La batalla en las calles del Vaticano, contra el Dios Fobos, era lo que uno llamaría, letal y algo salvaje. No porque e sí, sea destrucción y más destrucción, sino porque en serio, la destrucción que parecía traer Fobos con su hacha, era bastante grande como para hacer que el lugar entero se venga casi abajo.

Raynare estaba volando para tratar de tener una mejor visión del Dios que los estaba atacando, pero en verdad no era algo sencillo con tanto humo creado por la caída de las edificaciones que estaban en la zona.

Lo que si era claro, es que la caído, veía el como las cosas caían, por irónico que suene dado lo que es. Y notaba como Kurama lanzaba ráfagas de magia de su armadura, para detener el avance del Dios, que iba hacia ellos.

El hacha del Dios, desvió las ráfagas de magia o las cortaba, en verdad era muy sencillo para este. Pero a su vez, se sentía la sensación de que algo más estaba pasando por la cabeza d ese sujeto.

Lanzó unas lanzas de luz, para tratar de detener su avance, pero el tipo era como un maldito tanque. Eso no era bueno. Corría hacia Kaori, quien creó una espada envuelta en electricidad, así como un escudo que se notaba estaba redorado con magia, para poder resistir lo que se venía.

Fobo agitó su arma hacia la chica, quien alzó su arma defensiva, para así, resistir lo que era el enorme impacto que se vino al instante le hoque de ambas armas. Kaori podía sentir en carne propia lo que era el poder de un Dios.

Si, habían peleado contra Afrodita, pero ella no era una deidad que peleaba de por sí, por lo que sus poderes no eran muy llevados al área del combate. Pero, lo que, si era claro, es que estaban peleado contra alguien que si... que si veía la lucha como algo importante. Algo que debe de ser llevado acabo.

Apretó los dientes, para poder resistir el impacto que estaba recibiendo. El dolor en sus rodillas era abismal, ya que, en verdad, sentía que le estaba doliendo todo... Alzó la mano con la espada como pudo y al agitó para poder alejar al Dios de ella, quien lo hizo... solo para poder moverse y lanzare una patada.

La chica salió volando hacia unas edificaciones y las tiró abajo... Ray vio con horro a su amiga ser siendo mandada de esa manera a un choque con casas, no le gustó. Apretó los dientes para mostrar su rabia y voló hacia el Dios, agitando la lanza de luz que tenía a la mano, logrando hacer que este sujeto e defienda, pero de inmediato, se vio e a obligación de esquivar el ataque de su puño.

La onda de impacto, bastaba para hacer que ella sienta miedo del poder de este sujeto. Se logró quedar en el aire, para luego ver, como este la miraba... como denotaba una sensación horrible en esos ojos. Er una que jamás pensó sentir.

Kurama ladró, como diciendo que no pierda la concentración. era verdad, no la debe de perder, no debe de hacerlo en este momento, porque de hacerlo, ella... ella en verdad debe de tener cuidado con lo que hace. Debe de... moverse como se debe, para que su muerte no sea inmediata. Ya que eso era lo que estaba sintiendo...

Pero.... ¿Por qué lo sentía? No era la primera vez que pelea a morir y con alguien más fuerte que ella misma. Era como si algo sacara ese pánico en su ser... si, el miedo siempre estaba ahí, era lo normal al pelear. Pero esta vez...

Abrió los ojos al entender que....

-Tú... tú estás aumentando la sensación del miedo en nosotros. ¿No es así? – le hizo la pregunta al Dios, quien sonrió un poco... - Miserable. Aprovecharte de miedo es...

-Parte natural de lo que uno puede considerar, una guerra. – Fobos solo lo dijo con calma, como si le hablara a una niña pequeña. – Soy el miedo que les entra antes del combate, es natural que sea capaz de darles esa sensación y aumentarla sin mucho problema.

Raynare maldijo todo... ¿Cómo es que no lo notó? ¿Cómo es que no noto lo que estaba pasando en verdad? Ella... así como sus amigos, debían de estar sintiendo en cierta manera el poder del Dios, su especialidad era dar miedo antes de que empiece la batalla, que mucho se mueren del mido antes de poder hacer ago. Era parte de la naturaleza del ser vivo.

Y esa naturaleza, era aprovechada por el Dios, quien se movía como lo haría un maldito manipulador. Se notaba que pelear, era algo que estaba acostumbrado, pero a la vez, se veía que estaba más acostumbrado a dejar que el oponente se muera de miedo, antes de que las cosas terminen.

Kurama le gruño, a la vez que se veía como Kaori regresaba al lugar de la batalla, sus heridas creadas por los golpes no eran algo que no esperó jampas vivir. Es decir, ¿Quién espera tener que estar bajo un edificio destruido por tu propio cuerpo?

Lo que, si era claro, es que este sujeto no estaba para dejar que las cosas, se lleven de la manera en la que cuentan siempre en los mitos. Que espera a que el miedo del oponente sea tal, que se queda paralizado, para dejar que su hermano Dimos, lo derrote... lo mate. Ya que el miedo, podía matar de manera literal en las guerras que se mencionan en los textos mitológicos de los griegos.

Y Fobos lo veía en como esas dos y el lobo, se ponían en guardia. Si, era gracioso el ver como estaban tratando de querer, hallar la manera en que pueden derrotarlo.

Si, puede que no sea un Dios tan poderosos como su padre o lo Olímpicos, pero a la vez, no era débil. Sabe que se habla de la mitología de ellos, que se habla e su relación con su hermano y lo que los une, pero...

-Les diré esto niños, no pueden ganar.

-Ya vamos de nuevo con el discurso de que no podemos ganar porque eres más fuerte, blah, blah... - Kaori rodó los ojos. – ya nos sabemos esos discursos de memoria.

-Je.... No lo iba a decir por eso. Sino porque... no tiene sentido de que ganen.

-¿No sentido en que ganemos? – Ray alzó una ceja. - ¿Eres idiota?

-No... simplemente, digo lo que veo. A diferencia de mi hermano, que es más salvaje que yo y está aquí para poder sentir de nuevo el placer del pánico de la gente antes de que este mundo perezca, yo... estoy aquí para una cosa... cumplir una venganza.

-¿Contra quién? ¿El Rey Supremo? – Kaori alzó la voz. – Tu padre obtuvo lo que se merecía. Hasta tu madre lo sabe...

-Mi madre nunca amo a mi padre. Solo lo veía como alguien que podía darle placer. Todos los que hemos nacido de ella, lo pensamos... nuestra madre era una puta cualquiera. – Las chicas soltaron un jadeo... ¿¡Cómo puede hablar así de su propia madre!? – No sé porque se sorprenden.

