...

Gabriel despierta bastante adolorido, empieza a recordar lo que lo llevo a esta situación.

Gabriel: ¡Carlos!

Gabriel dirige su mirada hacia el viejo Jolteon, aún estaba respirando.

Gabriel: Esto es mi culpa, no debí de intentar matar a ese monstruo en este estado.

Gabriel se arrastra hacia el Jolteon, lo mueve con la esperanza de despertarlo, esto no tiene éxito.

Gabriel: Solo aguanta.

Gabriel con esfuerzo lleva al viejo Jolteon de vuelta a la cabaña, una vez allí, lo recuesta en su cama.

Gabriel: Creo que es mejor buscar ayuda.

Este se dirige a la salida de la cabaña, pero antes de salir, toma una baya zidra para comerla y recuperar energía.

Aquel Serperior se desliza por el bosque buscando a alguno de los curanderos del bosque, por su madre sabía de algunos.

Gabriel: Recuerdo... Que era por aquí.

Este llega a un gran árbol, da unos pequeños golpees para llamar adentro, en poco sale un Vaporeon.

Vaporeon: ¿Te puedo ayudar en algo?

Gabriel: Necesito su ayuda, mi amigo está muy mal herido.

Vaporeon: Está bien. ¿Y como vas a pagar?

Gabriel: No tengo mucho, podría darle algunas bayas como pago.

Vaporeon: Aquí no se acepta caridad.

Gabriel: Por favor, mi amigo está grave.

Vaporeon: Si no tienes algo de valor, no tengo por qué ayudarte.

Gabriel: Necesito su ayuda, mi amigo fue atacado por un Zoroark.

Vaporeon: Nosotros no aceptamos miserias, si quieres caridad, busca a mi hija, tal vez te quiera ayudar.

Gabriel: ¿Dónde la puedo encontrar?

Vaporeon: En un lugar cerca del río, ahora vete.

Gabriel se va de allí molesto, con dirección al río, era lejano de dónde vivía.
Al llegar se percata de un par de casas de campaña allí, pensaba que eran humanos hasta que ve a una Umbreon salir de allí, rápidamente asume que era la hija de ese Vaporeon, así que decide acercarse. 

Gabriel: Disculpa, ¿Eres una de las curanderas?

Umbreon: ¿Que necesitas?

Gabriel: Necesito tu ayuda, mi amigo, un Jolteon fue atacado por un Zoroark, y me temo que le haya pasado algo grave.

Umbreon: ¿Un Zoroark?

Gabriel: Nos atacó y casi nos mata, necesito tu ayuda.

Umbreon: Esta bien, llevame a donde está tu amigo.

Sin perder tiempo, aquel Serperior se desliza a la mayor velocidad que le es posible hacia la cabaña. La Umbreon lo sigue detrás, está nota el estado de Gabriel. Nota algunos cortes recientes en todo su cuerpo, también una parte grisácea en su parte trasera, además de que le falta una parte de su franja izquierda.

Gabriel: Es aquí.

Aquella Umbreon ve curiosa la cabaña al frente de ella, Gabriel entra y le indica que la siga.

Gabriel: Está por aquí.

La Pokémon sigue a aquella serpiente hasta al frente de una habitación.

Gabriel: Está dentro, por favor, haz todo lo posible.

Umbreon: Yo me encargo.

La Umbreon entra a la habitación, cerrando la puerta detrás de ella, impidiendo ver a Gabriel lo que pasaba.

...

Después de unos diez minutos aquella Umbreon sale de la habitación.

Umbreon: Tu amigo estará bien, es posible que despierte dentro de poco. Solo tiene un esguince en una de sus patas delanteras, así que tiene que reposar por unos días.

Gabriel: Agradezco mucho tu ayuda... Emm...

Amesis: Me llamo Amesis.

Gabriel: Pues muchas gracias por la ayuda Amesis.

Amesis: ¿Cuál es tu nombre?

Gabriel: Me llamo Gabriel.

Amesis: Gabriel... ¿No crees que necesitas que te revise? Por que veo que no estás en buen estado.

Gabriel: No es necesario.

Amesis: Insisto.

Gabriel suspira y cede a la petición de la Umbreon, está le limpia los cortes que tenía al rededor del cuerpo.

Amesis: ¿Puedo saber por qué está parte está decolorada?

Pregunta mientras observaba la marca de Gabriel.

Gabriel: Cuando era un Servine perdí una de mis piernas, es por eso que esa parte no se ve bien.

Amesis: Lamento escuchar eso.

Gabriel: No te preocupes, solo es una cicatriz que no quisiera tener.

Amesis termina de curar a Gabriel, este por agradecimiento decide ir al almacén de Carlos para darle algunas cosas a la Umbreon.

Amesis al quedarse sola decide ver la cabaña, le llama la atención lo bien cuidada que la tenían, ya que contrastaba con su apariencia de afuera, en la mesa de la sala había un álbum con fotografías , sin embargo, una que sobresalía le llama la atención, al tomarla no puede evitar sorprenderse. Era la foto de su hermana con su mejor amigo.

Convenientemente Gabriel regresa con una bolsa llena de bayas y algún alimento raro.

Gabriel: Espero que esto sea lo suficientemente para pagar... ¿Pasa algo?

Pregunta debido a que ve la expresión sorprendida de Amesis.

Amesis: ¿De dónde sacaste esta foto?

Gabriel: ¿Para qué quieres saberlo?

Amesis: Los Pokémon de allí, están desaparecidos desde hace un tiempo.

Gabriel: La encontré en un árbol aparentemente abandonado.

Amesis: Creo que es el árbol donde vivía mi hermana. ¿Por qué tomaste esa foto?

Gabriel: Es una prueba.

Amesis: ¿Una prueba de que?

Gabriel se queda callado, cosa que molesta a la tipo siniestro.

Amesis: De seguro sabes algo, así que lo preguntaré una sola vez, ¿Sabes dónde están?

Gabriel: No, no lo sé.

Amesis: ¡Sabes algo y me lo dirás!

Aquella Umbreon comienza a cambiar de forma, Gabriel mira asustado el cambio de forma, mira cómo se volvía más alta, como sus garras crecían, como se paraba a dos patas, como se cambiaba de aparecía, a la de una Zoroark.

Gabriel: ¡U-Una Zoroark!

Amesis: ¿Dónde están ellos?

Gabriel: De seguro debes de estar aliada con el otro Zoroark.

Estos se preparan para pelear, sin embargo, son paralizados por algunos rayos.

Carlos: ¿Podrían hacerle el favor de no destrozar mi hogar?.

Este cojea un poco para llegar a dónde ambos Pokémon se encontraban.

Carlos: ¿Podrían decirme por qué razón quieren pelear?.

Amesis: Ustedes deben de saber algo sobre la desaparición de mi hermana y no quieren decirlo.

Gabriel: ¿Acaso no es obvio? ¡Ella debe de estar aliada con ese Zoroark!

Carlos: Escuchen los dos, no quiero que peleen, Gabriel, se que ella no está aliada con ese Zoroark.

Aquel Jolteon saca de la bolsa que tenía Gabriel dos baya Zreza para desparalizar a ambos Pokémon.

Carlos: Y con respeto a lo tuyo... Sabemos cómo está tu hermana, sin embargo, no te gustará nada su situación.

Este les aplica las bayas a ambos, quitándoles el mal estado.

Amesis: ¿A qué se refiere?

Carlos: Siéntate... Es mejor que escuches todo.

La Zoroark obedece, Carlos se sienta en el sofá frente a ella.

Carlos: Sabemos que tu hermana está secuestrada.

Amesis: ¿Secuestrada? ¿Sabes por quién?

Carlos: Por el Zoroark que nos atacó, y también por el Ninetales de la foto.

Amesis se sorprende por eso.

Amesis: ¿Por Ismael? Es el mejor amigo de mi hermana, no es capaz de hacer eso.

Gabriel: Mi compañera y yo vivos como ese Ninetales atacaba a tu hermana.

Amesis: ¿Quién es tu compañera?

Carlos: Es mi hija, se llama Layla.

Amesis: ¿Y dónde está ella?

Carlos: Ella fue secuestrada por el mismo Zoroark, sabemos que ella está con tu hermana.

Amesis: ¿Y como saben eso?

Gabriel: Nos llegó un vídeo...

Gabriel procede a mostrarle el vídeo a Amesis, está derrama algunas lágrimas al ver el estado de su hermana.

Carlos: Eso nos llegó está mañana, Gabriel perdió los estribos y quiso enfrentarse a ese Zoroark sin tener el nivel suficiente, por eso terminamos así.

Amesis: N-no puede...

Esta rompe en llanto, Carlos se acerca para consolarla.

Carlos: Lamento que te hayas enterado de está manera.

Amesis: Aurora...

Gabriel: Hemos estado buscándolas desde hace días, sin embargo, nadie sabe nada.

Carlos: Hace días me tope con ese Ninetales, no sabía que estaba involucrado hasta que Gabriel me lo dijo, cuando fue a buscarlo consiguió está foto.

Carlos le entrega la foto a Amesis.

Carlos: Creo que es mejor que tú conserves esto

Esta la toma, acto seguido se limpia sus lágrimas.

Amesis: Tenemos que cooperar para encontrar a las chicas(?)

Gabriel: Oye, dijiste que conoces a ese Ninetales, ¿No es así? Entonces debes de saber dónde estaba.

Amesis: Cuando Aurora desapareció intenté buscar a Ismael, sin embargo, no recuerdo el lugar donde se quedaba, por eso asumía que también estaba desaparecido.

Gabriel: ¿Cómo que no recuerdas donde estaba?

Amesis: Es lo que no entiendo, visite ese lugar muchas veces, pero, ya no logro recordarlo.

Carlos: ¿Has intentado rastrearla?

Amesis: Si, cuando desapareció lo intente, pero, su aroma solo iba en círculos, y ahora que ha pasado el tiempo he perdido el rastro.

Gabriel: ¿Cuánto tiempo ha pasado?

Amesis: Ya han sido dos meses.

Carlos: Además de ti, ¿Hay alguien más que sabe de la desaparición de tu hermana?

Amesis: Solo lo sabe mi padrastro y alguno de mis hermanos.

Carlos: ¿Y han intentado buscarla?

Amesis: Mi padrastro odia a mi hermana, así que no le interesa ayudarme. Además, los pocos hermanos que saben comparten la misma opinión que mi padrastro.

Gabriel: ¿Tu padrastro la odia?

Amesis: Si, así que yo soy la única que buscaba a mi hermana.

Gabriel: ¿Crees que puedas encontrar el rastro de Layla? Lleva un mes desaparecida.

Amesis: Es posible, ¿Tienen algo con su aroma?

Carlos: Tengo algunas pertenencias de ella.

El viejo Jolteon se dirige a uno de los cuartos, dejando solos a Amesis y Gabriel.

Gabriel: Lamento el haber intentado atacarte.

Amesis: Yo también lo lamento, pensaba que tú tenías algo que ver con algo de la desaparición de mi hermana.

Gabriel: Lo mismo digo. Así que, ¿Todo olvidado?

Gabriel le extiende su brazo, Amesis le estrecha una de sus garras.

Amesis: Todo olvidado.

Carlos regresa con una pequeña almohada y un pequeño peluche de Eevee.

Carlos: Esto es de ella, tomo esto antes de que desapareciera, así que debe de tener su aroma.

Amesis: Creo que esto será suficiente.

Esta olfatea las pertenencias de Layla. No tarda en captar algunos aromas.

Amesis: Tengo su aroma...

Esta sale de la casa buscando algún rastro, Gabriel carga a Carlos y la sigue, con la esperanza de saber dónde estaba Layla.

Esta camina hacia el lago, siguiendo lo último del rastro de Layla, sin embargo al toparse con un arbusto su aroma se revuelve con las flores, por lo que no puede continuar.

Amesis: Aquí se pierde el rastro.

Gabriel: ¿No lo puedes encontrar?

Amesis: Me temo que no, su aroma fue mezclado con estás plantas, así que aquí se pierde.

Carlos: Maldición.

De pronto Amesis encuentra un olor familiar, sabía a quién le pertenecía ese aroma, así que sale a todo velocidad a dónde provenía el aroma.

Gabriel: Hey, espera.

Gabriel sigue a aquella Zoroark sin embargo, la pierden de vista.

...

Cerca del árbol de Aurora, se encontraba Ismael gruñendo cosas sobre la incompetencia de ese Zoroark.

Ismael: Todo por la culpa de ese inútil.

Este se encontraba allí para quemar el lugar, pensaba que así no habría más evidencia para que lo encontrarán.

¿?: ¡Tu!

De inmediato es derribado al suelo, ve que se trataba de una Zoroark, la hermana de Aurora.

Amesis: ¡Dónde está mi hermana!

Ismael: No se de que hablas. 

Amesis lo levanta para mirarlo directo a los ojos, de inmediato nota algo extraño en ellos.

Amesis: ¡Sabes bien de lo que hablo! ¡Dónde está ella!

Con rápidos movimientos Ismael logra zafarse del agarre de Amesis. Este se pone en posición de combate mientras gruñe.

Amesis: Bien, si así lo quieres.

Esta se abalanza sobre Ismael con garra umbría, mientras que esté cargaba un potente lanzallamas.

...

Gabriel: ¿No la vez por algún lado?

Carlos: No, por ninguna parte.

Gabriel: ¿Crees que haya encontrado algo?

Carlos: Por cómo salió, debe de ser alguien.

Gabriel: Si estuviera en mejores condiciones no la hubiera perdido.

Carlos: Apenas nos estábamos recuperando de la paliza que nos dio ese Zoroark.

Gabriel: ¿Y tú crees que con la ayuda de Amesis podamos encontrar a las chicas?

Carlos: Por supuesto, nos servirá bastante en la futura batalla contra ese Zoroark.

Estos escuchan una explosión, estos buscan el origen de la explosión, mientras se acercaban escuchan varios estruendos que aumentaban a medida de que iban avanzando.

Al llegar encuentran a Amesis peleando contra Ismael.

Gabriel: ¡Amesis!

Gabriel con gran velocidad se acerca a Ismael y con rápidos movimientos lo inmoviliza con su cuerpo.

Gabriel: Si vas a noquearlo, este es el momento.

Ismael empieza a morder el cuerpo del Serperior buscando liberarse, sin embargo, es paralizados por un rayo de Carlos. Gabriel aprovecha y usa tóxico en su presa.

Ismael: Déjenme ir malditos.

Amesis: ¡Dónde está mi hermana! 

Ismael: No se de que hablas.

Amesis: Tu y un Zoroark tienen a mi hermana. ¡Me dieras donde están o te mato aquí mismo!

Ismael: No te diré nada.

Este logra liberar una de sus patas y lanza una pequeña bola gris al suelo, de está empieza a salir bastante humo, acto seguido Ismael quema a Gabriel, librándose del agarre.

Gabriel: ¡Se me ha escapado! 

Amesis: No puedo ver nada, tampoco puedo olerlo.

Carlos: No podemos perderlo.

Cuando se despeja el humo no hay ningún rastro de aquel zorro, Amesis no puede encontrar su aroma.

Amesis: Escapó...

Esta se tira de rodillas mientras derrama algunas lágrimas.

Amesis: Tenían razón, tiene a mi hermana.

Gabriel: ¿Acaso no nos creías?

Amesis: Era el mejor amigo de mi hermana. Nunca lo creí capaz de hacerle eso.

Carlos: ¿Te dijo algo?

Amesis: Tenía el aroma de mi hermana. Eso dice mucho.

Gabriel: Perdona la pregunta, pero, ¿Que tan cercanos eran tu hermana y ese Ninetales?

Amesis: Es una larga historia... Pero en resumen, eran como una pareja.

Gabriel: Entiendo.

El trío de Pokémon deciden regresar a la cabaña de Carlos para recuperarse de la batalla contra Ismael.

...

Ismael: Mierda... Esa maldita.

Ismael cojeaba de regreso a la cueva.

Ismael: Su hermana... Sabía que me encontraría.

Su mente estaba dividida, la voz que le pedía parar con la tortura de Aurora era más fuerte.

Ismael: Nunca dejaré a esa puta.

Mientras más avanzaba se debilitaba más debido al envenenamiento de Gabriel.
Da unos pasos más antes de caer debilitado al suelo.

....

Primer capítulo del 21 ¿Cómo les fue en las festividades?