nueve
Para sorpresa suya, JunMyeon se encontró la mesa puesta. SeHun había encendido unas velas y había puesto un jarrón con flores en el centro de la mesa. Había tenido en cuenta todos los detalles para una cena romántica, y un escalofrío de anticipación recorrió la espina dorsal de JunMyeon.
—¿Qué es todo esto? —preguntó JunMyeon con suspicacia, como si no estuviera claro.
—Ambiente. —dijo SeHun, con aspecto vagamente incómodo—. He oído que a muchos chicos les gusta.
—Tal vez cuando los están cortejando, pero las circunstancias son ligeramente distintas en nuestro caso SeHun. — corto JunMyeon sacando una cerveza en lata de la nevera.
—¿Ah, sí? —preguntó SeHun con tono intencionadamente seductor.
Y JunMyeon lo miró con escepticismo dándole una bebida a su cerveza para luego ponerse a reír por la situación.
—SeHun, SeHun jajaja no puedes decirme esas cosas. —se burló.
—¿Por qué no? —cuestiono SeHun dejando lo que estaba haciendo.
—No es apropiado. —rezongo JunMyeon como a un niño con déficit de atención.
—¿Porque nos separamos hace mucho tiempo?
—No, idiota. Porque estás casado y tienes un hijo, al menos. ¿Qué te pasa? No puedes tirarme los tejos. No voy a tener una aventura con un hombre casado sólo por los viejos tiempos. —escupió JunMyeon ya sin nada de gracia.
Algo oscuro y doloroso brilló en los ojos de SeHun y su aspecto físico también cambio.
—Gracias por el voto de confianza respecto a mis principios morales JunMyeon. —dijo con voz tensa—. Y para que quede claro, tengo un hijo que vive en Asan con su otro padre. Y ya no estoy casado.
—De nada. — murmuro con simpleza JunMyeon dándole otro sorbo a su cerveza y luego mirarlo—. ¿Estás divorciado... o separado simplemente? —preguntó luego para asegurarse de que no había oído mal, por estar bebiendo.
—Va a hacer tres años. Puedo traerte los papeles para que los veas si no me crees. —dijo SeHun con expresión lóbrega.
JunMyeon sonrió, no supo si era porque ya lo había olvidado de verdad o por el alcohol, pero quería burlarse y gritarle que no le importaba ver esos papeles de divorcio, ni nada con referente a su vida.
—¿Qué ocurrió? —preguntó JunMyeon ocultando su sonrisa y aguantándose sus comentarios.
SeHun le lanzó una mirada inescrutable.
—No quiero hablar de ello.
—Pero...
—Mira JunMyeon, te he preparado una pequeña cena y me he quedado para asegurarme de que cenabas. Nada más. Eso no te da derecho a entrometerte en mi vida personal. —dijo SeHun como si lo estuvieran atormentando.
—¿disculpa? —gruño JunMyeon— Tú estás tratando de entrometerte en la mía, sin que yo por menos te la comentara o diera indicios de querer hacerlo asi que no te hagas el ofendido o la victima y... —le recordó.
—Y tú me has dicho que me largue. Ahora comprendo por qué. —hablo SeHun en tono más calmado—. Hablemos de temas neutros y seguros, ¿de acuerdo?
JunMyeon asintió, pero en lo más profundo de su ser, en aquel lugar en el que la noticia de Pete acababa de encender una diminuta satisfacción de que la vida de SeHun también se haya vuelto miserable, por lo menos no había sido el único que fracaso en el amor y eso ya lo hacía sentir menos miserable.
Se tragó todo lo que quedaba de la cerveza y se sentó sobre la silla, al ver la expresión sin gracia de SeHun JunMyeon sintió la necesidad de sacar algún tema del que pudieran hablar, su rostro y actitud molestaban su animó jovial por la bebida.
—El pollo tiene muy buena pinta. —dijo finalmente—. ¿Cuándo aprendiste a cocinar?
—Después del divorcio. —dijo SeHun, evitando su mirada.
Así que ni siquiera la cena era un tema de conversación seguro pensó JunMyeon y lo miró con creciente frustración.
—Podrías poner de tu parte o por lo menos tratar SeHun. —refunfuño JunMyeon haciendo pucheros—. Di algo, estas malogrando mi ambiente de paz y alegría...
Una sonrisa ajena a sus deseos hizo elevarse las comisuras de los labios de SeHun. Era evidente que estaba luchando por contenerla.
—Nunca hubo nada sencillo entre nosotros, ¿verdad JunMyeon?
—No mucho. —admitió JunMyeon sonriendo.
—Siempre podemos hablar del tiempo. —dijo SeHun—. He oído que puede nevar otra vez.
—¿De verdad? ¿Cuándo? —preguntó JunMyeon, siguiéndole la corriente.
SeHun sonrió ampliamente.
—A lo largo del invierno.
JunMyeon se rió y la tensión desapareció.
—Te lo has inventado, ¿verdad?
—Oye, es un parte meteorológico tan acertado como los de las noticias. — se quejó SeHun.
—Supongo. —dijo JunMyeon, devolviéndole la sonrisa—. ¿Crees que lloverá esta primavera?
—Lo más seguro. —dijo SeHun.
—Si nos esforzamos, podríamos labrarnos un futuro pronosticando el tiempo.
—Personalmente, me gusta mi trabajo. —dijo SeHun—. Pero te animo a que lo intentes.
JunMyeon negó con la cabeza.
—Yo no. Me gusta el diseño de exteriores. —dijo JunMyeon, pero luego se arrepintió al recordar las duras palabras de Taehyung sobre su trabajo y sus dibujos*.
pero contrario a lo que pensaba los ojos de SeHun se iluminaron al oírlo, es más parecia maravillado, como si su trabajo no le pareciera ridiculo o una estupidez.
