Capítulo 32
[Capítulo final pt4/5]
En cuanto el oficial se acercó al joven amarrado para liberarlo, este comenzó a desesperarse y a gritar, intentaba con las pocas fuerzas que tenía, alejarse de las manos de aquél hombre.
—No te haré daño, ya todo ha pasado. —Le decía con la intención de calmarlo, pero este seguía moviendose de un lado a otro con pavor.
TaeHyung, finalmente reaccionó, caminó hasta el muchacho y con sus temblorosas manos, le tocó el rostro.
—Soy yo, soy TaeHyunie, soy tu hermano, aquí estoy. —Musitó con voz calma haciendo que Jin lo mirase a los ojos.
El joven, aun con su respiración agitada y expresión de pánico en sus ojos oscuros, miró a TaeHyung y se quedó repentinamente muy quieto. En ese momento, el oficial se acercó procurando no hacer movimientos bruscos y lo liberó con mucho cuidado. Primero los pies, finalmente las manos. SeokJin estaba prácticamente colgando de los brazos, así que en cuanto fue liberado, de no ser porque TaeHyung estaba allí, hubiese caído al suelo. Tenía las piernas demasiado débiles como para mantenerse en pie.
—Seokjinie, ya todo estará bien, estaré contigo y te cuidaré. —Susurraba TaeHyung. Aquel joven, aun detrás de todos esos hematomas y moretones, era hermoso. Al menor le transmitía una sensación de calidez al verlo, ya que este, tenía los mismos ojos que su abuela.
El oficial que estaba asistiendo a YoonGi, lo tomó de un extremo de sus brazos y lo recostó sobre un banco de madera que estaba atornillado contra la pared.
—Oye, chico, reacciona. —Le decía mientras le tomaba el pulso.
TaeHyung observaba a su amigo con preocupación, quería acercársele, pero si soltaba a Jin, este caería al suelo.
Poco a poco, YoonGi comenzó a reaccionar. Le habían dado un golpe muy fuerte en la cabeza.
Lo hicieron sentar y este se mantuvo muy quieto intentando recomponerse, mientras se tocaba la herida. Si quiera se había percatado de lo sucedido.
Estaban todos observando a YoonGi con preocupación, cuando uno de los oficiales, vino corriendo por el pasillo, al encuentro de sus compañeros.
—¡Hay otra habitación con rejas más allá!, ¡allí se encuentra otro muchacho!, Ayúdenme a liberarlo. —Musitó alarmado, seguido de ello corrió de regreso hasta el final del pasillo.
TaeHyung, caminó hasta el banco de madera donde YoonGi estaba sentado, fue muy despacio con Jin aferrado a su cuello. Una vez allí, lo depositó con cuidado sobre el banco.
—Gr-gracias. —Musitó SeokJin con voz muy ronca.
Enseguida vinieron dos oficiales caminando junto al joven que había estado encerrado en la habitación del final del pasillo. TaeHyung, en cuanto pudo verlo, caminó directo a él y le propició un fuerte golpe en el rostro.
— ¡Él se hizo pasar por mi hermano todo este tiempo! —Gritó.
El joven se tocó en donde TaeHyung lo había golpeado.
Uno de los oficiales, quien había presenciado la escena, se acercó y lo sujetó del brazo con fuerza para que no intentase escapar.
—Di todo lo que sabes. —Le ordenó el oficial en un tono de voz firme mientras lo empujaba fuertemente hacia atrás.
—Yo… yo trabajaba para el señor Jung, él me contrató para que me hiciera pasar por aquél chico, —Dijo señalando a Jin—, cuando me enteré que el novio de SeokJin estaba en casa de TaeHyung, me dio miedo ser descubierto, no quería regresar a prisión asi que intenté escapar. El señor Jung se enteró y me encerró aquí, ¡ese hombre está loco!, ¡les juro que solo acataba órdenes!
—Bien muchacho, lamentablemente eso no te resta culpabilidad. Acompáñenos. —El oficial lo tomó del brazo y lo arrastró escaleras arriba mientras el joven gritaba e intentaba liberarse de las fuertes manos que lo arrastraban.
—N-am… Nam… —Jin rompió en llanto y no pudo siquiera concluir lo que quería decir. Aun asi TaeHyung lo intuyó. Se le acercó y le palmeó la espalda.
—NamJoon está aquí, se encuentra muy bien, pronto lo verás.
Eso fue suficiente para Jin. Se quedó en silencio mirando sus pies desnudos y ya no se movió de aquél banco sino hasta que los oficiales anunciaron que la ambulancia estaba esperando por ellos.
Primero atendieron a YoonGi, quien había perdido mucha sangre debido a su golpe en la cabeza. Les preocupaba que no había emitido palabra alguna, se encontraba ido, como si no pudiese reaccionar.
Una vez en el hospital, le hicieron cinco puntos y le curaron la herida. Ahora solo necesitaba unos cuantos analgésicos y descansar.
Por otra parte, a Jin le habían puesto suero, y le habían hecho varios chequeos para asegurarse de que no tuviese algo grave. Los golpes que tenía en su cuerpo, eran de hacía bastantes meses. Y los hematomas en sus muñecas y tobillos, eran a causa de las cadenas. Fuera de ello, no tenía ningún hueso quebrado, y el diagnostico era que pronto podría marcharse.
TaeHyung estaba en la sala de espera, junto a HoSeok y NamJoon, a este último se le había informado todo hacía menos de veinte minutos y ya no sabía que hacer para acallar sus temblorosas piernas. Estaba ansioso por ver a su novio, pero también entendía que Jin debía descansar.
—¿Dónde está? —Jimin ingresó a la sala a toda prisa y miraba con desespero todo a su alrededor.
—Tranquilo, hoy mismo le darán el alta médica a YoonGi, solo está descansando. —Musitó TaeHyung. La calma en su voz, tranquilizó a Jimin.
— ¿Puedo preguntar como te enteraste de esto? —TaeHyung estaba confundido.
— ¿Aun no lo sabes?, ustedes chicos, están en todas las noticias.
— ¿Las noticias?, ¿Qué tanto saben? —Preguntó el castaño con evidente nerviosismo.
—Todo, que el padre de HoSeok… —Jimin hizo una pausa y miró a HoSeok con un dejo de tristeza.
—Está bien Jimin, no necesitas compadecerte, se lo merecía. —HoSeok se encogió de hombros, aunque una parte de él le dolía por como las cosas habían terminado.
—Bueno, el señor Jung está preso, entrevistaron a la policía y ellos informaron respecto a Kim SeokJin, quien estuvo encerrado todo este tiempo. También que JungKook resultó herido y lo peor…
— ¿JungKook? —TaeHyung se incorporó de la pequeña silla de plástico y observó a Jimin preocupado.
— ¿No sabías?, JungKook está…
—Jimin, no. —HoSeok lo acalló. No quería preocupar más a TaeHyung.
—HoSeok, ¿qué sabes?, ¿dónde está JungKook?, ¡por favor necesito saber!
—Bien. —HoSeok suspiró—, él recibió un disparo cuando fue a liberarme, mi padre me había encerrado en mi habitación y…
— ¿Cómo... cómo se encuentra? —TaeHyung no esperó una respuesta, fue directo al escritorio de información y preguntó por el paciente JungKook.
—En este momento acaba de salir del quirófano, cuando lo ingresaron aún tenía la bala en su vientre, así que está en un coma inducido, ha perdido mucha sangre —musitó la mujer mientras leía la ficha del paciente.
— ¿Va a mejorar?, ¿pu-puedo verlo?
—No podemos saberlo ahora, las siguientes horas son claves, por el momento no puede verlo. Lo mantendremos informado.
TaeHyung regresó con un nudo en el pecho, JungKook era su amigo, y se sentía responsable por él. Enseguida dejó salir toda su angustia en cuanto se sentó junto a HoSeok.
— ¿Cuándo acabará todo esto? —Preguntó más para si mismo que para el resto.
—Disculpa... —NamJoon observó a Jimin con nerviosismo—, ¿Qué es lo peor? Ibas a decir algo antes de ser interrumpido.— NamJoon, no se explicaba que cosa podía ser peor.
—Quizá es mejor esperar un poco más.
—Dilo ahora, quiero saberlo todo, no más sorpresas. —Interrumpió TaeHyung tras un mohín.
—Bien, esta noticia conmocionó un poco al país, ya saben, se supone que esta ciudad es segura, la gente ha comenzado a hablar. Entonces los medios han lanzado una noticia un tanto más… polémica, con el fin de que se olviden un poco del incidente con el señor Jung, el secuestro y el impostor.
— ¿Qué cosa? —Preguntó HoSeok.
—Se transmitió al aire, un video que detectó la cámara de seguridad de un restaurante, en dónde se ve claramente a HoSeok y a TaeHyung besándose. Créanme que todo el país está como loco, ese video se ha difundido en cada medio de comunicación. “Vergüenza nacional” .
—Ya, detente. —Musitó NamJoon.
— ¿Qué haremos ahora? —TaeHyung se aferró a los brazos de HoSeok y lloró sobre su hombro.
—Bien, ya no tendré que decirlo, me han sacado un peso de encima, créeme. —HoSeok intentaba hacer que TaeHyung no se sintiera peor, pero no funcionaba. El castaño sabía que muy probablemente, J-Hope sería despedido de su compañía.
—Lo siento mucho. —Musitó entre sollozos.
—TaeHyunie, ya no debes preocuparte, tu hermano está bien, YoonGi también, ya nadie te hará daño, estaremos juntos, ya no llores.
—Ya, déjalo llorar, ya habrá tiempo de ser valientes y seguir adelante.—Musitó NamJoon.
—Estoy saliendo con YoonGi.
Todos se quedaron en silencio.
— ¿Qué? —Preguntaron HoSeok y TaeHyung a coro mientras observaban a Jimin boquiabiertos ante la noticia.
—Bueno, aun no me lo ha propuesto pero, tenemos algo. —Musitó el pelinegro despreocupado.
—Bueno, en realidad me lo imaginaba, estaba esperando a que algunos de los dos se dignara a decírmelo. —Musitó TaeHyung mientras se secaba las lágrimas.
NamJoon suspiró y se levantó sin decir nada y fue en busca de agua y café. No se iba a mover de aquél lugar hasta que Jin despertase.
—
Lamento no haber publicado antes, estuve muy ocupada.
¡Gracias por los comentarios!, ¡os adoro un montón!
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro