¡Todos adentro!

Hablaba un señor de unos 40 años con tono autoritario y con un uniforme militar, así es el era el reclutador de The lights.

Los llantos de algunas madres se podían escuchar mientras sus hijos eran forzados a subir a ese camión.

Me llena de miedo el pensar que dentro de un año, yo será el que vaya allí dentro, intentó no pensar mucho en ello pero en cuanto más días pasan más difícil se me hace olvidarlo.

Mi madre también se preocupa por mi, cada día la veo elaborando junto a mi padre planes más complejos y minuciosos para que pueda escapar del reclutamiento, pero aún así ambos saben que es inútil, el reclutamiento se hace en todas las provincias de The Lights, la única manera de escapar sería mandándome con The Silents lo cual seria un suicidio, pero en estos momentos no se que sería peor. Se estima que la taza de vuelta con vida después de servir a la milicia es del menos del 10% y los que vuelven tienen una esperanza de vida de 27 años, nadie sabe lo que pasa una vez entras, sólo se sabe que si vas ahí o mueres o estas cerca de morir.

Pero aún así no siento pena por saber que mi posible muerte este cerca, siento pena por lo que dejó atrás, una vez que me vaya ¿Quien cuidara a mis padres cuando envejescan?, ¿Quien pagará el pan de cada día de ellos cuando mi padre se jubile?, esas son las preguntas que me quitan el sueño.

Cada día que pasa los veo más y más preocupados y no los culpó, si estuviera en su lugar también estaría de igual o peor manera, se muy bien que con cada día, cada minuto, cada segundo, esa fase inevitable, ese infierno que deberé cruzar se acerca, por eso aprecio mucho más los momentos con ellos, cada risa, cada abrazo, cada lágrima que compartimos son tesoros en mi memoria. Es por ellos que estoy decidido a volver, no importa que, seré el primero de todos en volver de lo que sea que pasé allí y vovere a ver las sonrisas de mis padres, sin importar lo que tenga que hacer o a quien deba matar... yo volveré.

6/12/20XX

¿?: ¡Vamos apresuren el paso que si no se quedan sin lugar! *gritaba un niño de aproximadamente 13 años*

¿?: Ya vamos ya vamos cariño *le respondieron los padres al unísono los cuales al ver que respondieron al mismo tiempo simplemente se dieron una rápida mirada cariñosa y se sonrieron el uno al otro*

Estas personas que van aquí son mis padres y yo, estamos en un día que ninguno de nosotros queríamos que llegase...

Mi cumpleaños número 14 ya ha llegado y con ello se que estoy obligado a prestar servicio el próximo año, mis padres también están al tanto de ello, pero a pesar de esto decidimos celebrarlo como algo feliz, queríamos hacerlo por lo menos una vez en la vida, ya que a partir de que The Lights dio el infame anuncio los cumpleaños han sido vistos como una maldición ya que cada uno de ellos te acerca más y más a lo que muy posiblemente sea tu muerte. Por eso les pedí hacer este día uno de los más felices, quiero cambiar esa perspectiva que se tiene, hacer ver a los demás que los cumpleaños son un regalo que se nos dio para pasar otro año con nuestros seres más amados, eso es un cumpleaños.

Al principio mis padres dudaron, dijeron que, ¿por que celebraría algo que posiblemente cambiaría mi vida para siempre si no es que acaba con ella?.

Siendote sincero ni yo lo se, sólo se que no quiero ver ni una lágrima en sus rostros, es difícil ver que con cada año que pasa tu madre llora más frecuentemente durante las noches mientras tu padre intenta consolarla y tu sólo puedes escuchar desde otra habitación sintiendote tan impotente,

P. Niño (padre del niño): Bueno creo que aquí está bien

M. Niño (madre del niño): Bien hora de preparar todo

Niño: Esta bien

Dicho esto los tres empezaron a preparar todo lo necesario para el cumpleaños del niño.

Más no había mucho que preparar ya que el niño simplemente había pedido comer al aire libre en el parque, en resumidas cuentas lo que llamamos un día de campo, puede que esta actividad a nosotros nos resulte de lo más normal, pero para el es más que suficiente, sentarse a comer con su madre y padre al lado de un árbol mientras las suaves brisas invernales de diciembre acarician su rostro y hacen que un pequeño escalofrío le recorra el cuerpo.

M. Niño: Te dije que debíamos venir más abrigados, vamos a caer resfriados los tres

P. Niño: Calmate, no es para tanto

M. Niño: Cuando estén en cama tumbados por la gripe y el dolor de cuerpo ni crean que les voy va servir la comida en la cama

P. Niño: Como digas cariño

Luego de esa breve charla los tres se dispusieron a sentarse en el suelo e ingerir sus alimentos, mientras hacían ocasionalmente una broma, contaban una anécdota o practicaban algún tipo de juego, así se la pasaron todo el día entre risas y algunas amenazas de la madre hacia el padre por ciertos errores o malos consejos que este le daba a su hijo

M. Niño: Ya está anocheciendo, creo que va siendo hora de empezar a recoger toda la basura que dejamos aquí

P. Niño: Concuerdo, ya se está haciendo tarde y no quiero que nos pasé lo que le paso a una familia de un comic que leí hace mucho tiempo en donde asesinaban a los padres del niño y este se convertía en un vengador que lucha por la justicia durante las noches

M. Niño: No digas eso, mira que con nuestra suerte todo puede pasar *dijo la madre un poco alterada*

P.Niño: Oye calmate, sólo fue una broma

M. Niño: Pues no ha hecho ninguna gracia. Este no es el momento correcto para hacer bromas

Niño: Mama, ¿Te sientes bien?

M.Niño: Si... es sólo que...me parece tan irreal la situación, que dentro de tan sólo unos cuantos meses ya tengas que ir a prestar tu servicio, que este pueda ser el último cumpleaños en el que estemos contigo, el último año... yo no quiero que te vayas, quiero que vivas, quiero verte más, por favor prueba a esconderte, te esconderemos bajo tierra de ser necesario, sólo no quiero que mueras, quiero que de alguna forma tu seas el que me entierre, no quiero enterrarte, no lo soportaría *dijo la madre mientras su voz se empezaba a quebrantar y a sus ojos hacían aparición las tan conocidas lágrimas y se lanzaba a abrazar a su hijo*

P. Niño: Cariño... te entiendo, se que es duro pero no hay nada que podamos...

M. Niño: ¡No!, no te atreves a decir que no hay nada que no podamos hacer... No lo sabremos hasta que lo intentemos, por favor hijo, probemos esconderte, tal vez no te encuentren y podamos vivir, los tres juntos *intentó convencer la madre a su hijo aún manteniendo el abrazo que le daba a este*

Niño: Mamá, yo... quisiera que si fuera posible, pero tanto tu como yo, sabemos que no es así, The Lights tiene los listados de todos los niños que cumplen 14 este año, si ven que uno falta se harían locos buscándolo, además aunque logrará escaparme, toda la comunidad no tardaría en revelar donde estoy, y debería cambiar mi pocisión, y lo mismo el otro año y el siguiente. Se muy bien los riesgos que pueden depararme allá y también estoy consciente de la poca cantidad que vuelve cada año... pero ten por seguro algo Mamá, Yo nunca me rendire, estoy seguro que tarde o temprano volveré con vida a casa así que por favor espérame, ¿Si?

La madre en un principio no supo como reaccionar a las palabras de su hijo, pero al ver la determinación en los ojos de este vio que no había ninguna pizca de duda en su ser, así que como pudo se calmó, vio a su hijo a los ojos y le dijo

M.Niño: Muy bien, ya has hablado, volverás, creceras, tendrás hijos y cuando yo ya esté vieja y muera me enterraras, ¿Entendido?

Niño: Entendido

M. Niño: Bien volvamos a casa

No me gusta pensar en enterrar a mi madre, es una experiencia que no me gustaría vivir, pero eso es lo que ella siente también con lo que esta a punto de pasar conmigo, así que lo veo como algo que va ha tener que pasar y lo deberé de aceptar, así que cumpliré esta promesa, en un futuro cuando yo a haya crecido, te enterrare mamá, y si tengo que matar lo que sea para cumplirla, mi mano no temblara a la hora de disparar el arma. Ellos son mi razón de vivir, no los defraudare.

24/03/20XX/

La fecha ha llegado de nuevo, y la historia se repite, madres llorando, niños siendo atrapados cuando intentaban escapar, otros que entraban sin más y entre todos esos niños estaba yo, Hai Kurosaka que me limitaba a despedirme mientras veía a mis padres en la distancia con un cartel que decía:

CUIDATE MUCHO.
TE ESTAREMOS ESPERANDO

Esas simples palabras, me motivan a terminar con esto lo más rápido posible, se que habrá muchos peligros de aquí en adelante, estoy consciente de ello y mentiría cuando digo que no tengo miedo, pero aún así a pesar de lo que se me venga, se que lo podré superar.

El camino hacia la base de The Lights, fue un poco calmado, sin contar los llantos de algunos niños que eran rápidamente callados por los militares, quienes con un tono autoritario les gritaban que se callasen o si no les darían verdaderos motivos para llorar, la mayoría de niños callaba con este anuncio, pero cuando uno hizo caso omiso de la orden los militares lo golpearon hasta dejarlo inconciente, y aunque no sea un experto en medicina se que por lo menos le rompieron dos costillas en el proceso, cuando el chico quedó inconciente uno de los militares habló

Militar: ¡Espero que esto sirva de llección para los demás!, ¡Ahora sirven a su patria y deben acatar cada orden que se les de!, ¡Todos ustedes son soldados y deben empezar a comportarse como uno!

Después de ese aviso por parte del militar nadie se atrevió a decir ni una sola palabra.

Ni siquiera cuando vimos a más camiones acercarse a nuestra posición.

No tarde mucho en darme cuenta que los camiones que venían, eran los otros camiones que traían a los otros chicos que habían sido reclutados por The Lights, podías saturarte la vista con todos los camiones que venían, docenas y docenas de camiones en cada dirección que mirases.

Creo que no fui el único en hacer cálculos mentales, ya que luego pude  ver las caras de terror de algunos de los chicos que me acompañaban.

En cada camión vamos unos 40 niños, y hay unos 400 camiones en total, eso significa que hay alrededor de unos 16,000 niños en total y de esos 16,000 niños sólo vamos a sobrevivir alrededor del 10%, lo que significa que sólo sobreviviremos unos...

1,600

14,400 de nosotros van a morir, se muy bien que es una probabilidad alarmante pero aún así nunca se dijo que era imposible, ya a habido personas que logran volver, sólo falta una que vuelva y  muera de vejez, y no importa que, yo seré esa persona

Después de varias horas en las cuales no hubo más que la sinfonía que componían los motores del camión, junto con las ruedas de este, llegamos.

Ahora estábamos en frente de la peor pesadilla de todo niño de menos de 14 años y de todos los padres.

Estábamos en frente de lo cual seria nuestra casa durante los próximos seis meses.

Estábamos en frente de la Base de Operaciones Generales y Entrenamiento de The Lights.

-Fin del capítulo-

Se que es corto, pero no quiero desperdiciar palabras en algo que sería muy pesado de leer.

Bueno como digo, espero que te haya gustado y que la historia este llamando tu atención, por ahora me despido