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Inicio de la Rebelión

El destello de luz que los trajo al área, solo hizo que el grupo de avanzada contra Cristaldi, solo pise tierra. El lugar era como uno esperaría... una Iglesia abandonada. Por supuesto. Pensar que el lugar sería una reacreación de la zona de Kuoh, donde las Iglesias eran algo... central. Más que antes.

-Odio este lugar... - Irina miró el lugar con... rabia. – EL lugar donde dejé salir todo lo malo en mí.

-Hey, no eres la única que detestas las Iglesias. – Raynare le dio a su amiga una palmada en la espalda. – Yo casi muero en una al fin y al cabo.

Kiba vio como ambas chicas parecían compartir algo en común. No sólo ello, se podía sentir arrepentimiento. El Knight miró a Ravel, quien...

-No hay nada aún. Griselda-san, ¿Está lista para...?

-Si. Lo estoy. – la mujer sonrió. – Sitri y su grupo parecen ya estar en la zona perimetral. Eso es lo que nos debe de permitir ganar mucho espacio. EL número será algo que nos puede dar la ventaja, si es que lo aprovechamos.

Todos los presentes miraron a la mujer, quien parecía escuchar algo... Debe estar en conversaciones con Sona. Se sabía que ella era muy buena en los planes, como Sona y Ravel. Y no sólo ello, habían unos cuantos Brave Saints, siendo liderados por Dulio y Griselda. Irina dijo que ella no merece dirigir ningún escuadrón, no desde que lo que pasó con Tarvos.

-Lo mejor será esperar... Veamos que planes tienen contra nosotros. – Fay se acercó a Sunset quien... -¿Sientes algo?

-No... Pero creo que puedo hacer algo. – Los ojos de la chuca brillaron para que ella suelte una brisa purpura. – Veamos si esto sirve.

Kiba vio con curiosidad lo que su amiga hacía, hasta que...

-Ah, no esperaba poder estar junto a Kiba-kun en el frente. – Dulio se acercó al demonio, quien se sorprendió al verlo. – Quedan unos pocos minutos hasta que Griselda diga que debemos movernos.

-Ya veo... En ese caso, me siento honrado de poder estar aquí.

Kiba sabía la clase de guerrero que era Dulio. Alguien quien no puedes vencer con solo técnica. Debes tener poder o mucha velocidad. Su control sobre el clima es temible. Lo que daba una idea del poder combinado de las Elemental Maidens. Y eso que ha visto el poder de 3 y eran increíbles.

-Ya escuché sobre la complicada situación que rodea al origen de Kiba-kun, pensé que Kiba-kun no querría cooperar conmigo. – Kiba miró al ángel con una ceja alzada, para soltar una risa. Con que era eso...

-Mi odio hacia las cosas se distingue claramente, y actualmente no tengo nada contra ti que eres el segundo al mando del grupo. – Con lo que puede ver y sabe, se notaba que Dulio era lo que uno debe de esperar de una persona que sirve al Vaticano, por las razones que deben de ser.

-Sí, porque escuché sobre el pasado de Kiba-kun. Estoy un poco preocupado sobre si Kiba-kun estará sediento de sangre hoy. Incluso si guardas rencor, este es un conflicto interno entre tus propios camaradas. Solo los niños que pueden aguantar ahora son los mejores.

-Es algo... que es difícil de responder. – Kiba miró a Irina, quien... - Me imagino que... he cambiado. Mi modo de ver al Vaticano lo hizo. Pero...Veo a Irina y me doy cuenta que el daño está hecho. Ella no puede confiar en la institución de nuevo. Y su reacción a su antiguo mentor dice todo...

-Si... Créeme, me sorprendí como todos en el Cielo, de lo que pasó... Irina es lo que uno pensaría, como el ángel ideal. Pero creo que eso demuestra que no estamos ostentos a las emociones negativas. Aún así... algunas cosas son... mejor que pasen. – Tras decir ello, Dulio sacó un objeto desconocido de su pecho. Era una grulla de papel de origami. - En el subsuelo de las instalaciones de la Iglesia alrededor de la ciudad de Kuoh, pronto se llevará a cabo una ceremonia sobre la disolución de un Sacred Gear.

Desde la alianza, varios lugares de la ciudad se abrieron del lado del Cielo; esas eran las instalaciones para las personas de la Iglesia que fueron enviadas a quedarse, y se dijo que una de ellas en particular era una instalación relacionada con Sacred Gears. Dulio jugó con la grulla de papel y luego continuó...

-Hay un niño cuyas piernas están discapacitadas. La mayor parte del tiempo, ese niño está en silla de ruedas. De hecho, ese niño en realidad tiene un Sacred Gear relacionado con las piernas, pero debido a que su resistencia es demasiado débil, está causando que su poder se desarrolle de una mala manera. Es decir, el Sacred Gear que podría permitir que sus piernas corrieran más rápido en realidad está atando las piernas de su usuario. Los Sacred Gears, aunque muy convenientes, también son muy aterradores. – Se vio la tristeza en los ojos de Dulio...

-No todos tienen la suerte de los que... han sido ayudados. Ise-kun me dijo que... si hubiera estado solo, el poder de Ddraig lo habría matado. – Kiba era consciente de su.. suerte. La suerte de que sus Sacred Gears, van a la par con su talento. Y no contra ellos...

-Es verdad.... Gracias al éxito del análisis y el trabajo técnico de Grigori, para los niños con Sacred Gears, el procedimiento de disipación ya ha podido entrar en la fase de prueba. Aunque en teoría ya alcanzaron la perfección, aun así, ese niño decidió someterse al procedimiento de disipación.

Con que desea... quitarse es algo, que debió de ser un don, pero era una maldición...

-¿Qué pasará después de la disipación?

-La molestia generada del Sacred Gear puede debilitarse y es posible que pueda llevar una vida normal. Bueno, depende de la tecnología del ex gobernador, por lo que definitivamente tendrá éxito. Eso es lo que creo.

Kiba pudo ver algo en esa sonrisa que Dulio le dio... que en verdad había esperanza en que todo iba a salir bien. Sin duda, esto era una prueba de que realmente confiaba en la tecnología de Azazel.

Aunque originalmente era más hostil, Azazel solicitó la alianza de buena fe, por lo que, aunque algunas personas se mostraron escépticas, hubo un poco de confianza. Dulio se puso de pie, sostuvo la grulla de papel como si fuera a sostener un avión de papel y luego dijo...

-Parque de atracciones. Ese niño dijo que si pudiera caminar, iría a un parque de diversiones. Usando sus propios pies, jugaría en todos los parques de diversiones una y otra vez. Todo lo que quiero es probablemente imposible. Pero ... eso es muy normal. Incluso con el Sacred Gear, sigue siendo un niño normal. Entonces, quiere ir a un parque de diversiones como la mayoría de los demás. - Soltó la grulla de papel. Entonces, la grulla de papel voló hacia el cielo mientras viajaba con una ráfaga de viento pasajera. Después de que la grulla de papel dio vueltas en el aire, el viento amainó y volvió a la mano de Dulio. - Creo que ya basta con poder proteger los sueños de esos niños.

-....Creo que eso es lo que nos hace diferentes en relación al pasado. – Kiba miró hacia sus amigas, quienes estaban en una conversación rápida. – Antes... solo nos importaba nosotros. Pero hemos aprendido que el peso de nuestras acciones, es algo que afecta a otros. La vida de una persona, nos hizo entender que no solo somos nosotros los afectados.

-Entiendo... - Dulio pareció captar que... - Crisaldi no será fácil de derrotar. Aun con lo que tienen. Pero Griselda y yo, nos haremos cargo de los que él traiga. Ustedes, peleen con todo. Les deseo la mejor de las suertes.

Y como si fuera arte de magia... Sunset sintió como el viento que estaba ligado a sus manos, se movía de otro modo... ella miró a Ayane, quien parpadeó para ver que una gran cantidad de energía se movía en dirección de ellos.

-Deben de irse ya. – La kunoichi miró a los dos miembros de la Iglesia. – Sigan el plan. Nosotros estaremos bien.

-... Buena suerte. – Griselda, desapareció en un destello de luz al saber que...

-... Demuestren lo que son capaces y... - Dulio miró a Irina. – Recuerda porque peleas Irina.

LA chica vio al Joker irse en un destello de luz, así como los demás ángeles rencarnados del lugar. Parece que Sona e Ikuse lo tenían todo bien planeado. Ella soltó un suspiro, para tratar de calmarse. Sentía a Tarvos inquieta...

-Oye. No dejes que tus emociones te nublen, nya. – Kuroka se acercó a la chica, quien... - Estamos aquí por una razón.

-... Lo sé. Pero no significa que no pueda tener una pequeña venganza. – Irina miró a un lado, como sintiendo que... - Ahí vienen.

Como en respuesta a lo que acaba de decir, las figuras de un grupo de guerreros aparecieron ante los jóvenes guerreros.

En medio de los guerreros que estaban alineados frente a ellos, había más guerreros que vestían un traje de sacerdote, pero también era posible ver las figuras de guerreras vestidas como Xenovia e Irina. Y también veían a personas que se parecían a Freed... ese sacerdote loco. Aunque no parecían tener la misma atmósfera sedienta de sangre que Freed, Kiba aún podía sentir que estaban llenos de hostilidad. Y Kuroka podía sentir todo eso gracias a su X-Pulse como el Knight. Ambos sentían la angustia, así como la rabia de esos guerreros. Era como... si sintieran todo como dagas. ¿Tanto era el resentimiento?

Basado en una evaluación visual del oponente, el número de guerreros que habían venido para la batalla estaba cerca de cien. En medio de los guerreros estaba: el hombre que tenía la réplica de Excalibur y vestía vestimentas modernas de hace unos días, Ewald Cristaldi. ... No solo era el maestro de los guerreros, una vez también enseñó a Xenovia e Irina a manejar la espada, quienes son sus discípulos. Sostuvo la réplica de Excalibur en su mano mientras liberaba un aura sagrada. Pero la persona que reaccionó primero...

-Sensei... Tanto tiempo... - Irina dio un paso al frente.

-Irina... se ve que te dejaron a mando de este grupo. ¿Acaso Dulio no tuvo el valor de verme?

-Para nada. Él tiene su trabajo. Nosotros el nuestro. – La chica sonrió como pudo. – Es más, ¿No le basta que nosotros estemos aquí? ¿Tanto nos menosprecia?

-Este reencuentro, debería ser feliz o debería ser triste. Irina si todavía me reconoces como mentor, ¿puedes aceptar el castigo de mi espada sin más preámbulos?

-¿Quiere que le responda con respeto o como las palabras van a mi cabeza? – Kuroka se mordió la lengua y soltó una tos en vez de la risa que quiso dar.

-Pensar que esta Iglesia, se volvería algo como una... facilidad. – Irina se mostró tensa. – Es un lugar que demuestra tus pecados, ¿Verdad?

-No sabe de que habla, anciano. – Raynare dio otro paso al frente, demostrando que el número no era algo que le tema. – Si, puede que sea así en cierto modo, pero esta Iglesia será usado para algo bueno, luego de años.

-Sin embargo, esa instalación ha sido ocupada por "los rituales de los demonios". Esto ya es un pecado. Necesito ejecutar el juicio sobre aquellas personas cuyas mentes y cuerpos ya han sido teñidos de negro.... Hay personas dentro de mis subordinados que también tienen esos puntos de vista, y yo soy un verdadero creyente. En esta posición, no puedo negar lo que estas palabras traen. Purificación.

-Es una broma verdad... - Sunset no lo creía, como puede... - ¿¡Quieres matar a todos los que han tenido contacto con este lugar!? ¿¡Hasta los niños!? ¿¡Donde hay justicia en la muerte de gente que desea algo diferente en su vida!? ¿¡Qué clase de purificación es esa!?

-En el purgatorio, serán purificados de sus pecados. Si digo eso, ¿qué harán?

A esas palabras, se sintió como el aura de Irina cambió y Crisaldi lo vio... los ojos rosas de la chica demostraban todo. Así como el brillo en los ojos de las otras 4 chicas.

-... Es un bastardo. – Irina escupió la palabra. - ¿¡A esos extremos desea llegar!? ¡No puedo creer que lo respete en su momento!

Kiba notaba como solo Kuroka estaba calmada, como él. Pero debía de ser por sus instintos como X-Rounder. Nada más, lo que los tiene en esa posición de calma. Es más, puede jurar que la mujer estaba viendo el lugar, analizando todo lo posible que... les puede servir.

-Irina, ¿por qué? Una buena guerrera como tú, alguien que incluso alcanzó la posición de Ace, pero ¿por qué no te has dado cuenta? ¡Incluso si hay una alianza, todavía es necesario erradicar el mal! ¿O incluso tu corazón ha sido reemplazado después de que Michael-sama te reencarnó como un ángel? Tu poder...

-¡No es nada de eso! ¿¡No puede verlo!? El poder que tengo es algo que puede destruir el mundo. Así como Dulio, quien es consciente de ello... Pero esas cosas no nos interesan... Dulio solo pelea para proteger la sonrisa de los niños y yo... Yo solo me uní a esta causa, porque en verdad quería una cosa. Venganza contra los seres que me quitaron lo que me más me importaba. – Irina soltó un suspiro. – Pero... Fue ese mundo que me lo quitó, que me lo dio de nuevo... y con más gente que es la familia que elegí. – Irina se soltó el cabello y tomó un listón rojo que tenía atado a su espada. Lo elevó a su cabello y lo amarró en una cola de caballo. Una que... - Y también, prometí no dejar que una idea cerrada, destruya la vida de alguien, si puedo evitarlo. Es más... Deseo algo de venganza por lo que los altos mandos le hicieron a mi amiga...

