
Hermanos Mayores
Aj estaba mirando a su oponente y lo que estaba planeando. Ya sabe que él crea bestias basadas en la mitología egipcia en base a la arena que hay en el lugar. Miró a sus lados, hay una gran cantidad de arena en el lugar por lo que... el tipo tiene recursos ilimitados.
Cuando empezaron a emerger de la arena esas esfinges que hasta hace poco la habían molestado en el laberinto tuvo unas ganas de gritar de la rabia y del colerón que le estaba a punto de dar. Cuando vio que unos seres muy similares a unos perros pero estos eran muy grandes... ¿Existían animales así en la mitología egipcia?
-Ok... en serio...Llevo más de 3 horas huyendo de animales de esa clase y me vienes a crear más para pelear conmigo. – La rubia habló con sarcasmo pero al mismo tiempo con fastidio. - ¿Por qué mejor no luchas conmigo cuerpo a cuerpo?
-No le veo lo conveniente en pelear contra ti en un área en la que te desenvuelves mejor. – Mahad camino a paso lento hasta al lado de las bestias que había creado. - ¿Iniciamos?
Uno de los perros fue hacia Aj quien al tener al animal cerca sólo le dio un golpe con tal fuerza que este se volvió arena de nuevo. Inmediatamente, la rubia dio un salto al costado para ponerse a la par de las esfinges que iban hacia ella.
Cargó fuego en sus manos y lanzó ráfagas de este hacia las bestias que a pesar de recibir el impacto en la cara... seguían avanzando, debió de suponer que esto no iba a ser tan sencillo. Lo notó más al ver que una de esas bestias caninas saltó hacia ella para morderla, por instinto alzó el brazo y este fue mordido con fuerza.
Aj sintió que los colmillos de esta cosa le estaban apretando los huesos y le iba a desagarrar el músculo. Con un giro, para aprovechar la fuerza de este, Aj mandó a volar a ese animal hacia otro que iba hacia ella para luego darle una patada hacia la esfinge que iba hacia ella desde atrás. Ese acto bastó para alejar a las bestias que estaban cerca de ella unos segundos porque decidieron replantear su plan de acción.
La chica sacó uno de los vendajes que tenía y se vendó el brazo lo mejor que pudo para detener la hemorragia, suerte que estas cosas no tienen veneno en sus mordidas. Aj al sentir en algo el cese del dolor se puso en guardia de nuevo. Mahad esta vez ordenó a la esfinge más grande, esa que tenía cabeza de carnero, a atacar.
La bestia hizo caso inmediato y fue contra la chica que se puso en guardia. Esperó y esperó lo que se le venía que sabía que era un ataque directo hacia su cuerpo, los cuernos de esa cosa deben de doler como los mil demonios. Esperó y esperó hasta tener las astas de esa cosa a su alcance para alzar ambas manos y así detener el avance del animal con fuerza bruta. Sus manos atraparon las astas del animal para luego usar fuerza y hacer que esta dé un giro y caiga de espaldas, sin ninguna posibilidad de que se mueva o se recupere debido a su tamaño y anatomía, Aj piso la cabeza del animal y con pura fuerza bruta le arrancó una de las astas para luego usar esta misma para clavársela en el ojo, matándolo de modo definitivo.
Mahad se mostró sorprendido al ver la muestra de fuerza de Aj y como mató a la bestia sin mucho remordimiento. Analizó a la muchacha y pudo notar que en un combate uno a uno era imposible derrotarla. Tanto sus bestias como él...
-Admito que subestime un poco tu fuerza. – Mahad se mostró algo molesto, no tomó mucho en cuenta la experiencia de la muchacha. – Me disculpo por eso.
-Je, mira... No es que me importe lo que digas o pienses de mí, ahora mismo somos enemigos ¿No? - Mahad sonrió a esas palabras para luego crear otra bestia idéntica a la que la chica mató. – Debe ser una broma.
Se vio rodeada de esas cosas nuevo, esta vez más que listas para atacar en conjunto que por separado. Deben aprovechar la ventaja numérica. Aj pateó y golpeó a esas bestias caninas que eran más persistentes que las otras, las esfinges eran obviamente las más fuertes pero eran la de menor número. ¿Acaso tiene un límite de lo que puede crear?
Sin darle mucha importancia a eso en este momento, Aj se puso en guardia luego de haberse deshecho de uno de esos canes. Con una patada mandó a volar una de esas cosas sólo para ver en frente de ella a un gran animal que parecía un grifo debido a la composición de su cuerpo pero...
La bestia dio una especie de rugido y se lanzó hacia ella tras alzar vuelo. Usando sus grandes garras que las sacó de las águilas, atacó a Aj quien esquivó el ataque del animal por los pelos pero no pudo esquivar el de esos perros ya que uno se aferró a su hombro con sus garras y colmillos. El grito que Aj dio bastó para mostrar el nivel de dolor que estaba sintiendo.... A pesar de la situación en que estaba, no se rindió y atacó con una patada a otra de esas cosas que se atrevió a tomarla desprevenida.
-¡Agh, maldito animal! – Aj tomó al can con su mano izquierda y con fuerza le aplastó el cráneo gracias al poder de fuego en sus guantes. El sonido de la muerte del can bastó para hacerla soltar su agarre y dejar caer el cadáver mientras el resto la veía con algo de miedo y hasta algo de... cautela.
Las esfinges no, ellas siguieron su ataque desmedido contra ella y eso era más que suficiente para mostrar que estaba en problemas. El que parecía un grifo alzó sus alas y con agitarlas, creó varias cuchillas de aire que fueron contra ella... el impacto pudo ser peor porque esquivó el impacto a último minuto. Con dificultad, Aj se puso de pie solo para ser embestida por una de las esfinges del lugar con todo su cuerpo.
Cayó al suelo y rodó varias veces antes de detenerse, estaba de rodillas debido al dolor que tenía en el estómago. Escupió sangre antes de pararse y ver que la bestia en frente suyo era... uno que tenía una apariencia más de león pero con alas... lo que faltaba.
La chica cargó fuego en sus manos para luego irse al ataque. Al tener a la bestia en el rango respectivo, la golpeó con una serie de patadas y golpes, estos fueron tales que la bestia quedó deforme antes de recibir la patada de Aj que la mandó a un lado del lugar. Al verse libre de la bestia enemiga y de que el resto de ellas iban hacia ella.... La chica puso sus manos en el suelo y creó un círculo mágico justo debajo de donde esas cosas venían y de este emergió un pilar de fuego. Las bestias recibieron el poder de las llamas y lo resistieron solo unos segundos... segundos que bastaron para que estas caigan derrotadas.
Aj tomó aire al sentir el cansancio pero se puso de pie para poder ir a atacar a Mahad pero este ya había creado más de esas cosas. Esta vez con unas grandes aves sobre él y unos leones con gran cuello.
-Oh vamos... esas cosas no son tan fuertes como deseas que sean, puedo acabar con ellas fácilmente. – AJ se puso en guardia al ver que más de esas cosas venían hacia ella.
-Es cierto, si comparo mis creaciones con las bestias reales... son muy débiles. – Mahada creó más bestias al ver que la mujer había acabado con unas cuentas. – Pero mi intención no es ganar en un combate corto.... – Creó más para reemplazar a las que habían muerto de modo reciente. – Sólo debo seguir haciendo esto hasta que te quedes sin fuerzas.
Aj pudo entender lo que quería decir, esta iba a ser una batalla de resistencia más que de poder o habilidad... Y sabe una cosa, tiene las de perder.
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-¿Qué haces Xenovia? – Irina estaba leyendo un libro mientras esperaba para luego pasar a ver a su amiga.
-Yo... sólo trato de usar o entender algo de magia. – Todos se sorprendieron al oír eso que... dejaron lo que estaban haciendo o su preocupación para quedársele viendo. - ¿Qué? Oigan, a mí eso me llama la atención también.
-No es por ofender Xenovia... pero no eres del tipo de personas que tengan la capacidad de usar magia tan fácilmente. – Aki dijo eso con una ceja alzada mientras Xenovia se mostraba muy ofendida por esas palabras.
-Pues perdón por no actuar como creen que soy. – La chica se cruzó de brazos molesta para luego suspirar. – Aunque no los culpo.
-Pero... ¿Por qué el repentino interés? – Rossweise hizo la pregunta, una que todos tenían.
-Porque... Porque Aj me derrotó en una pelea de práctica unos días atrás. – Todas la miraron con duda, era bien sabido que ambas tenían un nivel muy parecido aunque con Ex Durandal, Xenovia había ganado algo de... ventaja. – No crean mal, no es por... envidia. Es que... saben que ella puede crear una espada hecha de fuego.
-Así es, la habilidad de Aj para crear esas cosas se vio incrementada luego de tener las formas Astral. – Twilight dijo eso tras cerrar su libro. – Como saben, las formas Astral nos ayudan a crecer a base de nuestras habilidades, las de AJ parece inclinarse a la esgrima.
-Por eso, además de que ella sabe canalizar bien su magia de fuego... además de que... - Todos esperaban a que Xenovia siga. – De que esa espada de fuego se hacía cada vez más caliente... Puedo soportar un calor alto pero el que esa espada generaba era... de temer.
Todos se mostraron confusos al oír eso... ¿Qué tanto calor generó la espada de la chica para que la misma Xenovia diga eso? Ella quien tiene la espada Durandal repotenciada por trozos de las Excalibur.
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La batalla de AJ contra esas bestias fue, tal como Mahad dijo, una de pura resistencia. Una que la rubia estaba perdiendo porque esas cosas... las mata pero el bastardo ese crea más y más. Haciendo que su esfuerzo de bajar el número de enemigos sea en vano y cuando desea atacarlo a él, para poder acabar esta batalla de una vez... Tiene ya a una bestia en su cara dispuesta a morderla o arañarla. Aj mató al que sería el número 50 de esos canes y al número 15 de esas esfinges con el 5 de esas aves tan molestas que la atacan a la cara con toda la intención de dañar sus ojos.
Tras dar una patada, a la vez matando a una de esas aves, Aj cayó de rodillas al suelo tras finalmente sentir el cansancio. Cansancio que no era por falta de resistencia, es porque no ha podido tomar un suspiro ni un segundo. Estaba ya harta de seguir esta charada... Debe de acabar con el tipo ese para poder acabar con todo esto... Si lo derrota a él...
Paso a verlo, Mahad ha estado en su lugar todo el tiempo.... Sin mover un maldito músculo... ¿Tan confiado estaba de derrotarla? No, debe de haber algo más y justo ella es alguien quien está en condiciones de decir que... no tiene ni idea de que es. Tener que pararse y pelear contra otros de esos animales no ayuda en su capacidad de razonamiento. Pelear y pensar no era fácil, dio una patada al animal para tirarlo al suelo y de inmediato aplastó el cráneo de este con su pie. Acto seguido se dio vuelta para dar un golpe en la cara hacía de esos canes. Acto seguido se pudo en guardia, en espera del próximo ataque u oleada de ataques irán hacia ella.
Al ver que las esfinges eran las que venían hacia ella, Aj se pudo en guardia y no pudo evitar pensar que... esto no tiene fin. Mientras golpeaba y golpeaba, trataba de idear un plan algo... algo que la ayude a derrotar a esas cosas, pero no era tan sencillo como muchos creerían.
