Al día siguiente a primera hora, JunMyeon adormilado y con la cabeza martilleándole abrió la puerta trasera para dejar entrar a Kai, que iba seguido de Kyunsoo, para gran consternación suya. JunMyeon frunció el ceño al ver a su hermano ahí parado.

—No sabía que ibas a venir. —dijo JunMyeon.

—kai me dijo que le habías pedido que pasara por aquí, y decidí acompañarlo. —dijo Kyunsoo, mirando a su hermano con curiosidad—. ¿Te molesta?

JunMyeon contuvo un suspiro cansado por la resaca de la noche anterior. Esperaba poder tener aquella conversación con Kai en privado. Temía que su hermano pudiera leer entre líneas. Pero ya era demasiado tarde, no podía echarlo de la casa. Era evidente que Kyunsoo leería entre líneas.

JunMyeon se obligó a sonreír.

—Claro que no. —dijo con un tono exageradamente alegre tan falso como su sonrisa. Con un poco de suerte, era demasiado temprano para que KyunSoo se diera cuenta—. Pero pasen adentro. El café está listo. ¿ya han desayunado? Puedo hacer huevos revueltos o unas tostadas. Me temo que, si quieren un bizcocho, han venido al sitio equivocado. Ése es terreno de Xiumin.

—Yo no, gracias. —dijo Kyunsoo, mirándolo aún con gesto perplejo.

—Yo tampoco. —respondió Kai—. Tengo que estar en el trabajo dentro de veinte minutos. Habría venido antes, pero tuve que esperar a que mi adorado esposo se arreglara. Es sorprendente lo rápido que puede ser cuando quiere.

—¿Y eso? —preguntó JunMyeon.

—Se moría de curiosidad por saber para qué querías verme. —dijo Kai, mirando cariñosamente a Kyunsoo.

—Entonces iré directo al grano. —dijo JunMyeon—. Oh SeHun me ha preguntado si podría ocuparme del diseño exterior de un par de casas que acaba de construir. —conto JunMyeon—. Me dijo que tú estabas demasiado ocupado para encargarte. Yo le he dicho que lo haré siempre y cuando a ti no te importe. No quiero robarte un cliente.

—No, claro que no me importa. —Kai sonrió ampliamente—. De hecho, sería genial. SeHun ha tenido mucha paciencia. En cuanto Kyunsoo me dijo que ibas a venir, se me ocurrió ofrecerte trabajo, pero no quería meterte prisa.

Aunque sonaba muy convincente, JunMyeon lo presionó un poco más.

—¿Estás seguro? Podemos hacerlo de modo que tú me subcontrates, y a mí puedes pagarme según las tarifas que se muevan por aquí. —propuso JunMyeon ignorando el comentario sugerente a Taehyung.

—No de eso ni hablar JunMyeon. —dijo Kai—. ¿Para qué hacer más papeleo? Acuerda las condiciones con SeHun directamente. No te hago falta. —Kai le dirigió una astuta mirada y dijo—: Aunque si decides quedarte a vivir aquí, me encantaría que consideraras la posibilidad de asociarte conmigo. Hay trabajo más que suficiente para los dos.

Kyunsoo los miró con ojos resplandecientes.

—¡Qué idea tan maravillosa! —chillo emocionado.

Y JunMyeon lo miró con el ceño nuevamente fruncido.

—¡Cómo si no fueras tú quien le ha metido la idea en la cabeza Kyunsoo! —rezongo JunMyeon a su hermano.

—Te aseguro que no. —respondió Kyunsoo—. Esta vez ha sido idea de Kai.

JunMyeon miró al mencionado y éste asintió con la cabeza para confirmarlo.

—En ese caso, gracias. Agradezco la oferta Kai. Te prometo que pensaré en ello. Veamos cómo se me dan estos dos proyectos primero; puede que no te gusten mis ideas.

—No esperes. Di que sí ahora, JunMyeon. —suplicó su hermano—. Sería genial que vivieras aquí cerca de nosotros.

—Tiene razón. —dijo Kai—. Para mí sería la solución perfecta JunMyeon.

JunMyeon alzo las manos para indicarles que no fueran tan deprisa.

—Paren un momento los dos. Me he comprometido a hacer un par de trabajos. Aunque accediera a aceptar alguno más, no he decidido quedarme a vivir aquí para siempre. Sigo teniendo la intención de volver a Seúl y seguir con mi vida, no voy a cambiar mis hábitos por ese imbécil. —hablo JunMyeon con firmeza y convicción.

—Pero ¿por qué? —preguntó Kyunsoo.—. Eres un diseñador de exteriores y SeHun dijo que necesitaba ayuda podrías tener un trabajo fijo acá.

—en Seúl también lo tengo y como dije no voy a cambiar mis hábitos solo por el idiota de Taehyung. —dijo con enojo y tristeza—. Además, SeHun solo dijo que lo ayudara con el diseño de dos casas.

la explicación de JunMyeon no satisfizo a Kyungsoo

—¿Y cuando ocurrió eso? —cuestiono suspicazmente.