Kiba soltó una risa, con eso, ya estaba todo dicho. Ravel dio un paso al frente, mostrando la etiqueta con la que ha sido criada desde niña. Dio una reverencia y...

-Su Eminencia Cristaldi, continuar con esta conversación no tiene sentido. ... Incluso si esto continuara, no hay palabras para decir que puedan sacudir el corazón de mi amiga. Por lo que le sugiero, a usted y los demás, que se preparen para la lucha.

-¿Debes de decirlo de ese modo Ravel? – Sunset se sobó la cabeza al oír a la chica. – Bueno, ¿Qué voto tiene una ex terrorista en esto? Nada.

Crisaldi vio a la chica con rabia. El saber que una ex criminal estaba en este grupo, solo aumentaba su creencia de que lo que estaba pasando estaba mal. ¿Cómo pueden ignorar las cosas más obvias? ¿Cómo pueden aceptarla como un amigo? Su mano apretó con fuerza el mango de la espada que tenía.

-En serio... la estupidez es contagiosa. – Crisaldi pareció perder ese deseo de querer hacer entrar en razón a Irina. – El mundo no necesita de gente que arriesga todo por un sueño que puede que jamás pase.

-Quizás... - Kiba habló por primera vez, mostrando su espada Sacro demoniaca. – Pero el mundo se ha forjado por sueños. No por conformismos.

-Bueno, entonces también seguiré mis creencias. Aunque el Dios que respetamos es el mismo, si la [Justicia] en la que creemos es diferente, habrá que corregirla. - Ewald Cristaldi los apuntó con la hoja de la réplica de Excalibur, y luego gritó en voz alta. - Seguir hablando no tiene sentido, es ... realmente es así. Si también son guerreros, ¡usen sus armas para hacerme ceder! Guerreros, esta es una batalla que el Cielo permitirá. ¡Hoy dejaremos salir todas nuestras creencias!

Se pudo sentir como el grito que sus seguidores dieron, pudo hacer temblar el aire. Y se pudo ver algo de tensión en la cara de los jóvenes...

-¡No te arrepientas de la muerte! ¡Porque la paga del pecado es la muerte!

Irina maldijo con fuerza al oír ello. ¿Pagar el pecado con la muerte? La chica pudo oír como Sona y Griselda estaban solicitando que reciban refuerzos, pero ella se negó. Porque... en verdad, pudo oír la voz de... Alzó la vista, notando que algunos de los seguidores de Crisaldi atacaron. Los primeros en... ser idiotas.

-¡Sufran idiotas ciegos! – Fue la voz que se oyó de la chica, viéndose como las manos de Tarvos se crearon y empujaron a los exorcistas lejos del pequeño grupo.

Crisaldi y sus aliados al ver eso, se sorprendieron. Más al notar como la energía que envolvía a la chica tomaba más forma. Tanto que... algunos retrocedieron con miedo, excepto los aliados de la chica.

-... La justicia, como dice, es algo que se crea en base a creencias y leyes, Sensei. Pero hay algo que toda justicia tiene como base. Sin importar la religión o el lugar... Un pedazo de venganza.

A esas palabras, la energía de Irina la envolvió, dejando pase a las marcas rosas de la Séptima Fase, envolviendo el cuerpo de Irina.

Yo, que soy la Fase de los Vengativos

Surjo para destrozar a los seres que justifican sus acciones de maldad con justica

Para que sufran eternamente, el juicio divino

Tras decir eso, lo que la chica recibió, fue algo interesante. Las alas de ángel, blancas, se vieron envueltas en una capa rosa. Como si fuera una armadura que era tanto dura como el diamante, como flexible... como una plastilina. Irina agitó sus alas, con su espada, Hauteclere. Demostrando su nuevo poder...

-Antes de ser un ángel, fui una exorcista... Por ello, esta forma, "The Avenger Exorcist", es mi modo de decir que... voy contra las creencias corruptas de una institución que debe cambiar.

Como sabiendo lo que se viene, Kuroka entró en su modo Wild Instinct, así como las demás en sus Avatar Trigger, Ravel solo creó un látigo de fuego, además de que las alas de fuego en su espalda ardían como nunca. Kiba sonrió al ver la expresión de sorpresa de todos los presentes. Quienes miraban a su líder, como esperando que...

-¿Saben una cosa? La verdad tras todo esto... es que estamos deseosos de pelear contra todos ustedes. Por lo que... Nuestros aliados se están haciendo cargo de los que... están en las zonas perimétricas. Por lo que... No esperen que los ataques sorpresas van a llegar tan pronto.

A las palabras del Knight, se pudo ver como unas explosiones pasaban a lo lejos, como ataques de relámpagos y llamas negras estaban haciéndose presentes. Lo que le sacó a Crisaldi una maldición de la boca.

El saber que tiene a 5 miembros de esa Onda y demás, solo lo pudo más nervioso... Pero no se iba a rendir. De ninguna manera. Con un movimiento de su espada, indicó el inicio del ataque... Y los demás, solo atacaron. Había iniciado la batalla.

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En otro lado del campo de batalla. Se veía como los Elementos de la Armonía y el equipo RWBY, estaban caminando a una zona que les hacía recordar a los parques de la ciudad. Si... recuerdan que hay Iglesias en esta zona. Lo que les hacía entender que...

-Se nota que será una batalla complicada, porque las zonas están conectadas. – Weiss dijo eso con algo de... nervios.

-Pero nos puede ser de utilidad. – Twilight miraba los alrededores. – Si algo sucede, podemos ayudar o pedir refuerzos.

-Oh vamos. ¿En serio creen que la necesitemos? – Yang sonaba muy segura de si misma. – Podemos ganar.

-No hay que confiarse querida. – Rarity se arrodilló y tocó la tierra del lugar. Parece que... - Este lugar puede ir contra nosotros, si que no sabemos como movernos.

-¿Ves algo allá arriba Rainbow? – Blake le pidió a la chica, quien estaba sobre ellos, tratar de divisar a los enemigos, pero ella negó con la cabeza, como dando a entender que... - ¿Nada? Que raro...

-No lo veo raro. Digo... Son militares, ¿No? – Pinkie dio una respuesta obvia. – Supongo que tendrán un plan.

-Aun así, no me agrada. – Rainbow descendió. - ¿Tienes una idea de lo que tu hermana puede planear Weiss?

-... No. La verdad, no tengo ni idea de lo que ella puede estar pensando. – Se pudo oír el como ella...

-¿Tan mal te llevas con ella? – la pregunta de Fluttershy, solo hizo que Weiss apriete los puños. - ¿Weiss....?

-Tienes envidia de ella, ¿No? – AJ pareció... entenderla. – Se nota que la admiras, la envidias... pero a su vez, la resientes por algo.

-... Puede decirse que sí. – Weiss miró el cielo artificial del lugar. – Solo quiero decir que... Siempre supe que esto pasaría. El día de pelear con mi hermana. Porque... pensamos diferente.

-¿Qué tan malo puede ser? Si, yo pienso distinto que Yang, pero no por eso quiero arrancarle los cabellos. Aunque se lo merezca la mayor parte del tiempo...

-Wow Rubes... eso si que es amor. También te quiero... - Ruby sacó la lengua al sarcasmo de su hermana, solo para que algunas rían, pero que Weiss solo sonreía un poco. Casi como...

-Es algo que... me gustaría hacer con mi hermana. Es solo que... las circunstancias no lo permitieron. – Todas la miraron, como diciendo que la iban a escuchar. – Ya deben de saberlo. Pero mi familia es importante para el Vaticano, porque hemos estado en esta desde que se creó la Iglesia, apoyando desde las sombras... Y porque, ahora lo sé, fuimos aliados del Rey Supremo. Y eso es un peso, que nadie puede dejar de lado.

-De todos modos, ¿Qué tiene eso que ver con tu hermana? – AJ no entendía el porque eso debe de pesar en la relación entre las hermanas.

-Mucho... Siempre, siempre... en la familia, quien nace primero es el siguiente en la línea de sucesión. Pero mi hermana renunció a ello, para ir con la persona que la apoyaba en sus deseos de... limpiar el mundo de los seres que lo traen a la ruina. Y esa es una creencia que se comparte en mi familia. Hasta yo la creí un tiempo... Aun así, cuando las responsabilidades cayeron en mi persona, de alguna manera, quise estar a la altura de... ellas. Quise... ser como mi hermana. Quería superarla. Quería... sentir que no era la sombra de nadie. Y en cierto modo, ella me entendía. Pero siempre hubo algo que nos... distanciaba. Y era el como pensábamos como debía ser el futuro.

Weiss miró su estoque. Su arma... las marcas en el mango de esta, eran el resultado de años de estudios de su familia en las runas. Y eran solo... una burla, contra el poder de lo que en verdad poseen.

-¿En que sentido? – Twilight la miraba con atención. Sintiendo que esto era vital para Weiss...

-Mi hermana cree que... no necesitamos de usar lo sobrenatural. Aunque si usa su magia, que es como la mía, solo que superior en unos campos. Dejando de lado la hipocresía de sus palabras, ella siente que los humanos... solo necesitan de su ingenio... de la tecnología que crean, para sobrevivir. Yo no lo veo así. Sé del poder de la tecnología. Pero no soy ciega a lo que... la magia puede hacer. Siempre creí que si unimos ambas, podemos llevar a la humanidad a un nuevo nivel. A ser capaces de conseguir, cosas imposibles. Claro, mi hermana no lo veía de ese modo... Y aun así, creo que ha recibido la ayuda de mi padre, quien es el único que tiene acceso a ese algo que... hemos guardado con recelo.

-¿Qué cosa? – Pinkie sonaba interesada, a lo que Weiss solo dijo...

-Una esfera concentrada de magia. Una que... le puede permitir a una persona, sin habilidad mágica, de usar magia. – la sorpresa en la cara de todas, era más que visible. – Si, es algo revolucionario.

-¿¡Revolucionario!? ¡Eso puede cambiar el mundo de los humanos como lo conocemos Weiss! ¡Darla la capacidad de usar magia a gente que nació sin ese talento! Eso es...

-Lo sé Blake. Pero hay... trucos. Limitaciones para esas cosas. Yo lo se. Porque he sido la única en más de 15 generaciones, que se ha dado el tiempo de estudiarlas como se debe, aprovechando mi posición y al más estudiar, más me di cuenta de su potencial, como su peligrosidad.

-¿Qué tan peligroso puede ser? Digo, si es algo que tu familia ha tenido en su poder años...

-Yang, soy consciente de que mi familia tiene mucho poder. Pero esas cosas, son algo que no deben de usarse sin el estudio necesario. Es como si... Tuvieras en tus manos, una bomba que puede explotar en un segundo. Si no tienes cuidado. – Weiss miró a su amiga rubia, solo para ponerse a... - LO que estoy tratando de hacer en esta situación, es que tengamos la certeza de que... No importa lo que pase, debemos de ir con cuidado. No sé que les han hecho a esas máquinas, pero no serán algo fácil de destruir. Al menos para estándares humanos.

-¿Olvidas que estamos aquí Weiss? – Rainbow miró a la chica con una sonrisa burlona y ella solo soltó una risa, tras negar con la cabeza.

-Lo sé Rainbow. Por eso, creo que podemos lograr algo. Esas cosas pueden ser útiles contra uno a uno, pero en grupo como el que tenemos, tenemos la ventaja. Más al tener a la mano, los Elementos de la Armonía. Que son, sin duda alguna y por lejos, los objetos mágicos más poderosos en el mundo.

-Y eso es algo que debemos de aprovechar. – Twilight sonrió al saber que estaban, de cierto modo, en ventaja. – Ahora, si logramos tener a la par a nuestros enemigos, así como a las máquinas esas. Quizás... solo quizás, podamos hacernos de la victoria, lo más rápido que podamos.

-Y también, que contamos con Millium. – Ruby miró a los alrededores. – Espero que esté bien. No debe de ser fácil el de tener que ir contra el que fue tu... lugar de origen.

-Como están las cosas, es algo que estaba destinado a pasar. Digo... ¿Quién deseas separar de modo tan tajante lo sobrenatural y el mundo humano? – Rarity miró a las chicas con algo de cansancio.

-Es algo simple en verdad, aunque no lo crean. – Blake tomó la palabra. – Es como si... trataras de decirle a una persona, que vive en una casa, que alguien más es responsable de que esta se mantenga en pie. Te pone de los nervios. Aunque, en cierto modo.... Es entendible. Uno desea hacer las cosas a su modo, no depender de seres que puede que no te ayuden. No puedo decir que... lo acepto, pero que lo entiendo.

Sabían que ella hablaba por experiencia. El ser mitad y mitad, una híbrida de especies, no es sencillo. Y sí, al final dependes de los líderes de las especies puras, porque solo no puedes lograr nada en este mundo. Y, de todos modos, ellos...

En eso, Fluttershy, quien podía sentir las vibraciones del aire que los estaba rodeando, pudo en cierta manera, captar que algo se les acercaba. No eran pocos. Eran varios seres. Pero lo más raro, es que no sentía que fuera algo natural. La chica pidió silencio a las presentes, quienes al ver la seriedad en la cara de su amiga...

-Se acercan. No están lejos de nosotros.

A sus palabras, todas voltearon y se vieron con la más agria de las sorpresas. Podían ver que ahí estaban 4 personas. A una la conocen. Es alguien con quien han pelado juntos... Millium se mostraba muy mortificada. Molesta... Pero los que la acompañan, eran los que en verdad mostraban su hostilidad a ellos.

-Con que ustedes son los que han mandado. Unas niñas... - El hombre, que mostraba ser el líder de este lado, se mostró más que fastidiado. Como si viera las presencias de todas ellas, como una ofensa al reto que habían mandado. – Pensé que mandarían seres de peso. Como un líder. No esto.

-Wow... que halagador. Se nota que eres un encanto para las mujeres. – AJ no pudo evitar hablar con sarcasmo, solo para que... - Supongo que ustedes son los miembros del ejército Atlesiano.

-Así es. – LA mujer, que se notaba era la hermana de Weiss, debido al gran parecido físico, se mostró más que... seria. – Somos los especialistas del Ejercito Atlesiano, enviados para hacernos cargo de la sobre influencia del mundo sobrenatural, en las actividades de los humanos.

-Woah. Se nota que eres una mujer seria y muy fría. – Pinkie alzó una ceja. – Pero, hay algo que no me cuadra... ¿En serio deseas pelear contra Weiss? Son hermanas.

El silencio que hubo, fue eterno, aunque duró un segundo mísero segundo. Porque quien rompió el silencio, fue el chico que...

-Hacemos esto, por la necesidad de que los humanos, no se vean esclavizados por lo sobrenatural.

-Elliot, ¿No? – Twilight habló con seriedad. – Un amigo de Rean-san. Pensar que en verdad irías contra él. Pensar que fueron amigos...

-Esos días de amistad, murieron cuando él optó por aliarse con seres que no son humanos. – NO podía creer que oyeron eso de su boca. – Puede que el resto lo haya perdonado, pero yo no... jamás olvidaré, como, por sus acciones, perdimos la oportunidad de simplemente, hacer lo que era lo correcto. Tener lo sobrenatural a raya.

-¿Y crees que ese es el camino? No me hagas reír. – Yang casi escupió sus palabras. – Lo sobrenatural no puede separarse de los humanos. Están ligados, queramos o no. No se puede vivir sin el otro. ¿Acaso no puedes entender algo tan simple como eso?

-Lo que nosotros definimos como primordial, difiere de lo que ustedes piensan. – Yang vio al hombre, que era el general de este grupo. – Nosotros, simplemente, hacemos lo que es necesario para proteger el mundo de los humanos. Los gobiernos confían en nuestra honorable labor. El de ser los protectores que merecen...

-Pero no los que necesitan. – Ruby afiló la mirada. - ¿Qué clase de protector piensa en hacer algo así? ¿En vez de ver las cosas de un modo pacífico y cooperativo? ¿Acaso cree que todo se soluciona con una muestra de poder y ya? No. La Alianza se creo, porque había gente harta de una pelea sin sentido. ¿Por qué no pueden ver eso?

-Porque... no es natural. – Winter miró a su hermana, quien se mostró más seria. - ¿Es natural el pensar que de la noche a la mañana, hayan demonios que tengan amigos a los ángeles? No. Ustedes pueden creer eso. Pero les aseguro que hay algunos que no lo ven así. Y no pueden demostrarlo, porque no tienen el poder de actuar. Pero una vez lo tengan, van a actuar. Así es la historia. Siempre lo ha sido. Solo están viviendo una fase, que en verdad no durará para siempre.

-Durará... si nos esforzamos por ello. – Weiss dio unos pasos a frente, demostrando que estaba cansada de esto. – Hay unas cosas que puedo... darte la razón, hermana. Pero... No puedo aceptarlo. Ya no... No tras ver que, en medio de todos los sobrenaturales, hay seres que se preocupan por este mundo, más que los mismos que lo habitan. Que luchan por este, porque lo quieren proteger, solo porque viven en este y lo aprecian. – Weiss soltó aire, al sentir los nervios concretarse en su abdomen. Como si se hubiera tragado una piedra. – No puedo... aceptar lo que dices Winter. No ahora...

-.... ¿Esa es tu decisión Weiss? ¿Prefieres a esos seres que a tu hermana...?

-¡No es nada de eso! ¿¡Por qué no ves que estamos tratando de tener este mundo en paz, pero a su vez mejorarlo!? ¡No podemos retroceder a como eran las cosas antes, no cuando hay una fuerza tratando de destruirlo! ¿¡Tan ciegos son para ver que hay cosas más importantes!?

-No hay nada más importante, que reafirmar la creencia de que los humanos podemos lograr grandes cosas, por nuestra cuenta. – El General caminó para estar al frente de su grupo. - ¿Creen que todo esto, es por hacerlo porque sí? No. Somos conscientes de los riesgos. Somos conscientes, de lo que pasa. Pero el mundo humano, tras las acciones de esa organización, no sabe lo que está pasando. Si, han sido ataques menores... Pero el de Shinjuku, solo hizo ver que, ni ustedes, son infalibles. Y que los humanos deben de ser protegidos, por los mismos humanos. Esa es la verdad absoluta.

Eso sonó... algo arrogante. Tanto que, en cierta manera, sintieron asco. ¿Es esto lo que piensan los supremacistas en verdad? De que, la raza a la que pertenecen, no deben de tener tacto con otra y que pueden lograr las cosas por su lado, sin ayuda de nadie. ¿eso es algo que debe ser visto como normal? No... Ellas habían entendido, que no importa la raza, todos necesitan algo de ayuda. Sea de un conocimiento de otro lado, como una idea... y eso era lo que los había llevado a este lugar.

-Sabe... Una vez peleamos contra alguien quien, en cierto modo, pensaba de esa manera. Que los humanos deben demostrar su superioridad a los seres sobrenaturales. Y tanta fue su ambición, que no le importó usar medios nada morales, para llegar a ello. Que atacó una capital, donde seres inocentes vivían. Sin importar que sean demonios, no sabían nada de lo que pasaba. Como gente inocente murió... y como al final, el mismo poder del que sentía orgullo, lo traicionó, porque no podía soportar lo que hacía. – Twilight se puso al lado de Weiss. – Ese día, aprendimos que... son las ideas, lo que nos impulsan, pero también... el mundo puede ser juez. Y puede juzgar, si el camino que uno toma, es el correcto. El mundo eligió el camino del entendimiento y la comunicación, que el de una guerra que ya ha durado suficiente.

-No nos importa lo que piense... no nos importa si cree estar en lo correcto. Porque al final, nosotras tenemos nuestro modo de ver el mundo. Y así es como son las cosas. – Ruby sacó su arma, mostrando que la situación había llegado a un punto, donde pelear era todo lo que les quedaba. – El mundo nos puso en esto... para que tomemos un camino. Y lo hemos hecho, tras ver que... hay gente buena y mala, sin importar la raza. No son unas alas, unos apéndices extra o el color de tu piel, cabello u ojos, los que hacen a uno malo o cruel. Son como piensan y el como actúan. Y ustedes.... – La chica apuntó con su arma. – Son los que están mal, pensando que el camino antiguo es el correcto. El mundo cambia, así como los que viven en él.

Elliot se sorprendió al oír eso. Esas palabras, eran como las de Rean... como las que él dijo, unos días antes de que todo pasara. Demostrando que no estaba de acuerdo con lo que estaban pasando en la institución, que las cosas estaban cambiando y que de seguir de este modo, solo... solo llegarían a ser enemigos.

-Eso suena muy bien Ruby Rose. – El General, no se vio afectado ni nada de eso... solo dio un chasquido con sus dedos, demostrando que... - Pero el poder lo rige todo y este cambia el mundo. Y ahora, los humanos lo tenemos... No necesitamos de lo sobrenatural para ello.

En eso, vieron como las máquinas se empezaron a activar... Lo que vieron, fue como media centena de esas máquinas se activaron. Como se pusieron de pie, para luego mostrar si apariencia.

Si hay un modo de describirlo, era como si vieras un ser insectoide con una armadura blanca, bípedo. El color blanco predominaba en la armadura, pero había dejos de negro en lo que parecían ser... las uniones o las partes internas visibles. Pero lo que más llamaba la atención, era que en la parte del pecho, se veía como varios cables estaban conectados a una esfera de color verde. Otros de color azul. Y unos pocos, de color dorado. Las esferas, a la simple vista, parecen no pasar de un diámetro de 10 cm... AL ver ello, Weiss solo pudo...

-¿¡Como pudiste darles "Materias" a ellos Winter!? ¡No son perfectas!

-Es lo que se debe de hacer... hermana.

A esas palabras, las máquinas, los Paladins, se mostraron listos para atacar. Demostrando que tenían armas humanas, como metralletas o similares, pero habían un aire mágico en estos. Lo que solo hizo que... las chicas se pongan en guardia. Era la hora de actuar.

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Por otro lado, tenemos al Grupo Gremory, el del Hakuryuukou y el Sekiryuutei, esperando en lo que parecía ser una gran Iglesia. Frente a un parque...

-¿Desde cuando tenemos una Iglesia así?

-Desde hace unos meses Xenovia. – Akeno le sonrió a la chica. La construyeron para los que venían a la ciudad y en verdad, eran católicos. Sería interesante verla desde adentro.

-Lamentablemente, dudo que tengamos tiempo. – Esdeath miró su reloj, supongo que nuestros enemigos atacaran pronto. Hay que estar listos.

-¿Algún plan? – Gasper miró a Rias, quien...

-Aki. – la chica miró a la demonio. – Saca los Fangs, tenlos en alerta máxima.

-A la orden Buchou. – La castaña activó su Balance Breaker, para luego lanzar los Fangs hacia el aire y que estos se dispersen. Lo que si en verdad la ponía de los nervios era... - Raro. No hay presencias cercanas aún. Pensé que con todo esto, ya habríamos sido atacados.

-Eso demuestra que son más listos de lo que pensamos. – Arthur simplemente miró a los alrededores. – De todos modos, debemos estar listos para los ataques de todos lados.

-Estamos listos para eso. La experiencia con los Grimms y Evil Dragons, bastan. – Kaori sonrió un poco. – De todos modos, no es mala idea un poco de trampas. ¿No Gasper?

El niño asintió. De su sombra se dispersaron varias franjas, que se fueron a zonas que pueden servir para la batalla, además de que...

-¿Pasa algo Rossweisse-san? – Merlina miró a la mujer, quien estaba revisando, por un círculo mágico, algo...

-Estoy revisando la capacidad mágica de la barrera. Estoy viendo que todo este en orden. Esta barrera la creamos para soportar grandes cargas de poder, usando los sellos 616 en estos.

-En pocas palabras, es un prototipo para esa bestia. – Bikou dijo eso con algo de asombro. – Cool.

-Vaya que lo es. – Teepo, quien estaba en el lomo de Kurama, lo dijo con asombro. – De todos modos, ¿Cómo haremos frente a tantos enemigos? Sé que somos hábiles, pero el número puede jugarnos en contra.

-Es fácil. – Koneko se arrodilló frente a Kurama, quien... - ¿Puedes invocarlos aquí Kurama?

-*¡Woof!* - el lobo ladró, como diciendo que la pregunta era estúpida. Claro que puede.

-Jaja. Lo tomaré como un sí. – Koneko acarició su cabeza. Y miró la pulsera en su mano... - Onee-sama dice que la batalla por su lado, está por empezar.

-Si... Sona dice lo mismo. Esperemos que la situación vaya como lo pensamos. Una pelea larga, no nos conviene. Más a los demonios, que el resto. – Rias miró los alrededores. - ¿Puedes sacar a Ryuuteimaru, Ise?

-Claro. – El Sekiryuutei extendió su mano, del cual emergió un barco que... ya no era un bote. Eran del tamaño de un Yate, además que estaba flotando y se mostraba estar armado. Su color había tomado un color rojo más oscuro. - ¿Listo?

El barco respondió, flotando al lado de Asia y de Merlina. Las dos eran el soporte del grupo, como diciendo que suban. Merlina miró el barco con asombro, pero Asia solo soltó una risa.

-Ryuutemaru ha crecido mucho en estas semanas. Al parecer, el crecimiento de Ise-san, solo aceleró el proceso. Además, de que absorbió la parte de otra Fase de la Onda. Azazel-sensei, dice que puede que alcance el tamaño de los que usamos en la batalla contra Loki, en poco tiempo. Y que aun le quedaría espacio para crecer.

-Eso es... bestial. – Bikou solo pudo silbar al ver la capacidad de ese barco. Es más, se pudo ver como Ryuuteimaru se movió, como aceptando el halago.

{Es gracioso el ver como parece que entiende lo que decimos} – Albion, simplemente no pudo negar que estaba interesado en lo que estaba viendo. – {¿Seguros de que no tiene un alma o algo similar?}

[Azazel dijo que, es como cualquiera de los barcos que se crearon. Solo que parece ser más capaz de captar lo que hay en el ambiente] – Ddraig solo pudo decir eso. Ya que en verdad, no había una respuesta clara para ellos.

Todos miraron a Ryuuteimaru, que simplemente siguió en su lugar, con Asia y Merlina en este. LA verdad, no lo habían pensado. Ise hace tiempo ha sentido que este barco guarda más de lo que pensaba en un momento. Porque parecía ser capaz de reaccionar mejor de lo que esperarían. Como si fuera capaz de identificar lo que pasa.