Sentir como uno de esos canes mordió su rodilla, luego otro su hombro... La estaban empezando a superar, no eran seres listos ni nada por el estilo pero la interminable cantidad y el tiempo que lleva luchando es demasiado... el impacto de la cola de una de esas bestias la alzó al aire sólo para que uno de los grifos fueron hacia ella y la atacaran con sus garran en medio del aire. Tras sentir como las garras de ese animal lastimaban su espalda luego de arañarla... Aj cayó al suelo con un dolor horrible, uno que no pudo asimilar ya que una de esas cosas volvió a ir hacia.
Harta y muy molesta, Aj cargó fuego en sus puños. Dio un golpe en el suelo para hacer que el poder de las llamas fuera por el suelo hacia los animales terrestres que recibieron el impacto de lleno y luego con su otra mano, lanzar una gran bola de fuego hacia los oponentes aéreos... Todos los que recibieron el ataque de Aj terminaron derrotados y muertos pero al caer al suelo, sucedió lo mismo que ha hecho que la chica ha odiado desde que la batalla inició. Ser arena de nuevo, sólo para ser usados de nuevo como material para la creación de más de esas cosas.
-No puede ser... - Aj cayó de rodillas al suelo luego de sentir al fin el dolor y el cansancio de lo que es llevar todo esto... - No hay fin, no puedo...
-Veo que al fin lo entendiste. – Mahad habló ante la sopresa de ella. – Mientras haya arena en este lugar, puedo seguir creando más de esas bestias... de ese modo no tendrás modo de ganar mujer... no hay modo que puedas luchar contra oponentes que vuelven una y otra vez.
La chica le tuvo que dar la razón, pero tenía que hallar un modo... de acabar esto. Se puso en pie como pudo y miró la arena que tenía en sus manos... Fue en eso que recordó algo... canalizó fuego en sus manos y pudo ver que la arena se estaba... Si, eso podía funcionar, pero al final... Necesitará más de esto para poder hacer lo que tiene en mente y...
Ver como una de esas aves descendían al ataque hacia su persona, la obligo en ponerse en guardia. Con un giro, le dio una patada a esa cosa para luego saltar y patear a la que estaba atrás de la primera. Usándola como catapulta hacia el grifo que iba hacia ella, Aj se aferró al animal lo más fuerte que pudo para luego forcejear con esta ya que la quería hacer caer de su lomo. Con esto ya listo, AJ obligo a la bestia ir hacia donde estaban el resto de animales reunidos, justamente era el lugar donde estaba Mahad quien veía con duda lo que ella estaba planeando.
Aj cargó magia en su dedo índice, con ello listo. Empezó a dibujar unas runas en el lomo de las bestia a una alta velocidad, lo admite... la magia no es su campo de experticia pero sabe lo básico y un poco como para hacer lo que estaba a punto de hacer. Tras terminar de dibujar las runas, la chica hizo lo impensado... Arranco las alas del grifo y empezó la caída al estilo libre, el brillo de las runas incrementó, esa era la señal que ella necesitaba. Dando un salto, tras darle una patada al animal, la chica lo mandó hacia su objetivo que era el amplio grupo que había, Mahad al ver ello se sorprendió al notar que la chica lo había planeado... La muy bastarda debió notar que...
El grifo marcado por la chica ya estaba echando humo, Mahad lo supo... la chica había creado una bomba usando al animal ese como base. Ordenó a todas las bestias pararse en frente de él para simplemente usarlos como escudo y... la explosión que hubo fue tal que bastó para que las bestias fueran eliminadas. Con Aj cayendo al suelo con fuerza por la expansión de esta y Mahad siendo impulsado hacia atrás debido a esta....
Cuando la explosión murió, Aj se puso de pie de modo tambaleante... eso le ha hecho ganar tanto tiempo como experiencia, ahora sabe que debe hacer para acabar con esas bestias y para ello... debe usar eso... Ver como Mahad se levantaba con dificultad, a pesar del poco daño que recibió. Eso era raro... No es que haya recibido algo tan fuerte y fatal....
Fue en eso que ella recordó... que la sortija esa toma la movilidad del usuario como medio de paga para... ¿Acaso...? Se fijo bien y lo pudo notar, los movimientos del tipo no eran tan naturales como uno esperaría, pareciera que está tieso... AJ pudo notarlo, es por ello que el sujeto este sólo usa a sus bestias y no se mueve pero eso no explica porque...
-¿Por qué no atacas con tu propio poder? – Mahad miró a la chica quien se mostraba muy seria.
-Lo haría si pudiera chica pero no es posible... La magia para mí, ya es algo imposible... - La rubia se sorprendió al oír eso. – No lo entenderías, lo que he pasado y lo que he tenido que sacrificar para llegar hasta aquí.
-No creas que por guardar silencio harás que las personas te entiendan. – Aj cargó fuego en sus manos pero este se vio más débil que las veces anteriores. – Rayos... usé más magia de la que creí inicialmente.
-Eso lo dices porque... no has vivido lo que yo. Todo esto lo hago no por mi bien, sino por el bien de las generaciones futuras. – Mahad dijo eso con una seriedad que sorprendió a la misma chica. - ¿Crees que hago esto por una ganancia personal? No, te equivocas.
-¿A qué te refieres? – Aj no entendía nada de lo que decía.
-Imagina esto niña, un día de repente te quedas sin nada... sin padres, sin hogar... sólo tú y tu hermana menor... sin el apoyo de alguien que los quiera, sólo un orfanato que al final tuvo que botar a unos cuantos niños porque estaban a tope. – Mahad dijo eso mientras tomaba un puñado de la arena en el suelo para luego dejarla caer. – Así era nuestra vida, algo que no puedes juntar... No entendíamos porque nuestros padres fallecieron. Uno no entendía... ¿Por qué nuestra madre falleció al dar a luz a mi hermana? ¿Por qué mi padre fue incapaz de afrontar la muerte de su esposa que al final termino por quitarse la vida? Pero así fueron las cosas.
Mahad creó de inmediato otro ejercito de esos canes alrededor de él ante el fastidio evidente de Aj. La chica se puso en obvia guardia para esperar un ataque enemigo... uno que nunca vino porque las bestias se quedaron en su lugar. Mahad parecía querer seguir con su relato...
-Lo más gracioso de todo esto es que... al ser forzados a vivir por nuestra cuenta, por nuestros propios medios. Es que conocimos a Aknam... él nos halló en unas de las tantas aldeas rusticas que aún hay en el desierto y nos ofreció un lugar donde quedarnos, todo a cambio de ser miembros de la nueva generación de cuidadores de la tumba que su familia lleva años cuidando. – Mahad dijo eso con un extraño sentimiento de nostalgia.
-Supongo que no termino como esperaste.
-La verdad no... Si bien la idea de ser un cuidador de una tumba no era de mi agrado, tome lo que se me ofreció por mi hermana menor. Ella no merecía vivir el estilo de vida callejero que estábamos teniendo. Con el tiempo, no sólo aprendí varias artes de magia sino que sentí que al menos teníamos algo en que sentirnos seguros... un refugio por decirlo así porque... ese lugar no se podía llamar hogar.
-No entiendo.... – AJ no entendía, decía que era un refugio, un lugar donde estar seguro pero no lo llama hogar.
-Un lugar donde vives el día a día, con sólo seguir clases y otras cosas que son del pasado. Un lugar debajo de la tierra donde no hay casi nada de luz natural, excepto de algunos rayos que llegan raramente. De no tener más opción que seguir una rutina día a día... Simplemente tener que aceptar lo que te impongan, si bien en los primeros años... No me importo tanto pero cuando pasas ya en esto unos años, te empiezas a preguntar si... es que elegiste bien. – Mahad miró a la chica que se mostraba más que interesada en lo que decía. – No creas mal, gracias esa elección mi hermana tuvo un lugar donde crecer y pude conocer a mi prometida quien... tiene mis mismos puntos de vista. Ambos sabemos que de seguir así, la generación que viene sufrirá lo que nosotros... sólo vivir... en un estilo antiguo y desfasado, sin ningún contacto con el exterior y sin... modos de cambiarlo ya que las palabras del líder son ley. Y créeme, el hijo de Aknam detesta este estilo de vida y por ello hago esto, porque él tiene un plan para acabar con esto y dar un nuevo estilo de vida a las generaciones que vienen.
-Aún así... Liberar a un ser así...
-Cuando ves día a día como los niños viven en este lugar, negados a tener una infancia normal y que tú mismo la padeciste, así como tu hermana... no te importa los medios que debas tomar ya que desde cierto punto has dejado de buscar otras alternativas porque no te dan la solución que buscas. – Mahad miró a Aj con determinación. – Yo lo sé, por ello es que mi prometida y yo aceptamos este plan por más cruel y destructivo sea... No deseamos que los niños que vendrán sufran.
-¿Y tu hermana, ella tuvo voz en lo que decidieron? – Aj pudo ver algo de culpa en la cara de Mahad, esa era respuesta suficiente para ella. – Ya veo, si... los hermanos mayores siempre comentemos el error de decir o hacer algo sin decirle a nuestros hermanos menores porque pensamos que es lo mejor para ellos. – Aj habló con un sentimiento de entendimiento que no creyó tener hacia el tipo este.
-Mana... hago esto por ella también. – Mahad mostró tristeza al mencionar a su hermana menor. – Ella siempre fue... especial. Muy hábil en todo lo que hacía si tenía una relación con la magia. Cuando se fue a ese gremio de magia, pensé que era su oportunidad de irse de aquí... Lo que no esperé fue verla de regreso tras 2 años, justo cuando las cosas en el refugio se estaban poniendo peor. Como Aknam, impulsado por ese Weil, no le importo buscar usuarios de estas cosas... - Miró la sortija que tenía en la mano con rabia. – Mi hermana fue la desafortunada en llegar cuando elegían al último poseedor. Cuando la obligaron a acercarse a esa cosa y sacarla sin verse afectada, me alegre y lo odie... Feliz de que estaba viva pero furioso porque ella iba a ser cosas que antes no hubiera hecho ni loca.
-¿Entonces por qué...? ¿¡Por qué hacer esto sabiendo lo que ella piensa, con el riesgo de que ella los llegue a odiar!?
-¡Porque es lo mejor! ¡De este modo la liberare a ella y a los que vienen de la maldición de esta tradición! – Mahad sonaba más que convencido de que... - NO me importa si ella me llega a odiar de verdad... Cargaré con todo eso con tal de hacerla feliz, de que pueda tener la oportunidad de una vida propia.
-La están condenando, ella... sabes lo que pasa cada vez que ella usa esa cosa ¿No? – El silencio del tipo fue respuesta suficiente para ella, ella sabía lo que iba a suceder si es que ella sigue con lo que ha estado haciendo.... – Lo lamento amigo, pero como una hermana mayor en mi propia ley... No puedo aceptar el camino tan extremo que has tomado, no puedes condenar a millones de este modo a pesar de que tu idea es justificada. – Aj se puso en guardia, debe ganar esta batalla.
Mahad sonrió ante la tenacidad de la chica, no duda que es muy interesante el ver como lucha a pesar de la adversidad pero eso no le hará dudar ni un segundo de lo que tiene que hacer. Todo por un futuro mejor para las próximas generaciones, bañara sus manos con la sangre de esta mujer.
Con un chasquido, las bestias de arena que habían se desintegraron volviendo a ser arena ante la obvia sorpresa de ella que no entendía lo que el tipo estaba haciendo. No fue hasta que noto que de la arena, algo más grande estaba emergiendo. Ver que era una bestia que combinaba lo mejor de las que había estado enfrentando hasta ahora la hizo sudar frío.
Era tan grande como Tannin pero tenía distintas partes de animales, le hacía recordar a Discord pero esta era más... agresiva debido a sus constantes gruñidos. Era una especie de quimera...
-No creas que es raro que estas cosas hayan existido en el pasado. – Mahad notó la preocupación en la chica. – No temas, esta cosa es lo más poderoso que puedo crear, tengo limitaciones. Me es imposible crear algo como el Dragón Apophis. – el Dragon Eclipse, uno de los Dragones Malignos... parece que crear algo de ese nivel era imposible y Aj agrade ellos porque no ganaría.
La quimera que tenía enfrente de ella la hacía recordar a una Hidra pero conformada por cabezas de leones, cuellos de serpientes, cuerpo de leones también, garras de águila y las patas traseras de esos perros del demonio. Al menos no tiene alas, aunque anatómicamente hablando no hubiera sido capaz de...
-Agh, no es momento Aj. – Al ver que una de las cabezas fue hacia ella, la chica dio un salto hacia atrás.
Tras esquivar el primer ataque, Aj dio una patada a la otra cabeza que iba hacia ella. Tiene 7 cabezas que van hacia ella para volverla su almuerzo, bien... puede ser peor. Ver que estas respiraban fuego le hizo maldecir al mundo y esa maña de darles la contra.
Esquivó la gran llamarada al saltar a un lado, en ese momento aprovecho en girar y lanzar varias esferas de fuego hacia Mahad quien no se había movido en ningún momento. Una de las cabezas de esa quimera sirvió de escudo para el hombre, la rubia maldijo que... hasta que acabe con esta cosa, no podrá atacar a su verdadero enemigo.
Con nueva determinación, Aj saltó hacia una de las cabezas de esa bestia para darle un fuerte golpe y acto seguido usarla de trampolín hacia la que tenía más cerca. Dicha cabeza noto el ataque hacia su ser y lanzó fuego de su boca para lastimar y detener el avance de ella. Canalizando poder en sus guantes, Aj lanzó un puño a la llamarada que en cuestión de segundos se vio absorbida por la gema en el guante de ella. El modo Astral la había hecho más resistente al fuego además de... añadir este a lo que tiene en mente. Necesita más, más fuego... más calor.
Con eso ya en mente, Aj siguió su camino hacia la cabeza que la acababa de atacar para luego darle un fuerte golpe. Acto seguido lanzó una bola de fuego a la que iba hacia ella y tras darle saltó sobre la cabeza de esta para empezar a correr sobre el lomo del animal.
Todas las cabezas al ver donde estaba su objetivo fueron al ataque, Aj sabía que esto iba a ser más que difícil. Un ataque conjunto de esas cosas contra ella, debe de dar lo mejor de sí. Por ello es que se centró en sólo en esquivar los ataques de esa cosa cuando usaba sus bocas para atacar, absorber fuego con sus guantes cuando la atacan con sus llamas pero todo se centraba ahora en eso, esquivar y absorber.
Sabe que no ganará de un modo convencional y por ello es que debe hacer esto, romper sus límites. Usar ese poder a pesar de que no pueda tener control total de este. Tras esquivar una vez otra de las cabezas, Aj se impulsó para caer a tierra y tomar aire.
Se hizo un auto análisis, estaba muy herida... no lo había notado pero de vez en cuando los dientes de esas cabezas lograban tocarla, tenía severas quemaduras en la ropa y su cuerpo, además de su cabello... rayos, está dejando que las mañas de Rarity se le peguen.
-Tiempo... necesito... concentrarme... - empezó a canalizar poder en sus manos para... - ¡Oh diablos!
Ver el ataque de la cabeza central hacia ella hizo que pierda la concentración. En ese momento, se vio obligada a esquivar el ataque hacia ella para luego darse una pirueta en el aire y dar una patada a la cabeza que tenía sobre ella, eso salió a lo muy fútbol. ¿Cómo se le decía a esta patada... chilena o chalaca? Da igual... es lo mismo.
Cayó de espaldas, ver que más de una iban hacia ella, siendo 3 el número ganador, hizo que la rubia ruede en el suelo para esquivar el ataque desalmado de esas cosas. Se puso de pie para hacer de nuevo el intento, lo que odia de esto es tener que tardar tiempo para hacerla estable y...
El rugido de las 7 cabezas hizo que se desconcentre y a buena hora, iban hacia ella... las 7. Maldiciendo de nuevo al mundo y toda la existencia por su mala suerte. Saltó hacia atrás, dio varias giros tras dar otro salto para no perder el impulso, esas cosas iban hacia ella con una gran insistencia, esto iba mal... muy mal.
En un momento determinado, ya incapaz de seguir esquivando el ataque desenfrenado de esas cabezas, Aj recibió el impacto de una de esas cabezas en su abdomen. La fuerza de este la mandó hacia un lado con mucha velocidad y por instinto la chica trató de recuperar su equilibro, cosa que logró luego de dar varias vueltas nada amigables en el suelo, pero ver como dos cabezas iban hacia ella... miro a otro lado, tenía a dos más... atrás.... Las otras dos... al frente, la última de las cabezas iba hacia ella... No había salida... la única que tiene es....
-¡Heat Wave! – Alzó su puño y lo impactó con el suelo del lugar para crear una onda de fuego de 360°.
La fuerza de la onda llameante bastó para que las cabezas sean repelidas y vuelvan a su posición normal en el cuerpo de la bestia, pero Aj no de mostraba nada tranquila. Sabe como acabar este combate, pero no puede hacerlo porque... no es capaz de reunir la energía suficiente para crear eso.
-Rayos... Si sólo tuviera un apoyo... - Sabía que sola no estaba logrando nada, que necesita al menos un... - No... NO. Pensar así sólo demuestra que en un momento crítico no podré valerme por sí sola. – Aj había aprendido de sus amigas que no hay nada de malo en pedir ayuda.
Pero hay momentos y situaciones que deben ser afrontadas por ti y sólo por ti. Este era uno de esos momentos, tenía que pensar en cómo... ver como esas cabezas lanzaban fuego de nuevo la hizo maldecir hasta lo...
-Un minuto... ¡Eso es! – tuvo la idea que la haría ganar.
Bien, tal vez Twilight sea la intelectual del grupo pero ella es la que entiende con la práctica y con la experiencia. Esquivar de nuevo esas llamas fue tal vez el último esfuerzo físico que hará por ahora ya que...
Extendió sus brazos a los costados, abrió las palmas de las manos dejó salir de las gemas en el dorso de estas todo el fuego acumulado. El fuego salió sin ningún tipo de filtro o limitación, era como abrir un caño y que el agua salga con fuerza. Las llamas que salían de las manos de la chica eran de un calor intenso, tan intenso que algo de la arena en el lugar se estaba cristalizado.
-¿¡Qué estás haciendo!? – Mahad se cubría de las llamas, no porque las tenga cerca, porque no es así. Es porque las llamas sueltan un calor insoportable...
-¿¡A qué temperatura la arena se vuelve un vidrio!? – la pregunta de Aj hizo que el tipo se sorprenda y asuste un poco... Eso es... - ¡Exactamente 1500 °C! ¡Es algo básico que deberías saber ya que es una debilidad de tu habilidad!
-¡Imposible, no puedes generar tal calor y mucho menos ser capaz de soportarlo!
-¡Muy cierto, humanamente es imposible... pero...! – las llamas en las manos de Aj se estaban empezando a concentrar. - ¡Pero yo soy una humana que convive con seres de gran poder y uno de ellos es un dragón que fue entrenado por el Meteor Dragon en persona, algo aprendí! – Las llamas poco a poco se hicieron más delgadas pero el calor de estas no disminuía... al contrario, se hacía mayor.
Mahad no creía lo que estaba pasando, esa mujer... estaba concentrando la salida de fuego mientras lo dejaba salir para hacer algo pero... no debería ser posible, debería estar ardiendo debido a la cercanía que tiene con esas llamas, no importa que sean suyas... Fue en eso que se fijo en los guantes que ella llevaba en sus manos. Estos.. Estos estaban resistiendo las llamas, si bien se ve que poco a poco se ven dañados por el poder de estas, eso es lo que la está salvando.
Aj sabía una cosa, desde que consiguió el modo Astral de su elemento, su control sobre el fuego mejoró, pero eso no quitaba su miedo de usarlo... el fuego es peligroso... pierde el control y... dañara sin discriminación. Por ello es que esta vez lo está haciendo, dejar que el poder de sus llamas sea libre... sólo debe controlar el flujo y...
Alzando las manos al cielo, ambas columnas de fuego de mezclaron para luego formar una espada hecha de puro fuego. El calor de esta era tal que la chica al agitarla cerca del suelo volvió la arena cristal. Eso hizo que Mahad se ponga de nervios... ¿Acaso... el calor de esa espada alcanza los 1500°C? No sólo es una locura, la locura más grande es que una mujer humana pueda tener en sus manos algo así.... ¿Qué clase poder tienen los elementos de la Armonía?
-Bueno... lamento la tardanza... Esta Blazing Blade no es tan sencilla de crear... - Aj mostró su espada al sujeto quien a pesar de la distancia que los separaba, sentía el calor de esa cosa... era monstruoso.
Con su arma ya lista para atacar, Aj se puso en guardia... a pesar de que tiene los guantes que la protegen del calor en su gran mayoría... estos no aguantarán mucho ya que... se están empezando a derretir. Con un solo paso, dio un poderoso salto hacia la bestia de 7 cabezas, una de las cabezas fue al ataque pero cuando su cabeza fue cortada por la espada de Aj, ella de inmediato cortó el cuello de dicha cabezas seccionada... el corte volvió dicha zona cristal... impidiendo la regeneración de dicha cabeza. Mahad lo sabía porque lo estaba intentando... no importaba cuanto poder use, esa zona no... no regresaba. Sentir como su pierna izquierda se ponía tiesa le hizo saber que estaba al límite.
-¿Conoces el mito de la lucha de Heracles y la Hidra? El héroe cortaba las cabezas y quemaba la zona cortada del cuello con una antorcha para que las células ahí mueran y nuevas cabezas no nazcan. – Aj dijo eso con una sonrisa, a pesar del sudor y el cansancio... se mostraba muy segura. – Es lo mismo en teoría, sólo que con una bestia de arena y una bella chica. – Tal vez ese comentario vanidoso estuvo de más pero... nadie podía negar lo de bella.
Aún así, la chica sabía que no podrá estar en este estado mucho tiempo. Ya está sintiendo como sus manos son quemadas por sólo sostener esta espada, alzó la espada y lanzó una cuchilla de corte con las llamas que impacto a una de las 6 cabezas de la bestia y la dejó ciega. Momento que fue aprovechado por Aj para atacar. La degolló sin piedad y no conforme con eso se impulsó usando la parte de la bestia que acababa de matar como un medio de impulso para dar un salto en medio de dos cabezas del animal que la iban a atacar, pero ella con un giro de 360° para cortar ambas cabezas y así reducir el número que tenía como enemigas de 7 a 3.
-No puedo creerlo. – Mahad trató de decir algo pero ya lo estaba sintiendo, el efecto final de estas cosa... maldita sortija. – Debo...
-¡No harás nada! – Aj alzó la espada para luego lanzar una onda de corte de fuego.
El ataque impacto a la bestia para luego lastimarla de manera grave. Fue ese el momento decisivo, falla y es el fin. Usando todas las fuerzas que le quedaban, Aj salto al lomo del animal y a pesar del intento de esta por zafarse de la presencia de ella. Pero unos segundos bastaron para que la chica clave el arma en el lomo de esta sin piedad. De inmediato, las llamas de la espada recorrieron el cuerpo de la bestia y la mato desde adentro sin oportunidad de defenderse. Poco a poco, la bestia al morir se volvía arena pero al mismo tiempo, debido al calor, se volvió un cristal en forma del animal que se hizo pedazos por inercia.
Aj cayó al suelo al mismo tiempo que trataba de recuperar el aliento, está al límite.
-¡No, no puede terminar así! ¡No después de todo lo que he hecho, lo que he sacrificado y pagado! ¡No dejaré que esto acabe de esta manera! – Mahad empezó a canalizar poder para volver a crear a la bestia esa...
Aj al ver como el tipo ya botaba sangre de la boca y como su cuerpo poco a poco se hacía más tieso... supo que tal vez ella hubiera hecho lo mismo si es que su hermana menor estuviera en la situación que él dijo... su hermana significa mucho para ella... lo entiende, todo hermano desea lo mejor para el menor... pero no así. No puede hacer las cosas de este modo, sabiendo que su hermana lo desaprueba... sabiendo que lastimara más que los que serán beneficiados. Por ese sentimiento de comprensión... Es que debe de vencerlo, para que vea su error...
Aj alzó la espada, concentró poder en ella y con un solo movimiento la clavo en el piso para expandir el calor de esta en todo el suelo y más allá. El calor que empezó a haber en el sitio era como estar en un horno... tanto ella como él, sólo que la chica tenía una resistencia mayor que él debido a su elemento de la Armonía.
La arena en el lugar se volvió vidrio y se rompió sin ningún tipo de resistencia. El lugar ardía al rojo vivo... eso demostraba la fuerza del calor que había... en sólo segundos, sólo había polvo del vidrio en el lugar, nada de arena con una Aj de rodillas y con algo de quemaduras en su cuerpo... sin duda el fuego es un peligro para el que lo usa y el que lo recibe.
Alzó la vista a pesar del cansancio y el ardor, sólo para ver el estado en que Mahad estaba y horrorizarse de que... piedra, se estaba volviendo piedra y se estaba resquebrajando.
-Eso es...
-No era erróneo.... Lo que Mana les dijo, este es el precio que pago... la movilidad de mi cuerpo.... Hacerme piedra poco a poco y al fin... es mi hora... - Mahad sonrió triste al ver que... - Detengan a Aknam... Al menos hagan eso... ya no importa lo demás... mi hermana... deben de salvar a Mana.
-¿De qué...? – Aj noto que el tipo era casi piedra y se estaba resquebrajando más.
-Mana...ella... - No pudo decir más porque ya esa parte de su cara se volvió piedra. – Ishizu, lamento no poder... volver a tu lado... Mana... perdona a tu tonto hermano...
Ese fue el último pensamiento de Mahad antes de volverse piedra totalmente y que su propio cuerpo de resquebraje totalmente ante la sorpresa y horror de Aj que... sólo pudo ver como el tipo se volvió técnicamente polvo. Lo único intacto que quedó de Mahad fue la sortija... sortija que calló al suelo y que... brillaba como si nada.
Aj maldijo esa cosa, objetos malditos que acababan poco a poco al poseedor que tenían... no podía creer que haya gente que haya creado algo así... Sin importar las consecuencias, ahora entiende porque... porque Azazel y los demás tenían que estas cosas...
-Ugh... - Aj noto que su cuerpo... estaba lleno de quemaduras y... a este paso... se va a desmayar y lo sabe pero al menos debe de... - Vendajes.... Debo...
Sacó como pudo los vendajes para cubrir rápidamente las heridas y quemaduras mas graves en su cuerpo. Ya al ver que las había cubierto cerró los ojos y se dejó caer... estaba cansada y muy adolorida... ojalá esto baste para... recuperar fuerzas para lo que viene... lo de Mana la tenía preocupada... algo malo debió de pasarle.... No pudo pensar más de ello ya que su conciencia la dejó.
La sortija en el suelo brillo al sentir que ya nada podía ganar estando aquí luego de que su último portador se hizo polvo... lo mejor será regresar al sarcófago. El Artilugio brilló para luego desaparecer en un destello de luz, había vuelto al lugar donde yacía el único ser con la capacidad de usar su energía como se debe.
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-¿Huh? ¿Hermana? – Apple Bloom, quien estaba con sus amigas en la casa de Spike, con los padres de este, su hermano y cuñada en el lugar. Estaban teniendo una pequeña reunión cuando sintió que su hermana...
-¿Pasó algo Apple Bloom? – Scootalo hizo la pregunta a su amiga, la expresión de esta era de... preocupación.
-No.... Es sólo que... no sé porque pensé en mi hermana... - La chica no se entendía.
-¿No será por qué la extrañas? Yo extraño a Rarity, a pesar de sus momentos donde discutimos, la extraño. – Sweetie estaba algo triste al decir eso.
-No creí decir esto pero yo también extraño a Twilight. – Spike se rasco la nuca con vergüenza pero las 3 niñas rieron por ello.
Los adultos que veían a los jóvenes no pudieron evitar que tal vez algo estaba pasando en el exterior. No lo sabían a ciencia cierta pero... lo podían presentir, algo estaba sucediendo. Y los chicos estaban involucrados...
-Ise-kun... - Cadence lo sabía de algún modo, Ise estaba en algo peligroso... muy peligroso.
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-Veo que la sortija también... perdió a su dueño. – Kahim vio como el objeto volvió. – Lástima, el tipo tenía talento... y era un buen mago. Es una pena que por el efecto secundario de la sortija perdiera su habilidad de usar magia poco a poco.
