En la casa Hyoudo, Rias estaba mirando seriamente a Ruby, ambas chicas tenían una competencia de algo que puede ser muy absurdo, pero era una pasión para ellas.

-Pongo esta carta boca abajo y acabo mi turno.

La pelirroja empezó a sudar frío al ver que estaba contra las cuerdas, no pensó que Ruby sería tan hábil en esto. Estaba perdiendo, un golpe más y sus puntos de vida irán a 0. Debe de pensar que hacer...

-Oigan, ya dense prisa, quiero jugar. – Yang estaba aburrida de a esas dos matarse entre ellas, de algún modo algo raro.

-Esto es estrategia. Por lo que deben de ver que hacer paso a paso. – Twilight también miraba muy interesada lo que estaba pasando, solo que lo hacía más porque en verdad quiere aprender a jugar.

Weiss y Akeno estaban sentadas viendo la televisión, algo que habían optado por hacer luego de tanto entrenamiento. Kurama estaba recostado al lado de ellas, porque estaba aburrido. Sin Rossweisse en la casa, sus opciones de diversión se vuelven muy limitadas.

El lobo bostezó para luego ver a un lado, el destello de luz que vino, mostraba a Rean, Azazel, Venelana, Celestia, Luna, Emma, Fie y Celine. Habían venido de unas cosas en el inframundo, de seguro que tiene que ver con eso de la escuela que estuvo oyendo. ¿Cómo será ir a la escuela?

En fin, volvió a recostarse, porque empezó a oír a los adultos hablar sobre temas que no le conciernen, solo para oír como la puerta era abierta de un modo nada amable. Saltó para ponerse alerta, así como el resto, quienes vieron como los demás entraban con una cara que bordaba el horror y la rabia.

-¡Las noticias, pongan las malditas noticias!

AJ señaló el televisor, siendo Rainbow la que se lanzó hacia el control remoto, importando poco pasar sobre Weiss, quien se quejó obviamente.

-¡Hey! ¿¡Cuál es la gran...!?

-¡Luego! ¡Miren!

La chica cambió el canal de inmediato, para poner las noticias. Algo que hizo que todos prestaron atención, más al ver que estaba pasando.

-¡Noticias de último minuto! ¡Un atentado terrorista ha sido llevado a cabo en Shinjuku! Exactamente hace una hora, una explosión se originó en el centro de la zona, esto hizo que muchos entren en pánico. Por motivos que no se saben, la policía y fuerzas de apoyo como las ambulancias tardaron en reaccionar a la emergencia, algo que tiene en desconcierto a todos. No hay un informe oficial, pero según los pocos sobrevivientes...

Todos vieron como el resto de la noticia seguía, mostrando varias cosas que muchos no esperaron ver aquí, un país pacífico como Japón. ¿Qué había pasado exactamente?

-¡Ahí es donde Blake fue!

-¡Así como Ise y Rossweisse!

Ayane y Rarity recordaron esos detalles, algo que puso a todos de punta. Aki tenía su celular en mano, tratando de llamar a Ise y Rossweisse, pero no había contacto. Y eso no le gustaba nada.

-¡Nada, me mandan a la casilla de voz! ¡No sé si es por la emergencia o porque algo...!

-¡Ni termines esa frase! ¡Ellos son más fuertes que eso! ¡Dudo que algo así...!

Xenovia detuvo a su amiga, no quiere pensar lo peor. Menos ahora que estaban con los nervios a flor de piel.

Sorprendentemente, fue Fay y Ravel las que se mostraban más tranquilas. Pero algo había en sus cabezas... ¿Lenta reacción por parte de las autoridades? Eso les parece muy raro, más al ver que, aquí, en Japón, es una cultura reaccionar de inmediato. EL único modo que no supieran que pasó hasta que fue varios minutos tarde, debe ser porque algo corto la comunicación o la vigilancia que debía de haber en esa zona. Y ese estilo... se parece al de...

-Blake tampoco contesta. – Ruby dio el aviso, se mostraba algo preocupada por su amiga. No debieron dejarla ir sola.

La situación, era algo que no esperaban afrontar cuando se levantaron esta mañana, los adultos se vieron las caras. Esto no estaba bien.

¿Atentado en el mundo humano? Sí, no es algo que sea raro. Pero es algo que se da más en otros países que no son como Japón. No es por desprestigiar, pero... no cuadra. Es más, es muy planeado para que sea algo hecho por... una organización terrorista. Es más, no hay más información. Esto era muy misterioso....

Mientras veían las noticias seguir su curso, podían ver que... algo de la paz que creyeron aún existir en el mundo que ellos consideraban a salvo, irse. No sabían porque, pero... Sentían que algo estaba por cambiar. Para siempre.

Y solo les quedaba esperar que esos tres llegaran, ya que no daban señales de vida. Y eso era exasperante...

Eso fue lo que hicieron, esperar... Esperar mientras más noticias hablaban de lo que ha pasado en Shinjuku, poco a poco algunas cosas se hacían más claras por el testimonio de los que lograron sobrevivir. Los pocos que lo hicieron. Había descuadres en los testimonios, porque no sabían explicar que pasó con claridad. Y eso daba una idea de que... Algo más estaba tras todo esto.

Ver como se empezaron a armar teorías de la nada, con solo unas horas de lo acontecido, era estúpido... Porque era ilógico. Pero era de esperarse de los políticos, que no sabían que cara poner a nivel mundial. Ante la nación que debían de defender. El Primer Ministro Japonés no había dado un discurso claro. Solo atribuyendo a que se harán todas las investigaciones.

-No sabe que decir. Está tan confundido como todos. – Raynare dio su opinión, tras oír lo que se dijo.

-¿Lo culpas? Un ataque, una bomba en medio de Shinjuku. Eso no es normal. – Kaori había terminado de hablar con sus padres, se alegraba de que estuvieran bien. - ¿Qué pudo pasar?

-La verdad... tengo unas sospechas. – toda la atención paso a Fie. – Este tipo de estrategia, es algo que haría una organización bien... conformada. No hay evidencia de cámaras o de fotos, lo que hace ver que... Deshabilitaron las cámaras, para luego cortar las conexiones con los departamentos de policía. ¿Por qué? – Al no recibir respuesta, supo que debía seguir. – Porque no son una organización humana, al menos no conocida o que desee serla. Y eso elimina varios sospechosos.

Fie había sido entrenada como mercenaria, sabe como esos sujetos pueden pensar. Y esto le da una idea... una clara idea. Pero no le está gustando nada lo que estaba pensando... Nada.

Kurama por su lado, escuchó que la puerta de la casa era abierta. Ladró para llamar la atención de todos, quienes vieron la llegada de quienes estaban esperando.

-¡Ayuda! ¡Ise-kun...! – Rossweisse, con ayuda de Blake, eran el soporte para el muchacho, quien tenía los ojos cerrados.

De inmediato, todos fueron hacia ellos. Las chicas insistieron que Ise era la prioridad, porque él era el que la tuvo peor. Y era así, tenía quemaduras y heridas en el cuerpo, además de que... por alguna razón su brazo de dragón estaba sin los vendajes que lo hacen ver humano.

-¡Las heridas no importan...! ¡Él...!

-¿De qué hablas? – Kuroka no entendía de que hablaba Blake, ¿Cómo que las heridas no son importantes? Claro que eran, miren el estado en que están...

-Esto es... - Celine se acercó al muchacho, quien estaba sentado en el sofá, siendo atendido por Asia y Fluttershy, pero seguía con los ojos cerrados. – Chico, abre los ojos.... – Ise apretó los dientes al oír ello... - ¡No me hagas forzarte a hacerlo! ¡Ábrelos!

El Sekiryuutei no tuvo más opción. Al abrir sus ojos, se vio algo que nadie espero... no había luz en ellos. No había... nada. Estaban apagados, como si estuvieran muertos...

-¡Déjame ver! – Emma tomó la cara del muchacho y empezó a hacer un análisis de magia.

-¿¡Que pasó allá!? ¿¡Que vieron!? – Azazel miró a ambas chicas, quienes no sabían que cara poner.

Todos estaban preocupados por Ise. Sus novias eran las que estaban más alarmadas, al ver que sus ojos carecían del brillo que siempre hay en ellos. Akeno, Ayane, Fay, Ray y Sunset oían como sus otros yo trataban de sacarle información de Skeith, pero este seguía en silencio. Como imitando la acción del Sekiryuutei, esperando el diagnóstico de Emma antes de poder decir algo.

Pero las chicas que lo trajeron aquí, no decían nada... porque esperaban la noticia antes de poder decir todo lo que habían pasado. Lo que habían vivido... lo que han visto. Oír a Emma maldecir por lo bajo, las hizo ver que... esto estaba mal.

-¡Magia de sellado! ¡Con runas de distintas tribus! ¡Este nivel de sellado es tan alto que tomaría una vida romper la maldición!

-Minuto... ¿¡Nos dice que se quedará ciego!? – Sunset fue la primera en reaccionar, pero su acción era la respuesta que todos querían dar.

-... A menos que él logre romper el hechizo... Sí. Se quedará ciego, para siempre.

La respuesta generó varias reacciones, desde llantos hasta rabia... Pero los únicos que no mostraron ningún tipo de reacción fueron los que estuvieron en el lugar del ataque... Rean se arrodilló y pasó a ver la expresión de su alumno. Aun ciego, los ojos de Ise muestran lo que él ve como prueba de que estaba herido, no físicamente, sino en lo mental. Lo que sea que pasó ahí, lo ha dejado marcado.

-¿Quien? ¿Viste quien hizo esto? – El Sekiryuutei asintió... - Dímelo Ise. No puedo ayudarte si no sé quién te hizo esto. ¿El que te dejó ciego es el mismo que hizo lo que dicen en Shinjuku? – Ver como los ojos de su alumno mostraban una rabia sin igual, lo hacía ver que... - Ya veo... No lo contengas Ise... deja salir la rabia que sientes...

El puño del Sekiryuutei pareció sangrar... su cara mostraba una ira que asustó a todos, menos a Rean, Rossweisse y Blake, ya que entendían lo que estaba pasando. Oír el número de víctimas de las noticias... 1500, lo hizo explotar....

-Euclid.... ¡EUCLIIIIIIIIIIIIID!

La primera reacción que tuvo fue ponerse de pie y alzar el sofá que tenía tras suyo y lanzarlo a la pared con un rugido que salió desde el fondo de su alma. Todos retrocedieron al verlo actuar así, como un animal que había sido herido. Ise se tambaleó, al recordar que está ciego. Y eso añadió más frustración a su grito, tanta era esta que, al tener el mueble en su cara, lo empezó a destrozar con sus manos. Sin importar lo que el resto pensara.

Rean alzó la mano, para que nadie trate de acercarse, que dejen que tenga esto... un momento en donde puede soltar toda su ira y frustración... una, que se acabó en segundos... Porque se empezó a oír los sollozos del muchacho...

-NO pude... No pude hacer nada.... No pude salvarlos... Yo...

El Sekiryuutei empezó a llorar, no le importaba mostrar su debilidad ante los que estaban aquí, porque habían visto que él era... como cualquiera. Rias y Twilight fueron hacia él, trataron de consolarlo, pero verlo llorar solo hizo que ellas hagan lo mismo. Asia caminó hacia él y tomó su mano lastimada por lo que había hecho de modo reciente, para empezar a curarla.

-Ise-san... No es tu culpa... Nadie... Nadie pudo esperar que algo así pasara...

Las palabras de la muchacha parecieron llegar al muchacho, quien se mantuvo en su lugar el tiempo necesario antes de que... alguien más tome el valor de poder decir algo. ¿Quién ayudó a Euclid en esto?

-White Fang... Fue White Fang... - Las palabras de Blake, fueron un balde de agua helada a quienes sabían de dicho grupo. Y quienes sabían, que este fue desmantelado años atrás.

-¿El grupo al que perteneció...? Pero, se supone que...

-¡Lo sé! – Blake se sentó en una de las sillas, tras interrumpir a Koneko, y se llevó las manos a la cabeza, estaba confundida, furiosa... dolida. - ¿¡Cómo pudieron caer tan bajo!? ¡Aliarse con esos sujetos! ¿¡Donde quedó el grupo que buscaba la igualdad entre especies!?

Blake soltó una risa amarga, sabía que ese grupo murió el día que Adam hizo... lo que hizo. Y ella como idiota, siguió dicho juego por meses hasta que... Sintió las lágrimas llenar sus ojos, dejar salir un sollozo que llevaba años ahí. Sintió el apoyo de sus compañeras de equipo, pero no bastaba... no lo hacía. Porque había visto de primera mano, lo que ellos habían hecho. Las consecuencias... Todo.

-Euclid... él... - Rossweisse estaba igual, tal vez peor. Porque vio y escuchó cosas que nunca había pensado. Ni los libros, nada la había preparado para esto. Nada por lo que también quiso llorar. Y los demás, no sabían que decir.

....

Tras varios minutos, que fueron eternos... Supieron lo que había pasado al fin. Entendieron todo...

Euclid se presentó ante Ise y Rossweisse, su misión era... acercarse a Rossweisse, pero su verdadera intención debió de ser esto. El ataque, romper la creencia de que el mundo humano no sería afectado. Pero no era así... Nunca lo fue. Solo lo creyeron de un modo tonto...

-Son claramente diferentes a los seres sobrenaturales que han causado terrorismo hasta ahora. Parece que los de Qlippoth no dudan en dejar influencia en el mundo humano y causar bajas.... Esto último... Malditos... Gente inocente. Dios... - Irina apretó los puños al imaginar todo lo que había pasado.

Era como dijo Irina. Son diferentes a los terroristas que habían estado enfrentado hasta la fecha. Los que habían enfrentado hasta ahora tenían un objetivo claro y concentraron sus ataques allí. Si fuera la facción Old Maou, entonces habrían atacado principalmente a los Tres Grandes Poderes, y si fuera la facción de Héroes, habrían desafiado a los seres sobrenaturales. Pero aquí yace lo distinto, están atacando punto variados, que no pueden predecir donde deben poner las defensas... Lo de Rumania fue un ejemplo claro, pero en se entonces... habían evitado el desastre... esta vez no fue así. Y hay consecuencias.

-Alguien debió de... haberles dado pase a esos sujetos para entrar. No creo que hayan evitado todas las líneas de defensa que hay en la ciudad.

-¿Y si no es así? Ya vieron que es White Fang quien hizo el ataque, no otros seres. Si algo se especializan, es en esto. Y no han perdido el toque por lo que veo.

Pinkie no pudo decir nada ante las palabras de Weiss. La chica estaba en un humor algo... sombrío. No era para menos, había muerte en este caso. Inocentes. Habían visto la muerte antes, pero en medio de una batalla. No fuera de esta y menos de este modo.

-Ahora están más alertas... Pero debió pasar esto para que... - Akeno no supo ni que decir. – Es tanto que entender, tanto que... quiero decir y que quiero sacar. Esos malditos... no hay escrúpulos en sus acciones. Solo presionan el gatillo y ya... Es como si...

-No les importa. Si, así es. No lo hacen. – Yang miraba su prótesis. – Con esto, está claro que estamos en guerra. No solo como un equipo, sino como un bando total. Y vaya que estamos en medio de esto.

-Creo que eso ya lo sabíamos desde el principio. Sólo que esta vez, hemos visto las cosas como son. Con pruebas. – AJ no sabía ni que decir, como humana, sabe que esto es cruel para los que no saben nada de lo sobreantural.

-Pero... lo que me tiene en alerta es que se acercaron a Rossweisse-san incluso hasta el punto de correr un riesgo si el plan no salía bien... Supongo que esto muestra cuánto toman el ensayo escrito por Rossweisse-san durante su tiempo como estudiante como información crucial. Pero... ¿Qué tiene que lo hace tan valioso? – Ravel dio su opinión, como estratega, sabe que este trozo de información no puede quedarse en el aire.

-Creo que eso es algo que yo puedo responder... - Azazel supo que era el momento de decir lo que habían logrado descubrir estos días. – Ya deben de haber oído que... algunos magos han desaparecido, ¿no? Es algo que Gondur tocó brevemente, ¿no? Lo menciono... Sí. Dando un resumen de todo... Hay una similitud entre los incidentes. Todos ellos son hacia aquellos que habían estado investigando "el número de la bestia", 666. Y eran investigadores que habían estado investigando desde otro método al general. Aparentemente, los que vendrán a la asamblea serán ese tipo de investigadores.

-Minuto... ¿Secuestran gente que sabe del 666? ¿Qué ganan con eso?

-Mucho Rias... Puedes imaginar qué tipo de sello se ha usado si conoces el contenido del Apocalipsis y el Dios de la Biblia. Sin embargo, llegué a la conclusión de que hay 23 sellos poderosos diferentes que esos tipos de Qlippoth pueden tener dificultades para abrir. Actualmente estamos teniendo una conferencia aquí y estamos calculando cuánto tiempo nos queda hasta que se libere el 666 calculando a partir de esa información. No tenemos intención de dejar que esos tipos traigan de vuelta el 666, pero sí tenemos que prepararnos para lo peor.

-Pero... Eso significa que estamos en una carrera contra el tiempo, si logran romper los sellos...

-Tranquila niña... se está haciendo planes... para varios casos. – Azazel detuvo el ataque de nervios que Ruby estaba teniendo. Miro de modo discreto a Rean, quien negó con la cabeza. – Les diremos más luego... Ahora quiero hacerte una pregunta Rossweisse... ¿Cuál era tu teoría?

La mujer no prestó mucha atención a lo que dijeron, su mente aún tras lo último... miraba su mano, aun sintiendo el peso de la vida que se fue... Y ella... Sacudió la cabeza, tratando de captar la información que su cerebro le manda... Hasta por esa investigación, una amiga fue...

-Lo investigué usando el número "616" que tiene un enfoque diferente. Utilicé ese número para compararlo con los documentos e incidentes que ocurrieron dentro de cada fuerza mientras hacía una fórmula numérica y una fórmula técnica. Me pareció... tonto al inicio, pero con el paso de los días y las investigaciones, vio que había algo en lo que estaba investigando.

La cara de Azazel y Emma mostró una clara sorpresa, una que fue... rota por Celine al sonreír por lo que acaba de oír.

-Brillante. Cuando muchos de los investigadores del Apocalipsis se centraron en el número 666, una parte de los magos aparentemente utilizó el enfoque diferente de usar el número 616 para investigar al respecto. Los que habían sido secuestrados para este incidente investigaron sobre el "número de la bestia" usando el número "616". Tenemos una pista, una muy clara.

-Si. La mayoría de los investigadores no ven el número "616" como la forma correcta. Incluso nosotros, en Grigori, pensamos que sí. ...... Pero al ver a esos tipos hacer su movimiento, ¿el Dios de la Biblia hizo sus sellos contra 666 usando el número "616".....? – Azazel empezó a pensar en las posibilidades, en... - Muy bien, antes que nada, Rossweisse. Escribe todo lo que recuerdes sobre el ensayo que escribiste cuando eras una estudiante en una hoja de papel y dáselo a Grigori. Yo mismo comprobaré para ver cuánto está relacionado con 666.

Rossweisse no dijo nada varios segundos... Alzó la vista, mostrando la clara rabia que sentía.

-¿Ahora...? ¿Quieres que escriba eso ahora? – Parece que el caído supo que... debió esperar. - ¿¡Quiere que me ponga a escribir algo cuando hace menos de unas horas uno de mis estudiantes murió en mis brazos!? ¿¡Eso es lo que quieres que haga Azazel!?

EL grito de la chica bastó para que todos la vean con algo de dolor y miedo. Las lágrimas que Rossweisse derramaba eran muestra clara de que no estaba bien. Lo que pasó, la afecto demasiado.

-No fueron solo por Ise-kun... ¡Fueron por mí! ¡Todo por esa maldita investigación! ¡Todo por algo que no sé si es verdad o no! ¿¡Eso valen las vidas de miles!? ¿¡Una puta investigación!?

.... Nunca la habían oído hablar así. Nunca. Pero mostraba que estaba dolida. Demasiado.

-¡Si es así, bien! ¡Les daré mi investigación! ¡A ver si así logramos hacer algo bien! ¡Porque claramente fallamos en lo que nos habíamos propuesto! ¡Vaya protectores que somos! ¡Si hubiera sabido que lo que investigue iba a ocasionar esto...!

Con eso dicho, Rossweisse se puso de pie y fue corriendo a su habitación, ignorando las voces de Rias y las demás... Solo se oyó el sonido de la puerta cerrarse con fuerza y tras unos segundos, oír los sollozos de ella...

-Creo... que lo mejor será irse a descansar. No... No creo que logremos algo. – Kiba daba un buen punto. No había nada más que hacer...

-Sí... Ahm... Llámennos si... ahm... Pasa algo. – Gasper se despidió de todos, en especial de Fluttershy, para luego ir con Kiba a la salida.

Tras unos segundos, el silencio se volvió más incómodo para todos.

-Mejor descansamos. Ahora. Le diré a Sona lo que ha pasado. Veremos que nos dice, ya que pasado mañana debían de ir unos cuantos a su escuela. – Rean miró al equipo RWBY. – Lo mejor es que Blake se quede aquí. Para que traten sus heridas.

-Pero...

-Sin peros Yang. No entra en discusión. – La rubia no pudo decir más. – Asia llévala a dormir contigo. Por si tiene dolencias en la madrugada.

-O-Ok. Vamos Blake... Tratare tus heridas luego de limpiarlas. – La rubia tomó la mano de la chica, quien solo se dejó llevar. No tenía fuerzas para nada...

-Fluttershy... ve a ver a Rossweisse. Cura sus heridas. Se dura de ser necesario.

-De acuerdo. – Fluttershy obedeció las palabras de Rean en serio y se fue al piso superior.

-El resto... a descansar. Ya. Deseo hablar con Ise y Emma de algo.

-Pero Rean-san, nosotras...

-Ahora. – Twilight fue incapaz de... seguir con su obvia queja.

Ella y todos los demás se vieron obligados a hacer caso. Azazel se retiró por el día de hoy, al igual que las mujeres adultas se fueron a descansar, siendo Ruby, Weiss y Yang las últimas en irse. La líder del equipo RWBY tomó la mano de Ise en un intento que sienta que ella lo apoya. El gesto fue devuelto por el muchacho, quien seguía viendo el suelo. Pero había fuerza en su agarre, mostrando que él... La chica le susurró algo y se fue con su hermana y amiga a su casa. Y al final solo quedaron Ise, Emma y Celine con Rean en la sala.

-¿Cómo puede romperse la maldición? – Rean hizo la pregunta, sabiendo que hay una respuesta.

-Solo hay un modo.... Debe superar al que le lanzó el hechizo. Eso quiere decir, debe derrotarlo. De cualquier modo. Pero debe ser en una pelea. La voluntad de Ise debe destruir la de Euclid. Esa es la única salida que él tiene... Pero...

-Eso bastará Emma. – Rean sabía que esto era algo que Ise debe decidir. – Escucha Ise. Sé que estas molesto, te sientes culpable. Pero Euclid cree que esto te derrumbara. Que la muerte de esa gente te destruirá y estar ciego te hará ser miserable. – Rean tomó la mano de dragón del muchacho. - ¿Quieres que ese mal nacido sepa que ganó? ¿Quieres que viva su vida sin saber lo que es hacer enfurecer al Sekiryuutei?

La respuesta que obtuvo fue la que esperó, la mano de Ise apretando la suya. Emma vio algo en el aura del muchacho, algo que estaba tratando de despertar. Estaba ahí, pero necesita... un poco más para ser libre. Celine por su lado sonrió, sabe que el muchacho ha sufrido más por lo que ha pasado, más por su responsabilidad de líder del DxD. Pero... ahora sabe que este es un tema personal... para él.

Rean sonrió al ver los ojos de su alumno. A pesar de no tener luz, podía ver ese fuego que lo caracteriza. Ese, que puede dar calor a quienes ama y destruir a los que merecen su ira.

-No será fácil. Estas ciego. Pero eso no te hace incapaz de luchar. ¿Sabes a que me refiero?

-.... Maestro... Quiero iniciar la fase final... la fase final del Estilo de las Ocho Hojas. – Esa fase la había estado evitando porque no se sentía listo, pero ahora... necesita de todo lo que puede para ganar. De todo.

Y Rean lo sabía... Era la hora.

-Entonces ponte de pie. Tenemos mucho que cubrir. – Ayudo al muchacho a ponerse de pie, para ayudarlo a caminar al sótano. – Ustedes, descansen. Mañana hablaremos.

Emma y Celine vieron a ambos caminar hacia el sótano... listos para dar la última fase del entrenamiento. Ese, que solo se hace cuando el Maestro siente que el alumno, está listo para tener su propia Maestría.

-¿Lo lograra...?

-Viste sus ojos Emma... Esos ojos... Euclid acaba de cometer un error. Le ha dado a Ise el impulso que necesitaba. Y no dudo, que cuando sea el momento... ese demonio deseará haberlo matado cuando tuvo la oportunidad.

Y Celine, lo veía en esos ojos... Ise estaba siguiendo el camino de ser una existencia que lo pondría a la par del Rey Supremo... en eso de dar miedo a sus enemigos. Un Dragón que se baña en la sangre de los que... se oponen a él.

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La noche no estaba siendo amable con ella. Blake seguía despierta a pesar del cansancio que su cuerpo obviamente sentía. Estaba aún en la cama que Asia tenía como extra en su habitación.

La chica había tratado sus heridas sin hacer preguntas innecesarias. Algo que ella agradeció, el gesto bastaba para ella. Mucho, porque en verdad no quiere... decir algo que al final, sabe la quebrara.

EL dolor en su cuerpo era natural, las quemaduras y las heridas eran más que... vagas. Porque el dolor verdadero yace en su corazón. Recuerda los días en que... creyó que el grupo que acaba de matar un gran número de personas, una vez pensó en hacerlo todo de pacífico. Sí, todo cambió cuando él tomó el mando. Y ella, una estúpida enamorada, solo aceptó lo que pasaba... Todo.

Le daba asco recordar esos momentos donde ella... ¿Se supone que así es como recuerdas tu primer amor? ¿La persona con la que... tuviste intimidad? Duda que sea así. Y hasta deseaba poder olvidarlo.

Se levantó de la cama, su yukata negro para dormir no muy bien puesto. Mostraba algo de sus pechos y... Si, no es una vista que le desea dar a nadie. Necesita agua... Necesita... pensar. Y la oscuridad de la noche la puede ayudar. Salió de la habitación de modo lento y silencioso, sin notar que Asia miraba su figura salir.

-Espero que pueda hallar la paz que tanto busca. – La chica se volvió a acostar, porque sabe que ella no es esa persona...

...

Blake agradecía haber pasado unos días en esta casa, al menos no se ha perdido en busca de la cocina o de las escaleras. Pero al escuchar dos voces, se escondió tras la pared, costumbre que hasta la fecha... no la deja.

-Lamento que te hayas quedado viendo como me apalean Ophis.

-No Ise. Se ve que quieres mejorar.

Se asomó un poco para ver que, Ise y Ophis estaban sentados en el sofá de la sala, el que quedaba tras el ataque de rabia del Sekiryuutei. EL Dragon God le estaba dando algo, una galleta. El muchacho sonrió al sentir el deseo de la chica de querer ayudarlo.

-No es necesario...

-No has comido. Y Rean te ha hecho pelear con él, sin ver, estabas en una clara desventaja.

El Sekiryuutei sonrió algo... complicado. Sí, le costó seguir el ritmo al inicio. Pero logró hacerlo cuando al fin captó su limitación. Era raro sentir cosas que antes no cuando tenía la vista. Tal vez aprenda algo de todo esto.

-Me iré a dormir Ise. No quiero que Sunset se preocupe por mí.

-Ophis... - la chica se detuvo al escucharlo. – Lilith... ¿Qué piensas de ella?

Blake vio como Ophis no cambiaba su expresión. Estaba inmutada, pero... Ella pareció pensar sus palabras, su respuesta.

-Mientras ella sea el enemigo de Ise, de los demás, es la mía. La detendré yo misma de ser posible.

La chica vio como Ise se mostró, preocupado. Era... Él no quería que ellas lleguen a eso. No quiere verlas luchar.

-No debes hacer ello. Hare que ella venga a nuestro lado Ophis. Hare que ella... sea una amiga para ti, para todos. Porque se lo prometí. – Ophis mostró una ligera sonrisa a las palabras de su amigo, su primer amigo.

-Porque nunca rompes una promesa. – Ophis vio que Ise se mostró complicado. – Lo que paso hoy... no fue tu culpa. He visto muertes en mi estancia aquí, que se me hace raro, el pensar porque muerte de gente que no conozco, me puede molestar. Pero, ahora sé, que es porque... les duele ver la crueldad que otros hacen. El dolor que se produce. Y creo... que esa empatía, es algo que hace a los mortales, seres que... pueden conectarse.

-Ophis...

-No estoy segura. Pero... Creo en que puedes salir de esto. Y serás más fuerte... Tienes lo que se necesita. Solo no olvides eso que sientes Ise. Porque te hacen tú. Y eso me hizo ser tu amiga.

Blake se sorprendió al ver la sabiduría que había en las palabras de Ophis, quien a simple vista, pareciera no saber nada de lo normal o común, pero se ve que ella... ella puede lograr sorprender al haber visto más que todos ellos. La chica le deseo buenas noches al chico y camino hacia las escaleras, pero al ver a Blake, solo le sonrió, como diciendo que vaya y hable con él.

La chica no supo que decir o como reaccionar, la imagen de Ophis en su cabeza era distinta a la que acaba de ver, pero eso demostraba que las apariencias y las primeras impresiones, no siempre son lo que uno esperar o como es la persona en verdad.

Blake tomó aire y camino hacia el sillón de modo silencioso... No esperando que Ise supiera que era ella quien se acerara. Pero...

El Sekiryuutei captó algo... un olor. No era el que estaba acostumbrado, Rias huele a tulipanes, Twilight huele a violetas... con algo de libro viejo debido a su pasión por leer. El de las demás menos, no es que se centre en el olor de todas las chicas que viven en su casa, pero... su sentido del olfato era desarrollado y este olor... Sabía quien era...

-¿Blake?

Al oír su nombre, ella se detuvo y lo vio con sorpresa... ¿Cómo...?

-No era que estabas ciego...

-Lo estoy. – El Sekiryuutei rio al escuchar el tono de sorpresa de la muchacha. – Pero supe que eras tú...

-¿Cómo? Mi entrenamiento me ha hecho dar pasos de modo sigiloso, casi nulo. ¿Lograste oírme? – Se sentó al lado de él, solo para ver que este se ponía nervioso y se rascaba la nuca. – Ise...

-Ahm... Sonara mal si te lo digo de este modo, pero... ahm... Fue... tu olor....

-... ¿Perdón? – no supo porque sintió un ligero calor en su cara. Tal vez sea su instinto animal, por instinto estos aprecian que los capten por su olor. Pero otro lado, ¿olerá mal?

-Ahm... No es que huelas mal. Hueles bien... ¡No! ¡No de ese modo que tu olor es excitante! ¡No que no lo sea! Es que... Ugh... - Verlo llevarse las manos a la cara, solo le sacaron una ligera risa. Una que él vio con algo de fastidio. – Hey...

-Lo siento... Es solo que, verte tratar de excusarte, me hizo recordar a un chico que quiso coquetear con Ruby, diciendo que olía a galletas.

-Supongo que acabó mal...

-Mucho. Yang estaba ahí. El pobre no supo en que se metió. Pero no creas que me olvidé de que hablaste de mi olor... ¿A qué te refieres? ¿Huelo mal? Porque te juro que...

-NO... Es que... No creas que es por tener un fetiche por el olor de una chica, es que... cada una tiene un olor distinto... Es... bueno... lilas...

-¿Eh?

-Hueles a lilas... Lo sé porque... bueno... mi sentido del olfato está muy desarrollado, más con este cuerpo. Y bueno... ahora que no veo, se ha visto más fuerte. Lo lamento...

¿Por qué se lamenta? No le ve el sentido. Es más, jura que... él... Bueno. Sería la primera vez que alguien le dice que huele a sus flores favoritas... Que femenino salió eso y ella es la que debe ser la menos femenina del equipo RWBY. Ugh, vuelve a lo central...

-¿Cómo estás? ¿Estuviste entrenando hasta hace poco?

Ver como habían vendajes en el cuerpo del chico, la hicieron preguntarse... el como lo hace.

-Bueno. Necesito todo el poder necesario para poder hacerle frente a Euclid. Tarde o temprano, él dijo que nos veríamos de nuevo. Y sin mi X-Pulse, solo me quedan mis demás sentidos. Ni puedo pedir ayuda de Skeith y Himmel.

-¿Por qué? Tú fuiste el que perdió la vista. No ellos.

-Porque... Sea lo que hizo... Afecto también mi nexo con ellos, están ligados a mí. Mi vista, es la de ellos. Ddraig me puede ayudar, pero él mismo admite que es una limitación el ser los ojos de alguien más en medio de la pelea. Y tengo los moretones para corroborar ello.

No entendía el porque se esfuerza tanto. ¿Desea demostrar algo? No. Pareciera que solo quiere... no sentirse mal consigo mismo. Que no desea, verse como un fracaso.

-¿Cómo lo haces? ¿Cómo puedes lograr seguir adelante tras tanto dolor? Viste lo que hizo... Viste lo que hicieron. La gente que murió. Sé que te debe doler. ¿Cómo puedes...?

-Créeme... Lo sé. Yo... Es más, mi propio sentido de culpa diciéndome que pude hacer más. Que, si hubiera reaccionado de otro modo, quizás pude evitar que esto pasara. Pero al mismo tiempo, mi experiencia me hace ver que... tal vez solo pude empeorar las cosas. No lo sé. Lo único que tengo claro en estos instantes, es que no puedo obviar el deseo de Euclid de querer hacerme pedazos antes de nuestro combate. No le daré ese gusto. Haré que pague lo que hizo... Lo que le hizo a Yang, como sus acciones mataron a la mamá de Ruby... Lo que Grayfia siente, todo... Haré que desee no haber nacido.

Si... se veía en su expresión... fuerte, firme... a pesar de que hace unas horas, grito y lloró como cualquiera lo habría hecho tras lo que paso. Ella lo hizo horas, aún debía pedirle perdón a Asia por el desastre que hizo en su falda cuando... ella la dejó llorar en sus piernas. Pero... ¿Podía ser igual de fuerte que este chico? ¿Puede... superar el dolor que tiene?

-Yo... White Fang... Es mi culpa.

-¿Por qué dices eso? No fuiste tú la que hizo explotar la bomba.

-No... Pero yo... Yo hice actos así en el pasado. No creas que no sé en que se ha convertido White Fang. Sé que... es algo que no puedo negar por más que quiera. Pero... Antes, todo era más sencillo. Sabes... Me pregunto aún ahora, ¿Dónde quedó eso? ¿Dónde quedó ese deseo de querer crear un futuro mejor para los que son... como yo?

-Blake...

-Sabes... Mi papá y mi mamá... ambos son Hanyous, raro ¿no? Ambos... tuvieron suerte de conocerse. Porque tuvieron una vida algo solitaria. ¿Lo sabes no? Los pocos que son híbridos, no pertenecen a ninguno de los lados del que se originó. Ni el humano, ni el sobrenatural. Por lo que... es normal estar solo. Pero un día... mi papá, cuando yo nací, quiso crear algo mejor para mí. Que no viva la discriminación como él y mamá la vivieron. Por eso... creo White Fang. Donde los híbridos marginados o los de otras razas que recibieron el mismo trato, se unan.

-¿Tu padre creo a...?

-Si. Pero no era lo que es ahora. Originalmente, inició como una organización de ayuda a los que sufrían de discriminación, algo que es común ahora en las filas de la organización. Y... al inicio, eran protestas pacíficas contra pequeñas fuerzas de poder de diferentes facciones, en busca de una mejora de trato... Pero...

-Pero nada cambió, ¿no? – Blake no dijo nada unos segundos...

-Cuando cumplí 10... vi lo que pasaba. Como las cosas no mejoraban. Cuando cumplí 13, mi padre dejó el liderazgo. A los 14, hui de casa para seguir a lo que White Fang se volvería ahora... Contra el deseo de mis padres. Contra mis principios... porque creí que estaba creando algo mejor. Porque... creí en las palabras de él, a sus 18 años... quien tomó las cuerdas cuando mi padre dio un paso al costado... Todo porque... Creí que lo amaba.

-Adam Taurus... - Los ojos del Sekiryuutei se pusieron serios... - ¿Cómo era él? Lo poco que lo conocí, en medio de la pelea, estaba loco. Hablaba que los humanos debían ser... eliminados o ser esclavos. ¿Qué lo hizo así...?

-La verdad... No estoy segura. Una vez me dijo fue por lo que unos humanos le hicieron, dejándolo ciego de un ojo. Tal vez sea eso... Pero... Adam era... un líder y un símbolo. Sus habilidades y logros estaban... haciendo un cambio. Se vio una mejora inicial, por el miedo que enfundábamos con nuestras acciones. Robos, vandalismo... pero escalo a puntos que... Muerte. Destrucción... a eso llegamos en un punto. Todo porque Adam perdió el rumbo. Y no importa cuanto lo intenté, no pude hacer que viera las cosas como eran. Hice de todo... Todo...

El Sekiryuutei no tuvo ni que preguntar a qué se refería. Se da una idea, más al oír el tono de la muchacha.

-Sabes... Una vez, me dijo que lo entendería. Que las muertes tendrían sentido cuando... cuando lográramos un mundo mejor para nosotros. Pero no lo hice. Mientras más veía, más me horrorizaba. Le pedí mil veces que deje esto, que podría haber otro modo. Pero no lo hizo... vi con dolor como el hombre que creí amar, volverse el peor de los monstruos por un deseo de venganza que siempre lo impulsó tras esa máscara de buscar el cambio y la mejora.

Ise no pudo decir nada... sí, lo recuerda bien. Esas palabras...

-¿¡Qué sabes tú!? ¡No sabes lo que es vivir marginado y que te odien por lo que eres! ¡por eso haré que esos humanos entiendan su lugar! ¡Que deben estar en lo más bajo! ¡Y que los de arriba nos vean cómo lo que somos, superiores!

Que idiota. Eso fue lo que pensaba al recordar las palabras de un hombre que nunca se tomó el tiempo de recordar. No le parecía importante, porque... su ideal era dañino. Ridículo. Destruir una raza entera, le hizo recordar a la idea de Cao Cao. Le hizo recordar... el genocidio que este quería traer. Y eso lo ponía de malas.

-Un día, no lo soporté más. Vi que nada de lo que hacía lo haría cambiar de opinión. White Fang se había vuelto una organización criminal y terrorista, donde los que no estaban de acuerdo... eran eliminados. Por eso, un día... aproveché el caos que hubo a un ataque a un pueblo en los límites de China, hice que una de las bombas que iban a usar, explotara antes de que de inicio al plan... y hui. No sin antes ver que había manchado mis manos con los que una vez, llamé amigos. Y eso es algo que no puedo olvidar... Hui a Francia, en busca de algo que me dé una pista que seguir. Fue en esos días, que oí de la red de contactos que tenía, que White Fang había sido derrotada por un grupo pequeño, pero que logró evitar un desastre mayor. Pensar que eras tú y tu grupo...

-Ayane... ella había recibido uno de sus encargos. Era una misión peligrosa y... por eso fuimos, no la podíamos dejar sola. Fue nuestra primera misión como grupo, ya que sólo hacíamos cosas pequeñas. Esa... fue mi primera misión real. Tenía 15... y recuerdo bien lo que pasó ahí. En esos días... creo que no me importó la muerte que lleve con mi espada. Sólo quería... evitar que mataran a gente que no sabía nada... que eran ajenos al mundo Sobrenatural. Y cuando pelee con Adam, admito que era un guerrero excepcional. Pero... estaba tan lleno de odio e ira. La batalla... duró menos por eso, no porque fuera débil. Pierdes los estribos en una pelea y esta acaba antes de que inicie.

Blake vio la expresión del Sekiryuutei, vio algo de... dolor y tal vez arrepentimiento. Pero lo dejó pasar...

-Luego de ello, fui a la Academia Beacon que está a los bordes limítrofes de Italia. Ahí conocí a Ruby y las demás... les conté mi origen cuando tuvimos nuestra misión. No me odiaron por eso. Weiss sólo me dijo estúpida por... pensar que algo así, del pasado, la haría actuar de otro modo. Siempre tan orgullosa... - Ambos rieron un poco. – Luego de ello, mi vida mejoro. Vi cosas que debí a mi edad. Relaciones, fiestas... todo. Claro, tuve que evitar que Yang se fuera de fiesta todas las noches. Con Ruby... es difícil de tratar, pero la aprecio. Con Weiss... a veces quiero ahogarla en un estanque de agua. Jajaja... pero... me sentí feliz por primera vez en años. Hasta ese día... el ataque... y fue como ver que... nunca huiría del pasado... por eso yo...

-¿Lo intentaste? – El silencio que obtuvo fue respuesta suficiente. - ¿Cómo...?

-Primero trate de cometer Seppuku... pero no pude... al imaginar el dolor que... me acobarde. Luego... - La chica mostró su muñeca derecha y se veía la cicatriz del corte que se hizo. – Me corté la muñeca con mi propia arma... Yang... ellas me encontraron desangrandome en el baño de uno de los hoteles que... usábamos para refugiarnos los primeros días. Je... cuando vi que fallé... primero sentí... nada. Había fallado en algo más... pero cuando vi las lágrimas de Ruby, hasta las de Weiss... supe que había hecho mal. Y el golpe de Yang me hizo entenderlo más. Me dio dos, uno me rompió la nariz. – trató de decir eso con humor, pero no era fácil. – Es más... creo que las cosas se pusieron tensas entre nosotras un tiempo. Y no la culpo... me quise matar. Quise que todo acabará... quería... no sentir nada... estaba cansada de ver... que siempre acabo mal. No importa que decisión tome.

Ise no veía, pero podía imaginar a Blake llorar. Su tono y demás, la hacían vulnerable a sus ojos. Una mujer que se ve fuerte, imperturbable a primera vista, era muy frágil. Había fallado en todo... su misión en la vida, en el amor, en empezar de nuevo... por eso buscó esa salida. Porque se sentía atrapada.

-¿Y ahora viene esto...? ¿Acaso no puedo nunca... dejar el pasado atrás? Murió gente por culpa de personas que llamé amigos. ¿Está bien eso? Estoy harta Ise... No puedo... no sé qué hacer para...

Blake se detuvo al ver al Sekiryuutei empezar a quitarse la casaca que tenía y luego el polo. El mal pensamiento que tuvo se fue al ver su cuerpo. Sí, estaba bien marcado, pero las cicatrices que tenía no eran normales. Más al ver la que tenía en el pecho...

-Cuando perdí mi cuerpo y me hicieron este... pedí que dejaran las cicatrices... porque eran un recuerdo de lo que... pasé y aprendí. – El muchacho señaló una en el abdomen. – Esta me la hizo mi maestro cuando iniciamos... Me dijo que esté preparado para morir, porque esta es la vida que me tocó, pero no significa que la deba aceptar así como así. Que luche y viva. Esta de acá, me la hice en mi pelea con Vali. Me lanzó una estaca de luz y no sabes como duele... jaja... - Blake miraba cada una de las marcas... de una vida llena de dolor y sacrificio. – Cada una, tiene una historia. Pero es la del pecho la que... tiene su lugar especial.

Blake vio la cicatriz en el pecho del muchacho. Era... extraña. Parecía haber sido hecha por dos armas.

-Cuando me mandaron a matar de niño... la lanza me la clavaron aquí. – el jadeo que escuchó le dio pase a seguir. – No sabía que pasaba. Sólo pensé... que no quería morir. Y me salve más por milagro que por otra cosa. Luego de ello... mi historia es la que muchos conocen. Pero... hay un punto en que caí en lo más bajo. Y fue cuando perdí el control... cuando me dejé hundir en la Ruina a cambio de poder para la venganza.

Blake vio algo que nunca esperó en él. Cansancio... mucho.

-Tú lo intentaste Blake. Pero yo lo logré... me atravesé el corazón con la espada de mi maestro cuando supe que había caído por el mal camino. Quería que acabara... quería morir. Porque sólo estaba dando dolor a todos. Y lo logré... me tuvieron que revivir dos veces... y eso fue más suerte. Mucha suerte... - Ise sintió la mano de Blake tocar la horrible cicatriz... una que aún tras tanto tiempo, da dolor... a él. A ellas... - Pero... Pero no conté con que, en el fondo, aún quería vivir. Aun quería luchar... quería estar con mis amigos. Con quienes son importantes para mí. Ese día, entendí que el pasado ya ocurrió, que el futuro es muy incierto... pero el presente es un regalo que todos tenemos cada día. Que estar aquí, en este momento, vivo, es el mejor regalo que le puedo pedir a la vida. Y ahora lo sé mejor que nadie...

Ise pudo sentir la mano temblorosa de Blake en su pecho y la tomó con su mano derecha, llena de escamas, pero ella no mostró asco.

-No sé que decirte para que te sientas mejor. Porqué sería hipócrita de mi parte decir que lo que hiciste estuvo mal, cuando yo lo hice. Pero estas viva... Por tus amigas, por una fuerza superior, no lo sé... Pero estas aquí. En este momento. Y eso te debe bastar para entender que... puedes mejorar las cosas. Que puedes ser mejor. Sí, tal vez te equivocaste en varias cosas. ¿Quién no? Pero lo deseas remediar. Quieres ser mejor... quieres... ser libre. ¿Recuerdas lo que te dije que Himmel siempre decía? El futuro es de los que tienen el valor de luchar por él. Pues, esta es tu oportunidad... tu oportunidad de luchar por tu futuro libre de culpas. Libre de los pecados que has hecho. Porque yo vivo cada día luchando para dejar de sentir culpas. Sólo ten valor Blake... no estas sola. Nunca lo has estado... y tienes la suerte que otros no tuvieron en su momento.

-Ise.... Yo...

-Es más. Hasta yo puedo ser un oído amigo. Nunca sobra... Sé que te cuesta... pero no quiero que sufras por culpa de gente que no lo vale. – El Sekiryuutei tocó el hombro de Blake, sintiendo el temblor que este tenía. – Soy tu amigo. Y estaré ahí para ti, cuando me necesites. No importa donde y cuando... estaré para ayudarte.

No supo cuando, al estar ciego, pero sintió algo en su pecho. Luego sintió humedad y oír los sollozos de Blake, que se hicieron más fuertes, lo hizo abrazar el cuerpo de esta chica. Una que parecía sacar todo el dolor que tuvo guardado.

-¡Yo...! ¡Yo sólo quiero que las cosas cambien! ¡Quiero ver igualdad! Pero... ¡No así! ¡No un futuro creado por una pila de cadáveres de inocentes! ¡Yo...! ¡Lo siento tanto! ¡Nunca desee esto! ¡No quiero seguir viendo algo así! ¡Quiero...! ¡Quiero ser libre de esta culpa que tengo! ¡No es justo! ¡No lo es! ¡Los veo! ¡Sus caras, sus muertes! Quiero que pare... ¡Quiero...! ¡Quiero ser mejor! ¡No ser la cobarde que fui tantos años! ¡Quiero ser yo al fin!

El Sekiryuutei sólo dejo que la chica siga soltando el dolor y la culpa que sentía. Y él sabía... que era lo que ella necesitaba. Sabe que... no será fácil. Pero cree que ella puede cambiar... si él pudo. Porque ella no...

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En una parte del mundo humano, Cao Cao estaba caminando por las calles con Starlight. Ambos estaban en un pueblo que... ella conoce muy bien. En Rusia.

-¿Segura que ella está por aquí?

-Creo que sí. Su banda y ella cambian de lugar cada cierto tiempo. Es más, si no está... hallaremos pistas. – Cao Cao negó con la cabeza, lo que le faltaba... - Oh vamos. No seas mal humorado.

-Temo que sea una pérdida de tiempo.

-Claro... ¿Es eso lo único que te molesta?

El muchacho no dijo nada. La verdad, estaba cansado. Mucho. Pero está haciendo esto como un medio de hallar su propio propósito. Al menos eso es lo que desea creer.

Starlight suspiró al ver la expresión de este chico. Sigue confundido, aún no sabe que puede hacer con su vida. Es extraño... Pero al menos, no está planeando en hacer ataques genocidas. Parece que su tiempo en Reino de los Muertos lo ha ayudado de algún modo.

Fue en eso que se detuvo frente a una tienda de electrónica, no era raro que muestren las TVs en oferta por las fiestas. Pero lo que llamó su atención fue... que las noticias CNN estaban mostrando.

-Ahm... Cao Cao. Creo que quieres ver esto.

El chico detuvo su andar, alzó una ceja y caminó hacia donde estaba la muchacha. Vio la pantalla y se sorprendió al ver lo que se decía.

"Ataque terrorista en Shinjuku". Eso lo hizo ver algo que no esperó... Sí, ni era raro que haya esta clase de ataques en el mundo humano. Pero por alguna razón, sentía que había más. Ya que según lo que se ve, nada es claro y no hay sospechosos de ninguna clase. Eso lo puede hacer todo aún más... complicado.

Ver el caos que se generó por las acciones de esos sujetos... le hizo ver sus propias acciones en el pasado y lo que ocasionaron. Y eso...

-¿Puedes comunicarte con Sakra-sama?

-Si. ¿Qué tienes en mente?

-Lo de la Spring Maiden puede esperar un poco. Ahora mismo necesitamos saber que pasó exactamente ahí. – Starlight asintió, era un buen plan. – Es más... creo que iré a ver a viejos conocidos. Ellos pueden tener información que nos sea útil.

-Oh, hablas del que te dio ese ojo de Medusa. Sí... Admito que puede ser útil. Más si ahora estamos a ciegas.

Ambos empezaron de nuevo su caminar, con una meta algo más clara. Sólo necesitan recolectar la información necesaria. Y de ahí, darán su siguiente paso.