Se jodio mi actuación.

Sin embargo seguí fingiendo, debía intentarlo una vez más.

—¿Acaso necesitas un beso para despertar?

Su tono irónico fue una alerta para mi cuerpo.

Y tuve que abrir los ojos, con vergüenza pero lo hice.

No me apetecía un beso de él, no.

Me reincorpore enseguida aún sin mirarlo directamente y no pase de largo esa sonrisa socarrona.

—¿Como te sientes?

—Bien.

—¿Segura? ¿No tienes miedo?

Vaya.. ahora se preocupaba de mi.

—Ajm  —me limite a hacer un simple sonido con lo garganta en forma de respuesta.

No podía seguir soportando su mirada en mi, la vergüenza me estaba carcomiendo.

Intente alejarme de él levantándome de la cama, pero al momento de hacerlo mi cabeza empezó a dar vueltas.

Para no terminar de caer me apoye en la cama y termine sentada sobre ella.

—No estas del todo bien.  —mencionó —Debes descansar un poco más.

Solo asentí con la cabeza y me termine por acomodar en la cama, poco a poco el mareo iba desapareciendo, pero a cambio de eso una fuerte sensación de hambruna y sed aparecieron sin previo aviso, y lo peor era que no había sido necesario que lo dijera, mi cuerpo por si solo lo dio a conocer.

—¿Eso fue tu estómago?

Mordi mi labio sin contestar, no hacia falta que lo hiciera.

—Volveré enseguida.

Solté un largo suspiro.

La tensión en mi cuerpo al fin se había ido.

Pero los recuerdos de la noche anterior seguían conmigo.

Me repetí varias veces en que no pasó a mayores y que debía olvidarlo.

Por suerte la nueva habitación en la que estaba y Jimin, me distraian.

Me levanté de la cama con cuidado y esta vez me atreví a recorrer la habitación.

No había nada que me indicara que fuera de un hombre..o de una mujer, así que solo camine alrededor.

Me detuve frente a las ventanas.

La luz de la mañana era muy bonita.

Y me sentía feliz de poder apreciar aquello.

—Ven a la cama.

La voz de ese sujeto me bajo la nube llena de tranquilidad que había creado en mi cabeza.

Así que solo me di la vuelta y regrese a la cama.

Una bandeja de comida fue colocada por encima de mis piernas.

—Come.

Reí.

No debía enserio pero no lo sé..  solo reí.

Por breves segundos sentí que el fuera mi sirviente.

Algo que no niego que me gustaría.

—Solo falta que me des de comer.

—Podría hacerlo.

Comenzaba a pensar que seguía dormida y que todo era un sueño de mal gusto.

—¿Tu..?

—No es cierto, puedes comer por tu cuenta.

Bien.. era la realidad.

Y no me gustaba.

No pude disfrutar de la comida puesto que fui vigilada todo el tiempo por el.

—¿Al menos podrías dejarme comer en paz?

—No.

Lo ignore y seguí en lo mío.

Rato más tarde aparte la bandeja, había quedado llena.

—Tú estómago —señaló haciéndome fruncir el ceño.

—¿Qué sucede con el?

—Esta enorme.

Su tono fue de burla.

Por breves segundos baje la mirada hacia mi estómago y si.. estaba un poco hinchado por la cantidad de comida que había ingerido.

Lo que me causó risa.

Algo me pasaba, no estaba bien.

Supe que nada estaba bien cuando el río conmigo.

—¡Tu no te rías! —Tome una de las almohadas a mi lado y se la lance.

Y no me importo nada al hacerlo.

La almohada había golpeado justo en su rostro haciendo que cerrará los ojos y apretará el rostro, yo solo lo mire expectante.

Y sonrió.

¿Acaso le había gustado que lo golpee con la almohada?

No, ese no era el problema.

El problema era que su sonrisa me gustó.

Sus pequeños ojos se achinaron dejando ver dos líneas.

Y por un momento me sentí feliz de haberlo visto así.

...

Había pasado toda la tarde con él.

Durante ese tiempo hablamos como personas normales, tal vez como simples amigos.. y supe que el no era tan malo como parece.

Fue flexible conmigo en cuanto a mis preguntas, tuve cuidado en no mencionar el tema de estar encerrada, no lo hice por que cabía la posibilidad de ganarme su confianza en un futuro.

Solo tal vez.

Cuando no hubo más preguntas nos quedamos callados, tenía una pregunta en mente en realidad, la tenía desde hace días atrás, pero no estaba segura si preguntar.

—Jimin..

—¿Mh?

—Ahm.. ¿has tenido novia antes?

Solo me interesaba saber porque así podría saber la raíz de todo esto, del porqué tuve que ser yo la escogida para estar aquí.

Quizá descubra algo.

Pero no respondió.

Creo que había hecho mal en preguntar.

¿Y si pensó que el me interesaba?

No, no.

No era así.

—Eso no te importa.

Su semblante cambio rápidamente, aquellas palabras fueron duras.

—Yo no quise..

—No digas nada, de todas formas lo hiciste.

El hecho de no haber contestado logró que mi curiosidad sobre ese tema aumentara.

Así también como el saber más sobre él.

Hola :)

Ya aquí está su actualización!

Se viene algo súper bueno sobre Jimin.

Hasta la próxima ❄

-Jaymy