-No... la sortija... si no mal recuerdo es de... - Fay se quedó helada al captar que el que tenía la sortija estaba muerto... El hermano de Mana estaba muerto. - ¿Por qué...?
-Estúpido... Buscar un futuro mejor para los niños que vivieron como él. Deseo noble pero innecesario, a nadie le importa la vida de los huérfanos que hay en ese refugio. – Ver como Fay lo miraba le hizo soltar una risa. - ¿No lo sabes? Donde están los demás miembros de esta comunidad no sólo hay familias y sus niños, sino muchos huérfanos... Él buscaba darle a esos niños un futuro mejor... pobre diablo, debió centrar su atención en otra cosa.
-¿¡Cómo puedes decir eso!? ¡Esa gente de ahí son descendencia en su mayoría de quienes fueron tu familia y que juraron proteger tu tumba!
-Era su misión y la cumplieron muy bien, luego de ser libre ya no necesito de ellos. – Fay abrió los ojos con horror. ¿Cómo puede ser tan ajeno que indirectamente creó...? – El mundo es de los fuertes y los de abajo deber hacer que el fuerte sobreviva... Aún a costa de sus vidas.
-¿Esa es la clase de mundo que los Dioses Egipcios desean crear? – la chica apretó los dientes con rabia. Kahim sólo sonrió...
-Es el mundo... que el mundo siempre ha deseado. Yo sólo lo voy a hacer una realidad. – y pensar que por despertar a un ser como él... tanto se haya sacrificado y que tantos hayan muerto...
-Ahora te entiendo Skeith... ahora entiendo porque ayudabas a ese humano y ayudas a ese chico ahora. Seres como este, sin honor... Sin ni una pizca de resentimiento... estos son los monstruos reales que deben ser destituidos... estos seres llamados seres pensantes, esos que se ocultan tras la piel de un cordero entre todos ellos... Los de un corazón negro son los que deben morir para que el mundo no caiga en la desesperación. – Fidchell estaba más seguro de una cosa ahora, que este Kahim... no debe vivir.
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Mientras tanto, Rarity corría ya harta de este lugar... lugar que...
-¡Odio esto! – la chica piso el suelo con tal fuerza que este se rajo un poco. - ¡Yo, una dama, no debe estar en este lugar tan seco y árido! – Rarity se acercó al muro de su derecha y lo pateó con fuerza con la punta de su bota... mala idea. - ¡Au, maldita sea mi desgracia! – la chica se apoyó en el muro e hizo una pose de desgracia y drama... - Yo, una bella doncella, aquí en este árido lugar. Lugar que daña mi delicada piel, reseca mis labios y daña mi cabello... Oh el horror. Si mi Yuuto me viera ahora pensaría que estoy horrible. – La chica se entristeció...
Y ella que esperaba todo para pasar tiempo de calidad con él y... rayos, no puede creer que Rainbow le dijera que se confiese en el Festival, hasta Pinkie... no le sorprende pero en fin, todas las chicas decían que lo haga, que no pierde nada.
-No creo poder aceptar un rechazo... - la chica siguió caminando mientras creaba estacas de los muros y del suelo para empalar a las bestias que iban hacia ella. Hace ya varios minutos ya no hay tantas. – Debo de estar avanzando... Ojalá todos estén bien. – Rarity se mostraba preocupaba por sus amigos.
Aj obviamente, era su mejor amiga por más sorprendente que sea. Rias y Akeno, sus amigas con quienes podía hablar de moda. Kuroka, su compañera de armas y su amiga, así como su modelo de vez en cuando. Fay, su amiga y alguien quien consciente... Ise, su amigo y hermano menor... Ellos tienen que estar...
-No, ellos están bien... lo sé. – Rarity sacó de su bolso en la cintura los vendajes que tenía. – Debo de usarlos sólo cuando...
Los guardo de nuevo para luego seguir su camino, así fue varios minutos hasta verse frente a frente con una puerta. Se sorprendió al verla ya que la tomó desprevenida... debió de haber salido de la nada.
Sin una pizca de duda, la abrió sólo para verse maravillada del lugar. Era como el interior de esos templos donde las mujeres de la realeza egipcia se bañaban o tomaban sus baños aromatizantes. Rarity contuvo un grito de emoción ya que no era la hora de pensar en algo así... por más que quiera... Siguió su camino, alejando la tentación de tomar un baño...
Al seguir su camino se vio con una salida o al menos eso creyó porque era un lugar bien iluminado con una especie de laguna artificial y con poca arena y tierra. A orillas de esta... habían varias rosas. Eran bellísimas...
-Raro, no sé de botánica pero sé que unas rosas no deberían crecer así de fácil .... – Fue en eso que sintió que algo iba hacia ella, alzó la mano y atrapó... ¿Una rosa roja? – ¿Eh?
-Veo que tienes buenos reflejos, te doy eso. – Una mujer salía del lago, estaba totalmente desnuda... era más que obvio que estaba tomando un baño.
-Tú lanzaste esta rosa... Eso quiere decir que...
-No te preocupes, es una rosa común... No tiene nada en ella que lastime, sólo unas espinas. – Rarity se hinco el dedo índice con una de las espinas y la dejó caer. La mujer sonrió mientras terminaba de ponerse su túnica, aún con esta se mostraba la bella figura de aquella mujer que fácilmente... era una rosa en el desierto. – Mi nombre es Ishizu y soy tu oponente, un gusto linda.
Rarity se puso en guardia, sabía que esta era una batalla decisiva para ella... en esta batalla se verá los frutos de su entrenamiento y de ver... si sigue siendo digna de luchar al lado de sus amigos.
Una rosa del desierto contra una gema de rara belleza... ¿Cuál será la ganadora en esta pelea entre mujeres de gran belleza?
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