El primer cap de la segunda parte ya está publicado en mi perfil pero recuerden leer este último episodio o no van a entender ❤️

-¿Te sorprendes?-mi cuerpo temblaba y mi corazón latía tan fuerte que podía sentirlo sin tener que posar la mano sobre mi pecho

No tenía palabras, estaba asustada, los pocos meses que trabajé para él. Él viejo me acosaba día a día, me pedía que me quede hasta tarde y a solas con él. Supuestamente con la intención de solo trabajar pero ambos sabíamos que no era así

Siempre trataba de seducirme o utilizaba alguna excusa para verme desnuda, las cuales nunca le habían servido, después de lo sucedido con Frederick no me había vuelto a desnudar ante nadie y no lo haría ante un viejo, gordo y feo como mi jefe, pero si lo hice por el capullo de su hijo, el cual no sabía que lo era hasta ahora

No creí que su nivel de locura llegaría al punto de mandar a alguien a secuestrarme

Mi vista sobre el viejo se puso borrosa y no recordaba lo que me había preguntado mi ex jefe que ahora resulta ser nada más ni nada menos que el líder de mis secuestradores

Busqué con la mirada a Xavier pero sus ojos no me miraban, estos estaban fijos hacia el suelo, hacía un raro movimiento con la mano, como si fuera un tic

-¿La drogaste?-él labio de Xavier tembló pero se mantuvo en silencio

-No-susurró

Aproveché su miedo y descuido para quitarle el puro, aún estaba conciente de lo que hacía, la pastilla se está tardando en hacerme efecto y eso era lo que menos quería

North me lo quitó y lo arrojó al suelo, lo aplastó con su pie y me sonrió mostrandome su asquerosa dentadura amarilla y con un solo diente de plata

-Vas a ser conciente de lo que te haré Amnesia, esperé meses por esto, ahora sientate a comer y te espero en mi habitación-dicho eso salió de la cocina

Xavier quiso abrazarme pero no se lo permití,me hice a un lado

-Nes-no lo miré y me senté en una de la sillas mirando hacia el vaso de agua-llamé a Adonis-susurró y colocó la vajilla sobre la mesa

-Ya lo sé y puedes decirle que se vaya a la mierda-no me reconocía, antes jamás decía una maldición, antes de perder todo apenas sabía lo que significaba cada insulto pero ahora parece que me compré el diccionario de estos

Antes solo los utilizaba cuando el dinero no me alcanzaba para pagar las cuentas o para maldecirme a mi misma por ser tan ciega y no darme cuenta antes de la mala persona que era Frederick pero nunca los había utilizado contra otra persona hasta que el vuela sesos tironeó de mi brazo y lo llamé idiota

Lo primero que me llamó la atención de él fue la altura, luego sus dos piercings y por último el tatuaje, ni siquiera le había prestado atención a sus atrayentes ojos, me repugnaba la gente como él, no entendía ni entiendo como es que podían pasarse día tras día, noche tras noche en una esquina haciendo absolutamente nada ¿Tendrían familia a la que alimentar o estarán solos en el mundo? Esas solo eran algunas de las preguntas que se me pasaban por la cabeza cuando los veía

Abrí los ojos como platos al sentír que me sacudian

-¿Nes estás bien?-todo se veía... fantástico, podía ver como el salero y el pimientero se daban la espalda lo que me causó mucha risa-¿Nes?-levanté la mirada y allí estaba Xavier mirandome con una expresión muy graciosa

-Siip-reí

-¿Cuántas te tomaste?-me encogí de hombros-Nes pareces muerta, dime-miré mi mano y comencé a contar con los dedos aunque no sabía si se refería a las caladas que le dí al cigarro o a la pastilla

Me dí un golpe en la frente

-No es un cigarro es puuuro-me reprendí a mi misma

-Nes enfócate ¿Cuántas tomaste?-bufé

-Estoy en eso papaito calmadito eh-reí por su cara y seguí contando las caladas con los dedos

-La primera que me ahogué, la segunda que Jort me había enseñado, la tercera  y la última pero el viejo me la quitó y la aplastó con el pie-Xavier se golpeó la frente molesto

-La pastilla Nes ¿Cuantas tomaste de esas pastillas?-ohh ya entendí

-Emm una, si, está bien una, te besé para quitartela y luego corrí al baño, Jort entró me dijo que era asquerosa y repugnante, me llevó a la cama y me enseñó-reí y me acomodé la ropa-Esto es muy incómodo ¿Crees que debería quitarmelo?

-¿Te enseñó a qué Nes?-se pasó la mano por la frente, parecía molesto y apretaba muy fuerte los puños

Tomé su mano y la besé

-Te lastimas-su ceño se relajó

-¿Qué fue lo que te enseñó?-señalé el puro

-A fumar-suspiró

-Nes debes comer-miré la comida y negué

-No tengo hambre-susurré

Me miré la mano

-Nooo se me quebró!-le mostré mi uña y él acomodó un mechón rebelde detras de mi oreja

-¿Lista?-fruncí el ceño

-¿Para qué?-él no respondió y bajó la mirada a mi vestido pero no me miraba de manera lujuriosa, si no que triste

Me levanté torpemente de la silla y lo besé en los labios, él me miró a los ojos y solo ví vacío en ellos

Volvió a besarme y tiró las cosas que había sobre la mesa al suelo, me sentó en la mesa y volvió a besarme

-Nos iremos...-volvió a besarme-...Al infierno...-otro beso-...juntos-reí y le correspondí de la misma forma apasionada a sus besos

Comenzó a besar mi cuello

-Tengo aliento a tabaco-Él rió y me siguió besando

Gemí en su oído y comencé a quitarle la remera

-Xavier!-gritaron y dí un saltito del susto-Llevala a mi habitación-ordenó el viejo

-No-volvió a besarme y comenzó a quitarme el vestido

Un ruido hizo que se detuviera y sentí algo frío en mi nuca

-Papá no-el miedo volvió a sus ojos y yo temía voltearme a ver que era eso frío que me estaba tocando la nuca

-Te dí una orden-Xavier se quedó en su lugar-¡Obedece!-Xavier tiró delicadamente de mi mano y me llevó hacia la habitación donde me estuve quedándo

-¿Qué está pasando?-Todo se veía muy divertido menos las palabras del viejo

Besó mi frente y me hizo entrar a la habitación cerrando detrás de mí

Me tiré en la cama y gritos se escucharon pero no sabía de donde provenían, parecía que venían de todos lados, la habitación parecía tener eco

Estiré mi mano para tocar el suelo y me topé con algo frío

Me giré boca a bajo y me acerqué a la orilla de la cama

El arma estaba allí

Estiré más mi mano y la tomé

-¿Por detrás quieres?-levanté la cabeza y el viejo me estaba mirando, dejó su arma sobre el mueble muy lejos de la cama y se me quedó mirando con lujuria

Miré el arma que está debajo de la cama y luego miré al viejo, él aún no se había percatado de lo que tenía en mis manos así que sin que me viera la levanté, no recordaba que pezara tanto, la levanté sin que mi ex jefe me viera y la escondí detrás de mi espalda

Le hice señas para que se acerque

-Acércate Rodo- Él viejo rió

-¿Mi hijo te dejó caliente?-reí y asentí

-No sabes cuanto-susurré coquetamente y le guiñé el ojo

Caminó hasta a mi, se quitó los zapatos

Me dio mucho miedo ¿Qué tal si me aplasta con esa enorme panza que tiene?

Se acercó a mi rostro

Mis manos temblaban, levanté el arma y para cuando se dio cuenta ya tenía el arma en su frente

-¿De dónde la sacaste?-preguntó asustado

Me acomodé lo más lejos de él que pude mientras que con mis manos aún apoyaba el cañón del arma sobre su frente

-La bragueta de Adonis es grande-le quité el seguro para que vea que esto iba enserio-Vas a levantarte lentamente de la cama y no intentes nada-esta vez el que temblaba era él

-Estás drogada, no sabes lo que haces-asentí y reí

-Todos en esta casa se merecen una bala en la frente-reí por su cara-Has lo que te dije-mis ojos comenzaron a cerrarce-Ahora-le dije mientras me intentaba mantener despierta

Él me obedeció y se salió de encima

Salí de la cama y caminé hasta el mueble, tomé su arma y comencé a retroceder sin quitarle el ojo de encima, me tambaleé pero recuperé el equilibrio

La puerta se abrió golpeándome en el hombro, retrocedí apoyando mi espalda contra la pared y le apunté a la persona que había entrado

Mi vista estaba nublada pero aún así me mantenía despierta

-Baja el arma-

-No le hagas caso, dame el arma-miré a ambos y los dos me parecían idénticos

Maldita droga ¿Justo ahora haces efecto?

-No se la daré a ninguno, ambos son iguales no puedo distinguirlos ¿Quién de los dos es Adonis?-ví como intercambiaban miradas

-Amnesia soy yo-el que estaba cerca de la puerta fue el que habló

-No le hagas caso, yo soy el verdadero, debes darme las armas a mí-esta vez habló el otro Adonis-Estás drogada, pero dame el arma, nada pasará...

¿Cómo sabe que estoy drogada?

Apunté con el arma a ese Adonis

-No lo hagas, no te atreverías-sabía que no iba a matarlo pero tampoco tenía otra escapatoria

-Diganme algo que solo Adonis sabría-susurré

-Te encanta el café-dijo el Adonis al que le estaba apuntando

-Teodoro te ama-sonreí

-Eres tú-me abrió los brazos y lo abracé -Vuela sesos estúpido, me mentiste-él besó mi frente y me apretó más a su cuerpo

Grité al escuchar el ruído del cañón al ser disparado

Dejé caer a ambas armas al piso

<<Lo maté, soy una asesina>>

-¡¿Qué hiciste?!-gritaron pero no respondí

El piso poco a poco se iba manchando cada vez más, formando un enorme charco de sangre alrededor del Adonis

-Maté a Adonis..

Escribir esta historia fue una experiencia completamente diferente, usualmente escribo sobre seres sobrenaturales pero me encantó escribir esta historia y espero que a ustedes también les haya gustado leerla❤️❤️

La segunda parte ya está disponible en mi perfil espero que la lean❤️❤️