Capítulo 19 El Gran Susto
Eso me dejó perplejo, mi padre no respondía, abrió la boca para decir algo pero la volvió a cerrar. Sentí que mi corazón se empezó acelerar de manera descontrolada, una sonrisa enorme se empezó a dibujar en mis labios, mi cuerpo empezó a temblar al escuchar esa última frase. Entonces si le importaba, aún tenía oportunidad, solo quería abrazarla y besarla en ese momento, pero mi cuerpo no respondía a nada, se me formó un enorme nudo en la garganta y el corazón saltaba como loco, mis ojos se inundaron de lágrimas pero no las iba a dejar correr.
Alicia
Hubo un enorme silencio por más de diez segundos. Lo había logrado, callé al viejo cascarrabias, eso sí que era un gran salto, yo debía llevarme el premio por enfrentarme a dos estrellas, una de pop y otra de básquet. Lo que me molestaba, era que había descubierto la verdadera personalidad de mi jugador favorito John Lee. Me gustaba como jugaba este tipo, pero ahora no creo estar segura de eso
-Esto no se queda así John- dijo el hombre para darse vuelta e irse
Me quedé sorprendida ¿El verdadero nombre de Edrick es John? Ya veo porque no lo usa.
Después que el basquetbolista se fue, me dirigí a la puerta para irme con Jackson de nuevo, se me había quitado el hambre con toda esa escena y necesitaba pensar en muchas cosas. Cuando di un paso para irme, una mano me tomó la muñeca. Miré la mano y luego levanté la vista para observar a Edrick
-¿Cuánto escuchaste?- me preguntó. Él tenía sus ojos inundados en lágrimas que no salían, me miraba de una forma que no podía explicar
-Lo suficiente como para hablar- le dije, pero la verdad es que oí solo las dos últimas frases, ya que venía corriendo, escuché las voces y la curiosidad me invadió, por lo que escuché esas dos cosas que dijo el viejo y me llené de impotencia.
En ese momento había pensado en que me arrepentiría de esto, pero no soportaba que un padre le hablara así a su hijo, así que me dejé llevar por los impulsos y todo lo que dije, ni siquiera lo pensé
Me solté de su agarre y seguí caminado, pero Edrick me alcanzó abrazándome por detrás mientras apoyaba su cabeza en mi hombro, eso si me sorprendió, por un momento dejé de respirar al sentir sus brazos rodear mis hombros y cintura. Parecía aturdido y no lo culpo ¿Quién dura dos meses ignorándote y luego aparece en el momento justo para defenderte? Solo yo hago eso, en serio necesito un psicólogo. Volví a respirar y dejé que dos de sus lágrimas cayeran en mi cuello, provocando que me sintiera en desventaja. Estaba aguando mi corazón que se me hizo un nudo en la garganta con su vulnerabilidad
-Ven conmigo, hay un lugar a donde quiero llevarte- me dijo lentamente al principio y luego tan rápido que apenas pude entender
-Tengo algo que hacer, no puedo ir- le respondí secamente, después de aclararme la garganta y para tratar de soltarme de su abrazo
-Por favor, solo acompáñame esta vez- me dijo en forma de súplica y sin soltarme un poco a lo que accedí sin pensar
-Gracias. Ustedes dos. Encárguese de la comida- les dijo a los dos hombres de traje que llegaron después de que el padre de Edrick se fuera, mientras que él regresaba a su estado natural. Yo le hice seña al más amable para que se la llevase a Jackson, él merecía una buena comida y que mejor comida que la preparada por el chef, exclusivamente para nosotros
Nos adentramos en su auto y me llevó un poco lejos, mi vista estaba hacia la ventana, observaba todas las luces encendidas de varios lugares lejos de allí. Parecían focos en medio de la noche.
En mi mente solo estaba debatiendo por todo lo que había pasado ese día. Hablar con Jackson hizo que mi corazón saltara de dicha. Llegar tarde a la hora de la cena me hizo conocer a mi jugador favorito en su peor faceta. Lo raro fue que dije que daría la vida por el idiota que me secuestró; ni siquiera sé por qué dije eso, técnicamente no lo haría, pero en este momento no lo sé. Edrick parece haber cambiado en cierta forma y lo que dijo su padre, en parte tiene razón, él ha estado completamente solo en esa casa por quien sabe cuánto tiempo y no tiene ninguna persona en quien confiar más que en sus dos mayordomos y su manager o eso parece. Aun no creo que todo esto esté sucediendo. Estos son los momentos en los que me encantaría tener a mi madre para que me ayudara con mi ensalada cerebral
-Llegamos- dijo él sacándome de mis pensamientos
-¿Eh?- respondí, para luego ver el lugar en donde estábamos.