—¿Te dedicas a eso? —pregunto SeHun con alegría y admiración.
—Mmm sí. —dijo JunMyeon, sorprendido por el entusiasmo de SeHun—. ¿Por qué?
—Porque es un trabajo maravilloso e importante en la construcción de una casa. —dijo SeHun—. Y bueno supongo que no te interesará trabajar mientras estás aquí, ¿no?
—Kai me dijo que podría tener trabajo para mí. —admitió JunMyeon algo indeciso—. Pero aún no hemos discutido las condiciones. —añadió, aunque la verdad era que la oferta fue antes de que Taehyung le dijera esas duras palabras y ahora ya no se encontraba muy animoso de hacerlo.
Pero SeHun asintió lentamente.
—Podrías trabajar a través de él o directamente para mí. Llevo semanas en su lista de espera para los jardines de un par de casas que acabo de terminar. Me dijo el otro día que tal vez pronto tuviera ayuda. Supongo que se refería a ti.
JunMyeon tragó con dificultad. No se esperaba oír esas palabras que relegaban tanta importancia a lo su trabajo, esperaba tal vez unos comentarios no tan despectivos. Sin duda esa sorpresa le ayudo a JunMyeon en recobrar algo de la confianza y amor que le tenía a su trabajo, pero ¿trabajar para SeHun? ¿Podría hacerlo? Necesitaba saber si tendrían que trabajar muy estrechamente. Tal vez fuera más inteligente contar con kai como escudo, porque SeHun había demostrado tener un interés en JunMyeon y aparte había dicho que estaba separado.
—¿Las decisiones las tomas tú o los propietarios de las casas? —preguntó JunMyeon.
—De momento las tomo yo. He construido esas casas sin saber si las iba a vender y me gustaría que contaran con unos jardines perfectamente diseñados para la primavera, cuando el mercado inmobiliario estará en su momento álgido en la zona —lo miró SeHun fijamente—. ¿Te parece posible?
JunMyeon posó el tenedor en la mesa y le sostuvo la mirada.
—No lo sé. ¿Y a ti, SeHun?
—¿Qué me estás preguntando?
—Ha pasado mucho tiempo. Y han pasado muchas cosas también. ¿Podrás tratarme con el respeto que merezco y confiar en mi opinión, dejando de lado nuestro pasado o las preguntas personales? —pregunto por fin JunMyeon dejando salir un suspiro.
—Yo podría preguntarte lo mismo. —le recordó SeHun.
—Pero yo he preguntado primero. —dijo JunMyeon, curvando los labios en una sonrisa.
SeHun lo miró sin titubear.
—Siempre he confiado en ti JunMyeon. Fui yo quien lo estropeó todo, JunMyeon, no tú, tú siempre has sido perfecto. —dijo SeHun mirándolo con sinceridad—. Puede que no mostrara el respeto que merecías, pero todo fue culpa mía y de mi estupidez. No tuvo nada que ver con mis sentimientos hacia ti. Sé que no tiene mucho sentido, porque al final fuiste tú quien sufrió.
—No, no lo tiene. —admito JunMyeon sin mirarlo.
—Supongo que la pregunta verdadera es si tú confías en mí lo suficiente para darme una segunda oportunidad, al menos lo suficiente para trabajar juntos en un par de proyectos. Podemos hacerlo poco a poco. En cuanto creas que no puedes hacerlo, se terminará. Sin resentimiento lo prometo JunMyeon. —juro SeHun.
—Nunca dejo un trabajo a medias SeHun. —dijo JunMyeon retándolo—. Terminaré lo que empiece. Puedes contar con ello y no tienes que prometer nada, prefiero guiarme a los hechos y no promesas.
SeHun asintió vehementemente.
—Y tú puedes contar con que no volveré a hacerte daño, JunMyeon. Hablo en serio.
Todo en SeHun irradiaba sinceridad. JunMyeon quería creerlo desesperadamente. Era evidente que SeHun se refería a algo más que a un par de colaboraciones en diseño de jardines, pero el trabajo era lo único en lo que podía pensar JunMyeon por el momento. Por algo había que empezar, e impediría que se volviera loco metido en casa todo el día o en todo caso volverse un alcohólico, porque también JunMyeon es consiente que durante esta semana ha consumido más cerveza que casi todos sus años de vida.
Finalmente, JunMyeon tendió la mano a SeHun.
—Trato hecho. Llamaré a Kai para hablar con él, y si no le importa que trabaje para ti, lo haré. —dijo JunMyeon.
—Me parece justo. —SeHun tomó la mano de JunMyeon, pero en vez de estrechárselo, le besó los nudillos—. No lo lamentarás, cariño, lo juro por lo más preciado.
JunMyeon le sostuvo la mirada con firmeza, pero con cautela.
—Espero que tengas razón. —susurró. Por el bien de los dos, pensó JunMyeon con cansancio.
***********
*he visto que muchos decoradores de exteriores hacen dibujos como arquitectos y eso es lo que hace junmyeon y pues a Taehyung le parecian ridiculos, este tipo de criticas da inseguridades en una persona y más cuando es tu pareja.
ahora, este es un intento de drama y eso jaja, no planeo hacerlo tan largo y de hecho espero no hacerlo tan toxico, porque no soy fan de las relaciones toxicas y bueno la inexperiencia prima aca, porque gente ni novios he tenido jaja me faltan decepciones amorosas asi que algunas reacciones de junmyeon les parecen como que no van, es por eso, porque no se mucho y lo que plasmo son cosas que he visto de mis amigas o los posible escenarios que me imagino ante una posible ruptura y eso. Asi que disfruten y acepto criticas.
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