Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 1

-Solo no me gusta que hagas eso Becca. -Cristian enciende el auto, furioso - .Ya lo hemos hablado, no entiendo porque solo no me haces caso de una vez por todas.

-No lo hemos hablado, tu solo me das órdenes, y eso no es hablar. -Digo, molesta por su actitud -. No tiene nada de malo usar un vestido. No es que este desnuda, ni mucho menos.

-No tiene nada de malo, pero, tú no tienes porque usarlos, y punto. Sabes que me molesta, así que no entiendo la razón por la cual lo haces.

-Pues te jodes. - Murmuró enojada.

-¿Qué dijiste? -Frena en el semáforo y me mira -. Sigue diciendo esas cosas Becca y juro por dios que te vas a arrepentir.

-Lo lamento, solo que estoy harta que me prohíbas este tipo de cosas.

-Lo sé, pero si me quieres ver feliz y quieres que esto siga funcionando, harás lo que yo diga, ¿vale?

¿Tengo más opciones?, la respuesta es clara.

-Está bien, dejaré de usarlos.

-Gracias cariño. -Intenta alcanzar mi mano pero la quito antes de que logré alcanzarla -. Becca, por favor. - Habla con advertencia clara en su voz.

No quería seguir la discusión, así que, me trago mi orgullo y pongo mi mano de nuevo en mi pierna, a lo que el la toma con la de él, apretándola.

-¿Ves que no es difícil entendernos? - Me da una sonrisa, como si hace unos minutos no hubiera querido tirarme del maldito coche.

-Lo veo.

Al llegar a mi apartamento, Cristian decidió bajar conmigo y acompañarme. A pesar de que le dije que no era necesario, él no me escucho.

-Gracias por traerme. - Digo, cuando estamos al frente de mi apartamento -. Nos vemos después.

-¿No me vas a invitar a pasar? - Pregunta, mientras me toma por la cintura.

-No. Mañana nos vemos en la universidad, adiós.

Lo quite de encima, y antes de que pudiera decirme algo, abrí la puerta, pero me detuvo antes de entrar.

-No te enojes preciosa. Sabes que no me gusta que estemos peleados.

-No estoy enojada, estoy cansada.

-Claro. - Suelta un suspiro -. Nos vemos mañana.

-Adiós.

Y sin más, cierro la puerta.

Me voy a mi habitación. Ni siquiera me tomo el tiempo de cambiarme ni darme una ducha. Solo me tiró en la cama, rendida.

{✷✷}

Estaba rezando para que terminara está clase lo más pronto posible. Pero al parecer, el tiempo quería pasar más lento de lo normal.

Hasta que unos minutos después, el profesor da finalizada la clase. Tomo mis cosas rápidamente y soy la primera en salir, empujando a algunas al paso, pero eso no me importo.

Voy directo a las mesas de afuera, y es donde veo a mi amiga.

-Lamento por tardar, el profesor no nos dejó irnos -Digo, sentándome frente a ella -, fue estresante.

-No te preocupes cariño. Yo recién me senté. - Me sonríe. -¿Cómo te fue en la cena con Cristian? --Pregunta después de unos segundos.

-¿Cómo crees que fue? - La miro, para después recostarme en mi silla, algo fastidiada.

-¿Discutieron? -Asiento con la cabeza -. ¡Vamos!, Megan me debe cinco dólares.

-Neily, no es gracioso. Dejen de estar apostando. - Me cruzo de brazos, ofendida -. Mi vida no es una apuesta.

-Para mí sí. -La miro, con advertencia -Vale, perdón...- Ruedo los ojos, sé que no lo siente. - ¿Por qué discutieron está vez?

-Ya sabes, celos.

-El día en que ustedes tengan una cita que termine sin una discusión, es porque el mundo se va a la mierda. - Sonrió divertida.

-Entonces nosotros estamos salvando a la humanidad de extinguirse, deberías agradecernos.

-Deberías dejarlo Becca. - Se pone sería, al igual que yo -. Cada vez se vuelve más idiota. No entiendo porque no lo has terminado.

-Porque lo quiero y además, todas las parejas discuten porque no están de acuerdo en algo del otro.

-Tienes razón - Admite -, pero él ya se molesta por nada. Además, las parejas discuten, él te prohíbe cosas. Son dos cosas diferentes.

-Eres una exagerada, lo sabías, ¿no?

-Y tú una tonta por perdonarlo siempre.

-¿Podemos hablar de otra cosa?, no quiero amargarme el día.

-Está bien. Pero sabes que este tema no queda aquí. -No respondo nada. - Por cierto, tengo una gran propuesta...una fiesta.

-Sabes que no voy a fiestas.

-No vas por el novio pica piedra que tienes. Y esta vez no voy aceptar un no por respuesta, vas a venir. Y punto.

-No es un pica piedra. -Frunzo el ceño por tal apodo -. Y no pienso ir. No me gustan.

-Sera porque no has ido a una buena fiesta, pero está será genial.

-¿Dónde será?

-Queda cerca de la playa. La casa que está desocupada, ¿la conoces? - Asiento -. Pues ahí será. No te preocupes, yo paso a recogerte.

-Por si los oídos te fallan; no he aceptado ir.

-La sorda eres tú. Te dije que ibas a ir, si o sí.

-Está bien pesada. - Accedo finalmente. - Pero, ¿puedo ir con Cris?

A ella se le borra la sonrisa al instante. Al parecer la respuesta es un poco obvia.

-Eso significa que no, ¿verdad?

-¿Tu qué crees?, cariño, tienes que aprender a salir sin tu novio, así que solo iremos tu y yo.

-Está bien, pero ¿cuándo es la fiesta?

-Este sábado, te paso a recoger a las once.

-Entonces con todas las ansias del mundo te esperaré.

-No puedo creer que hayas aceptado, esto es un verdadero milagro.

-¿Qué haya aceptado qué? - La voz de Cris hace que Neily deje de sonreír de nuevo -. Hola preciosa. - Me da un beso en la mejilla.

-Hola. -Respondo a secas. Todavía estaba molesta con él. -¿Pasa algo?

-Nada, solo quería verte. ¿De qué hablaban? -Pregunta, mientras se sienta a mi lado.

-De algo que no te importa. - Neily habla en voz baja, pero ambos escuchamos perfectamente. Solo que Cristian la ignora.

-No hablábamos de nada. - Respondo, mientras miro a Neily de manera significativamente.

-Ah, ¿sí?, yo creí que si hablaban de algo.

-De la vida hablábamos, ¿Quieres unirte y escuchar como mi madre me parió?, es muy interesante. - Neily lo observa de mala manera.

-No, está bien. - Él sonríe falsamente, para después mirarme -. Te quería hacer una propuesta.

-¿Qué propuesta?

-Este sábado, para ir a la cabaña, ¿qué te parece?, solo tú y yo.

Neily me mira y empieza a negar con la cabeza. Yo solo tomo de mi botella de agua, mientas pienso una excusa para decirle.

-Bueno... - Me aclaro la garganta, antes de seguir hablando -. Lo lamento Cris, pero ese día tengo otras cosas que hacer.

Veo como Neily intenta no reírse con todas sus fuerzas. La verdad es que ella tiene razón, tengo que aprender a salir sin él, así sea por una noche. No me moriré por eso, ¿no?

-¿Qué tienes que hacer? - Pregunta, tenso.

-Tengo muchos trabajos de la universidad, ya eso lo sabes. Quiero adelantarlos, si quieres podemos ir otro día.

No le estaba mintiendo del todo, porque si tengo muchos trabajos.

-Vamos Becca, si quieres yo te ayudo con los trabajos. - Insiste -. Podemos hacerlos allá, no te preocupes.

-No puedo Cris, perdón.

-Vale.

Se levanta y se va, me pasó una mano por la cara, molesta por su comportamiento tan infantil.

-Bec, sabes que te quiero y que eres mi mejor amiga desde hace años, por eso como tú amiga quiero aconsejarte de que termines con él.

-Deja el tema ya Neily.

-Está bien, no me meteré más.

{✷✷}

-Sí, deje mi currículum aquí hace unos días. ¿Todavía no hay respuesta? -Pregunto a la señora que me está atendiendo -. Necesito el trabajo.

-Lo entendemos señorita, pero, el puesto ya fue ocupado. Dado a su falta de experiencia, ya alguien más lo tomo.

-Joder... -Murmuró frustrada -. Claro, gracias.

-No hay de que, y lamento que el puesto no haya quedado para usted.

Iba a responder, pero un fuerte golpe en una de las mesas, hizo que mi atención se desviará hacía allá.

Un chico, al parecer estaba más que furioso, estaba sentado junto con un tipo. Parecían que estaban discutiendo.

Decidió dejar de ver, no quería que me pillaran metiendo las narices en asuntos que no son míos.

-Claro, hasta luego. - Me despido de la chica y salgo del restaurante.

Saco mi teléfono, y marco a Neily, que responde al tercer tono.

-¡Bec!, ¿qué pasó?, ¿tienes el trabajo?

-Hola, no, no lo conseguí. - Al otro lado de la línea se queda en silencio -. ¿Podrías venir por mí?, ya se hizo de noche y...

-Ya estoy yendo, nos vemos cariño.

-Gracias.

Cuelgo el teléfono y lo guardo en mi bolso.

No tenía ni idea de que hacer. Necesitaba ese trabajo, no tengo como pagar la renta del departamento, no tengo como sustentarme. Ya he buscado en todos lados, y tan solo no me contratan.

Sentía que cada día estaba más jodida.

Una lágrima rueda por mi mejilla y la limpió rápidamente, no pensaba llorar en plena calle. Tenía que mantenerme fuerte y pensar en algo. No estaba en mis planes quedarme en la calle.

Estaba sumida en mis pensamientos, hasta que un fuerte empujón hace que pierda un poco de equilibrio. Logro estabilizarme rápidamente, para mirar a la persona.

-¡Hey, fíjate por dónde caminas, imbécil! - Le grito molesta al tipo, que ya se había alejado un poco.

Él se voltea y viene hacia mí a pasos acelerados. Yo retrocedo un poco. No lo quería cerca. Y al verlo mejor, era el chico de hace unos minutos, el que había golpeado la mesa...

-¿Qué dijiste? - Su voz fría y cortante hace que me sienta como una niña la cual está siendo regañada por su padre.

-Que te fijes por dónde caminas. Casi me tiras al suelo.

-Estabas estorbando en la entrada, así que fíjate tu.

-Joder, por eso existe la palabra, "permiso", un poco de amabilidad no hace daño, ¿no crees?

Él se da la vuelta, y empieza a caminar hacia un coche. Al tiempo en que salía un señor, más que furioso.

-¡Kailan, no hemos terminado! - Grita, rojo de rabia.

-¡Para mí ya terminó esto, así que vete a la mierda! - El chico se sube al coche, y sin esperar lo enciende y sale a toda velocidad.

¿Qué mierda acaba de pasar?

El señor vuelve a entrar en el restaurante, y yo me quedo, ahí parada sin saber que hacer.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro