligroso.

-Necesitamos a alguien veloz para que se haga cargo de ellos.

-¡Yo! ¡Yo! ¡Elíjanme a mí!

-Que sepa de la definición de la palabra sigilo. – Ruby bajó la cabeza decepcionada, Weiss siempre sabía arruinar su entusiasmo. - ¿Quién puede ser...?

-A mí ni me miren, no tengo técnicas de clase sigilo.

-*Woof*

Kurama apoyó la moción de Rossweisse, quién no estaba segura de sus talentos para algo así.

-¿Por qué no vas tú Bennia? – Loup miró a la chica, quién movió la cabeza a un lado. – Esta es tu especialidad.

-¿Lo es...? ¡Oh sí, lo es! ¡Denme unos minutos!

La chica se pudo la máscara de calavera que siempre lleva consigo, según ella para darse más... papel en lo que hace. Desapareció en las sombras del lugar, yendo entre ellas para hacerse cargo de sus enemigos.

-¿Qué hacemos mientras esperamos?

Unas voces se oyeron, se acercaban hacia donde estaban ellos. Yang supo que debía aprender a cerrar la maldita boca. Siempre es lo mismo.

-Escondernos. – Blake guio a todos hacia donde sabe, podrán ocultarse unos segundos.

....

Por su lado, Bennia seguía con su misión de sigilo. Viajaba entre las sombras y aprovechaba el silencioso acercamiento con el que había sido bendecida desde que nació.

Al verse cerca de dos de esos sujetos, que cargaban en sus manos, lo que ella identificó como armas de fuego, modificadas para el uso de balas especiales. Supo que debía ser precisa y veloz. Una oportunidad es todo lo que tiene. Corrió hacia donde estaban eso sujetos, se escondió tras el contenedor de ventilación que había ahí. Dio una mirada rápida a sus presas y... debe de separarlas.

Se llevó la mano al mentón y empezó a pensar. A ver... ¿Qué la puede ayudar? Fue en eso que recordó que... claro. Buscó entre sus cosas, en su ropa, lo que será su salvación. Al menos... eso quiere creer.

-No. – puso a un lado un lápiz. – No. – luego una caja. – No. – sacó un sándwich. Lo vio unos segundos, lo olió y le dio un mordisco. – Hmmm, crema de maní. – lo lanzó lejos, para empezar su búsqueda de nuevo. Esta vez, hallando lo que buscaba. – Ajá. Tenía sed. – Abrió lata de jugo, para luego beberla y sonreír al ver que tenía lo que quería.

Pasó a ver a esos dos idiotas, lanzó la lata al que estaba más cerca y le dio en la cabeza.

-¿Qué demo...? – el híbrido vio la lata de jugo en el suelo. - ¿De dónde...?

No terminó su pregunta, al sentir su cabeza ser cortada del cuello. Bennia la había cortado con su guadaña, no esperó a que el cadáver caiga. Fue hacia el que estaba más cerca. Este había visto la muerte de su compañero y cuando quiso actuar. Bennia le cortó los brazos. Su grito fue detenido por la patada de la chica en la boca. Logrando romper varias cosas ahí. Este cayó al suelo, llorando por lo último, mientras Bennia se le acercaba con una sonrisa en la cara. Una bien ocultada por su máscara.

-Esto. Es por lo inocentes que mataron.

Sin perder tiempo, cortó la cabeza del sujeto. Para luego tomar las armas de estos y ponerlos bajo su capa, era bueno que sea mágica. Puede que las necesite. Uno nunca sabe.

-Ok. Hora de hacerme cargo de los otros 4. Será pan comido. – y con su velocidad, digna de un Knight, Bennia fue hacia donde estaban sus siguientes víctimas.

....

En el suelo, el grupo se escondía de la cercanía de los dos sujetos que parecen hacer vigía terrestre. Rayos....

-¿Por qué no los viste Reya?

-Pues perdóname. Pero mis máscaras no son infalibles. – Momo tuvo un tic en el ojo al oír ello. Vaya infiltración, estaban por ser vistos.

-Escuchen. – Blake cayó a ambas chicas, centró sus sentidos en sus orejas de gato y... - Hablan de algo.

Todos hicieron lo que ella les dijo y guardaron silencio, a ver...

-¿Qué opinas de esto? No sé si es buena idea...

-¿Acaso quieres echarte para atrás? ¿Qué pasó con tu fe en la causa?

Parecía que uno dudaba un poco en el plan y el otro, parecía creer que estaban haciendo bien.

-Pero... ¿Será una buena idea habernos aliado con estos Demonios? Digo, se ve que quieren destruir el mundo. ¿No es eso malo?

-Si lo destruyen, bien. Este no ha hecho ningún bien por mí. Haber nacido medio Youkai ha hecho de mi vida una desgracia. Y tú ni hables, eres medio demonio, sólo porque tu padre hizo con tu madre. Deberías estar feliz de esto. Al fin, venganza.

-Si... claro. Igual, no me gusta lo que la señorita Ilia ha ordenado. ¿No crees que ha estado algo... loca?

-Desde la destrucción de White Fang a manos de ese dragón y su grupo, ella ya estado así. Parecía tener fe de algo y lo que pasó ahí, la afecto. No sé qué es, pero me da igual. Y no deberías estar diciendo esas cosas así como así. ¿qué pasa si nos oyen?

-Pero, las calles están vacías. Y todos los que estaban aquí, están en sus casas. Dudo que haya alguien fuera.

Eso era lo que creían.... Por el lado de ellos, los jóvenes parecían haber hallado algo bueno.

-¿Sabrán algo de nuestro objetivo?

-No lo sé Sairaorg... Pero lo vamos a averiguar. – Ise oía que los pasos se hacían más fuertes. Estaban cerca. – A la cuenta de tres, nos abalanzamos sobre ellos. 1, 2....

-¡Hey, ya acabé con ellos! – la voz de Bennia se oyó al otro extremo. La chica buscaba a sus compañeros, pero sin éxito. - ¿¡Chicos!? ¡Hola!

El silencio que hubo presente, sólo fue marcado por la sorpresa de los dos integrantes de White Fang, quienes miraban a la chica con sorpresa, mientras que...

-La ahorcare... de modo lento y doloroso veré qué como la vida abandona sus ojos. Sona-sama estará furiosa, pero le explicaré los motivos que me llevaron a esto. Me perdonará y podrá hallar otra Knight. Una más útil... menos ruidosa. – Momo murmuraba sus pensamientos asesinos hacia su compañera de equipo.

Esos sí que eran unos pensamientos bien oscuros si le permiten decirlo. Pero dado que el sigilo se fue por la borda... sólo queda una cosa.

-¡Ataquen!

...

Tras unos segundos, donde redujeron a esos dos sin ningún problema. Al menos, ahora los tienen enmarrocados y listos para ser interrogados.

... Todo esto, mientras algunas trataban de evitar que Momo cometa asesinato. El color azul en la cara de Bennia no es natural...

-Muy bien, ahora nos dirán lo que queremos saber.

-Oye... yo te reconozco. Eres la mujer de Adam. – Blake gruñó al ser llamada así, como detesta pensar, que una vez, le gustaba que la llamaran así. – Pensar que te aliarias con el que lo mató. ¿Yendo de...? ¡Agh!

El sujeto no terminó su frase, Ise le piso la rodilla para que se calle, estaba harto de oírlo hablar y que hable así de ella. Le importa nada el pasado de Blake, pero oír que la llamen así... le dio rabia. Mucha.

-Rayos... me ganó. Yo le habría aplastado otra cosa. – Yang suspiró decepcionada, vaya que las ganas no le faltan.

-No perdamos tiempo. ¿Qué desea White Fang en esto? ¿Qué ganan? ¿Y cuál es el plan de todo esto? – El Sekiryuutei sabía que uno no iba a cooperar, estaba muy metido en esta idea que White Fang había desarrollado, pero el otro... tal vez pueda. – Mi lobo es muy persuasivo.

Kurama ladró varias veces, listo para morder a esos dos en sus lugares más sensibles, en caso se nieguen. Rossweisse lo detenía, lo sostenía del collar, pero a su vez, soltaba un poco el agarre para que se acerque un poco. Esto podía ser divertido al menos para ellos...

-¡No diremos nada!

-¡Él no habla por mí!

El que parecía más adepto a cooperar, sabía que trataban con el Sekiryuutei... una leyenda en la actualidad. No está loco para hacerle frente a este monstruo y sus amigos. Prefiere vivir, que proteger las ideas locas que White Fang tenía en la actualidad, él no firmó para esto.

-Muy bien, habla. El que coopere... vivirá. – muchos se sorprendieron al oír las palabras de Ise, pero miraban en su expresión, que no era broma lo que estaba diciendo. Lo decía en serio... si ellos no cooperan, están muertos.

-Ahm... ¿Qué desean saber?

-¡Cállate, no digas...! ¡Aaaaahhh!

Kurama calló al que no iba a cooperar, mordiendo su pierna con tal fuerza que ya se empezó a ver algo de los huesos... los colmillos del lobo, eran muy fuertes. Por algo tiene en sus venas, la sangre del que se dice, es el lobo que come Dioses como desayuno. Kurama soltó la pierna del sujeto, para seguir gruñendo. Lo amenazaba.

El otro tipo, miraba lo que el lobo le podía hacer, por lo que pensaba ir a lo seguro. Este miró al Sekiryuutei, quién a pesar de su ceguera, era capaz de mostrar mucho con sus ojos y esto era lo que lo hacía, temible.

-¿Qué desean saber? – Ignoró a su aliado, quién ahora tenía la mano de Yura en su boca para que no hable.

-¿Cuál es el plan de Ilia y de White Fang aquí? – Blake sabía que su vieja amiga, era muy lista, no esperaba que actuara de este modo.

-La verdad, no lo sé. Sólo sabemos que estuvo en contacto con esos Demonios meses, planeando algo. Hasta que al fin salió esto. Muchos no estamos de acuerdo con la idea de que destruyan al mundo. Pero traicionar a White Fang equivale a...

-Muerte. Sí. – la chica sabía que esa regla, la había creado Adam cuándo derrocó al líder anterior, el que sucedió a su papá... - ¿Qué más?

-Tienen interés en esos magos. Por eso estamos aquí. Pero sólo quieren unos cuantos. El resto, desean que los maten.

-Eso si suena drástico. – Sairaorg se cruzó de brazos. – Veo que estos sujetos, no van a medias.

-Luego de ello, quería algo de esta ciudad. Ese demonio, la quiere para él. Creo que quiere transportarla lejos de aquí. Al menos ese es el plan. Pero también está yendo por los sistemas de controles maestros. Ilia se hace cargo de ello.

-¿Quiere la información que hay en Agreas? Eso significa que es como lo supusimos, algo aquí llama su atención. – Weiss empezó a pensar. – Creo que ya tenemos una idea clara de cómo avanzar. ¿Algo más que desees agregar?

-La verdad... no. Sé que es complicado, pero... en verdad no quiero ser parte de esto. Sólo quiero irme...

-¡Traidor! – el otro tipo de liberó del agarre de la chica y observó a su colega con rabia. - ¿¡Qué pasó con la idea por la que te uniste a esto en primer lugar!?

-Lo hice, porque quería ver un mundo mejor para los que son como nosotros. No esto. Muerte y destrucción. Adam podía ser un sujeto con carisma, pero estaba loco. Y agradezco que el Sekiryuutei lo haya detenido. Yo ya me harté. No quiero más sangre inocente en mis manos.

Ise analizaba lo que oyó. Eso le facilita un poco las cosas. Al menos en lo que el plan de rescate representa. Ahora, ¿Qué hace con estos dos? Prometió que si decían lo que querían oír...

-Blake... hazlo.

La chica asintió y sacó su arma, para apuntar a la cabeza del híbrido que no ayudó en nada. Y este mostró miedo al ver que...

-¡Esperen! ¡Él les dijo todo!

-Dije, el que ayuda, vive. El otro... no. – la frialdad con la que Ise habló no sorprendió a nadie. Todos sabían lo que estos tipos hicieron en Tokio, en el mundo... No sienten pena por estos sujetos. – Agradece que no soy yo el que te apunta.

-¡Espera! ¡Tú! – pasó a ver a Blake, cuyos ojos ámbar sólo mostraban frialdad. - ¡Eres cómo nosotros! ¡Seguiste a Adam! ¡Deberías ayudarnos! ¡No unirte a la causa de estos tipos! ¡Buscamos mejoras para los que son cómo nosotros!

-Con muerte y sangre de inocentes... Claro. – Blake quitó la seguridad de su arma y preparó el gatillo. – Sé que verás a Adam en el infierno... por lo que dile esto de mi parte. Púdrete.

El disparo fue preciso, en la frente del tipo. Quién cayó muerto sin miramientos. Nadie apartó la vista de lo que pasó. Eran conscientes de que, tal vez, era una acción moral dudosa. Pero estaban en una guerra. No pueden tomar riesgos, si este tipo huye e informa todo... están acabados. El otro híbrido, tembló al ver a su compañero muerto. Pero sé sorprendió al ver como la rubia rompía los amarres y lo levantaba, con fuerza.

-Vete. Te has ganado esta segunda oportunidad. – le sorprendió oír las palabras del Sekiryuutei. – Pero si haces algo... te juro que desearás haber quedado como tu amigo.

-... Activare las lanzaderas de emergencia. Las sellamos para que nadie las use para salir. Es lo mínimo que puedo hacer por... dejarme vivir...

-Vete.

Ni esperó un segundo en oír las palabras del Sekiryuutei. Se fue corriendo, haciendo que este suspire con cansancio.

-Esto fue fuerte...

-Estamos en un campo de batalla. La muerte es como el aire aquí. – Loup sabía que Nimura no estaba acostumbrada a esto. – Pero estratégicamente, hicimos bien.

-¿Quieren que lo siga?

-No Bennia. Confiemos en su palabra. – Ise jaló un poco el listón que lo unía a Blake, para que ella camine.

-Pensaba que no dabas dos oportunidades...

-Las doy a quienes las merecen y sienten verdadero remordimiento. – Ise no era idealista en lo que es la guerra. Sabe que deben luchar y matar de ser necesario. Pero... aún tiene fe en lo que es eso de dar una segunda oportunidad. – Espero que mi decisión no los asuste...

-Para nada. Es lo que esperamos de todo esto. – Momo volvió a ver el mapa. – Mmm... si queremos actuar y sacar a la gente de aquí. Hay que ir por la zona oeste. Pero apuesto que hay enemigos ahí.

-Entonces lo mejor será ir y hacerles frente. No le veo una salida más tranquila. – Weiss dio una idea. – Mientras unos se hacen cargo de los enemigos afuera, otros irán por los magos para sacarlos.

-Es un buen plan... Pero... ¿quiénes serán los que se quedan? – Tomoe miró a todos, pero al captar que Momo la miraba con una ceja alzada. – Oh. Nosotras, claro...

-Yo me quedaré con ustedes. – Sairaorg se ofreció a quedarse y ayudarlos. – Soy mejor atacando, que en infiltración. Y Regulus está aquí, servirá de apoyo.

-Perfecto ¿Qué Yangsperamos? ¿Eh chicos? ¿alguien...? Bien...

-Vámonos... - Ise obvió la mala broma, para seguir su camino con Blake de guía. – Este es el plan...

Espera que las personas allá abajo estén bien.

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Ella no esperaba esto. Un ataque de esta clase contra una simple escuela. Eso demuestra lo podrida que es la mente de estos sujetos.

Rias Gremory estaba al lado de Kuisha Abaddon, Queen de su primo, ambas dirigiendo el grupo que tenían. El séquito Gremory, Bael, sumando a Irina y Kuroka, estaban luchando contra varios Evil Dragons.

La llegada de Ryuuteimaru al campo de batalla, para ponerse al lado de Asia, dando su permiso para que suba, les hizo saber que era idea de Ise todo esto. Perfecto, con eso, ella podrá cubrir más espacios. Y eso era bueno, al menos para ellos.

Kiba luchaba usando sus espadas demoníacas, en conjunto con su tropa de armaduras, para cortar todo los que tenía al frente. Esos Evil Dragons, no eran nada contra el poder de un X-Rounder. La velocidad con la que Kiba y sus armaduras iban, era digna de admirar. Eran como destellos. Pero él servía también de distracción para que Aki, en el aire, dispare a los enemigos que tienen a lo lejos. Los disparos de la muchacha, de sus rifles, combinados con los Fangs en la punta de estos, sólo hacían más poderosos los disparos, creando destrucción. Mucha.

En el suelo, por el otro lado, estaban Kaori, Irina y Xenovia. La primera atacaba con una mezcla de armas de gran tamaño, para poder eliminar más enemigos de un solo golpe. La enorme espada mazo que tenía en mano, era una opción más que interesante.

Xenovia por su lado, cortaba enemigos por distintos lados con velocidad y precisión, haberse enfocado en algo más de técnica, le permitía poder usar de modo más eficiente el aura santa de Ex Durandal, que brillaba en respuesta a los enemigos que cortaba, como disfrutando la destrucción de la maldad.

Irina era la que usaba más movimientos gráciles y hábiles para esquivar los ataques de los dragones. Y así lanzar ráfagas de luz en la cara de estos, los dejó ciegos el tiempo que quería, para atacar con su espada. Las cabezas de los dragones cayeron al suelo, así como sus cadáveres. Y esto era lo que buscaba.

En el que sería el lugar central de este campo de batalla. Gasper usaba a Balor para crear varias bestias de oscuridad, con las que eliminaba a varios Dragones. Pero si uno lograba escapar, lo detenía con el poder de su Sacred Gear, para que el grupo Bael haga su trabajo.

El grupo de Sairaorg, era compuesto por demonios exiliados o marginados, cada uno teniendo su propio poder y habilidad. Poder sellar habilidades, controlar la gravedad en el campo de visión que tienen, etc. Eso los hacía un grupo con una variedad de habilidades similar al grupo Gremory.

Pero las que son la fuerza de ataque central en esto, son las hermanas Nekomata. Tanto Koneko, en su modo Shirone, como Kuroka, en su modo Wild Instinct, atacaban como cazadores que iban sobre sus presas. El poder del Senjutsu era tal, que purificar las maldades era algo que ellas podían hacer, aunque estas tomaran forma física. Y si bien, Kuroka era la del mejor control y uso mágico de este poder. Era Koneko quién tenía el poder puro, la energía que ella emanaba, era tal, que con sólo tocar un dragón con sus garras, lograba hacerlo polvo. Algo que le costaba un poco más a la mayor de ambas. Pero como ya dije, es Kuroka la que tiene la variedad en técnicas. Ya que ella lanzaba ráfagas de Senjutsu con una habilidad y puntería increíble.

La escena, le sacaba a Rias una sonrisa. Ver a esas dos trabajar juntas, tras recordar el inicio, le parecía increíble. Pero ella no se quedará atrás. Ver a Kuisha transportar a esos Dragones sobre ella con el poder del hoyo, la hizo crear la espada que tiene el poder de la Destrucción y de la Armonía de nuevo. Sólo que esta vez, había una forma más clara, que sólo una gran hoja. Al menos está mejorando. Agitó la espada para lanzar una onda de corte, la que al impactar con los Dragones, los hizo polvo. Pero no terminó ahí, creó unas dagas con el poder de la Armonía. Las lanzó hacia atrás sin ver, dando en la cabeza de un dragón que quería pasarse de listo con ella. Bah, payaso.

-Muy bien Rias. Eso fue bueno. – De la nada, un enorme dragón de agua apareció y logró contener a varios de los enemigos, al enroscarse contra ellos, como una anaconda. Los exprimirá hasta la muerte. Eso sí, aún hay campo de mejora.

Rias sonrió al ver a su amiga de la infancia descender. Se notaba que estaba lista para todo. Pero se le mostraba algo triste, al ver que algunas de las zonas de la escuela estaban dañadas.

-Debo suponer que pasaría....

-Hacemos lo que podemos. No esperé tantos enemigos de la nada. Twilight me dijo que por su lado, la cantidad de Grimms es abismal. Si no fuera porque tienen a los miembros de la Onda con ellas... y a Ravel...

Sona sabía a qué se refiere. De entre todos, son esas 5, las que tienen el poder mayor. Rias no se queda atrás con sus nuevas habilidades. Pensar que en menos de un año, cambiarían tanto.

Ambas chicas vieron a unos dragones ir hacia ellas. Ambas se vieron las caras, para luego sonreír. En un movimiento rápido, ambas se lanzaron al ataque. Lo que hubo ahí, fueron ráfagas de color carmesí y agua destrozando los enemigos que estaban ahí. Ambas chicas sabían que debían acabar con estos monstruos. Tienen fe en sus amigos, pueden pelear de un modo más calmado.

-¿Lista Rias?

-Eso ni se pregunta, Sona.

Las dos hermanas, de dos Maous, estaban listas para demostrar de lo que son capaces. ¿Sombras de sus hermanos? No... ellas demostrarán, que van de camino a superarlos. Un día, pero lo harán.

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En otra parte del campo de batalla, estaba pasando algo similar. Solo que esta vez eran los Grimms los que se hacían cargo de la dicha zona. Sí, era molesto. Porque eran muchos. ¿Se han imaginado lo que es luchar con cucarachas? ¿No? Bueno, este es un buen ejemplo.

Twilight y Ravel atacaban en conjunto con ráfagas de magia hacia esas cosas para que se queden en un solo lugar, al ser las de mayores reservas de magia. Dejaban que el resto se haga cargo de esto a fuerza bruta.

En el aire, Akeno y Rainbow volaban a velocidad, mientras lanzaban rayos y luz sin ningún tipo de piedad. Ser las más rápidas en el vuelo, era una ventaja que no debían desaprovechar. Por otro lado, AJ, Rarity y Ayane eran el equipo que se estaba haciendo cargo de ser la primera línea de eliminación.

Las 3 eran un buen equipo. Mientras Rarity usaba a Wizel para atacar en mayor cantidad o alzar a los enemigos más grandes, AJ y Ayane aprovechaban esos meros segundos para atacar. Una con sus puños o su espada de fuego, mientras la otra con sus técnicas ninjas. Además de que al no mataba, le dejaba un lindo regalo para luego mandarlo con el resto y haya un bonito Boom.

No solo con eso, tenemos también a Fluttershy, quien lanzaba ráfagas de viento que servían para detener a esos sujetos o mandarlos a volar. Además de que usaba a Acero Alado para crear tornados mucho más grandes. Pinkie aprovechaba eso, para hacer que esos tipos queden congelados dentro de una bonita pila helada, una que Raynare no desaprovechaba en cortar con sus lanzas de luz. Algo que al final, terminaba con mucha nieve en el suelo. Algo que le venía bien a las otras dos, porque mientras Fluttershy daba el viento, PInkie controlaba el aire helado que había en estos... SI, eran una letal combinación. Además, que gracias a los poderes de Blue Gorre en Ray, la caído era capaz de ayudar a Pinkie, algo que la chica estaba encantada al sentir que esto la acerca más a Ray... No sabía si estaba feliz u horrorizada de eso.

Sunset por su lado, era la que... puedes decir puede hacer cargo de un número mayor por si sola. Veamos, tiene un Sacred Gear del tipo fuego, uno que es muy fuerte, casi una anomalía, casi una Longinus, además de tener el poder de Macha, cuya especialidad es el viento. Sí, una pequeña llama con el poderosos viento que posee, puede hacer que lugar se vuelva un mar de fuego en segundos. La misma Sunset era consciente de eso, pero le daba igual... Podía usar este poder para destruir a los Grimms sin ningún problema.

La muchacha volteó a un lado, al ver a uno de los Grimms Elefantes acercarse a ella. Alzó la mano, lista para atacar, solo para ver que un espejo se hacía presente. Esto hizo que el elefante sea mandado hacia atrás y se vuelva polvo. Alzó una ceja al ver ello... Solo para ver a su lado, descendía Tsubaki Shnira.

-La Queen de Sona Sitri. Vaya...

-Sunset Shimmer. Ni creas que he olvidado que eras una enemiga. – La chica de lentes agitó su naginata, lista para la acción.

-¿Sí? ¿Por qué la ayuda entonces? – Sunset cargó fuego en sus manos.

-Porque por ahora, somos aliados. – Tsubaki hizo aparecer más espejos. – Balance Breaker. - Ver aparecer más de estos, hizo que la chica de cabello fuego alce una ceja. Solo para ver que de estos, salían lo que ella creía eran demonios.

Uno que parecía una gran rata, que botaba un gas de su boca, un conejo que parecía usar un traje y un pequeño demonio con un sombrero... Eran...

-Dime que tu Balance Breaker no tiene nada que ver con eso de Alicia en el país de las maravillas y esa fiesta de té... - el sonrojo en la cara de la demonio le sacó una gota de sudor. - ¿En serio...?

-¡No me juzgues! ¡Era mi cuento favorito! ¡Es más, es una sub especie de Balance Breaker! ¡Nostalgia Mad Tea Party! – Sonó orgullosa de su nombre, solo para ver la cara de incredulidad. - ¡Como si tú pudieras dar un mejor nombre!

-... Dame unos minutos...

Pero esos no iban a llegar, se ve que los Grimms se acercaban a ellas. Parece que se deberán de centrar en acabar con esas cosas.

-Dime... tu Balance Breaker sirve con estas cosas...

-Mientras tengan un nivel básico de conciencia...

-Perfecto... ¡A jugar!

Ambas chicas se lanzaron al ataque, no estaban dispuestas a ser amigas ahora. Pero pueden dejar pasar la enemistad que sienten, para poder salir de esta situación en una pieza. Sí. Eso hará que todo sea más sencillo.

Mientras que por su lado...

-¿Qué piensas Fay? – Twilight atrapó a un grupo de Grimms con un aro de luz y lo comprimió... ugh, no termino tan bien visualmente.

-Que es una clara distracción. Dudo que acabar con la escuela, sea una meta que ellos desean a largo plazo. Es más, es la ciudad Agreas lo que me preocupa. – Fay lanzó varios hechizos, para luego saltar al aire y flotar en este. Twilight siguiéndola. – Tengo un mal presentimiento.

-Me alegro de no ser la única con esa clase de sensaciones. – la muchacha sentía un mal ambiente. No eran los Grimms, era que sentía que algo malo puede pasar en cualquiera segundo. – Ise y los demás... espero que puedan salir de esto con bien.

-Confiemos en ellos. Ise-sama puede ser muchas cosas. Pero dudo que la ceguera que tiene, afecte sus habilidades para salir de cualquiera situación. Tiene una suerte nada natural.

-Si salir de la muerte 4 veces es resultado de su suerte... no sé si decir que es buena o mala.

Ambas sonrieron algo complicadas por ello, solo para ver a lo lejos... lo que parecían ser una llamas de color purpura y algo grande cerca de la escuela... Ojalá los que estén a cargo de defenderla, puedan hacerse cargo mientras ellos...

Ver a más Grimms acercarse, hizo que ambas chicas saquen más poder. ¿Quieren jugar? Perfecto... Será así.

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En los terrenos de la escuela, Walpurga y el Evil Dragon, "Insomniac Dragon", Ladon. Quien parecía ser una combinación de un Dragón con un gran árbol. Una clara referencia a lo que fue uno la undécima labor de Heracles, donde se describe a Ladon como un dragón con forma de serpiente que giraba y giraba alrededor del manzano dorado en el jardín de las Hespérides. En la mitología griega, Ladon fue uno de los monstruos criados por Typhon y Echidna, junto con Orthrus, Sphinx, Regulus, Cerberus, Hydra, etc. Digamos que... este dragón tiene algo de fama en su mitología... pero el verdadero poder, el que lo enorgullece, es el de crear poderosas barreras.

