Una semana después

~*~

JinEun

Sonrío viendo a Yuna y a MinGyu saludarse con mucha emoción. Apenas y llegaron a la universidad se empezaron a comer a besos. Sólo son unos babosos enamorados que dan diabetes.

Que envidiosa eres JinEun. Solo déjalos vivir.

Siento el abrazo de JiAh a mi lado y luego se nos acerca NamSik para saludarnos. Es temprano por lo que acabamos de llegar a clases para comenzar las clases de nuestros últimos exámenes antes de la tesis de grado.

No mentiré, tengo nervios, he estado estudiando muy duro esta última semana para estar preparada para la tesis y la pasantía que ya tenía prevista para el próximo mes. No falta mucho y cada vez que pasa un día y lo recuerdo observo el teléfono para ver si tengo algo de él.

Pero es inútil seguir mirando. Por lo que no lo hice ayer ni hoy, y de una forma me siento tranquila.

Jimin parecía haberse desaparecido. No había recibido nada de él, incluso cuando envié a JiAh a su empresa para que le entregara el vestido y los zapatos, junto con la joyeria que nos había regalado. No quisiera tener nada que me lo recordara.

¿Y por qué pienso así? Pues regresemos al día antes de ayer...

『•••』

— Mamá. — digo con sorpresa al ver a mi madre parada detrás de la puerta de mi departamento. No había dicho que vendría y me ha encontrado en mis peores fachas.

Su mirada va desde mis pies hasta mi cabeza y frunce el ceño.

— ¿Pero qué te ha pasado mi niña? — pregunta con tono algo preocupado mientras pasa y cierra la puerta detrás de sí.

— Necesito tu consejo. — le hablo con la voz en un susurro mientras mis ojos empiezan a aguarse. Ella asiente y deja las bolsas que trae sobre el mesón que divide la cocina con toda la casa.

No quería decirle a nadie sobre mi situación, pero en realidad necesitaba hablarlo con alguien.

Camino hacia la sala y cuando siento que viene detrás de mí me doy la vuelta y ve mis ojos llorosos.

— Me he enamorado. — ella me muestra su mirada aflijida porque sabe que es negativo y no de felicidad, con sólo ver mi rostro lo sabe.

Se acerca a mi y me hace sentarme en el sofá, se sienta a mi lado y empieza a acariciarme el cabello mientras estoy con la mirada baja.

— ¿Te ha roto el corazón? — es lo único que pregunta y me alegro de que aún no empiece con las que tenga que ver sobre él.

— Él no sabe lo que siento por él. — murmuro y con mi suéter ancho limpio mis mejillas. Mi cabello en un moño despeinado deja ver varios mechones caídos.

— ¿Pero por qué estás así? — pregunta con suavidad.

— Es que... — levanto la mirada y sus ojos me brindan confianza— él y yo teníamos una especie de relación pero nada formal...

Ella baja la mirada y suspira.

— JinEun ¿Qué te he dicho de esas relaciones? — cubro mi rostro con mis manos y prosigue— no trae nada bueno... eso es para personas que no tienen un interés... personas que sólo quieren pasar el rato... — me atrae a ella y me abraza— tu tienes un corazón enorme, tu sabes que te encariñas muy rápido...

— Lo sé y fue mi error... yo sólo quería probar algo nuevo. — sorbo mi nariz y ella me acaricia el brazo.

— Soy tu madre, y quiero que seas sincera conmigo... — tardo unos segundos en asentir y prosigue— Puede que no sepa mucho de las relaciones actuales, pero estoy cien por ciento segura de que eso involucra relaciones sexuales... — toma una pausa y yo sólo me hago una bola en sus brazos. No quiero que me regañe— simplemente dime ¿se han estado cuidando?

Cuando me dice eso me despego de su cuerpo y la miro.

— Sí... — es lo único que susurro mientras bajo la cabeza.

— Entonces dime qué ha pasado...

— Hace varios días decidí terminar esa especie de relación porque me enamoré de él y... no parece interesado en una relación.

— ¿Pero le dijiste lo que sientes o no? — niego con mi cabeza y vuelvo a limpiar mi rostro— ¿y cómo sabes que él no tiene un interés en ti más allá de sólo intimidad? — su voz tan suave siempre busca la manera de brindarme calma, y eso adoro de mi madre.

— No me ha escrito o llamado... o simplemente buscado desde que terminé con eso... — tomo una respiración profunda y prosigo— ¿Qué me puede decir eso si no es desinterés?

— ¿Entonces prefieres que no lo sepa? — pregunta en el mismo tono.

— Ya estoy sufriendo por haberlo cortado... no quiero sufrir más si me dice a la cara que no está interesado en mi. — nuevamente me quiebro y empiezo a llorar.

— Ay mi niña. — me atrae a su cuerpo y me abraza— ¿crees que yendo a Japón el próximo mes te ayude?

— No lo sé... porque me duele mucho el pecho mamá. — niego en un susurro.

Su abrazo me aprieta y luego de un rato me suelto.

— ¿Y este chico... estudia contigo? — vuelvo a mirarla y niego rápidamente.

— Jimin es mayor que yo... está próximo a cumplir veintiséis. — mi madre asiente lentamente mientras relame sus labios.

— Me asusté cuando dijiste que era mayor, pensé que sería casado y tendría esposa e hijos. — la miro con sorpresa y niego rápidamente— son sólo cinco años JinEun... está bien. — cuando lo dice de esa forma tan tranquila vuelvo a mirarla con sorpresa.

— Pensé que no querías que me involucrara con alguien mayor...

— Jamás he dicho eso. — me mira con una pequeña sonrisa— tu sola te haces ideas... ¿y viene de buena familia? — sigue preguntando y la miro cansada para levantarme y verla desde arriba.

— Eso no importa madre, no somos nada y ya no seremos nada... — le rectifico con mi tono cansado y ella asiente.

— Solo quiero saber si vale la pena como para que te estés descuidando tanto así por él. — apunta mi ropa y ruedo los ojos.

— Su nombre es Park Jimin... y ya no te voy a decir nada más. — comento ya cansada de sus preguntas.

— ¿Park Jimin? — asiento y ella parece pensar. Ay que no lo conozca dios, eso sería lo último— ¿Qué no es el chico de las fotos de la boda de HeeSook? ¿Él que fue el padrino?

Suelto un suspiro y ella no parece querer cesar.

— ¿Cómo es que sabes quien es? — pregunto. Ella siempre se entera de todo, que raro que nunca se entero de nuestra relación. O sí lo hizo y nunca dijo nada.

— Estuve hablando con tus tíos, los padres de HeeSook, y me comentaron que viene de muy buena familia. — dice con sorpresa mientras se ve tan elegante con sus piernas cruzadas.

— Igual eso no importa. — le resto importancia y ella se levanta.

— Claro que sí importa, porque es el chico del que estás enamorada... — suspiro queriendo que ya se vaya. Si también se pondrá del lado de Jimin es mejor que salga.

— Debo estudiar. — le digo cortando su conversación.

— Lo que deberías es darte un baño y arreglarte que das pena. — ahora sí empieza a regañarme y suelto un quejido.

『•••』

Desde ese momento entendí que no debía desvivir siempre por Jimin, así que intenté no darle más importancia y me concentré en otras cosas.

— ¡JinEun apresúrate debemos ir a clases!

La voz de Yuna me grita desde la entrada de la facultad y me doy cuenta que soy la única estúpida parada aquí afuera. Salgo corriendo rápidamente y la alcanzo para irnos a la clase.

~*~

Jimin

Veo a JinEun correr hacia el edificio de la facultad y sonrío por como a veces hace sus viajes ancestrales y no se da cuenta de su alrededor.

Tengo unos cuantos minutos aquí estacionado, pero me mantengo alejado del lugar para que no vea que la he estado observando.

Enciendo el auto y empiezo a conducir hacia mi apartamento. Al llegar allí simplemente me dejo caer en el sofá hasta que unos minutos después el timbre suena. Me levanto y camino hacia la puerta, al abrir me encuentro con una hermosa chica de cabello castaño y ojos expresivos. Me hago a un lado y la dejo pasar para después ver a mi mejor amigo pasar detrás de ella.

— Creí que debíamos visitarte. — dice JungKook mientras camina al interior de mi hogar.

— Y yo pensé que nunca lo harían. Se olvidan de mi ahora que están casaditos. — me río y voy a la cocina luego de cerrar la puerta— ¿Quieren tomar algo? — les grito desde este lado.

— Claro. — contestan al unísono y sonrío un poco.

Destapo las cervezas que sé que le gustaran a JungKook y las llevo para ambos con unos vasos.

— Lindo lugar, Jimin. — me dice la castaña y le sonrío.

— Gracias HeeSook. — respondo algo tímido. Casi nunca alguien me visita ya que no tengo muchos amigos, pero siempre me alegro de ver a este par.

— Que buena cerveza. — menciona JungKook mientras observa el vaso con cara de enojo, mira a HeeSook aún saboreando la bebida y ella se ríe.

— Sabía que te gustaría. — comento entre cortas risas.

Seguimos hablando un rato hasta que JungKook se disculpa para ir al baño.

— Oye Jimin. — llama HeeSook en un susurro y la miro para inclinarme hacia ella— me enteré que JinEun te cortó. — sonríe con burla.

Me echo hacia atrás y suspiro con una pequeña sonrisa de por medio cuando me recuesto del espaldar.

— Ella quiso alejarse un tiempo. — le digo de mala gana.

— Aquí entre nos sabemos que eso del tiempo no existe. — me recalca y asiento consciente de ello.

— Lo sé... — hago un pequeño puchero y ella sonríe triste.

— ¿No han hablado? — niego y ella piensa por un momento— ¿y por qué no le llamas?

— Es que ella quiso alejarse y no quiero molestarla. — murmuro en respuesta mientras pienso en aquellos ojitos llorosos mirarme con furia. Sí que estaba molesta ese día.

— ¿Y la extrañas? — me pregunta con suavidad mientras se lleva un snack a la boca.

— Claro que sí. — contesto con una sonrisa. Ella la imita y vuelve a comer otro snack— aunque vivía molesta todo el tiempo conmigo pero... igual me hace falta ver su cara de perrito rabioso.

Ambos empezamos a reír por un rato hasta que JungKook llega y vuelve a sentarse.

— ¿Me contarán el chiste? — pregunta sintiéndose excluido.

— Que a Jimin le gustan los perritos rabiosos. — JungKook nos mira con rostro confundido y yo sólo puedo reírme.