-Puede ser muchas coas... ¡Pero es tu madre! ¡Bastardo! – Raynare no tenía en una gran estima a la Diosa Afrodita. Pero en parte la entiende, ser vista como simple objeto de placer por años, la debió de cansar y eso era algo triste. Pero....

-Esa mujer fue todo menos una madre. Mi padre al menos nos trataba mejor... no como simples seres que solo nacían de ella, porque no le quedaba otra. Y una vez murió... a ella no le importó. Lo sé... todos lo sabíamos. Pero ella....

-Oh vamos.... No estamos para oír de tus traumas con tu madre. ¿Quieres acabar con el mundo solo porque no te quiso?

-Al contrario. – Kaori afiló la mirada. – Quiero acabar con él, para que así, la muerte de mi padre tenga un sentido. - ¿¡De que estaba hablando!? – El mundo como está, es lo mismo que en el pasado. Solo que no lo quieren ver. Guerras, miedos... eso es lo que los impulsa a todos. Si, eso es lo que los hacer querer cambiar, querer ser mejores... solo porque tiene miedo a que su existencia se acabe. AL menos en la guerra, eso era algo que todos tenían como igualdad... el miedo. el terror... el sentimiento de pánico. Y luchaban... morían, pero su vida había tenido un sentido.

-¿Dices que así uno tiene sentido a la vida? Esto no es la antigua Grecia. – Raynare solo pudo... - Lo que dices, es de una mentalidad que lleva siglos muerta.

-¿Es así? Dime una cosa... ¿Luchar dejó de existir? ¿Las guerras se han detenido? ¿Acaso el miedo no sigue existiendo en todos? – Ninguna pudo refutar lo que dijo. Porque es así. Siempre lo es... y que las cosas no cambien, es por la naturaleza de los mortales. El hecho de que se nieguen a creer eso, es que están ciegas a la verdad de este mundo.

Raynare entendía en algo lo que estaba diciendo. Era el miedo lo que impulsa a muchos a hacer cosas horribles. El miedo era lo que generaba las discriminaciones, lo que llevaba a que gente se arme para luchar, ya que lo desconocido, puede ser peligro. Y eso, era lo que llevaba a que la chica, sin querer, le entienda... ella estaba igual. Su odio a la Iglesia en el pasado, era por el miedo que sentía, tras la muerte de sus padres.

De todos modos, la chica no estaba para seguir oyendo cosas de esa calaña. De ninguna manera, ella solo... solo deseaba poder demostrar que hay cosas que si se pueden cambiar. Ella lo hizo... ¿Por qué el resto no?

-Hablas de ese modo, pero se nota que tú eres el que está asustado al cambio en el mundo. Que no sabes que hacer, si que ya no tienes claro tu ligar en el mundo.

-Es posible. – Fobos no lo negó. Es más... se notaba que sonreía, como si viera esto como algo divertido, el de tener que simplemente ver que era lo que pasaba en el mundo. – Pero no estoy para simplemente ponernos a filosofar de lo que creemos correcto y lo que no. Ustedes... - Las miró. – Creen en el cambio, pero yo.... creo en que el mundo está bien como está... que siga cambiando, es una pérdida de tiempo. Nadie puede ir contra lo que es... yo no puedo ir contra que Soy del Dios del miedo. Ustedes no irán contra lo que son parte de DxD... que mi padre fue el Dios de la Guerra.... Y que este mundo, solo debe de seguir el curso que siempre siguió, e de su mera destrucción. Es lo púnico que tiene sentido...

-Así que eso es lo que buscas... el sentido a todo esto... hasta a la muerte de tu padre... - Kaori no sabía que decir. - ¿Acaso tu madre no...?

-El sentido de mi madre era simple el de ser una mujer que solo daba a luz hijos de diferentes hombres. Eso era ella... no más. No menos. Hasta como Diosa, era patética, al querer buscarle otro sentido a su vida al haberse enamorado de un humano.

-Al menos fue valiente en querer ir contra ese sentido el que hablas... y aun con todo lo icho, no le veo el sentido a tus acciones. Al menos ella... quiso hallarle un sentido a su vida, no lo que el resto esperaba que fuera. Y ahí, demuestra que todos podemos cambiar. – Raynare no estaba para dejar que este sujeto se siga riendo de la desgracia de una persona, que si bien hizo mal... y no le tenía una gran estima, al menos trató de ser más de lo que otros esperaban que fuera.

El destello en su cuerpo de dos colores, un rojo anaranjado, un azul celeste, solo dieron paso a que saque sus 6 alas. y dos espadas gemelas, una de cada color de la energía que emanaba de ella.

-Veo que no llegaremos a un acuerdo, es una verdadera lástima. Ya que.... En serio, no deseo tener una pelea sin sentido. Solo deberían esperar la muerte y destrucción de este mundo, en paz. Es lo más sencillo.

-No somos conocidas por hacer lo sencillo, para que sepas. – Kaori solo se puso en guardia, así como su amiga y Kurama. – Así que.... Dejemos la charada, y vayamos a lo que nos importa. ¿no?

Si, que sea de ese modo.

Fobos fue contra ellas, lo que llevó a que el Dios inicie la parte de esta batalla con lo que era el movimiento de su hacha. Eso bastó para que la fuerza de viento, destruya varias edificaciones. El impacto solo obligo a las chicas al alzar vuelo, a la vez que Kurama saltaba para ponerse a resguardo.

Era una técnica para dares miedo, quiere que esta sea una batalla de voluntades, psicológica. Eso puede ser algo malo, dado que ese era el Dios del Miedo, de por si tenía la ventaja en ese campo. Pero no por eso, es que se van a rendir.

Kurama salió de su escondite y lanzó varias ráfagas de magia de su cuerpo, a la vez que corría. Los impactos de estas, no afectaban al Dios, para nada, pero lograban distraerlo del movimiento de Kaori, quien había creado un hacha similar a la de él, solo que esta parecía tener un filo más grande y marcado.

La chica atacó, el Dios logró defenderse a pesar de las distracciones que sufría por parte de ese perro, lobo... lo que sea. Pero no era algo que bastaba para poder moverlo, no bastaba para hacer que el Dios, sienta pánico o miedo. No, era algo que en verdad, no era suficiente, la chica trató de atacar de nuevo. Solo que esta vez, el Dios logró bloquear el ataque con su arma.

La demonio sintió como la fuerza del Dios, era superior a la de ella, por muchos niveles, no era algo que uno pueda decir, que no era claro... pero lo que si era muy claro, es que... ahora estaba en serios problemas. Con un movimiento, fue mandada a volar hacia el aire, el hacha el Dios logro hacerle un corte en el pecho, desgarrando en algo su uniforme.

-¡Kaori! – Ray iba a ir por ella, pero el Dios fue contra su persona. - ¡Mierda! ¡Kurama!

El lobo no perdió el tiempo, corrió hacia donde estaba cayendo la chica, a la vez que sentía que era mejor así, no puede darse el lujo de dejar que le pase algo a su amiga. Debía de confiar en Ray. Dio varios saltos en medio de las edificaciones destruidas, para tratar de llegar a ella...

A su vez, Raynare logró esquivar el hacha de Fobos, pero sintió lo que era el daño... el viento que creaba esa arma, era monstruoso en verdad. La caído esquivó un ataque que pasó cerca de su cabeza, perdiendo parte de su cabello... Eso no era bueno. Parte de su larga cabellera fue cortada y le llegaba solo a la mitad de la espalda

Retrocedió con un salto, para así ponerse a pensar en que la puede ayudar en esta batalla, que es lo que puede sacar de información de este Dios, para así lograr acabar con esto, pero mientras más pensaba, más era claro, que no estaba al nivel de ese sujeto. Estaba claro eso... era un suicido el solo querer pelear contra un Dios, aunque sea de menor rango... del tipo más débil por así decirlo.

Si, ella y os demás estaban en la capacidad de pelear con seres clase Maou con la ayuda de sus amigos. Juntos, quizás podían ganar... pero la diferencia entre un Dios y Maou, era enorme... puede que no lo parezca, pero era como comprara un edifico de 5 pisos con uno de 15. Y eso era lo que la tenia de los mil nervios... ¿Qué es lo que puede hacer para ganar?

Esquivó otro ataque, esta vez tratando de ir al contra ataque. Al esquivar el hacha, se movió para poder atacar con su espada de la mano derecha. Pensando que le había dado, es que no vio el como el tipo alzaba la mano y atrapaba el arma con esta.

-¿¡Como!?

-Es algo fácil de hacer, si es que tienes la experiencia necesaria. – Fobos alzó a Ray al aire, casi sacándole un grito de sorpresa, pero que vino con uno de dolor por el golpe en el estómago que recibió.

La caído fue alzada por el golpe, para luego terminar recibiendo una patada que la mandó al suelo. El impacto de su espalda con una casa que estaba en la zona, sumado a que chocó con varios pisos y que le cayó todo encima, no fue del agrado de la muchacha, pero a la vez, se nota que estaba muy adolorida. Lo que si era claro, es que... es que debe de quitarse los escombros de encima. Debe de moverse, sino...

En eso, sintió como era alzada del suelo, por el pie. De cabeza, se dio con la sorpresa de que... ahí estaba Fobos. Viéndola, con algo e lastima y pena, por lo que puede captar. Ngh, no es que la quiera... alzó la mano para atacar con su espada, que no soltó en ningún segundo. Solo para verse con que su cuero fue azotado.

El jadeo que soltó, sumado a la sangre que vomitó, fue más que claro el daño que su cuerpo recibió... sus pulmones no eran capaces de simplemente ponerse de trabajar. Le dolía todo, que el solo respirar, era el peor de los castigos.

-¿Ahora lo ves? Aun con el poder que tienes, no eres capaz de hacerme frente. Soy un Dios... de rango bajo, pero uno que, en verdad, sabe lo que hace... que tiene clara su meta. No como los demás... no como los Olímpicos, que solo se conformaron con lo que pasó. Que cambiaron sus metas a solo vivir en un mundo, donde ya no había lugar para ellos. Pero yo no... mi lugar es este... mi sentido de vivir es este... dar miedo. que el miedo se expanda, hasta que el mundo ya deje de existir.

Raynare le quiso refutar, pero fue lanzada como una muñeca a unos escombros. El impacto de su espalda con eso, bastó para que se oiga un crack. Su columna... sus vertebras... siente que se le movió una vértebra. Trató de ponerla en su lugar como pudo, pero el oír los pasos de Fobos hacia ella, solo aumentaron su ansiedad y miedo.

-Si, eso es lo que digo... siente miedo, niña. Porque eso es lo que tiene sentido en todo esto.

En eso, Kurama se puso frente a la caído, para evitar que el Dios se le siga acercando. El lobo gruño, con una daga en el hocico. Fobos rio, no creyendo que este lobo en verdad crea que le puede hacer algo. Era un simple animal.... No más.

Fue hacia este, pero el lobo corrió a su dirección, no amedrentándose. No mostrando miedo, ni nada de eso.... Solo una voluntad más que fuerte para la lucha que se estaba viendo. El impacto del lobo con Fobos, lo mandó a volar. Cayó rodando al suelo, con algo de su armadura dañada, dado que el impacto fue fuerte.... Pero se pudo de pie casi de inmediato.

No iba a dejar que se acerque a su amiga.

-Ray. – Kaori apareció al lado de la caído... se notaba el corte en su pecho... el desgarro de su uniforme y la sangre... ¿Cómo es que...? - Perdí el hacha, pero me salvó del peor daño. – Eso lo explica... - Vamos, Kurama no...

-Una vértebra se me movió... debes de ponerla en su lugar. – Raynare movió la prenda que cubre su espalda y se veía una pequeña protuberancia. – Rápido, antes que el poder de Gorre me cure y.... quede lisiada.

-Ngh... Bien... ¿Qué hago? Vio como Kurama estaba tratando por todos los medios, detener a Fobos.

-Golpea esa zona.... Con un arma, un martillo.... Luego, pon la vértebra en su lugar. Gorre se hará cargo del resto.

-... Estás loca... ¿¡Es lo mejor que se te ocurre!?

-¡Hazlo! ¡Aun con lágrimas del Fenix, eso se debería de hacer! – Eso era cierto... deben de.... -¡YA! ¡Kurama no resistirá mucho!

Kaori no pudo decir más... asintió. Creó un martillo para dar el golpe, se arrancó una parte de la falda, para poner la tela en la boca se Ray, sabiendo que puede que... grite.

Y tragando saliva, alzó el martillo y le dio el golpe en la espalda a la chica, justo en la zona donde estaba la vértebra salida. El grito de Ray se oyó a pesar de la tela en su boca. El como lágrimas salieron de sus ojos... Le dolía verla así. Pero el ver que aún estaba algo salida la vértebra, no le quedó otra, debía dar uno más... el grito de la caído fue mayor, pero esta vez lo logró.... Con sus manos puso la vértebra en su lugar. El sonido del hueso en su lugar, le sacó un suspiro y el verla energía de Gorre empezar a curar la zona era lo mejor.

Pero el ver a Ray llorar, era algo que no esperó.... Si, ella era fuerte, pero no es ajena al dolor.... Acarició su cabeza y....

-Kurama y yo aguantaremos hasta que puedas volver a la lucha.

Raynare asintió, dejando que Kaori regrese al campo de lucha, esta vez, más decidida que nunca a pelear con Fobos. Solo la pudo ver irse a la vez que sentía el poder de Gorre, empezar a curar su espalda.

Se sentía mal por dejar sus amigos así, en medio de tan importante pelea, pero... pero debe de recuperarse, sino... sino no puede... ella debe de luchar. Debe de... seguir, porque sino... ¿Qué sentido tiene todo lo que ha pasado hasta ahora?

En la lucha, Kurama soltó un quejido de dolor, al recibir un golpe de Fobos, cayendo al suelo, con su armadura muy dañada, pero a la vez, se veía que estaba determinado. El temblor en sus patas era claro. Pero... el lobo no estaba para rendirse. De ninguna manera... él no... no lo iba a hacer.

En eso, se vio como Kaori atacó con un gran mazo que parecía tener sierras en su parte plana, para atacar a Fobos. El Dios se defendió y con un movimiento de su ara regresó a la chica donde estaba el lobo. Quien ladró feliz al verla...

-Oh Kurama... mira cómo estás.... - veía sus heridas, su armadura cayéndose a pedazos y la sangre... jamás había visto al lobo así de herido. – Sin duda, eres valiente... Más que cualquiera.

Eso era algo claro, de seguro el más leal y valiente del sequito Gremory, era Kurama. Quien no dudaba en hacer estas cosas por los demás, su equipo... su familia. Quizás se parece en algo a Ise o a Rean... pero era de admirar. Kurama miró de nuevo al Dios, listo para seguir la lucha. Y no estaba para perder el tiempo. Era una pelea muy importante.

Kaori asintió... debían de seguir con la lucha.

Ambos fueron al encuentro del Dios, solo para verse ser mandados a volar por la deidad con su simple energía. El impacto de sus cuerpos con el suelo, solo mostraba que eso si debía de doler. Pero no se rindieron como este esperó, se empezaron poner de pie. Y de todos modos, ellos... ellos no...

-Es inútil. Ya dejen de pensar que tiene una oportunidad contra mí. Soy un Dios... No pueden vencerme con esos poderes tan débiles. No lograran nada con solo desearlo. ¿Creen que esa clase de milagros, sirven en este mundo? Es una estupidez, creada para que algunas crean que los milagros, de verdad existen...

-... No digas tonterías. Un humano, apaleó a los Dioses, si es que estos se portaban como tú. – Kaori le hizo el recordatorio del hombre que era el ser más temido por los Dioses.

-Ese hombre, era un caso único... él no era como los demás. Hasta padre lo vio... y le tuvo miedo hasta el último de sus días. Pero ustedes no son él. No se le acercan ni de lejos. Aunque una tenga algo de sus poderes... está ahí, tirada... herida y con miedo.

Kurama ladró con molestia, ya que...

-Si, es cierto... tiene miedo. Pero no es la única... todos tenemos miedo. ¿Y sabes por qué? Porque valoramos nuestra vida... queremos aprovecharla y queremos hacer muchas cosas con ella. - Y eso es lo normal en los seres vivos... el miedo, es algo que siempre tenemos... no es algo que sea especial y mucho menos... algo que se deba de usar para controlar a uno...

-Simples palabras de una mortal. No creas que eso bastará para que te salve. Solo alargas tu muerte.

-No pido eso... Es más... hay destinos que son peores que la muerte. ¿No crees? Oh... pero es cierto, tu padre no lo sabe. Él dejó de existir. - vio una expresión de fastidio en la cara de Fobos. – TU padre sintió miedo también... todos lo sienten. ¿Quieres hallar sentido a la vida? Pues aquí te viene uno... Tú o eres nadie para elegir el sentido de la vida de nadie y menos de este mundo.

Fobos fue contra ella.... Pero en eso, Kurama se puso al frente y su tamaño creció hasta el punto de que era casi de 10 metros, eso dejó en shock al Dios, quien no se vio preparado para la garra del lobo.

Lo bloqueó, pero en eso, se vio en el aire debido a la fuerza del ataque. y eso le dio a Kaori la oportunidad de atacar con su mazo, logrando darle un golpe certero... el primero en toda esta batalla.

Ver al Dios caer contra una casa, bastó para que ella sonría. No es tan invencible ahora. Pero en eso, lo vio alzarse de nuevo... no se quedó ni un segundo en el suelo.

-Penar que una mortal me haría este daño. Que humillante. No pasara de nuevo.

Lanzó una onda de corte. Gracias a su hacha, logrando hacer que la chica lo esquive, gracias a sus alas. Aun así, el impacto casi le cuesta caro.... Estuvo muy cerca. Dios...

Fobos voló contra ella, pero Kurama lo embistió con su enorme cuerpo. Pero el ver como Fobo lograba alzar al Lobo gigante y lo azotaba contra el suelo y le daba una parada que lo mandaba lejos de él, era impresionante. Tanto, que Kaori casi grita por lo que vio...

Y cuando tenía al Dios a solo unos metros de ella, es que vio como Raynare apareció y bloqueó el ataque del hacha del enemigo con sus espadas gemelas.

-¡Ataca!

Kaori asintió. Creando una espada gigante que tenía la curvatura tan grande y fuerza que era como una espada que le dio de lleno en el pecho del Dios, haciendo que este caiga de nuevo al suelo. El impacto fue tal, que derrumbó varias casas en la zona, solo por la mera onda de choque.

-Gracias Ray...

-Luego las das... - la caído respiraba agitado, demostrando que eso último fue algo que casi hace que pierda todas sus fuerzas.

Ambas chicas vieron a Kurama salir de los escombros donde estaba. El lobo soltó un quejido de dolor, pero se recompuso casi de inmediato. Corrió para estar debajo de ellas, quienes se posaron sobre su lomo. Acariciaron al animal, quien estaba como ellas, cansado, pero muy listo para seguir con la lucha. Al menos, eso es lo que puede ver.

La energía que salió de la zona donde estaba Fobos, solo demostraba que el Dios parece haberse cansado de este juego. Debían de pensar bien lo que les viene.

-Demonios... dudo que podamos seguir así siempre... ¿Dónde están los exorcistas en la zona? – Kaori no estaba feliz... ¿Y los refuerzos?

Raynare miró a la lejanía lo que era el Vaticano. Debían de estar aquí... o quizás...

-.... Claro.... Eso debe de ser. Kurama... date vuelta y corre al Vaticano, debemos de acerarnos.

El lobo ladró, como aceptando la petición de su amiga se dio vuelta y empezó a correr, como si no hubiera un mañana. Pero detrás de ellos, estaba el Dios Fobos, que se mostraba muy furioso.

En medio de esa persecución, Kaori no entendía el porque era que estaban haciendo esto.

-¿¡Que sentido tiene que nos acerquemos al Vaticano en estos momentos!?

-¡Lo del Vaticano deben de haber creado una barrera! ¡Eso debe de impedir que vean que es lo que pasa!

-¿¡En serio!? ¿¡Y que pasó con dar apoyo a las personas!?

-No Kaori... debe de haber gente ahí, por eso es que.... – La chica lo entendió... el Vaticano era el bunker en estos momentos para la gente que no pudo salir de la ciudad a tiempo. – No quiero hacer esto, pero debemos de acercarnos.

-¿Por qué?

-Porque si lo que creo es correcto. Deben de tener ahí, a la persona más capaz para defenderlos que existe en su organización. Si logramos hacer que venga... podemos ganar una fuerza que nos ayude a igual esto. No le ganaremos jamás ese sujeto en fuera bruta. Ya lo has visto.

Kaori no entendía de que hablaba, hasta que lo pudo enlazar con cada palabra que dijo. Sí, eso los puede salvar... los puede ayudar y así...

Kurama siguió corriendo en medio de las calles de Roma. El sonido de sus patas con el concreto era claro, dado el silencio que estaba en la zona. No solo eso, era su respiración y el jadeo, lo que llevaba a que no haya un silencio total.

Saltaba para poder esquivar unos edificios, para apresurar su paso. Acortar el camino. Esa era la meta de sus movimientos. Pudo ver acercarse al Dios, lo tenía a solo unos metros de él.... No puede dejar que se siga acercando... dejó salir de su armadura unos círculos mágicos, de los que salieron ráfaga de energía para detenerlo, aunque sea un poco.

Pero el impacto hizo poco o nada para detener el avance del Dios hacia ellos. Es más, logró alcanzarlos y darle a Kurama y golpe en el abdomen, que lo mandó hacia el suelo, junto con las dos chicas. El lobo vomitó sangre, aunque se trató de levantar. El daño no era el peor que pudo recibir. De todos modos... ellas....

-No sé por qué tratan de huir. Pero eso no les servirá de nada. Su derrota es algo seguro. – Fobos vio a las chicas ya ponerse de pie, no notando que....

Como si se supiera e la amenaza, el Vaticano pareció temblar un segundo un mero segundo... pero eso bastaba para que ellas entiendan, que la razón por la habían venido aquí, se iba a cumplir.

Y sin que Fobos lo viera, algo fue hacia él. No era cualquiera quien se estaba lanzando contra el Dios, sino una fuerza que las dos chicas, saben, puede salvarlas y ayudarlas a salir de este embrollo.

El Dios sintió la intención de atacarlo y alzó su arma. El hacha bloqueó lo que era una espada, muy similar a lo que era Durandal. El hombre demostraba ser muy musculoso, pero su cara era la de hombre ya pasado su punto más alto, era de 87 años, pero sus ojos brillaban como si fuera un joven aun listo para la lucha. Este le dio un golpe a Dios, quien lo mandó a un lado...

-¿¡Quien demo...!?

-Es bueno ver que no se han rendido... jóvenes de DxD. – el hombre giró su mirada y... - Lo que esperaba de los que Rean entrenó y les confió el futuro.

-Esperamos que no sea una molestia pedirle su ayuda, Vasco Strada. – Ray vio al humano más fuerte en la actualidad, dado que sin Rean en el lugar, ese título es de Vasco.

-Jajaja. Para nada. Tenía ganas de venir desde que iniciaron la pelea, pero los altos mandos no querían dejar el Vaticano sin protección. Pero ahora que se acercaron....

-No les queda otra más que mandarlo. Buen plan Ray. – Kaori felicitó a su amiga. - ¿Cree que...?

-Dejen que este anciano se divierta un rato. Puedo estar lejos de mi máximo, pero.... Aun puedo hacer algo contra un Dios. – Su cuerpo se vio rodeado de energía santa y la espada emanó la mima energía. El poder era grande. - ¿Qué dice Dios Fobos? ¿Desea jugar contra este anciano?

Fobos no dijo nada. ¿En verdad esperan que este sujeto le pueda hacer frente? Vaya ridiculez. Se lanzó al ataque, solo para que su arma se vea bloqueada por el arma del humano, quien lanzó un puño tan poderoso que al darle a Fobos en el estómago que lo hizo vomitar sangre, algo que le sacó al Dios, un a expresión de absoluta sorpresa.

-¿Cómo es que....?

-¿No sé que te sorprende? Que yo sepa, en el pasado... un humano lograba esto y más.

Las palabras del humano, no le agradaron nada al Dios, quien dio un grito de rabia, antes de ir contra Vasco, quien canalizo poder en su espada.

Ambos se volvieron como destellos de luz que se movían a toda velocidad y el choque de sus armas era tal que en verdad parecían hacer que el lugar se esté por venir abajo. No es que no estén acostumbradas a esto, lo han visto. Pero... el ver a un humano pelear mano a mano con un Dios, aunque sea de rango menor.... Era increíble.

Kurama usaba su cuero para protegerlas de los impactos que sabía que estaban pasando. Es más, el lobo parecía querer recuperarse un poco, para poder seguir con la lucha. La pelea era intensa, Vasco estaba mostrando su habilidad con la espada, que brillaba con una luz intensa. El hacha que Fobos trataba de clavarle en el cuerpo, no era capaz de superar la defensa de la poderosa espada, que si bien era una copia de Durandal, se notaba que no estaba lejos del poder de esta, además de que en manos de Vasco, era un arma mortal.

Ambos contendientes dejaron de moverse a velocidad para quedar en medio d ela destruida plaza... la plaza que era donde los creyentes de la religión católica se reúnen. Fobos atacó, Vasco se defendió con su espada y dio un corte. Uno que el Dios logró bloquear.

Se quedaron quietos un rato, antes de concentrar poder en sus armas y atacar. El choque de ambas, casi manda a volar a los que lo veían todo, pero si lograron destruir mucho de lo que estaba en la zona.

Y la misma fuerza, bastó para hacer que ambos contendientes retrocedan por eso último. Fobos casi se arrodilla, peor no lo hizo... su orgullo no lo permitía. Es más. se notaba que.... Vasco estaba sudando a mares y su respiración era agitada.

-Jajaja. La edad ya me está pasando la factura. Pelear con un Dios, es algo que un viejo como yo, no puede hacer sin sentir que la artritis le viene en encima. – El hombre vio la cara del Dios y... - No pongas esa cara, Dios Fobos. No veo el porque de la incertidumbre.

-No tiene sentido... - Dijo eso con una rabia contenida.... - ¿¡Como un simple humano sin nada especial, puede hacerme frente!? ¡Es un sinsentido!

-¿Sin sentido? No veo por qué piensas esas cosas. El mundo está lleno de sin sentidos. – Vasco tomó aire. – El simple hecho de que un anciano como yo siga vivo, cuando dos jóvenes prometedores ya han muerto, es uno... pero así es la vida. Así es la realidad.... Es más... Que un Dios, que se supone debe de proteger el mundo, desee acabar con este, es un sinsentido.

-¡Silencio humano! ¿¡Que puedes saber tú de esas cosas!? ¿¡Que puedes saber del sentido que el mundo y el resto debe de seguir!? ¡Yo solo cumplo con lo que siempre he hecho! ¡Mi meta desde que nací!

-Si piensas que es así... estas mal. Todos tenemos un sentido en nuestras vidas. Todos elegimos como es que queremos pelear o como es que queremos, simplemente... hacerlas cosas. Que no lo veas, muestra lo cerrada de tu mente.

Fobos no soportaba más. se lanzó contra el anciano, solo para recibir una ráfaga de ataques de magia de Kurama quien se puso al lado del anciano. Este sonrió y acarició la cabeza del enorme lobo, a la vez que Ray y Kaori se ponían en guardia.

-No es bueno dejar que haga todo solo. Ya nos hemos recuperado lo necesario para seguir.

-Jajaja. Agradezco esas palabras, Pawn Gremory. Será un honor pelear con los que Rean entrenó. Será una buena manera de iniciar mi redención hacia él.

-.... No piense tanto en eso viejo.... Rean no lo hacía.

Vasco sonrió a la boca lisa de Ray. Fobos vio a los cuatro y con la adición de ese viejo en esto, no puede ser bueno.

Kaori atacó con unos yoyos gigantes que parecían tener sierras gigantes. Los lanzó de tal manera que con sus manos era capaz de dirigir el movimiento del giro. No solo eso, pudo lograr hacer que el Dios se mueva para... para que Kurama se le lance con sus fauces abiertas, listo para clavarle los colmillos.

Este logró patear al lobo, quien cayó al suelo, pero no por eso estaba derrotado. El animal pareció sonreír, al ver como Ray estaba sobre él con sus espadas cargadas de magia de fuego y agua. Es más se veía que estaban muy cargadas de magia.

En ese momento, el choque de las espadas con el hacha, hizo que salga una fuerte corriente de ambas magias al ambiente.... Eso hizo que Ray se sienta algo afectada, pero no era lo suficiente como para hacer que ella salga volando, debía de resistir. Lo suficiente hasta que....

-¡Buen trabajo, ángel caído! – Vasco apareció al lado del Dios con su copia de Durandal, brillando, como si en verdad el poder de la espada, fuera como el de la original.

El impacto de la espada en el pecho de Fobos, sacó una gran cantidad de sangre en el pecho del Dios. Este cayó al suelo.. su armadura, lo que lo protegía, estaba dañada por el impacto de la espada. Pero la cara de Fobos, era que no se lo creía. No lo podía concebir... que unos mortales, lo estén poniendo en este embrollo.

Es más... se notaba de lejos, que....

-... No tiene sentido. No lo tiene... - Se puso de pie, con la zona herida chorreando sangre. – Los Dioses... los humanos... todos tiene su lugar. Su misión... su razón de ser. No podemos cambiar eso que somos.... Entonces... ¿¡Cómo es que me están lastimando unas basuras como ustedes!?

Wow.... Mucho ego. Se notaba que se parecía en algo al Dios Ares por lo que habían visto y oído de él. Parece que ve a los humanos, como algo que ya tiene su lugar... su misión. Que las coas, que ya estaban marcadas, no se pueden cambiar. Quizás lo era... quizás...

-Es verdad lo que dices. Hay cosas que no podemos cambiar... como que somos. Un humano, siempre será uno, aun cuando reencarne en otra raza, ya que su corazón humano está ahí... un demonio, lo es.... Ya que así fue criado. Así como un caído... hay cosas que no podemos cambiar. Es el sentido del que hablas. – Vasco pareció recordar algo... - Pero hay seres que van contra ese sentido.

-¿¡A que te refieres!?

-... Hace años. Un chico fue contra todo, por lo que creía... fue contra su escuela, sus amigos... su familia, porque no soportaba la injusticia que descubrió. No quería seguir ese sentido de que tanto hablas. No... quiso ir más allá de eso... nadar contra esa corriente. Quiso.... Ser él mismo. Hallar la razón de la que porque pelea... Si. Eso es lo que lo hizo algo grande. Tuvo el valor de ver más allá de lo que le habían enseñado. – Pasó a ver a Raynare y le sonrió. – Ella, por ejemplo, es un caído... Yo he peleado con cientos de ellos... todos tenían una meta, el reavivar la guerra... que la guerra debía de seguir. Pero en ella, no veo eso.... Veo a una chica que si bien es de la raza con la que nunca tuve buena relación, que desea algo más grande de lo que le pudieron enseñar. Un mundo mejor.... Y eso es algo que no se aprende, así como así. Nace de uno, de sus experiencias de lo que ha vivido.... de todo lo que ha logrado en estos años.

Raynare vio al hombre con asombro. Que el ser más fuerte del vaticano, piense eso es...

Fobos dio un rugido de rabia. NO lo entendía. No entendía eso... ¿Ir contra lo establecido!? ¡No tiene lógica!

Su hacha se agito contra Vasco, solo para que Kurama le lance una ráfaga de poder de su boca, con tal poder que lo mandó lejos de ellos. Estaba tan perturbado, que su fuerza no estaba siendo clara, estaba menguando. Aunque ayudaba que Kurama tenía los genes de Fenrir, lo que lo hacía capaz de dañar Dioses.

Fobos salió de los escombros.... Su cara ya no mostraba la paciencia de antes. Y e efecto de miedo que su mera presencia generaba, se fue... Así como la confianza en su ser. Como si no lo pudiera creer ni un segundo.

-LA vida es así... cambiante. Mengua. El sentido cambia... nada es estático. El solo querer ver más allá... eso es lo intrigante de la vida. Algo que veo, un Dios como tú... no lo ve. Por lo cerrada de tu mente... solo alguien con una mente abierta lo puede captar.

Lo intrigante de la vida... era algo que Raynare pudo sacar mucho de lo que se dijo. Que solo los de mente abierta, pueden cambiar de verdad. Que pueden ver lo intrigante que es la vida. Que sienten curiosidad de lo que puede verse más adelante, era algo...

-Es un lindo pensamiento. ¿no? – La chica parpadeó y se vio frente a Red y Blue Gorre. – Si. El mundo puede ser muy lineal, a veces.

-Pero depende de nosotros ver si hay más allá. Solo debemos de... ser algo curioso. Salir de la rutina... quizás veas algo muy bello y único. ¿No fue eso lo que hiciste el día que cambiaste para bien?

Ray sonrió a esas palabras... era verdad. No dejó que su odio y demás, la guíen... esa noche. Quiso hacer más.... quiso hacer algo por ella. Y ahora lo hace... ahora, pudo ver que esa intriga, esa curiosidad nacida de su moral.... Lo cambió todo. Quizás. Eso es lo que el mundo necesita.

Se vio de nuevo en la realidad.... Vio a Fobos, quien parecía querer refutarle algo a Vasco pero...

-Eres cerrado, Fobos. – el Dios la miró con rabia. – El que no veas que el mundo, no siempre es lineal.... Que a veces, uno desea nadar contra la corriente, porque desea ver si hay algo más en esta vida de lo que uno creyó al inicio. Yo lo sé... - Vio por un segundo, el reflejo de su yo más joven. De su resentimiento... su odio... pero eso lo cambió, por un simple encuentro... una intriga que la siguió hasta hoy.

Todos vieron el destello e luz que apareció en el cielo... como parecía demostrar que... si, era como lo pensaban. Todos estaban peleando... todos.... Querían demostrar que... Un poco de intriga, un poco de curiosidad, puede hacer que tu mundo cambie. Y a su vez, ¡Eso puede cambiar el mundo!

Al pensar ello, sintió como algo en su mente pareció conectarse con.... ¿Los demás?

Sentía los pensamientos de las demás Fases. Estaban como ella.... Heridos, cansados, pero la determinación de luchar por lo que creen, estaba ahí... presente. Cada uno, con su propia razón. Pero todos unidos a una voz.

Futuro... eso es lo que desean ver. Lo que desean labrar con sus propias manos y eso es lo que harán. Ella.... Todos....

-Entienden que el poder de ir a futuro no es fácil. – Esa voz... es... - Pero a su vez, es de admirar el ver como una generación puede superar lo que una hizo en el pasado. Tienen algo que yo no... están juntos. Así que... muestren el poder que va más allá de este mundo. ¡El que los lleve más allá del Cielo!

Es verdad. Todo lo que han pasado, ha sido para este momento. Todo es para que....

-¡Te lo voy a mostrar a ti y a todos! – Raynare dio unos pasos la frente. - ¡El poder de ver más allá de lo establecido!

La marca en su muslo izquierdo brilló con fuerza, a la vez que las marcas mezclas del color naranja rojizo y azul celeste emergían de su cuerpo. El destello de energía era tan fuerte, que se pudo ver como se creaba un pilar de energía que abrió el cielo y hundió el suelo bajo ella.

La energía era tan poderosa, que el viento que salió de ella era poderoso, lo suficientemente fuerte como elevar un edificio. Todos los que veían eso, no pudieron evitar notar como detrás de Ray, aparecían las dos formas de Gorre, Red y Blue, las dos hechas de la energía que salía de la chica. Y lo que se vio era....

Yo, aquel que despertará, soy la Fase que se intriga por el futuro.

Rechazó la incertidumbre, afronto la curiosidad.

Anhelo un mundo donde las intrigas por el futuro sean superadas.

Al decir esas palabras, se pudo ver como la energía de color naranja rojizo y azul celeste alrededor de Raynare estaba empezando a tomar forma. En su espalda aparecieron más alas, esta vez eran 6 pares de estas. Solo que del lado derecho todas eran del color naranja rojizo y del lado izquierdo, eran del azul celeste. Pero el cambio siguió, poco a poco, empezaron a hacerse partes de armadura que empezaron a cubrir el cuerpo de Ray, como si fuera un Scale Mail, pero a la vez, se notaba las diferencias. El color de a armadura era un intercalado entre el naranja rojizo y el azul celeste. Era como una armadura de estilo medieval, más aerodinámica, dado que no cubría mucho ciertas zonas, pero si lo necesario, femenina en su totalidad, que iba acorde con el físico de la persona, dejando solo visible algo de sus muslos y antebrazos. Apareció un casco que tenía el lado derecho del color naranja rojizo y el izquierdo el color azul celeste. No solo, eso, la máscara que cubría toda su cara, solo dejaba ver unos intensos ojos de color diferente, naranja rojizo y azul celeste. Raynare alzó las dos manos y emergió lo eran las dos espadas gemelas, una parecía usar el elemento de fuego y la otra usaba el agua, pero se notaba la sincronía que había entre ellas.

¡Y estoy aquí para llevarlos hacia un Cielo libre de Intrigas!

Todos en la zona vieron con asombro la apariencia de la mujer, no solo eso... se podía sentir en sus pieles, el enorme poder que sale de esta armadura. Era algo fuera de este mundo, pero a la vez... se sentía protector.

-Este es poder... ¡No es posible! – Fobos no pudo evitar sentir una familiaridad del pasado... como si ese poder fuera como el de ese sujeto.

-Este es mi True Avatar Trigger... Dual Fallen Machinator. – Ray sonaba calmada, como si hubiera hallado una verdad que le era esquiva desde hace años. – Deja que te muestre lo que pasa cuando superas tus intrigas y ves más allá de lo que crees.

A esas palabras, se pudo ver como la caído lanzó de su espada una onda de calor, que fue directamente hacia Fobos, quien se cubrió, solo para recibir el impacto de una corriente e agua a gran presión. El salir volando de ahí, era algo que no esperó.... Él no... él no estaba para perder contra esta niña... no importa que sea sucesora del Rey Supremo.

-¡Muy bien Ray! ¡Podemos ganar con esto! – Kaori estaba feliz de ver que su amiga lo logró. Kurama ladró igualmente de feliz...

Vasco sonrió, con que este es el poder de las Fases e las que tanto oyó. Se notaba que la chica había logrado descubrir algo de si, que desencadenó el poder. Pero eso lo pueden ver luego, lo que les debía de importar en estos momentos, era que deben de acabar con la batalla de una buena vez.

Fobos se lanzó hacia ellos... Rayanre fue a su encuentro y usando el factor físico de Red, logró resistir el impacto. El impacto de las armas fue lo suficientemente fuerte como para hacer que el aire se quede en vacío, pero esa oportunidad fue aprovechada por Kaori, quien había dado un salto sobre el Dios y usando un látigo que tenía espina, atrapó su mano con la que usaba de soporte para el hacha, la jaló y lo hizo perder la fuerza con la que estaba compitiendo con Ray. Eso le dio a ella la oportunidad de alzar su mano, cargar magia y usar el factor mágico de Blue Gorre, para lanzar una ráfaga de agua t fuego en todo el pecho del Dios.

Este fue mandado hacia atrás con tal fuerza, debido al cambio tan abrupto de atributos, solo para que en medio del aire, aparezca Vasco y con una agilidad que no era nada humana, le de varios cortes con la réplica de Durandal. No bastando con eso, Kurama se lanzó hacia el Dios y abrió su mandíbula, listo para devorarlo, pero Fobos logró salir de ahí, usando magia para impulsarse a un lado, pero no logró evitar que el lobo le tome del brazo y se lo arranque...

El grito de dolor del Dios, fue cortado cuando Vasco y Kaori atacaron... los dos con sus espadas en mano de gran tamaño, le dieron un corte en forma de X, que dejó una enorme marca en esa zona.

No solo conforme con eso, Raynare voló hacia él a una velocidad impresionante y dio un corte en su espalda con cada espada en su mano. Fobos estaba sintiendo que esto era imposible, que unos mortales le estén dando esta paliza.

Se recompuso y movió su gran hacha a su máximo poder, su aura brillando de una manera que puede dejar a uno ciego, pero lo mismo se pudo decir de Vasco, quien tenía a la réplica de Durandal, brillando del mismo. El grito que ambos dieron, sumado al choque de las armas y todo el caos que generó el mero choque de ambas armas, era enorme, tanto... que en verdad, las cosas se estaban saliendo del control de ellos. Pero cuando se oyó el como algo se rompía... no, como dos cosas se rompían, es que supieron que era la oportunidad que esperaban.

Si, la réplica de Durandal se hizo pedazos, pero también lo hizo el hacha de Fobos. Raynare tomó la cadena que Kaori creo y ambas la usaron para atrapar el Dios en un amarre que este no se esperaba, ya que estaba algo aturdido por lo que pasó... El impacto de todo esto, le estaba cayendo encima... Encima, Raynare estaba reforzando el poder de estas cadenas gracias al poder de Red y Blue Gorre. Era tan fuerte que

Tanto fue así, que no vio como Kurama estaba cargando poder en su hocico, como varios círculos mágicos se empezaron a interponer uno sobre el otro. Hasta el punto que el círculo que se creó, brillaba como si fuera un arcoíris.

-¡Siéntete honrado! ¡Ese es el ataque que el lobo Fenrir le enseño! – Kaori sonrió al ver la cara del Dios. - ¡Hecho para Dioses como tú, imbécil!

Antes que este se logre liberar, Kurama soltó su ataque más poderoso. El Elemental Howl.

La ráfaga conjunta de varios elementos mágicos, así como la concentración de energía, era lo suficientemente fuerte como para que uno sepa, que era definitivo el resultado.

Fobos fue devorado por el poderoso ataque, tanto así, que en verdad en solo un segundo, se l pudo ver.... y luego, no. La ráfaga siguió su camino, hasta que dejó de existir dejando en el suelo la marca de su camino, así como al Dios Fobos, quien estaba lleno de heridas, pero... vivo.

Kurama regresó a su tamaño normal, demostrando que estaba ya sin energía. Fobos se quiso poner en pie, peor el domo verde del Protect Break, se hizo presente, algo que él supo... era malo. Giró su cara y vio como Raynare lo apuntaba con su mano izquierda con las espadas de energía de colores naranja rojizo y azul celeste.

-No... No... ¡No debía acabar así! ¡Soy un DIOS!

-¡SOUL DRAIN!

Raynare no le dio ni tiempo e que se ponga a decir algo más o se queje del destino que le tocó. Ya que las ráfagas multicolores le dieron de lleno. El mismo destino de su padre.... El destello bastó para destruir su cuerpo y a su vez, dejar su alma en su lugar.

Kaori no perdió el tiempo el tiempo y la cortó con su espada, no se iba a arriesgar que este tipo siga vivo.

-.... Creo que... con eso podemos decir que matamos un Dios.... – la chica vio como Ray asintió, mientras trataba de respirar. – Eso fue... intenso.

-Lo han hecho bien, jóvenes de DxD... - Vasco sonrió, a pesar de que había perdido su arma. – Sin ese Dios, supongo que los que están pelando en la zona, estarán mejor. – Miró el cielo y... - Así como los que están allá arriba.

Justo cuando pensaban en agradecer al hombre por la ayuda, Kurama empezó a ladrar, con una desesperación que no era clásica de él.

En eso, sintieron la Tierra temblar.... No solo eso, oyeron el rugido de la parte de Trixeha que estaba sobre ellos y como el cielo se abrió. Dejando ver al fin la cara de la bestia que estaba escondida. Su rugido... era raro. Era como el... una bestia dolida. ¿Qué estaba pasando?

-¿Qué es lo que...? – Kaori veía como la bestia....

-... Al parecer se acerca el momento final. – vasco era capaz de verlo, lo que era....

-Al parecer, es como Fidchell dijo...

-Si, debemos de pelear con esa cosa, mi otra yo.

Raynare asintió... estaba lista para lo que sea. No iba a huir y mucho menos decir que todo estaba decidido. Ni el destino del mundo ni el de ella.

Algo grande estaba por pasar. Y no iba a ser agradable. Pero esto solo reafirma una cosa... Al parecer, es momento de que las 8 Fases se unan para una lucha final contra la Bestia del Apocalipsis.

Si era así... Bien. Mostrará que The Machinator despertará la intriga en el mundo para que quieran ver el futuro.