Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 3.

El pequeño chico japonés se encontraba por fin frente al casillero de Sunoo. Tomó aire y lo soltó de apoco, acercando el sobre a la rendija para poder dejar la carta en el interior del casillero e irse de allí.

Cuando por fin la dejó dentro soltó un suspiro de alivio. Solo quedaba ir al club con tranquilidad para no levantar sospechas.

Lo que no esperaba encontrarse al girar era un australiano que era mejor amigo del chico al que acababa de dejarle una carta en secreto.

El castaño tuvo que taparle la boca para evitar que el chico de gafas hiciera ruido por el susto.

—Vale, Nishimura, prométeme que cuando te quité la mano de la boca no vas a gritar.

El rubio pareció pensarlo un poco para después asentir, a lo que el contrario retiró la mano de su boca.

—¿Tú no tenías que estar en el club de baloncesto?

—¿No tenías tú que estar en el de literatura?

—Y justo estaba yendo.

—¿Mientras metías una carta en la taquilla de Sunoo?

Y el silencio se hizo presente.

—¿No dirás nada, Ni-Ki?

—Por favor, no le digas a Sunoo que yo soy quien metió la carta la última vez, no quiero que lo sepa.

—¿Pero por qué no? ¿No es mejor solo decirlo y ya?

—Apenas nos hemos dirigido la palabra un par de veces desde entonces, va a rechazarme, seguro.

—No entiendo en qué momento te volviste tan tímido. No tiene sentido qué lo seas.

—Déjalo Jake, solo, por favor, no le digas nada y deja que me vaya. Sunoo vendrá pronto.

—Mierda, es cierto, Sunoo no puede verme aquí.— Comenzó a alejarse del chico. — Pero que conste que tú y yo tenemos una charla pendiente Nishimura.

El japonés suspiró acomodando sus gafas y alejándose de allí con las mejillas completamente rojas.

Heeseung soltó un suspiro tras ver al crush de su mejor amigo marcharse hacia el pasillo de las taquillas.

—Nishimura Riki, más te vale haber metido la carta. — Habló para sí.

—Lo hice, hyung.

La voz a sus espaldas hizo que por poco le diera un infarto, pero estaba feliz de escuchar que la carta estaba en su lugar.

—Pero Jake hyung me vio también.

Y entonces su felicidad se fue por la borda. O sea que, para empezar lo que había hecho no había servido para nada, y su amigo iba a ser expuesto ante su crush.

—Dime por favor, que estás bromeando Ni-Ki.

—No, no es broma, no bromearía con algo así hyung, pero no se preocupe.

Antes de que pudiera continuar hablando fue interrumpido por el chico coreano.

—¿Que no me preocupe? ¡Sunoo va a descubrirte pedazo de merluzo apocopado!

Heeseung comenzó a sacudir al pequeño rubio por los hombros mientras lloriqueaba.

—¡Pero no hace falta ponerse tan agresivo ni insultarme de esa forma! ¡Jake no le dirá nada!

El mayor pareció tranquilizarse de golpe.

—¿En serio? ¿No lo hará? ¿Te dijo eso?

Una sonrisa estaba apunto de aparecer en su rostro hasta que Riki habló.

—No pero...

En ese momento le dió un zape al menor y tomó su mano para arrastrarlo hasta el club de literatura, al que por cierto, estaban llegando ya tarde.

Sunoo estaba feliz. Se dirigía a la biblioteca con una amplia sonrisa que demostraba como se sentía mientras llevaba un sobre en manos.

Había recibido otra carta.

Mientras Jake estaba en su entrenamiento del club, él aprovecharía para leer la carta, deseando encontrar esas palabras que hacían a su corazón latir con fuerza.

Se sentó en una mesa casi al final de la biblioteca, comenzando a leer con calma el contenido del papel.

Al igual que en la nota anterior, encontró unas cuantas palabras que no conocía. Pero le encantaban. Esperaba encontrar un hermoso significado detrás de cada una de ellas, igual que con las últimas.

Acendrado, indeleble, gigil, asíntota y perenne.

Un total de cinco palabras nuevas para él estaban escritas en la carta.

Se apresuró a levantarse para poder buscar un diccionario en el que buscar las palabras escritas. Sin embargo, a pesar de haber estado quince minutos buscando, no encontró ninguno.

Se sentía un tanto decepcionado, él quería saber lo que decía, pero no había diccionarios y su teléfono no tenía batería.

Se encaminó al lugar donde se había sentado antes, con la cabeza baja.

Por culpa de esto no se dió cuenta del chico que estaba tomando unos libros en el mismo pasillo que él, ocasionando un pequeño choque.

—Lo siento muchísimo.— Hizo una reverencia disculpándose de inmediato, aún sin levantar su mirada. —No miré por donde iba, estaba distraído, lo siento.

—¿Sunoo hyung? Está bien, no pasa nada.

Al escuchar una suave voz que hablaba con nerviosismo levantó por fin la mirada.

—¿Riki? Pensé que estabas en un club, ¿no tienes que ir hoy?

—Oh, ¿lo sabe? Que lindo es- es decir, al preocuparse.— Aclaró apresurado y con las mejillas rojas. —Me mandaron a buscar unos libros, por eso estoy aquí.

Sabe algo de mí, ¿se interesó por mí? Oh dios mío, es tan dulce. Eso era lo único que podía pensar el pequeño japonés.

—Entiendo... ¿Y por casualidad no sabes si hay algún diccionario por aquí? No encuentro ninguno y realmente lo necesito.

—¿Diccionarios? Lo lamento hyung, ayer se los llevaron todos para poder traer ediciones nuevas mañana. Aunque si necesita ayuda y no es mucho tiempo, podría ayudarle. Soy del club de literatura después de todo, conozco muchas palabras.

—¿Harías eso por mí? Dios, muchísimas gracias Riki, eres genial. Ven.

El mayor tomó la mano del rubio para poder llevarle a la mesa en la que anteriormente estaba, sin saber que eso solo lograría hacer que el chico de gafas estuviera a punto de explotar de vergüenza.

—Mira, necesito entender cinco palabras. Está bien si no las conoces, después de todo son un poco extrañas. La primera es acendrado, ¿sabes lo que es?

—Sí, por supuesto. Algo acendrado es algo puro, que no tiene mancha ni defecto. Es una palabra muy linda.

—Sin duda lo es.—Susurró Sunoo mirando al menor con una sonrisa y las mejillas levemente rojas. —La siguiente en indeleble.

—Indeleble es algo que no puede borrarse ni olvidarse. Por ejemplo, la mayoría de bolígrafos con indelebles, su tinta no puede borrarse.

—Entiendo, entiendo... Bueno, lo siguiente es gigil.

—Oh, vaya, es una palabra que no se usa mucho aquí. ¿De dónde la sacaste?

—Yo, uh, bueno. Solo fue una tarea del profesor de lenguaje.

Murmuró el de cabello azabache tratando de ni tartamudear.

—Entiendo. Bueno, es un término filipino. Representa en impulso humano de pellizcar o aplastar algo o alguien cuando es muy adorable.

El mayor no pudo evitar llevar automáticamente sus manos a sus mejillas con una sonrisa, y por mientras, el pequeño japonés trataba de reprimir su sonrisa, porque sabía que él provocó la del mayor.

—Bueno, ¿y cuál es la siguiente, hyung?

—Uh...— Sunoo trató de mirar discretamente la carta, que había escondido antes, para después hablar. —Asíntota.

—Asíntota, es una palabra relacionada con las matemáticas, es un tipo de función. Es algo más o menos como una 'L', pero más curva, y nunca alcanza a tocar a ninguno de los ejes.

El chico coreano estaba completamente confundido tratando de procesar y comenzando a plantear que fuera algún tipo de broma de quien escribió la carta. Trató de simplemente sonreír, aunque era imposible mentir diciendo que no estaba decepcionado. Estaba por comenzar a hablar cuando fue interrumpido por el rubio de gafas.

—Aunque, por supuesto también puede tener un significado más distinto y bonito. Con esa palabra puede tratar de representarse una cosa que se desea y que se acerca de forma constante, pero que nunca llega a cumplirse.  En una asíntota, la línea nunca toca los ejes, como antes te dije. La línea representa aquello deseado y los ejes la realidad. Por más que la línea avance y se extiende, nunca consigue alcanzar los ejes.

Y ahí estaba, esa palabra que aceleraba el corazón de Sunoo como ninguna otra. Se sintió mal por pensar que el chico de la carta podía estar simplemente bromeando con él. Sentía que las lágrimas de felicidad querían salir y rodar por sus mejillas. Hizo su mayor esfuerzo por tratar de retenerlas, pero no lo logró. 

Ni-Ki al darse cuenta de las pequeñas gotas de agua salada que escurrían de los ojos del mayor no pudo evitar sorprenderse y preocuparse.

—Oh, dios, hyung, ¿se encuentra bien? ¿Por qué llora? 

—No es nada Riki, tranquilo. Solo es que tiene un significado precioso, nunca había escuchado algo así. Y bueno, soy un poco sensible.— Soltó una suave risa, causando así que esta vez el corazón acelerado fuera el del chico rubio.

Y en el fondo le entendía, después de todo él también lloró cuando le dijeron aquella palabra y su significado por primera vez.

Sacó el valor de donde no sabía que lo tenía y acercó su mano hasta la mejilla derecha del chico de cabellos azabaches, acariciando esta con suavidad esta y secando las lágrimas que la recorrían. 

Sunoo subió la mirada, sus ojos se cruzaron con los del contrario, las mejillas de ambos enrojecieron. Ninguno apartó la mirada por un tiempo, hasta que Riki reaccionó, apartándose rápido, hecho un completo manojo de nervios. 

—Vaya, me parece que ya se me ha hecho muy tarde, Heeseung hyung me regañará si tardo mucho más. Lo siento, nos vemos hyung.

Con alta velocidad se levantó y tomó todos los libros que necesitaba para después salir corriendo tan rápido como pudo del lugar. 

Sunoo estaba mirando hacia la dirección en la que se fue con una sonrisa, sin duda el chico era muy divertido. Pero entonces se dio cuenta de algo, se había olvidado de una palabra.

—Oh, diablos. ¿Qué hago ahora? 

Sacó la carta para poder mirarla, pero se le cayó en un descuido. Cayó boca abajo, dejando ver a Sunoo algo que no había notado antes en la parte de atrás.

''Perenne: que es incesante y dura para siempre o por mucho tiempo.''

El chico coreano abrió la boca sorprendido, ¿cómo es que el chico sabía que justo esa palabra no iba a poder encontrarla hasta mucho después? ''Será casualidad'', quiso pensar. Pero la realidad, es que Riki lo tenía todo planeado. Tal vez no la parte del llanto de Sunoo y el quedar por dos minutos mirándose sin decir nada, pero sí lo de escapar antes de decirle la última palabra.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro