—Llegamos. —informó Liam.

Segundos después, un gran portón de metal fue abierto y la enorme mansión de Leandro se mostró, era bastante pintoresca; muy a su estilo, elegante y sofisticada.

—Maldito fanfarrón. —masculló el omega admirando el lugar.

Antes de entrar Zayn informó que Kira alfa aliada le envió un reporte sobre la omega, ella estaba dispuesta a contar todo lo sucedido.

—Al fin algo bueno. —Liam se acercó al morocho para tenerlo junto a él.

—Eso espero, y no salgas con más tonterías —Louis suspiró.

Un alfa se acercó de forma cautelosa mostrando su respeto con una pequeña reverencia, era el encargado de escoltarlos hasta llegar a la puerta principal.

Louis bajó de la camioneta siendo escoltado por Liam y Zayn, durante el trayecto estuvo enviándole mensajes a Harry, ya era un día pesado y su lobo solo deseaba regresar a casa y ver a su omega.

Como siempre su postura cambió, su rostro se hizo aún más serio, su instinto peleaba por dos cosas diferentes en su cabeza y eso lo estaba volviendo totalmente loco.

El alfa guía habló un par de cosas que le valieron mierda, ya que no eran relevantes, Liam ponía atención a lo que decían y Zayn solo veía a todos lados con sospecha.

—Por aquí, por favor, el señor Leandro los espera.

Siguieron el camino hasta estar en la entrada, el alfa tocó la puerta de madera y una linda omega salió a recibirlos, parecía ser una trabajadora muy sonriente y amable. Louis frunció el ceño cuando notó su enorme barriga, ella llevó sus manos acariciando su abultado vientre.

—Señores, sean bienvenidos, por favor pasen. —Les sonrió cálida haciéndose a un lado para permitirles la entrada.

Ya adentro visualizan los elegantes y bellos acabados, era todo muy sofisticado y de mucha clase.

—Gracias, dulzura. —el morocho le correspondió amable, el omega era especial para leer a las personas y ella no representaba algún peligro.

—De nada, es un gusto, mi nombre es Jazmín.

—El gusto es nuestro.

—Estoy preparando algunos aperitivos y dentro de un rato los subiré, ahora permítanme informar sobre su llegada. —ella caminó saliendo del lugar.

Los tres aguardaron pacientes a que la omega llegara, unos minutos después la chica regresó hasta ellos.

—No lo perturben mucho, por favor. —pidió amable.

—¿Sucede algo? —preguntó Zayn.

—No tanto, es mejor que ustedes hablen con él. —Ella dejaba salir dejes de su dulce aroma para enmascarar el olor que predominaba mientras iban avanzando.

Liam y Zayn al sentirlo se pusieron cerca del castaño para prevenir cualquier situación que afectara a Louis.

El olor que los rodeaba era como el de la misma muerte, sentían un poco pesado el ambiente, el aroma de flores podridas era cubierto por la intensa vainilla de la omega.

Subieron unas gradas hasta llegar a un pasillo con algunas puertas de madera fina, ella se paró frente a una donde tenía labradas las iniciales del nombre de Leandro.

Tocó un par de veces y el alfa le permitió el pase, la omega les abrió la puerta que dirigía a un tipo despacho con un gran escritorio; estantes con muchos libros, cuadros finos, jarrones con plaquetas dando la muestra de su gran valor y otras cosas más. 

—Bienvenidos. —La voz de Leandro se escuchó cerca de la enorme ventana.

—¿Qué quieres? —Louis intentó no levantar la voz para no perturbar a la omega.

El alfa salió con un libro en manos y los tres se quedaron asombrados del estado del alfa, lucía terriblemente mal; tenía grandes ojeras, se miraba pálido y extraño.

—Luces como la mierda. —Louis dijo en un tono no muy amable, viéndole con desagrado.

El alfa mayor apenas sonrió. —Siempre es un placer verlo, señor Tomlinson.

Louis percibió a lejanía un tenue olor ya conocido. —Mucha estupidez, dime, ¿para qué diablos me hiciste venir a tu pocilga?

—Tomen asiento, por favor. —pidió mientras la chica iba a ayudarlo a sentarse, él besó el dorso de su mano como agradecimiento.

—Gracias, querida.

Zayn estaba atento a todos los movimientos de ambos y Liam estaba de pie detrás de Louis.

—Listo, ahora dime ¿qué mierdas quieres?

—¿Cómo se encuentra Harry?

El humor de Louis empeoró, sus ojos se oscurecieron y su respiración se hizo pesada. —Malditamente, me hiciste venir hasta aquí, solo para preguntarme sobre Harry, mi omega. —masculló molesto.

—Solo quiero saber cómo se encuentra después de lo sucedido.

—Que te valga una puta mierda, él está jodidamente bien porque está con su alfa.

—No se altere, Señor Tomlinson, tenemos omegas presentes.

—Entonces habla, maldición. —vociferó molesto.

Jazmín suspiró audible llamando la atención de Liam y Zayn mientras Leandro y Louis no dejaban de verse.

—Señor, le pido, no levante la voz, el señor Leandro necesita tranquilidad.

El mayor la vio con cariño. —No te preocupes, cariño, estoy bien.

—¿Y bien? —inquirió Louis realmente molesto.

—Necesito un pequeño favor, Señor Tomlinson. —informó y empezó a tener una fuerte tos.

El castaño levantó la ceja con la necesidad de burlarse un poco por tal estupidez. —No me digas que el gran Leandro necesita dinero. —Su tono era burlón.

—Estoy enfermo como se habrá dado cuenta y lo que tengo no es tan fácil de curar.

Jazmín empezó a acariciar la espalda de Leandro con la vista en los invitados. —Necesita sanar, es muy necio, su lobo necesita una pareja.

Louis apretó fuertemente el dorso del sofá en donde estaba sentado. —¿Qué pretendes con eso? —preguntó con voz oscura e igual de enfadada.

Leandro no apartó la vista de Louis. —Harry… —El mayor se quedó con las palabras en la boca porque en un segundo Louis tenía su mano aprisionando sus mejillas, sus garras raspaban su la piel del alfa.

La omega retrocedió unos cuantos pasos cubriendo su vientre con sus manos para protegerlo.

—¿Qué parte de no debes mencionarlo ni mucho menos acercarte, no entiendes?

—Tranquilo, Señor. —Leandro no mostró ningún ápice de miedo.

—No me digas que hacer, hijo de puta, habla de una vez o te mato.

—Igual ya estoy muriendo.

—Adelantemos el proceso, entonces… —Sus uñas empezaban a hacer pequeñas incisiones en las mejillas de Leandro.

—Antes de todo… ¿Podría responderme algo?

—¿Cómo tus palabras finales? Adelante.—dijo cerca de su rostro.

—¿Por qué no me ha matado?

—¿Qué mierda dices?

—Sus ojos no mienten, Señor Tomlinson, nuestros ojos hablan por nosotros mismos y algo me dice que usted no me mataría, pero… ¿Por qué?

—No sé a qué mierdas te refieres.

Leandro rio amargo y suspiró, Jazmín se acercó de nuevo cuando Louis se apartó. —La única forma de salvarse es encontrar una pareja y tener mucha tranquilidad, no haga eso, por favor.

Louis ignoró el pedido de la mujer. —Ni se te ocurra mencionar el nombre de mi omega.

Todos guardaron silencio en la habitación, Leandro tomó la misma postura elegante de siempre suspirando con cansancio. —No me van los omegas, Señor Tomlinson.

Zayn se apegó a Liam tomando su mano viendo con desconfianza al alfa mayor, Liam era su alfa.

—¿De qué mierdas estás hablando? —Louis se removió inquieto.

—Que mi preferencia sentimental, sexual y todo lo relacionado a parejas se dirige con alfas.

Louis, consternado, levantó las cejas. —Tengo omega, ni siquiera pienses que tú me interesas.

Leandro volvió a reír. —Creo que no me está entendiendo.

—Sucede que no soy un puto adivino.

—Si me permite explicarlo, sabrá todo.

—Adelante, habla.

—Es su omega.

—¿Qué tienes con Harry?

—Es un chico muy lindo.

—Lo es, ¿y el punto?

El alfa mayor suspiro con tristeza. —Usted me está matando, Señor Tomlinson.

—Explícate, porque si te ves de la mierda y últimamente mi paciencia ha mejorado, pero no juegues con fuego.

—Usted acabó con mi alfa.

—Aquí vamos de nuevo, la misma historia de usted mato y yo aquí y allá y toda esa jodida mierda.

—Si me permite le contaré… 

—Sin tanta estupidez, mi omega me espera.

—Cuando era más joven no tenía todo lo que usted ve ahora, era un pobre alfa huérfano, sin nada en este mundo, la pureza en mi sangre no valía nada, pues no tenía ni donde caer muerto.

—Muy triste todo. —Louis viró los ojos impacientes.

—En cierto punto de mi vida conocí a quién sería mi destino, mi mundo y mi todo.

—Vaya, el viejo idiota se nos puso sentimental.

Leandro pasó por alto sus palabras continuando con su relato. —Bien sabe que los alfas como usted y como yo amamos intensamente… y cuando la vi supe que era mi destinada, era la mujer más bella y hermosa que mis ojos han podido ver. Lastimosamente, ella solo me vio como basura e ignoró lo que el universo escribió para ambos.

Louis frunció el ceño escuchando con atención.

—¿Y entonces? —preguntó Zayn que estaba muy atento a lo que el alfa estaba relatando.

Leandro le sonrió con amargura. —Yo era pobre y ella se fue con alguien de primer mundo, mi alfa quedó destrozado y no fue capaz de ver a nadie más, se rehusaba en tener otra alfa u otro alfa, soy un romántico, ¿qué puedo decir? Sentí que algo dentro mi se quebró.

Zayn se sintió conmovido. —Eso es realmente triste.

—Lo es, dulzura, y un día me la encontré de casualidad por unos empleos cuando empecé a trabajar, algo se activó en los dos y entramos en celo, fuimos a mi maltrecho apartamento y en nuestra locura me pidió que la marcara y así lo hice, en ese entonces aún no tenía nada recién estaba construyendo mi imperio.

—¡Por la luna! —exclamó Liam.

—Ella tenía pareja y cuando el calor pasó y vio el lugar donde nos encontrábamos me maldijo, así que me dejó de nuevo y se marchó, pero esta vez se llevó algo mío.

—… Un cachorro. —completó Louis siguiendo perfectamente el rumbo de la conversación.

—Así es, ella huyó de mí, cambió de domicilio y prácticamente se hizo polvo, no tuve nada relacionado con ella en mucho tiempo, lo único que fui capaz de saber era que había dado a luz un lindo alfa, mi pequeño cachorro. —habló con ilusión a lo último.

—¿Entonces? —Preguntó Zayn.

—Entonces cuando me enteré empecé a buscarla por todos lados, pero ella también tenía poder y supo cómo huir y ahora resulta que el Señor Tomlinson terminó con su vida y, por lo tanto, yo estoy enfermando.

—¿Y eso qué? Me trajiste hasta aquí para decirme tu tonta y triste historia, ¿tomarás venganza o algo?

—Claro que no, Señor Tomlinson, nunca sería capaz de hacerle daño.

Todos guardaron silencio, nadie dijo nada, la habitación se llenó con el aroma de Jazmín intentando calmar al alfa.

—¿Qué diablos, Leandro? —cuestionó Louis con preguntas rondando en su cabeza.

—Cuando logré crear mi propia fortuna pude hacer que investigaran y según me informaron Cristal dio a mi pequeño a un orfanato… o eso me hizo creer la muy maldita, todo apuntaba con exactitud a un pequeño alfa, de tez blanca y ojos verdes. Llevaba el color mis ojos y entonces fue como Paulo llegó a mí.

—¿Paulo es hijo de la puta de Cristal? —cuestionó el omega sorprendido.

—No.

—Entonces no estoy entendiendo ni mierda. —bufó dejándose caer en el sofá.

Leandro carraspeó un poco. —Desde pequeño le hice un test de ADN y los resultados fueron negativos, pero yo lo amé como mi propio hijo.

Louis lo escudriñó con detenimiento y hasta ahora se percataba de que algunos rasgos faciales o micro expresiones se le hacían familiares. —Mierda…

—Entonces por cuestiones del destino un día uno de mis investigadores se escabulló en la vida de las alfas, al fin supe quién era mi niño en realidad y resulta ser que ellas lo tuvieron todo el tiempo, cuando di de nuevo con ese par, Harry ya no estaba con esos malditos demonios.

—Espera… ¿Qué? —Liam se cubrió el rostro.

—Perdí la pista de mi cachorro hasta que al fin tuve una nueva, las muy malditas nunca hablaban de él, siempre lo mantuvieron cautivo, nunca lo sacaban, lo que vivió fue una total tortura y para no alargar la historia mis investigadores encontraron un lindo suéter. Era de un omega, estaba en una de sus casas, el olor se impregnó en mí, era como algo familiar que hizo aferrarme a ese trapo viejo. —Se acercó a un cofre que tenía cerca abriéndolo y mostrando la prenda.

Louis lo recibió acercándose para percibir el leve aroma. —Es Harry.

—Así es, se inició un rastreo y así fue como llegué a Copa de Oro. Además, uno de mis aliados hizo un comentario de una charla del idiota de Mike con cierto omega, algo se inquietó en mí y no pude quitar la preocupación de ver aquel lindo omega, todo se conectó fácilmente.

—Necesito otras pruebas, pudiste tomarlo de bar. —Louis extendió la prenda.

Leandro hizo una seña a la omega para que pasara unos documentos. —Tuve que buscar algo que le perteneciera a Harry para corroborar que si era mi hijo, aunque no voy a mentir desde que lo vi lo sentí dentro de mí, el lindo omega es mi pequeño.

—Es por eso que dijiste que nunca te alejarías, ¿no? —Zayn se entrometió emocionado.

—Así es y en realidad espero que ambas se pudran en el infierno.

—Les di su merecido. —espetó Louis.

—Cada día de mi vida me he culpado por no encontrarlo antes y tenerlo a salvo, busqué por todos lados, soborné a muchas personas, nadie sabía nada. Lo que hicieron con Harry no tiene nombre, estaba a punto de traerlo a casa y contarle todo, pero entonces usted apareció y entre cosas del universo no podía meterme, me enteré de que si era mi hijo el día que usted se lo llevó a su mansión.

—Vaya… —Louis parpadeó algo sorprendido.

—Es por eso que nunca me atrevería a hacerle daño al alfa de mi cachorro, Señor Tomlinson.

—¿Por qué mierdas no acabaste con ellas cuando supiste todo?

—Porque al principio no tenía seguridad de nada, mi alfa se negaba a lastimar a Cristal, nunca fui capaz de encontrar pareja, ya no pude, el lazo de un alfa puro es fuerte y mi lobo puede ser intenso en algunas cosas.

Jazmín tendió la mano al alfa para animarlo a seguir. —Ambas me odiaron porque la mordida de un alfa puro es más fuerte que la de un común y la otra nunca pudo borrar mi marca.

Leandro suspiró y continuó. —El día de la gala les tenía un pequeño presente, era un golpe donde más les doliera, compré todas sus acciones y las dejé en la calle, eso se los diría al final, pero usted se adelantó.

—No me esperaba esto… —Louis estaba por continuar cuando se sintió extraño.

—¿Qué sucede? —preguntó el alfa mayor al notar la expresión del castaño.

—Es Harry, algo le sucede, debo irme.

—Pero…

—No hemos terminado con esto, debemos seguir después. —Se puso en pie muy agitado, listo para irse.

—Señor Tomlinson, le pido que aún no le diga nada, o al menos le suplico, me dé la oportunidad de hablar con él.

—Bien, pero no lo forzaré a sentir algo que no quiera.

—Comprendo completamente, así será.

—Él decidirá que hacer cuando sepa todo. —dijo antes de salir sin despedirse.

Liam y Zayn caminaron aprisa siguiendo a Louis, al bajar intentó comunicarse, sin embargo, la llamada no conectaba correctamente.

Subieron al auto, el chofer aceleró ante la indicación de Liam.

—Date prisa. —ordenó al conductor.

El camino pareció hacerse largo, Louis sentía enfurecer cada vez, desesperado se quitó los primeros botones de la camisa, su pierna empezó a dar un leve brincoteo.

—Su maldito padre…

—Todo estará bien, Louis. —tranquilizó el omega.

—Todo es una total mierda y aún siento esa sensación extraña.

—Quizá solo se sintió mal. —Liam se dirigió a él.

—Es una opresión extraña.

Pasaron alrededor de cinco minutos. —Estamos por llegar a donde se recobra la conexión. —El conductor informó.

El celular de Zayn sonó y sonó informando muchos mensajes entrantes, Louis llamó a Harry, pero no respondía, empezó a sentirse enfurecido y ansioso.

—¿Qué no podemos ir más rápido? —espetó colérico—. ¿Qué mierda sucede? —preguntó al omega cuando notó que su piel se hizo pálida.

—Es Bella, desapareció.

—¡Por la diosa puta! ¿Qué pasó?

—En resumen, ella salió de casa y no regresó, había una prenda con el olor de Harry. —informó sin despegar la vista del aparato.

—Maldición, quiero que la encuentres con vida Zayn, me vale una mierda que es lo que debas hacer, ella debe aparecer.

—Así será. —el omega habló con los ojos algo llorosos escondiendo su rostro en el cuello de Liam.

Algunos minutos después llegaron, el enorme portón fue abierto para darles paso, ni bien el auto se estacionó, Louis corrió hasta donde Harry.

Jules estaba saliendo de su habitación. —Señor Tomlinson, disculpe que le interrumpa, pero Tali se sintió mal, hace rato.

—¡Demonios!, ¿qué sucedió? —Pues no estoy muy seguro, al parecer estaba al teléfono y de repente se sintió mal.

—Qué extraño, ¿cómo está ella?

—Ahora está dormida, Myles llamó al doctor y vino de inmediato a revisarla, solo fue un susto, pero sugiere que por su avanzada edad evitemos emociones fuertes o su corazón puede sufrir las consecuencias.

—En un momento iré con ella, ¿cómo está Harry?

—Se quedó dormido, le afectó mucho lo de esa chica. —dijo con pesar.

—Es importante para él, ella le ayudó mucho en ese lugar de mierda.

Louis fue rápidamente a la habitación de Tali al ver que estaba completamente dormida y que era custodiada por una enfermera y otro alfa de confianza, salió y fue a su habitación.

Las feromonas con son de tristeza dieron en su rostro al abrir la puerta, caminó con cuidado para no perturbar a su omega, pero no fue de mucha ayuda porque dejó salir su olor y Harry despertó.

—Alfa…

—Aquí estoy, amor. —E alfa llegó hasta donde él, Harry se abrazó a él, necesitado.

—Bella… —lloró desesperado.

—Tranquilo, la vamos a encontrar.

—Ella desapareció por mi culpa. —sollozó.

—No es tu culpa, todo una mierda, pero Zayn ya está trabajando, es el mejor para hacer su trabajo, no te preocupes. —acunó su rostro y limpió sus lágrimas para después besar sus mejillas.

—¿Y si no aparece? Ella no merece eso, nadie lo merece, Lou.

—Lo sé, mañana yo mismo iré por esos malditos.

—Nunca te he pedido nada, alfa, pero esta vez te ruego que acabes con ellos.

Louis se despojó de su ropa y quedó en interiores, apegó al rizado a su cuerpo dejándolo sobre su pecho, necesitaba la calidez de su alfa.

El omega se aferró a su agarre enterrando su rostro en su cuello, Louis llevó su mano para acariciar sus finos rizos.

—Todo estará bien, amor, no sabes cuánto te quiero. —habló en susurros pegando sus labios a su rostro. 

Harry se abrazó fuertemente a su alfa, su voz salió entrecortada. —Yo también te quiero, Lou.

—Todo pasará y ella estará sana y salva.

—Tengo miedo.

—No te preocupes, bebé.

—Confío en ti, se siente tan bien tenerte cerca, siento mucha paz, al fin tengo paz.

Louis sonrió, en su pecho vibró la felicidad brotada desde su interior. —Una vez leí una frase que decía “todos los sitios que nos abandonan nos conducen a nuestro verdadero hogar” —Louis pasó un mechón de su cabello hacia atrás de su oreja, le vio con cariño—. Siempre estuve de camino a casa, no importa el pasado si estás en mi presente y futuro.

—Y a mí me alegra al fin haber llegado.

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Buenasss noches, ya llegó su alfa jajaja

¿Cómo les va? Es un gusto saludarles.

Aquí tengo el nuevo capítulo, perdón pero esas migrañas son una total joda.

Espero haya sido de su agrado.

Y sí, Leandro es padre de Harry por eso la tonta de Estela intentó abusarlo porque no había esa conexión padre/hijo.

Por cierto... puse el cap original con lo de las madres de Harry, por si desean leerlo :)

¿Qué piensan?

Nalgaditas cariñosas :D