JinEun

Luego de que Jimin me dejara en mi apartamento me preparé para la cena de hoy con mis padres. Escogí un lindo vestido y un zapatos que hicieran juego, me arreglé el cabello y apliqué un suave maquillaje.

Justo ahora estamos llegando al restaurante luego de que pasaron por mi.

•••

Tomo un poco del vino que hay en mi copa, observo a mis padres hablar de sus negocios en Busan y a mamá de sus vacaciones en la isla Jeju. Me alegra que se diviertan cuando puedan, ya que ellos siempre tienen poco tiempo para pasar juntos sin preocupaciones.

— Hija, ahora que faltan pocos meses para tus pasantías ¿Dónde planeas hacerlo? — mi padre con su entusiasmo por las nubes me observa expectante, la verdad no había pensado en eso.

— Bueno papá faltan como siete meses aún, así que no había pensado en ello hasta ahora que lo mencionas... estudiar negocios es algo bueno porque hay muchas opciones, y con unos padres empresarios se abren más puertas para mi ¿no lo creen? — pregunto y ellos asienten con una sonrisa.

— A eso quería que llegaras. — apunta mi padre con emoción y se inclina un poco hacia adelante como si fuese a decir un secreto.

— ¿Por qué? — pregunto entre risitas para volver a tomar de mi copa.

— Tu padre quiere comentarte algo muy bueno que estuvimos pensando, y tal vez la propuesta te sienta mejor ya que no tienes una opción específica ahora. — añade mi madre con suavidad mientras toma del brazo a su esposo.

— ¿Cuál propuesta? — pregunto curiosa.

— Tengo amigos, muchos empresarios... hablé con uno de ellos para que te diera la oportunidad de hacer tus pasantías allí y después si pones mucho empeño puedas conseguir un puesto mucho más alto. — la emoción en mi padre es muy alta y su sonrisa me hace sonreír a mi.

Obviamente que me gustaría.

— ¿Es en serio, papá? — pregunto incrédula, mi sonrisa no se podía borrar. Él asiente igual de emocionado que yo y suelto un grito suave de emoción.— por supuesto que quiero.

Él toma mi mano sobre la mesa, estando feliz por verme feliz.

— Eso es genial hija, ya verás que serás la mejor empresaria. — anima y me río suavemente viendo a mamá de igual forma— solo tengo que hablar con SungWoo y decirle que estarás lista en unos meses cuando termines tus exámenes y te vas a montar en ese avión más que preparada para el empleo. — canturrea sonriente.

Y la gran sonrisa en mi rostro se borra lentamente.

— ¿Avión? ¿Dónde es el empleo? ¿Busan? — pregunto curiosa y mi padre detiene la mirada de su teléfono para verme.

— No, el empleo es en Japón. — comenta sonriente y yo parpadeo rápido.

— ¿Japón? — ambos asienten pero borran la sonrisa al verme seria— Papá ¿Por qué Japón?

— Bueno SungWoo tiene la central en Japón, sería muy bueno para ti empezar allí y no en una sucursal ¿no lo crees?

Trago fuerte y después bebo nuevamente de la copa.

— Bueno si, pero... ¿Por qué no aquí en Corea? En tu empresa... — él sonríe suave y espero su respuesta.

— Bueno hija, tenemos socios, y no podrás subir de puesto hasta que te gradues y tengas una maestría, allí tu rango dependerá de tu trabajo pero más que todo de tu aprendizaje... así que si no tienes una maestría o un doctorado no vas a escalar muy alto. — comenta con lástima al verme decaída— Yo tampoco quiero que te alejes de nosotros pero es tu futuro, hija. — asiento suave dándole la razón.

— El señor Kim es muy amigo de tu padre, y aceptó tenerte en su empresa si tu lo deseabas... en poco tiempo seras una empresaria reconocida si lo aceptas ¿Qué piensas?

Tomo aire y relamo mis labios para mirarlos al recostar mi espalda en la silla.

— ¿Puedo pensarlo? — pregunto y ambos se miran entre sí para después asentir suave.

— Intenta no esperar mucho tiempo, SungWoo es un gran amigo pero sé que no esperará mucho una respuesta de tu parte. — aconseja y asiento sonriendo levemente.

— Bien, bueno ¿que tal si pedimos el postre? — mamá rompe el silencio y alza la mano al camarero que viene hacia nosotros inmediatamente.

•••

Cierro la puerta de entrada detrás de mí y enciendo las luces para caminar por el pequeño pasillo que me lleva a la sala y cocina. Me voy a la habitación y quito mis tacones para guardarlos en el clóset.

Me lanzo a la cama y veo el techo mientras pienso en la opción de mi padre.

¿Sería bueno en verdad mudarme a Japón?

No me quiero alejar de mi ciudad pero mis padres tienen razón, en su empresa tendré un puesto alto cuando tenga cuarenta o cincuenta años literalmente, y para tener un empleo aquí, fuera de las influencias es casi imposible.

Pero la pregunta que en realidad me hace mi conciencia es: ¿No me quiero alejar de la ciudad o de Jimin?

Suspiro cerrando mis ojos fuertemente recriminando mis pensamientos en estos momentos.

— ¿Cómo podré poner esa pregunta entre las tantas antes de mudarme? — susurro.— Jimin y yo no tenemos algo más que una relación sexual consensuada, somos amantes, si.

¿Pero es un impedimento para avanzar en los planes de mi futuro?

— Ahhhhhhh — me quejo por no saber qué responder a esa pregunta.

No quiero hablar con Jimin respecto a nuestra relación porque él está siempre ocupado y no creo que el tiempo le dé para llevar una relación amorosa ahora mismo.

¿Pero en algún momento él ha detenido algo en su vida por ti, JinEun?

Vuelvo a suspirar y me siento idiota por pensar tanto en algo que no es serio, una relación que no es seria.

Ni siquiera tus padres lo saben.

Él es mayor, una persona que está enfocada en sus negocios, casi no tiene tiempo para ti y lo sabes, JinEun.

Nuevamente mi conciencia me tortura y soy incapaz de detenerla.

— En parte tengo razón. — me siento en la cama y pienso mejor las cosas— Jimin es un hombre, de veinticinco años, enfocado en su trabajo, y que sólo está conmigo cuando está excitado... irónicamente es así. — suelto un bufido— Él nunca ha hablado de lo que tenemos, nunca me ha propuesto llevarlo a más, y no creo que tenga planeado hacerlo.

Dejo de pensar en toda la situación cuando una llamada entrante en mi teléfono me interrumpe. Un nombre que ha dominado mis pensamientos desde que llegué a la casa. Tomo el teléfono y deslizó para contestar.

— Hola... — su tono me hace deducir que tiene una sonrisa en su rostro— ¿Qué tal la cena? ¿Qué tal todo con tus padres?

— Hola... todo salió muy bien, nos tuvimos que retirar porque papá ya estaba hablando muy fuerte y eso sólo sucede cuando está borracho. — comento entre risas suaves y escucho su carcajada al otro lado de la línea.

— ¿Es en serio? — continúa riendo— tu padre es todo un personaje, ya veo de donde sacaste tu personalidad.

— Yo no soy así — niego riendo y él sigue con su carcajada.

— Claro que sí. — me pelea y yo sigo negando— ¿no recuerdas la fiesta en uno de mis clubes? ¿Hace un año en nuestra graduación? — sonrío amplio recordando y sé lo que va a decir.

— Ya, no digas más que me avergüenza — río y él también.

— Bien, no lo diré. — alarga mientras detiene su risa lentamente.

— ¿Aún estás en la empresa? — pregunto suave y él hace un sonido pensativo.

— No, estoy tomando un trago con Jungkook, pero ya estamos por irnos. — comenta tranquilo— Oye JinEun ¿Qué harás en un mes?

— ¿En un mes? — me río— no sé ¿Cómo podré saber eso? — pregunto entre risas.

— Bueno yo que sé... solo... quiero que me acompañes a una boda. — frunzo el ceño y una pequeña sonrisa se forma en mi rostro.

— ¿A una boda? ¿Cómo tu acompañante...?

— Sí, exacto, como si fuésemos pareja ¿Te gustaría? — Auch. pregunta nuevamente y yo asiento suave aunque no me vea, borrando la pequeña sonrisa de mi rostro.

— Claro, pero... ¿los conozco? Me avergüenza ir así sin conocerlos. — añado.

— Claro que los conoces, seguramente recibirás una invitación mañana. — frunzo aún más el ceño y él continúa— JungKook y HeeSook se van a casar el próximo mes.

— ¡En serio! ¡Que genial! — digo contenta.

— Sí, JungKook está muy feliz de que HeeSook haya aceptado... y yo también, créeme, esos dos han pasado por tanto. — comenta aliviado.

— Sí... — Concuerdo.

— Ah, te dejo, debo... bueno debemos irnos. ¿Te hablo mañana?

— Claro... esta bien, supongo. — río suavemente.

Luego de una despedida de ambos él cuelga y me siento extraña de pronto... ¿Por qué Jimin me invitaría como su acompañante a la boda de su mejor amigo? ¿Justo antes de que me invitaran a mi y seguramente de inmediato al invitarlo a él?

"Como si fuésemos pareja" auch... eso dolió.