-Oh. Parece que hemos llegado en un buen momento.

-Je. Veo que sí. Es más, creo que es mejor dejar que esos seres sin mente se hagan cargo del trabajo pesado, mientras nosotros hacemos lo más divertido. – la bruja se lamió los labios, mientras bajaba de la cabeza del dragón, quien soltó una risa. - ¿Qué te es tan gracioso?

-Nada... Solo pensaba que es bueno ver a una humana que disfruta de la desgracia ajena. Es más, Grendel te llamaría hermana.

-... No sé si estar feliz o mortificada por eso. – Buen punto. - Pero creo que es el momento de... Oh...

La bruja en eso vio, que a unos metros de ellos, protegiendo la entrada a la escuela... estaban dos personas. Uno llevaba una armadura negra, que parecía la del Sekiryuutei. Y también... ese humano con la espada esa, que ya llevaba su armadura puesta.

-... Comité de bienvenida. Como me gustan las cosas. – Ladon miraba a los dos seres con curiosidad. Uno era... - ¿Vitra? ¿¡Quién lo diría!? ¡Es uno de nosotros!

-No soy como tú, loco. – Vitra habló desde la sombra de Saji, quien estaba listo para lo que sea. – Pensar que Ladon estaría aquí...

-¿Qué hacemos Rean-san?

-Solo queda estar listo para lo que sea. Creo que el mejor escenario, sería que tú te hagas cargo de la loca de Walpurga... Pelear fuego con fuego. ¿Qué opinas?

Saji asintió a la sugerencia del adulto, quien preparó su espada para lo que sea que vaya a pasar. Algo que le sacó una risa a Ladon, porque estaba seguro de que estaban hablando en broma. ¿Planean hacerles frente? ¡Que buena broma!

-¡JA! Un niño y un humano... ¿Hacernos frente? No sé si reír o llorar por lo ridículo que suena todo esto.

-No te confíes... el filo de la espada de ese hombre no es cosa de juego. – Walpurga perdió todo el tono burlón que había en su voz, porque estaba más que segura que esto no será fácil. – Yo me hago cargo del niño...

-Ok. Deja al humano ese conmigo. Será rápido.

Dicho eso, Saji saltó hacia donde estaba Walpurga, quien dio un salto al aire para volar lejos de este y tomar distancia. Saji la siguió usando sus llamas negras como propulsores, dejando a Rean y Ladon solos en el campo de batalla.

-Bueno. Dado que Walpurga jugará con ese niño un rato. Yo haré lo mismo contigo humano. Me llamo Ladon, el Insomniac Dragon, un placer.

-Rean Schawzer... Maestro del Estilo de las Ocho Hojas. Descendiente de Lavenza, hermana del Rey Supremo.

-JO. Veo que tienes una herencia interesante. Y hueles a... algo que no es humano. Creo que si me puedo divertir, un poco. – Los ojos rojos del dragón brillaron, creando alrededor de Rean una enorme barrera esférica. – Si es que puedes salir de esta barrera... - En eso, vio como la barrera fue cortada en pedazos por la tachi de Rean. - .... Vaya.

-¿Crees que una barrera de esa clase en verdad me detendrá? Ninguna barrera es totalmente impenetrable. Además, creo que podemos dar una cosa por sentada...

-¿Qué cosa...? ¡AH! – El impacto de una onda de corte en su cuerpo, lo hicieron casi caer. El dragón vio el corte en su pecho, no era profundo, pero si algo que lo había herido. – Tú...

-Que ustedes los Evil Dragon, hablan mucho.

Ladon sonrió al ver que este humano no estaba con juegos. Si desea pelearen serio... a matar. Y eso es algo que le está gustando. Muy bien. El dragón se alzó más, mostrando su imponente tamaño, algo que no incomodaba a Rean.

-Muy bien humano... Muestra de lo que eres capaz... Tengo la sensación, de que serás más divertido que ese imbécil de Heracles. Tienes fuerza... pero también más inteligencia por lo que veo.

-Será un placer... ¿Listo?

Rean agitó su arma, para luego ponerse en una posición Batou, haciendo que Ladon se encorve para lo que se viene. El rugido del dragón y el grito del humano, mostraba que el inicio de una poderosa e intensa batalla se iba a llevar a cabo.

...

Sobre el cielo, las llamas negras y purpuras chocaban la una con la otra. La Mabebolge Vritra Promotion parecía ser un enemigo natural para lo que sería Incinerate Anthem. Las llamas chocaban y se neutralizaban, algo que le sacaba una risa a la mujer, quien veía eso como algo muy divertido. Es decir, vamos, ¿Cuándo es que tiene la oportunidad de pelear con alguien que puede usar su poder para negar el poder de las llamas de su Longinus? Un fuego que maldice más allá de la muerte... mientras que el de ella, quema a los demonios con una simple llama. Pero ella sabía que eso no le va a servir.

-¡Jajaja! ¡Nada mal! – La loca lanzó una llama hacia el demonio, quien la desvió con sus propias llamas, la mandó al cielo. - ¡Pero no es algo que baste niño! ¡Te falta poder para hacerme frente! ¡Y dudo que tengas el poder bruto del Sekiryuutei para hacerme frente!

-No estás equivocada. – Saji lanzó unas llamas, que se separaron en varias, como hilos para tratar de atrapar a su presa, pero Walburga rodeó su cuerpo con llamas púrpuras, evitando un daño severo a su persona. – Si, es verdad.... Hyoudo es alguien que me supera en muchas cosas. No soy un idiota para tener una venda en los ojos. Soy... inferior a él en cosas que una vez creí podría resaltar. – El demonio detuvo su vuelo, al mismo tiempo que la bruja. – Pero hay una cosa en lo que ahora si tengo una seguridad. Lo que deseo hacer a futuro con la vida que tengo ahora. Sí... Puede ser que sea más débil. Pero tengo mi propia fuerza... mi modo de hacer las cosas. Y eso es lo que voy a usar para poder detenerte.

-¿Así? ¿Y qué puede ser eso que puede derrotarme? – Sonó burlona, no creía que este niño tuviera tal capacidad, pero sentir las llamas alrededor de este centrarse a su alrededor, le hizo ver que tal vez... no debió abrir la boca.

-Si... No soy Hyoudo. Pero si soy alguien quien tiene algo que él no. Variedad en técnicas. Te recuerdo que Vritra, siendo el más débil de los Reyes Dragones, era de los más temidos por su técnica y te daré una probada de ese poder.... ¡Mabebolge Vritra Promotion! ¡Modo Asura!

Al decir eso, de la espalda de la armadura, los tentáculos que estaban ahí, se volvieron 4 brazos extras que estaban bañados en llamas negras. Unas que la misma bruja, sintió que había metido la pata en provocar a este niño...

-Rayos... Malditos mocosos y sus habilidades...

-Voy a volverme un profesor que proteja a estos niños y sus sueños. ¡No darás un paso más para hacerles daño, bruja!

Walburga esquivó por los pelos lo que fue uno de los brazos extra de ese chico, el cual se extendió ante su clara sorpresa. Casi la atrapa... Ella al ver ello, quitó toda expresión de burla y...

-Bien... Que así sea... - Las llamas que la envolvieron, daban a entender que la verdadera batalla daba inicio.

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En Agreas, las cosas eran algo distintas... Afuera de lo que era el lugar donde la reunión de Magos se había estado llevando acabo. Los miembros de White Fang tenían la zona muy cubierta... al menos eso es lo que creen. Lo que ninguno vio, fue que desde un punto ciego del edificio, Blake e Ise lograron aferrarse al edificio, siendo seguidos por Ruby, Yang y Weiss, quienes asintieron a la chica pelinegra para que con su mano, dé la señal a quienes serán los cebos para poder entrar.

Y cuando fue así... En medio del lugar, calló lo que sería un enorme león dorado, que atrapo a uno de los enemigos en sus fauces y lo sacudió como un león de verdad haría con su presa, matándolo casi de inmediato.

De inmediato, el infierno se desató. Los enemigos no tuvieron tiempo para reaccionar ante el ataque sorpresa. Trataron de atacar con las armas de fuego mágicas que de seguro habían robado de una de las instalaciones de Grigori. Pero varias barreras bloquearon los disparos...

Momo tenía sus manos alzadas, siendo ella la creadora de dichas barreras. En sus muñecas tenía unos brazaletes, su Sacred Gear artificial, Applause Wall, el cual crea barreras. Eso le dio la oportunidad a Tomoe de aparecer y cortar a varios de esos sujetos con su propio Sacred Gear artificial, Blazer Shining or Darkness Samurai Sword... Que era la espada de Azazel, solo que en versión katana... Era poderosa y vaya que podía cortar.

Por otro lado, Nimura Ruruko parecía ir a velocidad hacia los tipos esos, dándoles poderosas patadas, sus piernas estaban cubiertas por algo que parecía ser una armadura en dichas extremidades. Este se llamaba Procellarum Phantom, el cual le permitía no solo ir a gran velocidad dejando imágenes de ella, sino también de dar buenas patadas a sus enemigos.

La chica supo que la atacaron desde atrás, pero no volteó... Ya que Yura había aparecido con un escudo de luz, que bloqueó el disparo. La chica tomó el escudo y lo lanzó hacia varios enemigos, los cuales fueron noqueados por este... solo para recuperar el escudo como si trajera hacia ella un yoyo. El Twinkle Aegis era un Sacred Gear Artificial, que parece estar envuelto en fuego y electricidad. Parece que la chica aún no muestra todo lo que puede hacer.

-Gracias senpai...

-Ni lo menciones... No es nada si lo comparas con ellos...

El resto de chicas vieron como Sairaorg, Rossweisse y Kurama arrasaban con los miembros de White Fang sin problema alguno. Ni sudaban... Era impresionante...

-Demonios...

-No es algo que podamos evitar. Tienen más experiencia. – Loup apareció con Bennia a su lado, ambos habían acabado su trabajo. – Solo queda intentar seguirles el ritmo.

-No me sorprende... - Momo alzó la mano, para decirle a Reya que dé la señal. La chica asintió a lo lejos y mandó una de sus máscaras para que den el mensaje a Ise y el resto de infiltrados. – Ok... Solo queda...

En eso, un fuerte temblor se hizo presente... algo grande había caído de la nada en medio del campo de batalla. Todos voltearon a ver que el que había llegado, era el Evil Dragon, Grendel...

-Vaya... ¿Qué tenemos aquí? ¡Pequeños insectos que se creen capaces de pelear! ¡Esperaba la llegada del poseedor de Ddraig o de esa caperucita!

Grendel sonrió al ver el claro temor en la cara de los presentes, pero había uno que no lo hizo. Sino que sonrió con interés. Algo que el dragón vio...

-El Evil Dragon, Grendel. He oído cosas de ti... y admito que es algo que en verdad llama mi atención. De ser de los que pudo hacerle frente a Hyoudo Issei, solo significa que si te derroto... estaré más cerca del nivel de mi rival.

-¡¿Derrotarme?! ¡JAJAJAJA! ¡Que buena broma pequeño demonio! ¡Para mí solo eres una mosca más!

-Oh... yo no estaría tan seguro... - Sairaorg sonrió al ver que Regulus a lo lejos, estaba más que listo. - ¡Balance Breaker!

En un destello dorado, la armadura dorada del león se hizo presente en el cuerpo del demonio. Quien tronó sus dedos para mostrar que estaba listo para el combate, algo que le sacó una risa al dragón. Más al ver a esa Valquiria y ese lobo ponerse al lado de este.

-¿En serio? Muy bien... Serán un buen aperitivo, antes de que acabe con el Sekiryuutei y esa caperucita... ¡Me limpiaré los dientes con sus huesos, pequeñas basuras! – Y rio más al ver que los miembros del sequito Sitri también se preparan para pelear. – ¡Hagan que me divierta!

-Ugh... Sabía que iba a ser un mal día... - Momo se preparó para esto... Pelear con un Evil Dragon... Tachen eso de su lista...

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Ya en el interior del edificio, el equipo RWBY y el Sekiryuutei sintieron que una poderosa presencia se hizo presente afuera.

[Es Grendel. Reconozco su horrible aura]

-¿Deberíamos volver? – Weiss le hizo la pregunta a Ise, quien en su ceguera, no sabía que expresar... Pero negó con la cabeza. - ¿No?

-Sé que ellos se podrán hacer cargo de Grendel mientras salvamos a los que están aquí. Confío en Sairaorg para ello.

-Le tienes una alta estima a ese sujeto. ¿Verdad? – Yang sonrió al oír al Sekiryuutei, quien asintió con una sonrisa.

-Si hay alguien de mi edad, que me puede igualar en una pelea a puño limpio... ese es Sairaorg.

-Wow. Eso suena tan épico. – Ruby sonó emocionada por la nueva información. Pero era momento de volver a lo central. - ¿Por dónde Blake?

La chica sacó de su bolsillo el aparato que Reya le dio. Mostraba un mapa tridimensional del edificio. Analizó todo... desde los pisos, las entradas y salidas.... Si conoce a Ilia como lo hace, sabe que las entradas convencionales no son una opción. Es más, todos los magos estaban en el auditorio, que es el piso 7. Y para llegar allá, solo deben subir un piso más. Gracias piernas fuertes. Pero en eso, vio una entrada que le puede servir...

-¿Quién está listo para ir por un conducto de ventilación?

-... Es broma, ¿Verdad?

...

-No lo es... - Weiss maldecía su suerte... Ella, una dama de alta clase, metida en medio de un nido de telarañas... El horror... - No sabes cuánto te odio ahora mismo Blake Belladona.

-Oh, no es tan malo Ice Queen. Es sólo... algo estrecho... Al menos tú cabes sin problemas...

-.... ¿¡Y eso que significa!?

-Que tu pecho ayuda a entrar... El mío me aprieta. – Ruby dio un comentario inocente, ignorando la expresión de rabia de Weiss. - ¿Por qué estas rojo Ise?

-.... Por nada... - Imaginar a Ruby, con el pecho apretado contra una de las superficies de este ducto de ventilación era... No, atrás pensamientos enfermos... Atrás.

-Eres un pervertido. – Lo descubrió. – Ruby, Ise se imagina cosas con lo que acabas de decir.

La ojiplata parpadeó un poco ante las palabras de Blake, para luego sonrojarse al ver que... La pelinegra por su lado, soltó un suspiro de fastidio... Vaya. El Sekiryuutei no sabía porque el ambiente se puso tenso... y estar ciego no hace esto más fácil.

[Aún con vista, no lo verías...] – No molestes lagartija, necesita...

-Sssshhh. Llegamos. – Blake detuvo al grupo, haciendo que la cara de Ise choque con su... - ¡Eep!

-¡Perdón! – No era hombre de traseros... Pero puede hacer una excepción... - Ow.

Yang le dio un pellizco para que se deje de acosar a su hermana y compañera. Para luego hacer que Blake les indique que vean por debajo de ellas. Ahí estaban... los magos en un lugar, siendo vigilados por esos sujetos... Muy bien. Solo necesitan...

-Oigan, ¿Qué es ese sonido...? – Ruby escuchó que algo se rompía... Era... - Oh no... - el lugar donde estaban.

No hubo tiempo para reaccionar, los 5 cayeron sin poder evitar el destino que les deparaba la caída... que fue justamente sobre los terroristas... Vaya suerte...

-A eso, yo le llamo una caída en el lugar apropiado. – Lograron identificar la voz de Luna, quien parecía feliz de verlos.

-¿Están bien? – Y esa era Celestia, parece que ella si sonaba más preocupada...

-Depende... ¿Qué tengo en la cara...? – Ise no sabía si había caído boca abajo o arriba.

-Bueno... Veamos el lado bueno, derrotamos a los magos terroristas sin... pelear. ¿Quién hace eso? – Yang sonrió al ver el buen resultado, solo para oír una cosa...

-Veo que... en verdad vinieron.

Los 5 se pusieron de pie rápidamente, con algo de dificultad. Solo para captar que la líder actual de White Fang estaba ahí, con unos miembros más. Listos para la acción.

-Ilia...

-Oh Blake... pensé que serías más lista. Pero por lo que veo, no es así. – La chica sacó lo que parecía ser una pistola de alto calibre. – Bueno, es hora de que... sepan el error en que se metieron.

Ise activó su armadura, mientras que el equipo RWBY se puso en guardia, siendo Weiss quien creó un muro de hielo para proteger a los magos, que estaban indefensos por el sellado de sus poderes. Sin duda alguna, no era el rescate que habían esperado realizar. Pero su suerte... siempre era en extremo, mala o buena. Y justo el día de hoy... les tocó la mala.

-Maldita suerte Hyoudo... - el Sekiryuutei soltó un suspiro, antes de lanzarse con sus amigas al ataque.

Hora de la acción.