"¡Maaaaammmaaaa!"

Brandy se sentó en su cama y dejó escapar un bozteso aun sintiendose algo adormilada. Revisando el reloj digital que estaba estacionado en su mesita de noche, este se percato que apenas eran las tres de la madrugada.

Esta pronto se encontró caminando en direccion al cuarto de su pequeño hijo Fray, que quedaba justo enfrente de el suyo.

Al abrir la puerta y encender las luces, esta pudo vislumbrar con total claridad a la figura de su hijo temblorosa debajo de la sabana de su cama. Esto sólo podia significar una cosa, y es que su pequeño Fray volvió a tener una pesadilla.

Ya habían pasado cinco años desde que ella dio a luz a Fray. Brandy se sorprendió de lo rápido que pasa el tiempo cuando ella tiene un hijo como Fray.

"Que pasa Fray?", Ella se encontró preguntando suavemente mientras esta se sentaba aún lado de la cama de su hijo.

Fray rapido arrojó sus sabanas aun lado y se abrazo a su mamá, "Volví a tener la misma pesadilla", el le dijo sonando aun bastante afectado por lo que habia acontecido en su pesadilla.

Ver a su hijo tan perturbado por una simple pesadilla, siempre rompia el corazón de Brandy. Ella aun se pregunta de donde sale la creatividad de su hijo para tener pesadillas tan extrañas y perturbadoras.

"Puedes decirme que fue esta vez Fray?", Brandy pregunto mientras se preparaba para recordar lo que su hijo le dijera, y luego poder apuntaron por el en su diario de sueños.

Ese diario a probado ser muy útil cuando su hijo visita al terapeuta.

"Esta ves era un mono mama ...", Fray le dijo mientras levantaba la vista y la veia con ojos llorosos, "... y-y-y habia otros monos, creo-creo que eran mi mamá, mi papá, y mi hermana mayor, y esos monos no dejaban de gritame cosas feas mientras me decían que era inservible por ser diferente", el le dijo para luego volver a enterrar su rostro en el pecho de Brandy, "... Tenia mucho miedo, mama. Seguia tratando de hacerlos felices para que me dejaran de decir esas cosas feas sobre mi, pero nada de lo que hacia servía, ellos cada vez me trataban peor por ser diferente!"

"Shh- shh. No te preocupes Fray ...", Brandy exclamó mientras le daba un abrazo protector y lleno de cariño materno a su cachorrito asustado, "... Todo esta bien. Recuerda que sólo fue un sueño querido. Nadie te va a tratar mal sólo por ser diferente", ella consolo.

Eso era algo que ella noto aterraba mucho a su cachorro. Ser tratado mal sólo por ser diferente.

Por que si, Fray era un cachorro muy diferente, y este era bastante conciente de esto y como los demas niños de su misma edad habeces lo veían raro sólo por eso.

El no tenia una muy buena memoria; a este le costaba mucho recordar ciertas cosas pequeñas, y casi siempre este actuaba de manera impulsiva a la hora de hacer cualquier cosa de la cual no se sintiera del todo seguro.

Fray era muy bueno comprendiendo cosas y situaciones, de eso no habia duda, pero no era bueno memorizando cosas como nombres (El aún se confundía con los nombres de sus tíos, el habaces llamaba a Chili o a Bandit, Billy y Baldy. Las primeras veces fueron, graciosas, pero despues de varias veces, era claro que algo estaba mal), lugares, dias de la semana, y entre otras cosas, el simpre las olvida o le costaba mucho recordarlas.

Eso era algo peculiar acerca de Fray ... El cachorro era muy listo, a niveles extremos, de eso Brandy nunca dudo.

Sólo que ... El no era para nada bueno recordando cosas que pudieran parecer pequeñas o intracendentes.

Por ejemplo, el, Brandy aun no sabe como o cuando, se las arreglo por el mismo para aprender el lenguaje de señas australiano y hablar frances. Y cuando Brandy le habia preguntado de el, por que sintió la nesecidad de aprender esos dos idiomas? Su hijo simplemente se encogió de hombros, y le dijo con la sonrisa mas inocente de el mundo, que el habia conocido a dos niños nuevos que parecia que nesecitaban a alguien con quien hablar.

Esa fue realmente toda la razón y motivación que su hijo tuvo para aprender esos idiomas.

Y el realmente lo hizo! Brandy no podia estar mas orgullosa de su pequeño genio aun que lo intentará. Ella se sorprendió mucho el día que lo encontró hablando francés de manera fluida con otro niño de su salón. Los padres de dicho niño incluso la felicitaron, por el simple echo de creer que ella era la que le habia enseñado el idioma.

Su pequeño de cinco años ya dominaba tres idiomas diferentes (Cosa que le habia ganado un helado), pero de alguna forma, aun olvidaba el nombre de los dias de la semana y tenia muchas dificultades a la hora de sumar, recordar los nombres de las personas, y trabajar con numeros en general.

Era claro que la forma en que Fray aprendía las cosas era muy diferente a la de cualquier otro niño de su edad. Este tenia una habilidad increible para aprender otros lenguajes, pero a su ves, el era muy malo recordando algunas cosas.

"Quieres que duerma contigo cariño?", Brandy le pregunto a su cachorro separandose un poco del abrazo para poder verlo con la mejor de las sonrisas.

"... Si", Fray exclamó negandose a ver directamente a los ojos a su madre. El realmente no queria molestar a su madre con esto, pero ahora mismo tenia tanto miedo de que su pesadilla se repitiera, que el no creyó poder dormir solo.

"Esta bien cariño. Deja voy a mi habitación por mi almhoada", Brandy le dio un pequeño beso en la frente antes de retirrase a su habitación e ir por su almohada especial, una que le ayudaba con los dolores de cuello.

~~>>(Mas tarde)<<~~

Brandy iba conduciendo de camino a la casa de su hermana y su cuñado. En la parte de atrás, ella tenia su equipo de hockey. El dia de hoy ella tenia planeado salir a jugar Hockey con Chili y Trixie.

Mientras ellas jugaban, Bandit accedió a cuidar de Fray.

Fray venia felizmente en el asiento de acompañante, pegando su rostro en contra de la ventana y viendo en silencio cada pequeña cosa fuera del auto con curiosidad y ansias de saber mas. El patrón de su pelaje, era una mescla de naranjas claros y mas fuertes y marrón, que lo hacia un cachorro bastante apreciado a su abuelo cuando este tenia su edad.

Pronto el auto de Brandy se detuvo. Esta se estaciono frente a la casa de su hermana, y antes de que ella pudiera decirle cualquier cosa a Fray ...

"¡Hu-zaa! ¡Llegamos!", este grito felizmente mientras rapido se quitaba el cinturon de seguridad, abria la puerta del auto y saltaba afuera de este. Su hiperactividad se mostraba rápidamente cuando este intento escalar el primer arbol que encontró.

Antes de que este pudiera lograr escalar cualquier cosa, su madre ya lo habia atrapado y lo estaba levantando.

"Oh no, no esta vez mi pequeña ardillita", ella le dijo en un tono juguetón, "Recuerdas para que vinimos aquí?"

"Emm, ¡oh! Si", Fray sonrió al poder recordar a que es lo que habian venido, "venimos con la tía Billy y el tio Baldy, verdad?"

"Exacto, y recuerda, es Tía Chili y Tío Bandit"

"Bandit y Chili ..., okey", Fray exclamó con una gran sonrisa, levantando dos pulgares en alto y asintiendo con su cabeza. Esta ves el lo recordaría. El estaba seguro de eso.

Brandy asintió satisfecha con la respuesta de su hijo, "Bien, vamos a saludar", ella le dijo mientras seguia cargandolo como si fuera un bolso.

"¡Mama~!", Fray se quejó mientras dejaba escapar una risa, "¡Ya puedes soltarme!"

"Voy soltarte si me prometes que no volveras a tratar de escalar el primer árbol que veas", Brandy le dijo, "Okey?"

"Hmm, ¡okey!", Fray exclamó haciendo una cruz en su pecho con su mano derecha mientras que cruzaba los dedos con la otra, y diciendo: "Que un rayo me parta en dos si vuelvo a escalar otro arbol, madre"

Brandy sonrió algo entretenida al notar que su hijo habia cruzado los dedos, ella fingió no haberlo visto e le dijo, "Eehh, tal ves no eso, pero aún puedo confiscar tu tablet en casa, sabes?"

Fray abrió mucho los ojos al escuchar eso, "¡Por favor no! ¡La nesecito para aprender nuevas cosas!", el le dijo a su mamá, sonando bastante preocupado de perder el acceso a su tablet en casa.

"Okey okay, tal ves no eso. Pero aun puedo comerme todo tu helado en casa", ella señaló.

"Aww, okey. Prometo no intentar escalar ese arbol por haya", el señaló a uno de los arboles pasando la calle.

Brandy vio a su hijo con una ceja levantada, "Sólo ese?", ella pregunto.

"Emm, tambien ese y ese y ese y ese otro por aya", Fray comenzó a señalar todos los árboles que podia ver mientras Brandy por su parte comenzaba a caminar directo a la entrada del hogar de su hermana menor Chili y Bandit.

Esta presionó el timbre de la puerta y espero a que la abrieran.

"¡Oh! pero no ese de por haya, ese de echo se ve bastante divertido de escalar", Fray sigio señalando los arboles que este pudiera ver desde la posicion en la que estaba.

La puerta de la entrada pronto se abrió. De el otra lado de la puerta, estaba Chili acompañada de Bandit y sus dos pequeñas hijas, Bluey y Bingo.

"¡Hola tía Brandy!", Bluey y Bingo saludaron.

"¡Hey niñas!", Brandy saludo a las dos pequeñas, antes de sostener a su hijo frente a ella, y exclamara de una forma algo jugetona, "Miren lo que traje conmigo"

Fray, al ver a sus dos primas, no pudo evitar sonreir y saludarlas, "¡Bonjour les cousins Blue et Bing! (Buenos dias primas Blue y Bing)", el les dijo en un perfecto frances mientras su madre al fin lo dejaba de cargar y lo dejaba frente a la puerta, "Et bonjour à vous aussi, oncle et tante Billy et Baldy", (Y hola tambien abustedes tia y tio Billy y Blady), el saludo viendo a su tío y tia.

"Fray~", Brandy reprimio, "Que te dije acerca de hablarles en frances a tus tíos y primas?"

"¡Oh! Hehe, lo siento madre ...", Fray con un sonrisa algo nervisa exclamó, "Hola Blue y Bing. También hola ustedes tio y tía Baldy y Billy"

Bandit y Chili simplemente le regresaron el saludo, "Hola Fray", y nisiquiera pestañaron un ojo extrañados al escuchar sus nombres siendo mal pronunciados por el pequeño cachorro. Ellos ya sabian muy bien que a el hijo de Brandy le costaba mucho recordar nombres.

"Hey Fray, ven con nosotras jugar!", Bluey exclamó en direccion a su primo, "Llegas justo a tiempo. Vamos a jugar al restaurante con papa. Tu y el pueden ser los meseros"

"¡Hu-zaa! ¡Me gusta ser el mesero!", Fray exclamo emocionado, mientras se apresuraba al interior de la casa detras de sus dos primas. Este dia perfilaba a ser uno muy divertido y lleno de juegos.

Justo cuando los niños se fueron a preparar su juego, Brandy, antes de irese con su hermana a recoger a Trixie, le pasó un pequeño contenedor con pildoras a Bandit. Esta era la medicina que el doctor le habia recetado a Fray para controlar un poco su hiperactividad.

Ella quiciera que su hijo no las nesecitara, pero sin ellas, el probablemente no se detendría en todo el dia.

Oh bueno. Almenos ella ahora mismo se podía distraer un poco de la maternidad, e ir a jugar Jockey con su menor hermana y Trixie. Fray ahora mismo estaba en buenas manos con Bandit.

~~>>(Continuara)<<~~