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024

Jimin 🥀

¿Alguna vez haz tenido novia?

Recuerdos.

Esos malditos recuerdos de mi juventud regresaron a mi memoria, era algo que evitaba a toda costa, pero esa entrometida causo que mi corazón volviera a doler como aquel día, como hace cinco años, hizo que volviera a revivir la desilusión mas grande de mi vida.

Flashback

Al fin había llegado el tan esperado día, estaba de más decir que moría de nervios, este tipo de cosas no se hacen todos los días, estaba dispuesto a compartir mi vida con ella, estaba listo y decidido, no podía esperar mas, e incluso nunca debí esperar tanto, tuve que haberlo hecho hace mucho tiempo atrás, pero ahora que estoy completamente seguro de lo que siento, estoy preparado para pedirle que sea mi esposa.

Por ello había reservado una hermosa velada en un famoso restaurante de la ciudad, ese restaurante era único y singular, porque fue el lugar en donde la conocí, en donde nos conocimos, en donde ninguno pensó que nacería tal inesperado y descabellado amor. Todo estaba listo, las flores, la decoración, la música, la comida, incluso, aunque parezca cursi, me había tomado la molestia de ensayar las palabras que expresaría esta noche, me aseguraría de que esta velada fuera inolvidable y mas que todo especial para ella.

20:20 PM

Llevaba mas de veinte minutos esperándola, mi ansiedad comenzaba a crecer cada vez mas, caminaba de un lado a otro para tratar de quitarme los nervios, o al menos de que estos se calmasen un poco, mi preocupación era evidente, era extraño aún no verla por aquí, ella siempre fue puntual, era una cualidad que me encantaba de ella, a pesar de que yo casi siempre era el impuntual. Horas antes le comunique discretamente que tenía una sorpresa para ella, y con gusto acepto venir, pero esta vez fue diferente, ni siquiera me había dejado un mensaje, o algún aviso, nada.

21:30 PM

Suspire por milésima vez, durante el trayecto de la noche había estado llamando a su celular, pero ella nunca contesto, no quería pensar lo peor, solo rogaba por que no le haya sucedido algo grave en el camino hacia acá, mis pensamientos atormentaban mi cabeza y no sabia que hacer.

El sonido de mi celular vibrar interrumpió mis pensamientos, una pequeña esperanza nació al creer que era ella, pero enseguida se esfumo cuando observe aquel numero desconocido.

"Ve a esta dirección, encontrarás algo que te interesa y mucho"

Fruncí el ceño al leer dicho mensaje, pensé en simplemente ignorarlo, pero el celular volvió a vibrar avisándome de un nuevo mensaje. Abrí los ojos de par en par al leer tan conocida dirección, ahora estaba mas confuso que antes.

Levante la mirada buscando en todos lados, sin embargo no había nadie.

"Claro.. como si el que envió el mensaje fuera tan estúpido para dejarse ver"

Pero ahora no podía ignorarlo.

La dirección daba al hotel mas grande de la gran cadena de hoteles que tenía mi padre en el país, pero este era especial, por que en dicho hotel mis padres se conocieron, y también fue en donde crecí.

No podía entender porque tenía que ser esa dirección.

La idea de que mi chica esté allí no me hacía sentir bien, así que antes de crear situaciones inciertas iría al lugar.

Fui en busca del coche, al subir y tener todo listo, acelere de inmediato, por suerte no hubo tanto tráfico y no tuve que lidiar mucho con eso, y en cuestión de minutos ya me encontraba parqueado al frente del hotel.

Suspire con pesadez y trate de reflexionar, tal vez me este comportando como un maldito idiota dejándose guiar por lo que decía un mensaje de alguien que ni siquiera sabia de su existencia, no estaba seguro de lo que hacia, pero mis instintos controlaron mi cuerpo y sin mas entre al hotel.

Volví a llamar al celular de mi chica pero ahora este se encontraba apagado, lo apreté entre mis manos con frustración.

Pronto un nuevo mensaje volvió a llegar a mi celular, lo revise de inmediato.

"17"

Antes de cualquier cosa me atreví a responder aquel mensaje.

Algo que debí haber echo antes.

¿Por qué haces esto?

¿Acaso es una jodida broma?

Espere por la respuesta pero no llego nada.

Hasta ahora.

Esta allí, con alguien, apresurate.

Volví a observar el celular, y ante aquel mensaje decidí llamar pero como supuse nadie contestó.

Mire hacia el frente y fui a recepción, no tuve problema en obtener la tarjeta del cuarto, soy el hijo del dueño y con una simple mentira logré obtener lo que necesitaba.

Subí al ascensor y a los pocos segundos me llevo hacia el piso en donde se encontraba la habitación. Al llegar a mi destino trate de darme ánimos para pensar que esto era una simple broma en la que había caído, solo eso. Pero todo eso se fue a la borda cuando al entrar a la habitación, la vi.

Enfrente de mi, estaba la mujer que aún amaba, su cuerpo desnudo cubierto por un par de sábanas blancas y a lado de ella un hombre.

En ese instante mi corazón se estrujo, se hizo añicos.

En cuestión de segundos fui totalmente destrozado por la mujer que yo creía amar.

Me sentía decepcionado y estúpido.

Pero más que todo furioso.

Deje de pensar con claridad y con pasos firmes me acerque a ese bastardo golpeándolo sin remordimiento.

Comencé a brindarle fuertes golpes en el rostro dejándolo aturdido, este quiso defenderse en varias ocasiones pero mi enojo era demasiado que me descontrole por completo, provocando fuertes heridas en su cuerpo y rostro, las lágrimas amenazan con salir, pero no iba a dejar que eso pase, aquello no valdría la pena.

-¡Morirás desgraciado! -vociferé dando fuertes patadas a sus costillas.

-¡Ya! ¡Jimin déjalo! -exclamó la única mujer presente en el lugar.

No preste en absoluto atención a sus pedidos, seguí otorgando patadas en el cuerpo de ese imbécil, las ganas de matarlo crecían cada vez más y aunque quisiera, no podía seguir con mi cometido, una alerta llegó a mi cabeza y lo deje, este se encontraba en el piso, poco me importo que estuviera desnudo, no estaba satisfecho con lo que había provocado en el, tal vez unas cuantas costillas rotas y hematomas.

Estaba seguro que no olvidaría su repugnante rostro.

Con la respiración acelerada y con el enojo en mi ser, me vi forzado a girar el rostro y observarla, su perfecto cuerpo desnudo sobre la cama, pense en que aún la seguía amando y me odiaba por eso, sus hermosos ojos negros me miraban con angustia, y desespero, sin poder evitarlo un par de lagrimas se deslizaron por mi rostro, estaba destruido no podía ser para menos.

-Soyoung... -mascullé observándola con lágrimas en los ojos.

-Lo siento mucho Jimin..

Su mirada destilaba inocencia me hacía pensar que ella seguía siendo el ángel que alguna vez pensé que era, pero eso ya no seguiría siendo así, mi manera de pensar de ella había cambiado drásticamente y un sentimiento de odio inundó mi corazón. Sabia que no tenia explicaciones porque simplemente no las había, al menos para su beneficio no, todo estaba claro, me había engañado y tal vez lo había estado haciendo desde hace mucho tiempo atrás, tampoco me tome la molestia de preguntarle el porqué de las cosas.

Solo faltaba algo más.

-Eres una maldita zorra. -mencioné mirándola con odio, su sorpresa fue notoria-Espero no volver a verte nunca más en mi puta vida.

•••

No era tolerante al alcohol, no era de las personas que se emborrachan por despecho.

O eso creí.

Esta noche había una gran diferencia, esta noche me atrevería a tomar hasta olvidarme incluso de mi propio nombre.

El tiempo en aquel bar paso sin importarme, comenzaba a ver todo borroso, los mareos llegaron y las ganas de vomitar eran más frecuentes, pensé que beber me serviría para olvidarla pero solo lo hizo peor, hizo que recordará todo lo que habíamos pasado juntos, cuando le pedí que sea mi novia, la primera vez que estuvimos juntos, los momentos difíciles que tuvimos que afrontar y lo que ocurrió ahora último, beber sólo sirvió que mi dolor aumentará, y las ganas de vivir disminuyeran.








Un año después.
















Aprendí nuevas cosas y tuve nuevas experiencias, ahora puedo pensar con mas claridad y me doy cuenta de que me deje llevar por mis sentimientos, deje que ellos me controlaran y me cegué por completo,

Fui un total idiota.

Aprendí que no hay que confiar en una mujer, eso lo tengo muy claro, aún la recuerdo, la recuerdo con un sentimiento de amargura, de odio, porque aquello fue lo que desarrolle en mi corazón hacia ella, odio, fue difícil entender que ella nunca me amo, dolió pero prometí no volver a demostrarme frágil, prometí no volver a cometer el mismo error, prometí no volver a dejarme manipular pero sobre todo, prometí no volverme a enamorar.

•••

Era el momento de trabajar, desde hace ya meses decidí ayudar a mi padre con la administración de los prestamos que el realizaba, al principio fue difícil pero con el tiempo fui aprendiendo, no era un trabajo normal, el tener que ir a sus domicilios y exigirles que devuelvan el dinero no era tarea fácil, lo digo porque cuando excedían el tiempo límite de pago les tocaba la peor parte, por órdenes de mi padre aquellos que no pagasen debían ser asesinados, asimilar eso no fue sencillo, ver como caían al suelo llenos de sangre, causo un enorme cambio en mi forma de pensar, todos tenían que pagar, tenían que morir, no importa como fuese, tenían que estar muertos cuanto antes, ni siquiera compasión sentía por aquellos que suplicaban y se arrastraban rogando por un poco mas de tiempo, aquí hay un tiempo límite y tanto mi padre como yo, respetamos aquello.

Pero esta vez parecía no respetarlo, anteriormente había notado que se había acabado el tiempo límite de pago de uno de los prestatarios, pensé que tal vez era una falla, y lo deje pasar, pero conforme pasaron los días ese dato seguía allí, era extraño que mi padre no comentara nada al respecto, demasiado extraño, así que tuve que tomar cartas en el asunto.

-Necesito hablar contigo. -dije entrando a la oficina de mi padre.

-¿Qué sucede? ¿Algún problema? - pregunto acomodándose en su asiento.

-Este es el problema. -deje caer un par de papeles encima del escritorio.

-¿Qué es esto? -apenas lo vio comenzó a revisarlos.

-Desde hace mas de un mes no se ha atrevido a pagar. -alce una ceja-¿No harás nada al respecto? o no, mejor dicho ¿Por que no has hecho nada?

Suspiro y luego de mirarme hablo.

-El es un caso especial.

-¿A que te refieres con caso especial?

-No te preocupes por él, yo me encargare de eso, ahora ve a trabajar en otro caso.

-P-Pero..

-Dije que otro caso.

No me dejó replicar, solo callé y salí de su oficina.

Sin embargo no iba a dejar las cosas así.

Una larga semana había pasado desde aquella conversación, pensé que el se haría cargo tal y como me lo dijo, pero no había hecho absolutamente nada, y eso comenzaba a molestarme, el dinero que ese sujeto le debía era una enorme cantidad y eso no podía pasar desapercibido.

Tuve que regresar a su oficina para encontrar más información sobre el sujeto, logré encontrar más archivos y en ellos estaban la dirección de su hogar.

Eso fue suficiente.

Me encargaría de hacérlo pagar, después de todo fue mi propio padre el que me enseño aquello.

Fue cuestión de tiempo para estar frente a la casa del desconocido.

Era un lugar pobre, la limpieza abundaba allí, pero ignore esos detalles y enseguida me adentre a dicho hogar, en el interior había una variedad de botellas de cerveza, estas se encontraban esparcidas por todo el lugar, además de cigarrillos, era un completo desastre.

Ahora podía tener una idea de en qué gastaba ese dinero.

Debio mejorar su vida, pero al contrario, lo utilizo para destruirla.

-¿¡Quién es usted!?

Gire mi cuerpo y capte la figura de un chico, supe enseguida que se trataba de su hijo según la información que había conseguido.

No pase desapercibido su ropa, esta estaba desgastada y parte de su rostro estaba sucio, pero eso no era lo peor, lo peor fue al ver en sus brazos y piernas marcas de quemaduras, estas no eran para nada leves, el chico vivía en muy malas condiciones, no parecía ser malo, al contrario, irradiaba inocencia y bondad.

Despues de todo mi problema no era con el, si no con su progenitor.

- ¿Me podrías decir donde esta tu padre?

El chico me miro temeroso y dio unos cuantos pasos hacia atrás, sus ojos se desviaban hacía varias direcciones, estaba nervioso, tal vez ya tenia una idea de quien era y de lo que venía a hacer.

- Tranquilo, solo necesito hablar con el.

Trate de tranquilizarlo, pero no hubo respuestas, al contrario, este comenzó a temblar, me acerque a el pero rápidamente huyo, su cuerpo se oculto detrás de otro cuerpo y una sonrisa apareció en mi rostro al saber de quien se trataba.

-¿Q-Quién eres?

Hice una gran mueca al ver su rostro, este se encontraba lleno de cicatrices, no fue nada agradable ver aquello.

-Eso no es lo que importa. -sonreí-
Lo que importa es que he venido a cobrar lo que debes.

-No puedes hacer eso.

-¿Porque no?

-No tengo ese dinero, además el señor Park me dijo que podía pagar cuando quisiese.

¿Cuando quisiese?

-¿Qué?

-S-Si, no le estoy mintiendo.. debe hablar con el.

Lo mire con el ceño fruncido, eso no podía ser cierto.

¿Por que mi padre tendría compasión por este sujeto?

No podía llegar a una conclusión, solo sabia que el era un "caso especial" pero eso no me importaba, el no era nadie para darle el privilegio de pagar cuando quisiera, con solo ver las condiciones en las que vivía sabia que no lo merecía, solo gastaba en sus adicciones, y eso me molestaba, no iba a dejar que esa situación siguiera así, y poco me importaba lo que pensara mi padre.

-Lo siento pero yo no soy el señor Park. -espeté sacando el arma que llevaba en mi pantalón- Soy su hijo y mucho más despiadado que el.

-No..

-¿Tienes o no el dinero? -pregunté aún sabiendo que no era así.

-N-No pero el..-recargue el arma provocando un leve sonido en el lugar.

Apunte directamente hacia él, buscaba el lugar perfecto para disparar, siempre lo hacia, eso me llegaba a divertir, pero tuve que dejar de hacerlo cuando el chico intento huir, rápidamente su padre lo agarro del cuello y lo apretó hacia él.

-¿Que crees que estas haciendo?- cuestione con una sonrisa, sinceramente no me importaba que el chico también muriera.

-L-Lo lastimaré si no bajas esa arma.. -en cuestión de segundos el chico se vio comprometido en la situación con una navaja rozando la piel de su cuello-Enserio lo haré..

Patético.

Apreté la pistola entre mis manos y los observe, el chico estaba sorprendido, y admito que yo también, siendo su propio padre fue capaz de ponerlo en semejante riesgo, solo me puedo dar cuenta de que las personas se siguen destruyendo así mismas, ahora no era momento de pensar, si no de actuar, sin embargo me detuve de golpe al ver los ojos suplicantes de ese sujeto, los había visto antes, de eso estaba seguro, pero era extraño, no recordaba en donde, no es para menos, su rostro estaba totalmente irreconocible.

"Bingo"

Sonreí de lado, siendo esta una de mis mejores sonrisas.

Ahora lo recordaba.

Era el imbécil que se acostó con la mujer que creí amar.

Me alegraba saber que yo era el causante de aquellas cicatrices en su rostro, el destino estaba a mi favor, no pensé encontrármelo de nuevo y ahora el tenía dos deudas que pagar, en ese momento no lo pude hacer, pero ahora tengo esa oportunidad y no la desperdiciaré, haré que pague por todo el daño que me causo.

-Esta vez no dejare el trabajo inconcluso, esta vez si te mataré.

Y sin esperar mas jale el gatillo.

La bala impacto justo en su cabeza, gozaba de una buena puntería, y gracias a eso solo logre lastimarlo a el, fue cuestión de segundos para que cayera al suelo dejando libre a su hijo, este lo observo atónito, pero no hizo absolutamente nada, simplemente se encogió en una esquina del lugar en busca de protección, lo mire expectante,no lloro no grito, solo se quedo allí observando el cuerpo de su padre, como si en sus más profundos pensamientos tal vez.. solo tal vez le hubiera gustado verlo así desde hace mucho tiempo.

Muerto.

Mi mente estaba tranquila, me sentía mas ligero, como si me hubiera quitado un peso de encima, se sentía bien, y ahora era momento de irme, ya no tenía nada que hacer en el lugar, o al menos eso pensé, estaba a punto de marcharme pero el muchacho logro llamar mi atención, estaba seguro que el me podría servir de algo en un futuro, parecía ser un buen chico, demasiado frágil y vulnerable, dos cosas que combinadas no traen nada bueno, así que mi trabajo de ahora en adelante sería lograr que esa fragilidad desapareciera, me encargaría de que se convierta en un hombre despiadado, lo entrenaría igual como lo hicieron conmigo, yo lo ayudaría, así también como el me ayudara a conservar el odio que tengo dentro de mi, pero sobre todo me ayudara a recordar que nunca se debe confiar en una mujer y que el amor es una completa basura, al ser él, el hijo de quien me quito todo, lo que alguna vez ame.












"Los secretos siguen siendo eso... secretos"

Hola ❁

Va les explico.. por si tienen dudas, Jimin tuvo un amor siendo aún joven, y este le falló, como habrán leído, todo lo que ocurrió lo llevo a ser a Jimin como es ahora, y si tal vez debí contar algo adicional sobre la relación de el con la chica pero que va, así quedo, para que más.

Espero que hayan descubierto ciertas cosas, ahre

Se que puede ser un poco cliché pero ¿y que?es mi historia y haré lo que yo quiera, así que por favor no quiero comentarios negativos.

Perdón por la demora, el capitulo tiene más de 3 mil palabras.

Regreso pronto :)

No se olviden de votar ☆☆

-Jaymy

Les dejo esta foto de los deditos de Jimin para que no olviden lo tierno que es 😊

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