Era un parque de diversiones extremadamente inmenso, había juegos que ni siquiera sabía que existían. Por Dios estaba en un lugar completamente libre, donde fácilmente me podía confundir con cualquier persona y escapar, pero no podía, debido a que Jackson seguía encerrado en la casa de Edrick
-¿Qué hacemos aquí?- pregunté asombrada y extrañada al mismo tiempo
-Iremos a cenar- me dijo como si fuera lo obvio, dejándome más extrañada
-¿En un parque de diversiones?-
-Si. Tú solo sígueme-
-¿Qué tal si solo tú te adelantas y yo me quedo a dar vueltas?- le dije esperando su reacción
-Tal vez después, ya sé que no serías capaz de escapar mientras yo tengo lo que más te importa-
-Pero podría pedir mi rescate- le respondí cruzada de brazos, un poco molesta por su respuesta y mostrándole mi lengua de forma infantil
-Andando- me ordenó
-Aish- repliqué, mientras lo seguía y él se reía, parecía divertirle mi situación. Nos adentramos entre la multitud de personas, algo que me extrañó es que nadie corriera hacia nosotros gritando como locos porque Edrick iba pasando ¿Dónde estábamos? Las personas cuando nos veían algunas saludaban como personas normales y la mayoría nos ignoraba.
Caminamos por algunos juegos, pasamos varios lugares, esto era como su casa, todo un laberinto. Después de girar más de cuatro veces, cruzar siete tiendas, llegamos a una especie de bosque oscuro. Se me vinieron miles de cosas a la cabeza y todas eran formas de cómo me mataría en este lugar, ahora si me asusté y mucho. Todo esto hizo que deseara regresar el tiempo hasta tener catorce años y decirle a mis padres que si quería entrar en la academia de artes marciales con Makensy, aunque sea de Taekwondo ¿Por qué rayos no le hice caso a mi padre cuando me dijo que debía aprender? Ahora el único truco que sé no me servirá de mucho
Estaba temblando, miraba a mí alrededor como si todo me amenazara, estaba demasiado alerta, que cualquier ruido me haría correr como si no hubiera un mañana. Yo no pensaba más que en salir corriendo, pero mi curiosidad me mantenía allí. Debo estar más que loca por seguir avanzando, cualquiera hubiese corrido desde hace mucho, pero yo seguí adelante.
De pronto Edrick se detuvo, provocando que yo chocara con él, alterando mis nervios y yo en vez de gritar suspiré muy fuerte, mi voz se tranco y mis piernas se activaron automáticamente para salir corriendo, no quería morir, tenía una vida por delante, amaba mi vida, esto me estaba enseñando a dejar de defender a las personas que no se lo merecen
-¡Alicia espera!- escuchaba detrás de mí, a lo que no hice caso en lo absoluto
Yo seguí corriendo, pero hubo un momento donde ya no sentí el suelo y me caí en una bajada, por suerte no era tan alto, pero tristemente caí de cara y me golpeé fuertemente. Me quejé de dolor, pero recordé la razón de mi corrida y traté de arrastrarme para levantarme y seguir, pero cuando me iba a levantar, alguien me tomó por la cintura, encerrando mis brazos y me levantó dejándome en desventaja.
-¡Auxilio! ¡No quiero morir!- empecé a gritar, pero me taparon la boca
-Alicia cálmate por favor. No vas a morir, te dije que quería mostrarte algo, pero no pensé que escaparías de ese modo. Ahora prométeme que si te suelto no volverás a escapar- me dijo Edrick en el oído con voz suave para relajarme, cosa que me estaba costando trabajo hacer, yo asentí con la cabeza rápidamente y demasiadas veces pero mi mirada decía lo contrario
-¿No confías en mi verdad? Tendré que usar el plan B- dijo desilusionado, por un momento me sentí mal por él, pero cuando dijo "Plan B", regresé en mi estado anterior.
Él me cargo sobre su hombro como si fuera un saco de papas y yo obviamente me alteré, lo golpeé con mis puños y le di patadas lo más rápido y fuerte que podía mientras pedía ayuda, él ni se inmutaba, no había nadie en ese lugar. Después de unos tres minutos me bajó, tomó mis dos hombros y me giró para que volteara.
Era un lugar muy hermoso y alumbrado, estaba decorado de bosque encantado por la noche, al mismo tiempo era un restaurante. Los meseros paseaban por todo el lugar entregando las órdenes vestidos al estilo medieval, los que comían allí se veían muy finos pero al mismo tiempo normal y por si fuera poco, todo el mundo había dejado de hacer sus cosas por mirarnos a nosotros, supongo que fue por mis gritos. Ahora me sentía completamente avergonzada por la actitud que tomé, definitivamente si no moría porque Edrick me mató, ahora lo haría de vergüenza
Miré a todo el mundo y le di una sonrisa avergonzada, tratando de decir que no pasaba nada, pero estaba segura que mi rostro estaba completamente rojo de la vergüenza
-No pasa nada, todo está bien, pueden seguir en lo suyo...Pudiste haber dicho que vendríamos a un restaurante en medio del bosque- le dije primero a las personas del lugar y luego susurrarle a Edrick un poco molesta, mientras todos regresaban a lo suyo
-¿Me hubieses creído?...Vamos- me dijo al principio como si supiera la respuesta, yo abrí mi boca para decir algo pero la volví a cerrar. Me sentía terriblemente mal porque lo que pensaba tenía razón, yo no hubiese confiado en él y aún me costará hacerlo. Al ver mi silencio me hizo seguirlo
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro