Capítulo dedicado a Shiki1221 por su cumpleaños.

Flashback

Ambos se encontraban columpiándose, con el atardecer detrás de ellos.

-¡Ésta es mi parte favorita del día, tebayo!

Dijo Naruto, emocionado y volteando a ver a Sasuke de reojo.

Se impulsaron con las piernas por unos minutos, disfrutando de la cálida brisa en sus rostros, hasta que fueron deteniéndose juntos.

Se habían conocido en el kinder, mientras peleaban por una pelota en el recreo. Y a partir de entonces, comenzaron a pasar el tiempo juntos.

Pero ahora, más que divertirse del todo, comenzaban a sentir la falta de calor en sus corazones.

Sasuke iba a irse de la ciudad, y no sabía si volvería alguna vez. Iba a perder a su mejor amigo.

Sasuke miró a Naruto y suspiró suavemente, para tomarle la mano al rubio.

-Naruto, no estés triste. Sé que volveremos a vernos, en serio.

Naruto estrechó la mano de Sasuke, y ambos entrelazaron sus dedos.

-Tú me has prometido muchas cosas durante éste tiempo, y has cumplido, ¿no? Pues déjame prometerte esto; nos volveremos a ver.

Naruto le sonrió y asintió.

-Teme.

-Dobe.

-Te extrañaré.

Murmuraron al mismo tiempo.

Fin del Flashback

-Vaya, otouto, y yo que creía que te inventabas lo de tu amigo para que mamá dejará de molestarte.

Se rió suavemente mientras el menor le dedicaba una mirada asesina.

Después de un par de segundos, Sasuke volvió a mirar a Naruto, quién seguía digiriendo todo.

"¡Es Sasuke! ¡Sasuke-teme! ¡Por dios! ¡Se veía tan... tan...! Tan atractivo..." gritó en su interior, aunque por fuera mostraba una sonrisita despreocupada, aunque el leve tic en su ojo derecho llamó la atención de Itachi.

El mayor de ambos Uchiha sonrió levemente, ya sabiendo la reacción del rubio. Lo había visto un par de veces, pero nunca había sabido su nombre, ya que Sasuke al hablar de él le llamaba dobe o usuratonkachi, pero al fin conocía al amor platónico de Sasuke, porque sí, éste gustaba de Naruto cuando eran niños, sólo que nunca cogió el valor suficiente para confesárselo, y menos aún después de que supo que iban a mudarse.

Pero ahora que los veía frente a frente, le parecía interesante observar las reacciones de cada uno.

Sasuke, por un lado, se mostraba muy tranquilo, pero él que era su hermano, podía distinguir que apretaba fuertemente la mandíbula.

"Ese dobe... no puedo creer que sea él... sí que ha cambiado" pensó Sasuke, lamentándose por sentir como el gusto que había sentido hace unos años por ese dobe, regresaba.

Se les veía muy nerviosos, así que decidió continuar.

-Bueno, siendo que ustedes dos ya se conocen, será un placer hacer negocios contigo, Naruto-kun.

Con eso pudo captar la atención del rubio, el cual sonrió. Ambos se tomaron de la mano y la estrecharon, cerrando el trato.

Incluso Itachi se sentía muy cómodo al lado del rubio, eso hasta que sintió la mirada de Sasuke posarse en él.

Pidiéndole... no, no le estaba pidiendo nada. Más bien, le exigía soltar la mano de Naruto. Vaya celoso...

Itachi procedió a soltar al rubio y le dedicó una suave sonrisa.

-Bueno, ya tenemos la decisión, primero iremos a comunicársela a nuestro padre y tú debes estar presente para eso.

Naruto asintió y se levantó junto a ambos Uchiha.

Después de haber cerrado el trato con el señor Fugaku, de inmediato ambas empresas comenzaron con los proyectos, y nos les iba nada mal. Todo salía mejor de lo que esperaban.

Y no sólo en el ámbito empresarial, pues al poco tiempo todos notaron que Naruto y Sasuke volvieron a ser muy cercanos de repente.

Salían juntos, iban a las reuniones juntos, a veces trabajaban en la oficina del otro, iban a casa juntos, almorzaban juntos... sólo les faltaba ir al baño juntos.

Todos estaban asombrados por el cambio que Sasuke mostraba cuando estaba con Naruto, y también cuando vieron que Naruto comenzaba a superar su pérdida.

Sasuke sabía de Hinata. Una noche, Naruto se lo había comentado, y Sasuke lo había abrazado, mientras lo escuchaba.

Todo se hizo un poco más fácil después de eso.

-¡Va a ganar él, tebayo! ¡Te lo puedo jurar!

Las personas en la empresa ya se habían acostumbrado a escuchar a Naruto y Sasuke gritar, así que seguían con sus actividades diarias.

-¡Tsk! Y yo te digo que no, dobe.

-¡Pues apostemos!

-¡Bien!

Ese para acostumbraba a apostar y competir en cualquier cosa, ésta vez hablaban de las tortugas que ambos tenían en la oficina. Las habían puesto a concursar en una carrera donde los pobres reptiles debían caminar a la meta.

Seeeeeh, esos dos eran muy raritos. Además, ¿de dónde habían sacado las tortugas?

Ah, sí. El rubio llegó con ellas un día.

-¡Mira, teme! Ahora son nuestras, tebayo. Son como nuestros bebés.

-¡¿Qué qué?!

Naruto sonrió triunfante al ver que su tortuga había ganado. Sasuke bufó. Un trato era un trato.

-Bien, ¿cuál será mi castigo?

-Una cita conmigo, teme

Le sonrió zorrunamente.

Sasuke sonrió de lado y se volteó.

-Pasa por mí a las siete en punto, sé puntual, dobe.

Dijo, empezando a caminar, haciendo que Naruto ampliara su sonrisa.

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-Tan sólo... prométeme eso, prométeme que no me dejarás así como así, porque no podría volver a perderte, desde entonces... no volviste a dejarme solo, ni un día, ni aún cuando tenía mi mente en otras cosas.

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-Naruto, idiota... eres el dobe más grande de los tiempos por no darte cuenta desde antes...

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Rozó con la yema de sus dedos sus labios, con una sonrisa de oreja a oreja y mirando al cielo.

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Bueno, espero que les haya gustado el regreso de ésta historia, de verdad. Intenté hacerlo lo mejor que pude, y afortunadamente, pude recordar más o menos que quería escribir.

Hasta pronto. 🧡❗