Sabían que este momento pronto llegaría. Sucede que ahora todos estaban deprimidos, para todos esto sucedió antes de lo esperado. Su familia estaba devastada, y para otros esta era la mejor noticia que habían recibido en mucho tiempo.

—¿Como está ella? —le preguntó Matt a su cuñado. Hace tiempo que no se dirigían la palabra pero ahora él había dejado eso en el olvido.

—No lo se —respondió un asustado Thomas —, aún no ha venido alguien a decirme su estado.

Los gemelos Griffin estaban igual de angustiados, Tyson estaba llorando y lamentándose al mismo tiempo. Se sentía culpable al decirle a Jade que saliera con Thomas, nunca pensó que eso pudiera ocurrir. Tyron intentaba calmar a su hermano con un cálido abrazo, solo logró que su respiración se relajara.

—Ella estará bien —le decía Tyron una y otra vez a su hermano. Matt y Thomas no se volvieron a hablar. Matt tomó lugar en una banca de la sala mientras que Thomas salió a fumarse un cigarrillo.

En la cabeza de Thomas solo se mantenían desgracias, se sentía culpable y no dejaba de lamentarse. Sabía que había una gran probabilidad que no saliera de esta. Su deber era protegerla pero no lo hizo, para él era una buena razón para sentirse una completa mierda.

—¿Donde está? —lo sorprendió Steve. Detrás de él venía su hija, Stassie. Se notaba que no ha dejado de llorar en un buen tiempo.

Thomas tomó una calada larga a su cigarrillo para después liberar todo el humo y responder:

—Puedes encontrar a sus hermanos en la sala de espera de urgencias, aún no han dicho nada de su estado.

Stassie de inmediato corrió hacia aquella habitación. Su amiga estaba en peligro, debía de estar informada de todo lo que acaba de ocurrir o al menos eso lograría que se tranquilizara. En el trayecto al hospital les envío un mensaje a sus amigas. Las dos dijeron que pronto estarían en el hospital. Stassie tenía miedo de sus reacciones, Emily y Sophie son muy sentimentales, más Emily en estas condiciones.

"En quince minutos llegamos" indicaba el último mensaje que le había enviado Sophie a Stassie.

Stassie de inmediato se acercó a Tyson y lo abrazó, para ella él era el indicado para encontrar apoyo pero él estaba igual o peor que ella.

Tyson se sentía de la mierda, según sus palabras. Para el, él fue un factor importante y no cambiará de opinión. Su hermana estaba en sala de emergencias por su culpa.

Tyron sentía que debía vigilar a todos, pensaba que muy pronto perderían la postura y se volverían locos de alguna manera. Por el momento solo trataba de beber de su café pero no lo disfrutaba, sentía que su deber era vigilar a todos y más a Matt; Jade hubiera querido eso.

—¿Tyron? —lo llama Liam, recién llega. Liam tomó por sorpresa a la mayoría, Thomas lo llamó. Sabe que es importante para Jade, importante para sus amigas y más para Matt, es como su otro hermano.

—Dime —respondió el.

—¿Estas bien? ¿Necesitas algo?

Tyron pareció pensar mucho en su repuesta, el no se sentía nada bien pero no lo diría.

—Si, solo me preocupa mi hermano. Nunca se sabe cuando puede perder el poco control que le queda, ahora solo queda esperar por el diagnóstico.

Liam se alejó asintiendo. Pensó que era mejor dejarlo solo, tal vez Tyron aún no procesaba todo. Eso le preocupaba a Liam, probablemente ninguno de ellos procesa todo realmente.

—Iré con Thomas —avisa Tyron hacia todos, cada uno asiente.

—Darrick ya está en camino por su pequeña —le dice Steve a Thomas, este enciende otro cigarrillo.

—¿Cuanto tiempo tardará en llegar?

—No lo se —de encaje de hombros, de inmediato recordó el por qué estaba allí con Thomas —. ¿Recuerdas el rostro de la persona que se agravió a atacarlos?

Thomas asintió, le dio una calada pequeña a su cigarrillo y guardó el humo por unos segundos.

—Un tipo rubio, lleno de tatuajes, parecía de estatura promedio para un hombre, tenía perforaciones en las orejas y tenía ojos oscuros. ¿Te sirve eso?

—Tal vez, espero y si funcione para Darrick.

Tyron aún no llegaba a ellos, el se había detenido cuando noto que las chicas recién llegaban al hospital. Estaba dispuesto a llevarlas con su amiga y hermano, así lo hizo.

—¿Tienes idea quien era ese tipo? ¿Qué mafia se encargó de atacarnos?

—Claramente esto fue obra de Christopher, eso es seguro desde el momento que nos contaste su plan.

—¿Buscarán aquí primero? —le cuestionó Thomas a Steve. Thomas estaba seguro que encontraría al hombre que causó todo, debía de arrepentirse de alguna forma.

—Darrick llegará esta noche, mañana lo buscaremos a primera hora. Hoy solo nos preocuparemos por la salud de Jade.

Steve se dio la vuelta y caminó en dirección a la entrada del hospital. Thomas se dejó caer en la dura acera, estaba devastado. Era consiente de lo terrible que se encontraba Jade, era consiente que difícilmente iba a salir de esta. Sabía que su cuerpo lucharía por todo pero desde el momento que su corazón paró aquella vez en la ambulancia sintió que ella estaría en peligro siempre. El no podía cuidarla del todo.

Thomas dejó que las lágrimas recorrieran sus mejillas, no haría el intento de deshacerse de ellas.

—¿Por que no pude ser yo quien ahora esa cama? ¿Por que mierda no me pasó nada?

Nadie entendía como es que él había salido con moretones o rasguños menores de aquel trágico accidente. Jade recibió lo peor, ahora ella estaba en la sala de urgencias luchando por sobrevivir.

Termino con su cigarro y se levanto de la acera, no iba a seguir allí aparentando ser un vagabundo con su olor a tabaco y aspecto de asesino. Guardó sus cigarrillos en el bolsillo de su pantalón y inició su camino a la sala de espera. Allí todo estaban en completo silencio, cada uno de ellos estaba perdido en su mente. Todos querían explicaciones que estaban inconclusas pero apuntaban a alguien, y sobre la salud de Jade todo estaba en blanco, todos estaban listos para escuchar lo peor.

Thomas les había informada del estado en que podrían encontrarse a Jade y lo ocurrido en la ambulancia. Eso hacía que todos estuvieran aún más nerviosos y ansiosos por alguna noticia que aún no llegaba y probablemente no llegue pronto.

¿Qué se debe de esperar ahora?

La fe es lo ultimo que se pierde en estos casos, ahora ni siquiera es de confiar la fe. Todo es inconcluso e impredecible.

—¿Han dicho algo? —preguntó Thomas después de llegar y ver a todos. Todos negaron, nadie podía hablar. Sus voces estaban perdidas en algún lugar del hospital. Eso era lo que provocaba cada uno de los hospitales, la energía y te encuentras allí es agobiante para ellos.

Steve pareció recibir una llamada importante, se disculpó y salió como rayo hacia el final de la sala. No tardo mucho en regresar e informo que Darrick ya había aterrizado, le pidió a Thomas que lo acompañara hacia el aeropuerto.

Los dos salieron del hospital no sin antes decir que en unos minutos regresarían y que les informaran de cualquier novedad.

Thomas condujo hacia el aeropuerto con velocidad estable, no tenían ninguna apuro. Esperaron más de veinte minutos a Darrick allá fuera.

—¿Cuanto crees que tarde? —le cuestionó Thomas a Steve.

—No tengo ni la menor idea, al parecer no tarda tanto cuando se trata de Jade —murmuro Steve al mismo tiempo que se encogía de hombros.

—Pues si, hay que recordar que Jade es como su hija favorita y no puede estar tan lejos de ella. Aunque Jade no lo noté y tampoco piense de esa forma —concluyó Thomas.

La presencia de Darrick pronto se hizo presente, pero no venía solo. Junto a él venían dos hombres, su escolta.

—¿Quien mierda eres tú? —preguntó Thomas con veneno en su voz.

Ni Steve ni Darrick parecían entender lo que sucedía. Thomas había reconocido al hombre que los atacó. Se había pasar como escolta de Darrick.

Thomas se lanzó sobre él e inició a entrelazar sus puños contra su rostro, no tardó muchos minutos en dejarlo inconsciente. No los separaron, ni tenían razón alguna para hacerlo.

Solo lo alejaron cuando veía que pronto estaría muerto y lleno de sangre.

—¡¿Por que lo atacaste?! —gritó Darrick.

—Por que él es el responsable de que Jade esté en el hospital —murmura Thomas, está asustado. Darrick está alterado y no es precisamente el hombre más pacifico en esas condiciones.

Darrick se acerca al tipo que está tirado en la acera y hace que su puño choque contra su mandíbula. El hombre de inmediato escupe sangre y trata de levantarse, falla. Está mareado, Darrick saca un habano de su saco y lo acerca a su boca.

—Llévenselo en otro auto, lo quiero en casa de Jade y veremos que hacer con él desgraciado ese.

Los hombres ordenaron a su jefe y lo subieron en el auto como si se tratara de peso muerto. Darrick se subió al auto de Darrick en el asiento de copiloto mientras Steve conducía.

—¿Por que no me dijiste que ya tenían al hombre? —demandó, Steve pareció pensar la repuesta y después soltó con cuidado de estallar la bomba.

—Te lo iba a decir en cuanto llegarás aquí, no sabía que se trataba de él. Thomas me dio una pequeña descripción física, nada fuera de este mundo. Nadie se habría imaginado que se trataba de él precisamente —contento después de dar un suspiro corto.

Ninguno de ellos habló por el resto del trayecto. Darrick estaba al tanto de todo, sabía que aún no le decían lo que le sucedía a Jade y exigiría saber lo que le sucede cuanto antes. Thomas no sabía qué pensar ni cómo actuar, había visto al hombre que provocó todo y había imaginado como vengarse de él. No sabía cómo reaccionar a algo tan rápido, estaba en shock. Steve solo quería que todo mejorara, Jade es amiga de su hija y como su otra hija. El la ama y se preocupa por ella, también piensa que debe de exigir información en el hospital.

Los chicos en el hospital están ansiosos y nerviosos, temen a los resultados. Saben que probablemente en cualquier momento llegara alguien con noticias de Jade, ni siquiera saben cómo reaccionar. Los chicos probablemente pueden manejar la situación, o tal vez no. Las chicas ya están empapadas de lágrimas, no hay quienes puedan tranquilizarlas, incluso algunos enfermeros se han preocupado por ellas y ofrecido su ayuda.

La llegada de Darrick tomó de sorpresa a los gemelos, más a Tyron ya que no se conocían. Es fácil saber que Darrick destaca el cualquier lugar por su elegancia.

—¿Han dicho algo? —interrogó Steve a los presentes, pero sin más negaron.

Darrick por su parte optó por obtener respuestas por su parte, fue hasta un mostrador y cuestionó a una enfermera:

—¿Tiene información de la paciente Jade Ventura? —La enfermera pareció buscar algo en un computador para después negar.

—Lo lamentó, aún está en cirugía. No debe de tardar mucho —trato de sonreírle pero no le funciono, realmente Darrick le provocaba miedo —. Le informó en cuanto salga de cirugía.

Darrick aceptó y regresó con los demás.

—¿Que te dijeron? —demanda Steve.

—Solo dijo que aún estaba en cirugía y que pronto saldría de allí —replica Darrick —. ¿Cuanto tiempo lleva en cirugía?

—Cerca de cuatro horas —contesta Thomas sin tartamudear.

—Ya debería de haber salido —balbucea Steve con preocupación. No era el único que se preocupó por eso, todos lo hicieron.

—¿Realmente estaba tan mal? —Matt cuestionó entre balbuceos, en cuanto hizo eso todos miraron a Thomas.

—Si, prácticamente estaba inconsciente pero entendía cada palabra que le decía. Tenía vidrios incrustados en la piel y cortes enormes.

—¿Por que tú no estás en cirugía? —volvió a cuestionar, en estos momentos se estaba molestando en tener a la persona incorrecta en cirugía, según el.

—No lo se, tengo cortaduras en los brazos, manos, piernas y estomago pero nada tan grave como ella —objeta con molestia, pensando lo mismo que Matt. Ahora desea ser él quien esté en lugar de Jade, el no tendría nada que perder si muere —¡Mierda! ¡Ese maldito si que la quiere muerta!

Thomas se levanta con un gran salto de la banca en que estaba, tomando por sorpresa a cada una de las personas que estaban en la sala.

—¿Por que mierda siempre tiene que ocurrir algo? —balbucea Thomas, se pasa las manos por su cabeza demasiadas veces que parece tiene un nudo de pájaros en la cabeza.

Darrick se acerca a él y lo toma de los hombros.

—Respira, toma aire. Relájate.

Thomas hace eso pero no funciona, solo logra alterarse más junto con su respiración. Thomas se recuesta en la pared mientras abraza sus rodillas con pánico, vuelve a hacer lo que le dijo Darrick y logra controlarse exitosamente. Pero sigue sin cambiar de posición, lentamente levanta la cabeza y descubre que todos los ojos están puestos en el.

—Tanta belleza debía de tener algo podrido —murmura Liam, robando miradas fugaces de muchos.

—Así le gustan a Jade, son sus gustos, no los tuyos —habla Tyron.

—¿Hay algún problema con lo que dije? —demanda Liam un poco irritado.

Es obvio que le menciono él comentario de Liam a Tyron, no le pareció correcto ni la forma de hablar ni el lugar en donde lo hizo.

—Si, estás hablando del novio de tu amiga quien ahora está mal de salud —replica igual de irritado —. Se que a ella no le gustaría que hablaras de él así.

—No encuentro el lado malo a eso— se queja Liam.

—Chicos —los interrumpe Sophie, es allí cuando notan que las personas apenas a ellos también los observan como si fueran animales de circo —, no pelean ahora.

Eso fue suficiente para que los dos estuvieran callados. Steve se acercó a Thomas a ayudarlo pero no aceptó nada, aclaraba que necesitaba tiempo para pensar, solo el y su mente. Steve se alejó de él y fue a la cafetería con Darrick.

—¿Que harás con el chico ese? —le pregunta Steve.

—Ahora solo quiero que llegue con vida a tu casa y allá sabré que hacer con ese hombre, tal vez se lo puedo dejar a Jade cuando salga de esto y... —pero Darrick no termina de hablar por que su compañero lo interrumpe.

—¿Que pasará si Jade no sobrevive?

—Probablemente después tendré a alguien yendo por mi cabeza, y esta vez no será un mafioso, es seguro se trate de la familia de Jade y con mas razón sus hermanos.

—No creo que suceda eso realmente, no te matarán.

—Siempre he tendido claro que es como mi hija, adore a su madre como mi hija al ser tan cercaba a mi hija mayor, después me encargué de moldear a Jade como es hoy realmente. La aprecio demasiado, si ella no sobrevive no solo perderé mi trono al ser ella quien me mantiene alto, también perderé a mi familia.

Al llegar a la cafetería no mencionaron algo más de ello, era mejor en un lugar privado y libre de personas.

En la sala de espera se estaba haciendo más incómodo el ambiente, al igual que triste. Tyron y Matt estaban junto a Thomas, se sentían igual, compartían la misma angustia. Las chicas por su parte no dejaba de hablar de lo acontecido sacando hipótesis o incluso hablando de un chisme antiguo como siempre.

—Me estoy muriendo por que saber algo de Jade, necesito saber que todo va bien —anuncia Sophie, empieza a mover sus piernas con nerviosismo —. No se por que tarda tanto, algo debe de ir mal.

—No, debe de esta bien —se entromete Emily —. Seguro están tardando por que tiene muchos vidrios en su piel, Thomas dijo que todo iba a estar bien.

—El nunca dijo eso, mentirosa —se desató la pelea entre las dos.

—Chicas —murmuro Stassie con Toni cansado —, dejen las maldigas peleas. Pasará lo que tenga que pasar, ella no morirá. Jade es fuerte y no querrá morir ahora.

—¿Creen que si muere en su mente pasará esa luz blanca?

—¿De que hablas, Emily? —cuestiona Sophie.

—Sobre esa luz de las que muchas personas hablan cuando casi mueren —replica ella.

—No, ella no morirá ni tampoco mirará esa maldita luz —las dos miraron con los ojos muy abiertos a Stassie, pocas veces decía groserías frente a ellas.

—No quiero que muera o le suceda algo —solloza Sophie.

—No le pasará nada de eso, ella estará bien.

Tyron escucha los sollozos de Sophie y lleva su vista a ella.

—Ella está bien, estamos hablando de Jade, ni siquiera se enferma nunca. Creo que puede resistir esto —Stassie anima a las chicas pero están tan perdidas en sus pensamientos negativos que no funciona en absoluto.

Tyron se levanta del asiento y va hacia Sophie.

—Sophie —la llama el—, voy por un café, creo que debes venir conmigo.

Sophie parece dudarlo demasiado pero al final acepta, el le toma de la mano y se va a la cafetería.

—¿Crees que a él le guste Sophie? —le cuestiona Stassie a Emily.

—No lo se—finge no tomarle importancia.

—Parece que le atrae ella, pero no es el tipo de chico que le gusta a Sophie.

Emily por dentro está molesta y siente celos —aunque no lo admita—, siempre ha pensado que prefieren a Sophie antes que a ella.

En la cafetería, Tyson y Sophie conversan pero los dos no tienen el humor para bromear o sonreír un poco.

—¿Que sucedió mientras estabas con tus amigas? —le preguntó Tyron.

—Nada interesante— balbuceó la chica, tomó la pajilla de su café y la agitaba con cuidado.

Tyron asintio y le dio un sorbo al café caliente con cuidado, por un momento, el intento mirarla a los ojos y saber todo lo que pasaba por su mente. Sophie entendió su mirada.

—No me gustan mucho los hospitales, solo entras aquí y una mala vibra te recibe. No se si me entiendas —volvió a balbucear.

—En realidad —Para Tyron era difícil estar en el hospital, tampoco le agradaban—, siento que entro a cualquier hospital y estoy listo para recibir noticias malas. Siento que mi pecho se comprime cada vez que entro a estos lugares.

—Lo dices como si fuera lo peor del mundo —bromea Sophie sin entusiasmo, a ninguno de los dos les causo el más mínimo entusiasmo.

—Por que lo es, probablemente cada persona que estaba allá recibió o recibirá una mala noticia. Si todo anduviera bien no estarían en un hospital.

—¿Crees que nos darán una mala noticia? —vuelve a sollozar. Tyron se vuelve a preocupar.

—Solo soy realista, claro, todo puede ocurrir pero no trato de darte esperanzar y decirte que Jade saldrá de esas puertas caminando.

Las lágrimas volvieron al rostro de Sophie, y ella sabía que eso pronto iba a ocurrir.

En la sala de espera se forman murmullos, el agotamiento se hace presente y también la angustia. Son mala combinación.

—¿Por que tardan tanto? —se cuestiona a sí mismo Thomas.

—No lo se, tampoco me gustaría saber y se que tú tampoco —Matt responde igual de triste.

—Ya es mucho tiempo, si tardan más ella estará en peligro.

—Tranquilo muchacho —decreta Darrick —, si le ocurre algo a mi niña los doctores morirán, ya está dicho.

—¿Eso debería tranquilizarme? —replica Thomas. Sus sentimientos están saliendo a la luz, se esta debilitando y su verdadero ser saldrá pronto.

—No, un cigarro tal vez si.

Se forma una guerra de miradas entre los dos, y nadie está dispuesto a ceder.

—¿Familiares de la señorita Jade Ventura? —llama una enfermera, de inmediatos todos se acercan a ella. TODOS.

La enfermera parece sorprenderse un poco por la rápida reacción de todos, y se sorprende más al ver a la cantidad de personas que se acercan a ella.

—¿Quien es el padre? —vuelve a preguntar mirando a Darrick y a Steve.

—Soy su hermano —protesta Matt.

—Bien, la señorita recién salió de cirugía, todo salió muy bien y el doctor me vino que en treinta minutos pueden pasar dos personas a verla —todos asienten y parecen volver a sus asientos mientras la enfermera se va —. Lo olvidaba, en el mostrador pueden pedir el número de habitación y si lo necesitan, más información.

Todos parecieron soltar el aire acomunado, pero para algunos no todo volvía ser color de rosa. Darrick sabía que podrían intentar atacarla en el hospital, Thomas temía de las personas que se encargaron de ordenar el ataque, Matt sólo quería que la mafia se alejara de Jade y que se acabaran los problemas.

Tyron y Sophie llegaron con café para todos, a la única que no le gustaba el café era a Jade.

—¿Que dijeron? —preguntó Tyron cuando noto que todos hablaban normalmente.

—Ya salió de cirugía —respondió Tyson, tomó su teléfono y lo encendió —, y en 10 minutos dos personas podrán verla.

—¿Quienes serán? —cuestionó Sophie. Ninguno respondió, ni siquiera Darrick.

—Tal vez Thomas y Matt que son quienes están en peores condiciones y ya están perdiendo la cordura —menciona Steve.

Y era correcto, ellos dos se encontraban tirados en el piso con la espalda en la pared y escondían la cabeza en sus rodillas.

El tiempo se fue volando, sus preocupaciones se habían ido y solo deseaban verla, y como se había dicho, Matt y Thomas fueron los primeros en poder verla.

Al entrar a la habitación el llanto regresó a sus rostros, no les importaba si estaban llorando frente al otro. Los dos eran igual de vulnerables. El primero que se acercó fue Matt, sentía como sus rodillas flaqueaban y como su corazón se aceleraba.

—No —murmuro con la voz rota, en un solo hilo. Dolía verla, sentía como su corazón estaba siendo comprimido en su pecho.

Thomas tomó sus manos con vendas y besó cada una de ellas, él en cambio disfrutaba hablar con ella en su mente. Iba a dejar que Matt hablara todo lo que quisiera y se liberara, pues nunca miro en las condiciones que estaba su hermana.

"Cariño, ahora todo va bien. Debes de soportar todo esto, desearía poder volver a hablar contigo. Todo esto fue mi culpa. Si tan solo nunca te habría dicho de cenar allá, nunca habrías estado aquí" Thomas se limpió sus lágrimas con el dorso de su mano, acercó su mano derecha a su rostro y lo recorrió.

Jade yacía en la camilla llena de vendas por los brazos, manos e incluso tenía pequeñas cortaduras en su rostro. Aveces su pulso aumentaba pero era normal, no había por qué preocuparse.

—Se que saldrás de esta, eres mi hermanita. Puedes volver a despertar y caminar por la calle, o mejor aún correr como tanto adoras —solloza Matt—. Solo tienes que despertar y abrir tus hermosos ojos, allá fuera hay muchas personas que necesitan ver tus hermosos ojos verdes.

Por la mente de Thomas se le ocurre corregir a Matt pero no lo hace, el pensamiento solo queda en su mente. "Según ella son marrones claros, no verdes pero da igual ahora"

Ocho horas después.

Matt, Thomas, Tyron y Tyson vuelven al hospital. Después de que todos miraran a Jade, Darrick dejo en claro que ellos debían descansar y el pasaría la noche allí.

—¿Ha dicho algo el doctor? —cuestionó Thomas a Darrick.

Darrick asiente lentamente, no sabe cómo darles la noticia a ellos. Para el fue duro aceptarla, sería aún más duro para ellos pero deben de enterarse.

—Si, mencionó que ella debería de haber despertado hace dos horas.

—¿Que significa eso? —preguntó Tyson con un hilo en su voz.

Darrick volvió a tomar aire como si con él juntara todo el valor que le queda, y finalmente termina de romper sus corazones.

—El doctor informó que entró en coma y podrá estar así por mucho tiempo, en todos los casos en diferente, algunos pueden tardar años, semanas o día en despertar. No saben lo que ocurrirá con ella.

Thomas y Matt fueron quienes peor tomaron la noticia, por la parte de los gemelos, los dos más tarde logran entender todo. ¿Cómo es que de un día para otro se puede perder todo?