Y JunMyeon vio la trampa.

—Ayer. —dijo JunMyeon cautelosamente.

—¿Ah, ¿sí? Pensé que pretendías mantenerte alejado de la casa mientras SeHun trabajaba. —recordó Kyungsoo arqueando la ceja.

—Y ése era el plan. —convino JunMyeon—. Pero no salió así. Seguía aquí cuando volví.

—¿Y qué hora era?

—Kyungsoo, ¿quieres llegar a algún punto en concreto? —pregunto JunMyeon cruzándose los brazos al pecho.

—No. —dijo Kyungsoo alegremente—. Sólo estoy recabando información para compartirla después con Baekhyun y Xiumin. Es raro que yo me entere de algo a la primera.

—¿Y qué es eso que crees que sabes? —quiso saber JunMyeon.

—Que SeHun y tú han congeniado. —señalo Kyungsoo con una sonrisa.

—Cierto. —dijo JunMyeon sin emoción—. Está encantado de saber a lo que me dedico. Y yo estoy emocionado de saber que está dispuesto a pagar por mi experiencia. Si se puede decir que eso es congeniar, entonces sí, estamos en la misma onda.

—Tómatelo a broma si quieres, pero yo creo que hay algo más. —insistió Kyungsoo.

—¿Como qué? —cuestiono JunMyeon.

—Química.

—Más bien, botánica. —dijo JunMyeon con sequedad—. Las plantas es lo que tenemos en común.

—Ja, Ja —respondió Kyungsoo, arqueando las cejas.

—El chiste me ha salido que ni pintado. —bromeo JunMyeon.

—¿Y dónde está, por cierto? —pregunto Kyungsoo mirando las esquinas.

—Trabajando, supongo. —respondió JunMyeon con indiferencia.

—Pero no aquí. —dijo Kyungsoo, decepcionado por no hacerle pasar un mal rato con su visita.

—Llegará más tarde supongo.

El rostro de Kyungsoo se iluminó nuevamente con esa típica mirada malévola.

—¿Horas extra? ¿Cuántas puede hacer una vez que anochece?

JunMyeon gimió al ver lo decidido que estaba su hermano a buscar el romance. Lo habría esperado de Baekhyun y de Xiumin, pero Kyungsoo solía mostrar más sentido común.

—Creo que ese proyecto del bebé no te deja pensar en otra cosa Kyungsoo. —dijo JunMyeon ofuscado.

Kyungsoo le dirigió una resplandeciente sonrisa.

—Puede ser. La verdad es que Kai y yo no pensamos en otra cosa. —dijo Kyungsoo, lanzándole una mirada cómplice para apoyar sus palabras—. Cada vez que tenemos cinco minutos libres y estamos juntos.

—Oh, no, no te atreverás a hacerlo, Kyungsoo soy tu hermano mayor respétame ¿si? —lo reprendió JunMyeon—. No voy a dejar que me hagas sentir culpable para que me quede aquí, y tu marido y tú puedan tener más sexo.

—No es por el sexo. Es por el bebé. —dijo Kyungsoo—. Un sobrinito para ti. ¿No sería maravilloso?

—Muy maravilloso. —convino JunMyeon con sinceridad—. Pero que ocurra no es responsabilidad mía.

Kyungsoo se echó a reír.

—Oh, bueno, pero valía la pena intentarlo. Ahora debo irme. Tengo cosas que hacer. —se despidió Kyungsoo.

—Imagino que la casa de Baekhyun será tu primera parada. —dijo JunMyeon.

Su hermano no se molestó en fingir.

—Pero por supuesto que sí. —dijo al punto—. ¿Quieres venir?

Algo le decía a JunMyeon que acompañarla sería la única manera de proteger sus intereses. De otro modo, Xiumin y Baekhyun solo oirían la versión de Kyungsoo diciéndoles que iba a hacer unos trabajos para SeHun. Eso sólo serviría para atizar el afán de sus hermanos por convertir la situación en un floreciente romance. Y una vez inspirada la idea, ¿quién sabía hasta dónde podrían llegar para asegurarse de que su amor madurase hacia la primavera, al mismo tiempo que las campanillas chinas? Aunque eso también ayudaría a que no supieran que Taehyung lo había visitado, pero no, el peligro más latente era SeHun porque si sus hermanas se enteraban de lo que había pasado entre ellos JunMyeon tendría que cargar el peso de tener dos relaciones fallidas, el peso de ser el cornudo de una relación por segunda vez consecutiva y no deseaba eso, por eso no quería estar cerca de SeHun porque SeHun le recordaba lo miserable que era su vida, de cómo había tratado de ser feliz pero le habían pagado igual. Así que tenia que lograr que sus hermanos dejaran de buscarle romance con SeHun.

Por ende, le sonrió a Kyungsoo alegremente.

—Te seguiré.

Y JunMyeon supo que había tomado la decisión correcta cuando vio que Kyungsoo no trataba de ocultar su decepción. 

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¿Bueno diganme que opinan? jaja siento que esto sera muy largo pero con drama ahi tal vez nos tome más tiempo se lograra.