En eso, lo Fangs se movieron en una sola dirección. Apuntando sus partes de energía a donde estaban los recién llegados. Todos hicieron lo mismo, siendo los Dragones Celestiales los que activaron sus Balance Breakers, para no perder tiempo. Pudieron ver a Strada, quien estaba al frente de la gran cantidad de exorcistas, los cuales, vestían similar a como Xenovia. Ella afiló la mirada, al notar la réplica de Durandal en la mano del hombre.

-Veo que en verdad están listos para la batalla, jóvenes. – Strada vio a todos los presentes, notando que... - Pensar que hasta el Hakuryuukou vendría a este lugar.

-El saber que pelear contra el ser que es llamado una leyenda en el Vaticano, era una posibilidad, no dudé un segundo en venir. – Vali respondió como siempre, pero se sentía en su voz, que no estaba siendo del todo esto con lo que decía.

-¿En serio? El pensar que uno de los Dragones Celestiales piense eso, es un honor en verdad. – el hombre miró a Ise, notando que... - Veo que es cierto, puedo sentir que has heredado el título de tu estilo, Sekiryuutei. Y a una temprana edad. Rean debe de estar muy orgulloso. Pero, ni creas que por eso, bastara para estar a mi nivel con la espada.

-No soy tan arrogante como para pensar eso. – Ise solo se encogió se encogió de hombros. – No estoy al nivel de mi Maestro aun. Sé mis límites.

-Rean... Si... No tengo duda de que él es más poderoso que yo... aun en mi juventud, dudo poder hacer lo que él. – Todos lo vieron con asombro, hasta los que estaban con él. – Vi su poder en su más pura expresión ese día. Tan oscuro, salvaje... brutal. Si no hubiera sido porque quería irse, pudo haberme matado a mí y Crisaldi ese día. Aunque tengo entendido, de que no ha usado ese máximo en años.

El oír eso, solo hizo que los que sabían del poder de Rean, sientan que el humano era mucho más poderoso de lo que decían. Si Vasco decía, que el poder que le han visto, a pesar de ser enorme solo era una broma con el que él vio esa noche, solo les hizo entender que... ni contra Rahab, él uso todo su poder. Era una broma...

-Pero en verdad... Estoy seguro que puedo decir con certeza, de que han sido entrenados por un gran guerrero, como persona. Si en algo se parece a su maestro, debo de ya darme una idea de lo que son capaces.

El grupo DxD, estaba en silencio, se puede sentir el respeto que ese hombre tiene. No los ve con rabia, desdén o algo de... arrogancia. Sino con el respeto, de un anciano, a una generación nueva. Este alzó su espada, mostrado la réplica. Se sentía que era una al fin y al cabo, porque solo emana una quinta parte de lo que la real muestra en verdad.

-Pero vine aquí por una razón. Y no me voy a detener...

-¿Es necesario? – Asia hizo la pregunta. - ¿Debemos pelear? ¿No hay otro camino?

Vasco le sonrió a la chica. Como un abuelo lo haría a su nieto, por hacer una pregunta tan buena, que calentaba su corazón con nostalgia o alegría. Se seguro viendo, el buen corazón de la muchacha.

-Lamentablemente, sí. Es lo se debe de hacer. No hay otra forma de cambiar las cosas... Lamento que sea así. – El hombre alzó su espada, demostrando que... estaba listo para lo que sea.

Todos se pusieron en guardia al ver ello, pero justo cuando estaba por atacar... Ise sintió como la marca en su mano derecha soltaba un pulso tan fuerte, que casi lo lanza al suelo por el dolor. Esta sensación...

-... No puede ser... ¿¡Está aquí!? ¿¡Como es eso posible!? – la voz de Skeith, sonaba entre la sorpresa y el horror, porque... esta presencia era la de...

Vali sintió como algo más estaba aquí. Que lo llamaba con fuerza, como pidiendo que... lo halle, que es algo que debe de hacer. Y sin decirle nadie en el grupo lo que pasaba, el Hakuryuukou alzó vuelo en dirección donde estaba esa presencia que lo llama... la gran Iglesia.

-¿¡Vali!? – Rias soltó un grito de sorpresa, no creyendo que... - ¿¡que hace!?

-Esto es... - Akeno sintió algo también. No como lo hizo Ise, pero estaba segura que esta presencia que siente es como la de... - ¿¡Ise, que está pasando!?

-No lo sé... Pero lo voy a averiguar. ¡Les encargo esta zona! – el Sekiryuutei miró a Vasco, quien estaba intrigado por el cambio tan repentino. – Lamento tener que irme Vasco Strada. Pero hay asuntos más importantes que requieren de mi atención.

El Sekiryuutei alzó vuelo, para ir tras su rival, dejando a los presentes en duda... solo que Akeno le susurró a Rias lo que pasaba, haciendo que la pelirroja la viera con asombro y algo de miedo.

-¿¡Aquí!? ¿Cómo...?

-No lo sé... Pero Innis dice que es él. Su presencia es más que clara.

Rias maldijo todo lo que existía... ¿¡Una Fase aquí? ¿¡Como es que Corbenik estaba aquí!? Esto es malo... Si es cierto lo que saben, sería peligroso que esto pase aquí... Rayos... No puede ser peor.

-No entiendo porque ambos se fueron. Pero creo que solo me hace entender, que hay una oportunidad más clara de derrotarlos.

-Que ellos se hayan ido, no significa que nosotros seamos débiles. – Roosweisse activó las runas que aumentan su poder, para luego... - Kurama...

El lobo asintió. Dio un aullido con tal fuerza, que atrás del grupo, emergieron varios seres que Vasco y los exorcistas reconocieron. Era Grimms Wolfos. Su apariencia, había cambiado ligeramente, pero eran Grimms... Solo que el color rojo y negro se habían invertido. Demostrando que eran diferentes.

-Nuestro lobo es el alfa de esta jauría de Grimms, además de que son... más fuertes. Por lo que no crean que serán fáciles de derrotar. – Kaori creó una hacha con su Sacred Gear, una que tenía un filo caliente, ya que las llamas se veían. - ¿Iniciamos? Porque se les nota ansiosos.

Vasco Strada, vio en esos niños, la voluntad de luchar. Xenovia sacó a Durandal, demostrando que la chica estaba más que lista para la lucha. Peor lo que jamás espero, fue el ver a esos Grimms ponerse del lado de ellos. Eso solo demostraba, la gran capacidad que poseen estos jóvenes. Dejando al anciano, con una sonrisa más que clara.

-¡Al ataque!

Tras decir ello, la pelea se inició.

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En el interior de la parte más alta de la Iglesia, Vali piso el suelo y... vio que el lugar era como lo que su madre una vez el comentó de las Iglesias. Pensar que ella, una mujer católica, diera a luz a un descendiente de Lucifer. Era más que gracioso y paradójico. Y debe de admitir, que el lugar se ve... bello. Más de lo que pudo llegar a imaginar con las descripciones o imágenes que ha visto en su vida.

En eso, sintió de nuevo el llamado... el llamado de... eso. Como un susurro... como si algo que ha buscado toda la vida, estuviera aquí. En sus narices. Y no desea perderlo de vista. Estuvo a solo unos pasos de entrar al edificio. Solo para sentir como la mano del Sekiryuutei tocaba su hombro.

-¿Piensas entrar solo?

-... Debo de saber que es lo que me llama.

Ise pudo ver como esto confundía a Vali. La verdad sea dicha. Él estaba tan confundido como el resto. Pero estaba seguro de que no pueden entrar a la loca. Sea quien sea el que estaba ahí... estaba conectado a Corbenik.

-Este chico debe de ser el marcado por Corbenik. Lo que pone más en duda, por qué este yace en otra persona. Algo debe de haber pasado... y Corbenik está llamando a quien debe de ser su otro yo real.

Lo que Skeith dijo, solo hizo que el Sekiryuutei se ponga más nervioso de lo que estaba... Tanto, que... Sugirió a su rival, de que usen sus armaduras más poderosas. Porque si es lo que piensa, esto no será fácil.

Ambos Dragones Celestiales activaron sus armaduras carmesí y plata, para ingresar a paso lento a la gran Iglesia. Viéndose maravillados con el interior del lugar. Como era más lo que... uno podía recordar o imaginar. Claro. Habían imágenes de la pasión de Cristo, hasta una imagen de él en la cruz, como es de esperarse en estos lugares. Sin embargo, era la persona quien estaba frente a esa imagen de la cruz, lo que los puso alertas.

-Con que... son ustedes. – el hombre volteó, para ver a ambos Dragones. – Es bueno verlos. Esperaba que... esto pasara. Lo que pone el plan en la mejor de las posiciones.

-¿Plan? – Ise hizo la pregunta con algo de duda... - ¿De qué...?

-No importa. Pero... puedo ver que tú eres quien tiene a Skeith, ¿No? – El hombre sonrió al notar como Ise se tensaba. – Corbenik puede sentirlo y también... - Miró a Vali, quien estaba en silencio. – Con que... tú eres quien él debe de unirse.

-... ¿A que te refieres...?

-¿No lo has captado aun? Tú eres el marcado como Corbenik, como el Sekiryuutei lo es de Skeith. Y vaya que es gracioso... los Dragones Celestiales, las Fases más poderosas de la Onda. Los que representan el inicio y el fin. La luz y la oscuridad. Es... raro. Que el mundo haya elegido esto.

-No me importa lo que estés diciendo... - Vali se mostró más hostil que de costumbre. – Pero si es cierto, tienes algo que es mío. – el Hakuryuukou sacó su espada, listo para pelear.

Ise notaba como su rival actuaba... pero no lo puede culpar. Ya debe de sentir el nexo que tiene con Corbenik, por lo que debe de... estar furioso de que este sujeto este con algo que es suyo por derecho.

Pero la reacción del enmascarado al ver la espada, solo hizo que se confunda más... Estaba sonriendo...

-Esa espada... pensar que tú la tendrías. – Miró al Sekiryuutei... - Tú eres el alumno de Rean, ¿No? Se nota por... tu pose de pelea. Él usaba la misma al pelear mano a mano, aunque prefería su espada.

Ambos Dragones se vieron las caras, solo para sentir que este hombre... demostraba ser más de lo que estaban pensando en un inicio. Porque este sujeto...

-Saben, siempre me he preguntado que ha pasado con el mundo, desde ese día... en que Rean huyó. Quería saber si es que... logró sus metas. Y veo que así es. Que él logró... hacerse de eso que siempre buscó...

-¿Quién eres...? – El Sekiryuutei hizo la pregunta con algo de miedo... - ¿Cómo es que...?

-¿Sé de Rean? Simple... porque éramos amigos. Los mejores. – a esas palabras, el hombre se tomó la máscara que ocultaba su rostro. – Y fui el dueño de esa espada.

El verlo quitarse la máscara, para ver el rostro, solo hizo que el Sekiryuutei se quede frío.. porque esa cara... era la de la persona que aparecía en las fotos que su maestro tenía. La de su amigo... su mejor amigo... la persona que murió para salvarlo.

-... ¿Crow? Pero... eso no puede... - el hombre sonrió al ver como Ise estaba sorprendido. - ¡Es imposible!

-Lo sería normalmente, si no tuvieras a un hombre tan inteligente, como Weil, usando el Caliz. – Crow solo sacó lo que eran unas pistolas. – De todos modos, hablar está de más. ¿Listos para pelear?

Ambos Dragones vieron el destello azul en los ojos de Crow, notando que en verdad.. estaban en una situación que no esperaron. Pero sabían que deben de luchar contra... la artificial Fase Ocho de la Onda.

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En su lugar, esperando que esa persona llegue con lo que estaba pidiendo, Rean estaba viendo con Celine la calle tan abandonada que... era como un recuerdo de esa noche, donde huyó. Alzó la vista al escuchar el sonido de los tacones. Notó como...

-Hey Alisa. Que bueno que viviste. – La rubia sonrió un poco.

-Estaba justamente hablando con mi hijo por Zoom. El cambio de horarios, ya sabes. – Alisa se puso a un lado de Rean, para luego... - Ten. Es lo que me pediste. – Le alzó una bolsa con lo que era... - Son más resistentes de lo normal. Pero bastarán para lo que necesitas.

-Gracias. Es... Ya sabes... - Rean tomó la bolsa y... - Yo sólo...

-¿Qué vas a hacer Rean...? – Alisa lo miró con algo de miedo. – ¿Debo de pensar que...?

-... Es algo necesario. Un trabajo que... será el último antes de que... me retire. – Rean habló con pesadez. Con verdad... y ella...

Ella sentía que... Algo pasaba. Pero no le pudo decir nada. Simplemente optó por pasar a verlo, de nuevo alzando la mirada. Se notaba la diferencia de estatura entre ellos. Y los años no han cambiado ello.

-... Me lo pagas cuando vuelvas. Es la tela más fina que ha creado mi compañía. Si te tardas, te cobraré intereses.

-Je... Claro. Te lo pago bien regrese.

Alisa le tomó la palabra... Porque, él era así. Nunca... rompía una promesa. Ella solo se acercó a él y le dio un beso al borde de los labios. Como tratando de... mostrar eso que aun siente, sin llegar a tan lejos. Como un modo de que él...

-... Suerte Rean. Nos vemos.

-Gracias Alisa. Te veo luego.

A esas palabras, Alisa se dio media vuelta y caminó de regreso hacia el hotel donde ha estado hospedada estos días. Dejando a Rean y Celine en el lugar. Con nada más, que el cielo nocturno.

-... ¿Listo? – Celine miró a su amigo, quien...

El ver el interior de la bolsa, para ver un conjunto de ropas de color negro, solo hizo que Rean asienta. No hay marcha atrás. Deben avanzar. Pase lo que pase...

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