Hoy tuve la idea de anotar a los gemelos en la preparatoria para que compartieran más tiempo juntos, tal vez no les va a gustar pero aún deben de estudiar y seguir con lo que hacían antes de estar en nuestra casa.

Había transcurrido una semana desde que ataque a Chris, me partió el corazón escuchar que Tyron estaba demasiado mal sin su hermano, ahora ninguno de los dos pueden estar separados.

También me alegro saber que Darrick solo tardaría unos días para recuperarse, ahora el solo tenía que tomar su medicina y guardar reposo para que con el tiempo la herida pequeña de la cabeza cicatrice, aunque hoy el me acompañaba para que él fuera el tutor de los gemelos y con su ayuda ingresaran en la preparatoria.

En este momento lamentablemente todos estaban en la cafetería, y eso significaba que todos nos podían observar ya que la cafetería tiene unos enormes ventanales del tamaño de la pared y de allí se observaba todo el estacionamiento de la preparatoria.

De lejos divisé a las chicas sentadas en su mesa típica, ellas levantaron sus manos y me saludaron, yo hice lo mismo.

—¿Son las chicas?— me preguntó Tyson.

Hace días los gemelos conocieron a mis amigas ya que sospecharon que tenía algo, ya que mi casa ya estaba en venta y no tardaron en conseguir mi nueva dirección, les conté todo con detalles ese día.

—Si, tal vez cuando ya estén ingresados podrías almorzar con ellas, aunque ellas no almuerzan solas pero creo que no debes preocuparte por eso por que los chicos que están allí son muy amigables.

—Lo pensaré.

Seguimos hasta la oficina y esperamos que sea nuestro turno. Al cabo de unos minutos, pasamos.

—Buenos días —nos recibió el señor Stewart —, ¿en que puedo ayudarlos?

—Buenos días —hablo Darrick —. Me gustaría ingresar a dos chicos en esta preparatoria, ¿aún puede aceptarlos?

El único problema aquí es que esta era una institución realmente buena y eso significa que tiene un número límite de estudiantes.

—Están de suerte por que acaban de salir tres estudiantes, y sin ningún problema los podré aceptar. ¿Trae consigo la documentación?

Los gemelos asintieron y le entregaron sus papeles a Darrick.

Por un momento me sentí fuera de lugar por lo que pensé en salir y saludar a las chicas ahora mismo, y conmigo llevar a los gemelos.

—¿Puedo mostrarles el lugar? —le pregunte al señor Stewart.

—Claro, señorita Ventura. Por cierto, después me gustaría charlas con usted.

Asentí con una sonrisa. Con la cabeza, les indique a los gemelos que me siguieran.

Cada vez que pasábamos por una puerta yo les decía que había en ese lugar, algunas veces los gemelos me contaban pequeñas anécdotas en su anterior escuela lo que hacía que los tres riéramos demasiado, páramos en la puerta de la cafetería, quería presentarles a los chicos y hacer menos incómodo cuando asistieran aquí.

Al entrar todos tenían la vista en nosotros —a causa de nuestras risas, supongo—, sonreí al tener de nuevo la atención de siempre, mire a los chicos de reojo y no si quiera prestaban atención al hecho de que la mayoría de los ojos estuviera sobre nosotros, solo caminaban como si de modelos de alta costura se tratasen.

—Hola —saludaron los gemelos al unísono.

Mis amigas saludaron tímidamente, Stassie le hizo una señal a Tyson para que se sentara a un lado de ella y él lo hizo de inmediato.

—¿Entonces? —le preguntó mi amiga.

El asintió, con una sonrisa, Stassie de inmediato asintió. Descubrí que las miradas aun seguían en nosotras pero no me importó un carajo, Tyron se miraba incómodo ya que para Tyson era más fácil hablar con las chicas.

—Bueno, —interrumpe la plática de las chicas y Tyson, también los de los chicos —el chico que está a un lado de mi es Tyron, espero que lo traten bien o sino... ya saben —me encojo de hombros, pero solo bromeé con lo que dije —, y el chico que está con Stas se llama Tyson y tal vez los verán un poco más seguido por aquí.

—¿Son primos? —preguntó un Michael, ya me lo esperaba de él. Él siempre habla y nunca se queda callado.

—Somos medios hermanos —me encojo de hombros como si fuera lo más normal, en este momento lo era para mi ya que les tome cariño el tiempo que estuve con ellos.

Tyson me miro sorprendido y Tyron igual, los dos estaban perplejos, incluso las chicas estaban sorprendidas aunque ellas ya sabían todo. La mesa se llenó de un incómodo silencio, solo por unos segundos ya que Sophie habló.

—Tyron puedes sentarte a un lado de mi, a no ser que no quieras, o pueden sentarte con los hombres.

El se sentó a un lado de Sophie y siguieron conversando, todo parecía normal, como si lo que dije anteriormente nunca pasó. Al cabo de unos minutos yo también me uní a la conversación, se trataba de la desaparición de varias personas, algunas de las personas desparecidas las conocía, también mencionaron un nuevo grupo criminal o nueva mafia, por lo que se no son muy conocidos.

Me teléfono vibro, desbloquee mi teléfono y era Darrick solicitando mi presencia. Deje solos a los gemelos ya que yo aún tenía que hacer algo más y eso significaba que aún no iríamos a casa.

—Me tengo que ir, después los llamo para avisarles cuando nos iremos, tardaré unos minutos, si necesitan algo me envían un mensaje.

Salí de la cafetería aún con algunos ojos demás en mi, no tarde más de diez minutos en llegar con Darrick.

—El te espera dentro —me indicó cuando me estaba acercando a él, no dije nada y solo seguí de largo.

Entre a el despacho con mucho silencio.

—¿Me buscaba?— pregunte.

—Así es señorita —El señor Stewart me espera a un lado de su enorme escritorio, me indicó con la mano que me sentara frente a él y así hice —. Se trata de sus estudios, solo tengo unas preguntas para usted.

—Está bien, lo escuchó —murmure, no era algo difícil de hacer y solo tomaría unos minutos.

—Respecto a los estudios en línea y cómo funciona, ¿cual es su opinión de ellos? Ya que es una de los pocos estudiantes que tiene un año o más estudiando de esta forma.

—Es muy practico que lo manejen por correo electrónico, los lunes te envían las tareas que se tiene que enviar los sábados sin falta, yo siempre he preferido hacer los proyectos, ensayos o cualquier trabajo que incluya a dos personas, sola, siempre seme dificulto trabajar si se trataba de dos o más partes y ahora eso ha cambiado por que yo tengo una idea y la empleo. Me encanta.

—Es muy bueno saber su opinión —me sonrió el hombre frente a mi —, ¿no tiene alguna cosa de que quejarse?

—Si, el hecho de que aveces los trabajos se dividen por maestro, es decir que cada tarea se tiene que enviar a cada maestro que le corresponda, aveces es difícil para mi saber que correo es de quien. Solo se debería de usar un correo para todas las tareas y te evitarías adivinar qué trabajo es de qué persona.

—Trataremos de arreglar eso —Asentí al escucharlo.

—Si eso es todo o tiene que agregar algo más, me puede decir ahora.

—El señor Monet me mencionó qué tal vez los chicos estudiarán de la misma manera que usted, si es así, usted podría ayudarles a que para ellos sea más fácil.

—Bien, estaré checando, si es todo me retiraré.

—Hasta pronto, señorita Ventura.

—Hasta pronto, señor Stewart —me despedí desde el umbral de la puerta del despacho.

"Ya termine. Podemos irnos, estamos en el despacho. Apresúrense." Le envíe un mensaje a Tyron.

—¿Todo listo? —preguntó Darrick.

—Si. Fue más rápido de los que esperaba, no fue tan importante como creí.

—Tardaste menos de diez minutos, los asuntos importantes tardan más de quince.

—Olvidaba que tú eras experto en tratar asuntos importantes de más de quince minutos —dije con sarcasmo.

—Hace tiempo que no escuchaba tu típico sarcasmo.

Rodé los ojos, me exaspera Darrick.

—¿Y bien? ¿Donde están los gemelos?

—Ya vienen, espero —murmure lo último en un volumen demasiado bajo, que estoy segura no escucho.

Solo tres minutos y ellos ya estaban con nosotros. Darrick solo salió de el lugar y fue directamente al estacionamiento. Ahora me tocaba manejar, subí al auto y ajuste mi cinturón. Sonreí incondicionalmente, no tenía seguridad en cada momento del día y eso solo significaba que ahora no corría peligro de muerte y podría salir sin ser secuestrada.

La semana anterior no había sido atacada, ni siquiera había un auto que me sígase como antes sucedía cuando alguien planeaba atacarme. Ahora solo estaba conduciendo sin ninguna preocupación, tal vez estaba en problemas turbios al estar en la mafia y algunas veces tenía una recompensa en mi frente, ahora es lo contrario. Por casi todo el país se corrió el rumor que la reina había atacado a una las mafias más fuertes del país, eso era muy bueno para mi reputación ya que significaba que muy pocos se atreverían a contradecirme.

No era la gran cosa por que sinceramente no fue difícil atacar a Chris, no tenía a los mejores hombres vigilando o tal vez tuvimos suerte de tenerlos con la guardia baja, no lo se, ahora tenía el nombre de ser alguien importante. Más personas conocían el nombre de la reina, también me ganaba más enemigos pero no significaba nada si no tenían el suficiente valor para bajarme de lo que estoy ganando.

Por suerte manejamos el hecho de que el rostro de la reina no se hizo famoso a nivel nacional o ya estaría la DEA detrás de mi, solo Michigan sabía mi rostro y si alguien se atrevía a compartirlo era hombre muerto.

👑👑👑

La música estaba demasiado alta para mi, pero subía mi adrenalina. Después de la tercera margarita yo comencé a ver un poco borroso, solo un poco ya que aún era consciente de lo que pasaba a mi alrededor.

—¿Estas ebria? —preguntó Tyson, o Tyron. Ahora mismo no los logro identificar.

—Solo un poco —murmure.

Tal vez un cigarro me ayude a ver un poco más con claridad. Tome uno de mi bolso y lo encendí, le di una calada y después expulsé el humo.

—Dame uno —me dijo uno de los gemelos, ahora se que es Tyron por que Tyson me pediría uno, no como Tyron que aveces suena como exigencia.

—Ten.

Le entregue un cigarro, él también repitió lo mismo que yo. Era tan relajante, mis músculos se relajaron y se me bajo un poco la ebriedad. Ahora mi punto de ebriedad estaba más baja que antes.

—¿Donde está Matt? —pregunte.

—Probablemente este con una rubia de piernas largas cojiendo.

—Ah —fue lo único que dije, sinceramente solo quería saber si estaba en el baño o en la pista de baile, no precisamente saber que estaba haciendo pero era muy tarde para decir algo más — ¿Y Tyson?

—¿Realmente quieres saber?— me preguntó elevando una ceja.

Lo pensé unos segundos y al saber mi respuesta no dudé en responder.

—No.

—Eso creí.

—¿Por que estas aquí? Digo, Matt esta con una chica y Tyson me imagino que hace algo parecido, ¿tú por qué sigues aquí conmigo?

—Alguien tiene que cuidar de las chicas existiendo tantos hombres pervertidos.

Sonrió, bebió de su vaso cuando se burló de mi, claro, él también bromea con eso de no poder cuidarme.

—Sabes que la reina puede cuidarse sola, ¿verdad?

—Oh claro que lo se —tomó un sorbo de su vaso, otra vez, por un momento se me hizo agua la boca él imaginarme el rico líquido del vaso, así que le quite el vaso y bebí de él, dejándolo vacío —. Ahora no vienes vestida de la reina, hoy estás vestida como Jade Ventura, cuando tengas esos ojos azules serás la reina, mientras tanto hoy te cuidaré.

—Oh si claro, el gigante fortachón me cuidará de los hombres malos —ironicé.

—Eso mismo haré.

Sonrió de lado, esa sonrisa de mujeriego. Solo quería deshacerme de él pero me temo que no sedería tan fácil.

—Si traigo a un linda chica de piernas largas, una chica de tu estilo, ¿me dejarías sola?

—No —¡Mierda! ¿Por que lo tiene que hacer tan difícil?

—¿Por que no lo aceptarías?

—Matt me dejo cuidándote, no haré otra cosa que no sea eso.

—Tyron, entiendo que puedo cuidarme sola.

Le di una calada larga a mi cigarrillo, este ya estaba punto de acabarse por lo que saqué otro de la cajetilla.

—Lo se, pero tu hermano se enojará si se entera que me aleje por lo menos un minuto de ti.

—Para eso existen los rápidos cariño —le guiñe un ojo exageradamente, el río por lo que dije, no por el guiño.

—Lo se, pero el rápido significa al menos cinco minutos lejos de ti.

¡Por el carajo! Ya no se que mas hacer o decir para convencerlo de alejarlo de mi, esta demasiado asustado de enfrentar a Matt enojado. Ahora solo esperare a que Matt llegue de su maldito polvo fiestero.

—¿No te puedo hacer cambiar de opinión? —negó —. Al menos me podrías traer una de esas bebidas de las que estabas tomando tu, ¿no crees?

—Ahora vuelvo, más te vale que no te muevas.

—Tenlo por seguro que no lo haré.

Y no lo haría, ¿a donde iría?, las personas sudadas no me gustan, el sudor de alguien más me provoca arcadas, por lo que no pasaría yo sola por la pista de baile y el baño quedaba demasiado lejos de donde yo estoy, tendría que pasar por la pista llena de malos olores y yo un poco ebria, además de oler eso, solo sería un rotundo no.

—Aquí están muñeca —llegó Tyron con mi bebida.

—¿No le echaste droga o algo así? Solo digo, aveces hay personas que me quieren secuestrar y vender mis órganos al mercado negro. Muchas personas me quieren muerta.

El maldito alcohol me hacía decir tonterías, no se por que lo tomo, tal vez por que esta tan malditamente bueno.

—Ahora que lo dices — me tendió el vaso y yo lo tome—... agrege un poco de droga para que te duermas y dejes de decir estupideces.

—Gracias, es muy bueno saber que te gustaría dormirme y no se que hacer con mi cuerpo —limpie una falsa lágrima de mi mejilla.

—Ven, vamos al baño. Te quitaré un poco lo ebria.

Me tome el líquido de la bebida de un solo trago, me ardió a horrores mi garganta pero me agrado, Tyron me arrastro de la muñeca por la pista de baile hasta el baño de damas.

—Es de damas, tú no puedes pasar.

Me ignoro, ¿tan ebria estaré? No lo creo, el idiota me odia y odia lidiar con una persona en este estado, pero él tiene la culpa por que él me da la bebida cuando yo la pido.

—Jade, tienes que cooperar.

—Lo estoy haciendo imbecil.

Ignoro mi insulto, tiene demasiada paciencia este hombre. Si yo fuera él ya me habría disparado.

Me acerco al lavabo y metió mi cabeza allí mojándome el cabello y el rostro. Inclusive yo lo ayude tallándomelos los ojos y quitándome el maquillaje, poco más y casi tomo una ducha completa en el lavabo.

—Hay unas toallas en mi bolso, pásamelas —le pedí y estire mi mano para que él me las entregara.

Termine de desmaquillarme y yo estaba un poco mejor, mi ebriedad disminuyo considerablemente, pero me ardían los ojos y ahora mismo lo único que quería hacer era tomar una linda y larga siesta en mi acolchonada cama enorme, con mi manta calentita y mis almohadas cómodas.

—¿Sabes? Me quiero ir.

—Que bien Jade, solo debemos encontrar a mi hermano y a Matt.

—Ajá.

Tome un pequeño pasador de mi bolso para terminar de hacer mi moño despreocupado. Tyron se encargó de abrirme la puerta para que yo siguiera con lo mío.

—Tyron llama a los chicos y diles que estaremos en el—alguien me golpeó bruscamente en el hombro, me dolió demasiado—... Idiota, no es tan complicado mirar por donde caminas.

Le dije a un tipo de ancha espalda, este de inmediato paso sus ojos por mi cuerpo haciéndome sentir pequeña —era como si con solo mirarme descubriera todas mis debilidades y defectos—. Muy pocas personas lograban hacerme sentir eso, bueno, solo una, Brandon.

—Perdón, no te mire.

Pero yo me quede perdida en sus hermosos ojos, por unos segundos pude jurar que también mire las hermosas olas de mar dibujadas en sus ojos de color, me perdí en sus bellas cejas y sus largas pestañas oscuras, sus labios simétricos y aquella barba que me hacía derretirme de calor.

—¿Por que mierda estas tan bello?

Estaba tan perdida en su rostro que ni pensé dos veces en hacerle la pregunta. ¿En que demonios pensaba?

El solo sonrió, mostró ligeramente sus dientes, un pequeño detalle que me hizo estallar de calor, y no precisamente me sonroje.

—Perdona, está ebria —se disculpó por mi Tyron.

Tyron me volvió a tomar de mi muñeca y trato de sacarme de allí a toda prisa.

—No le creas, no estoy ebria. Espero volver a verte —me despedí con una sonrisa y le guiñe el ojo.

—Espero lo mismo —el también se despidió con otra sonrisa, ahora decorada con dos bellos hoyuelos.

Listo, él quiere que me muera de calor.

Camine más deprisa por que Tyron casi me lleva arrastrando por la acera. Logramos salir del lugar y me acerque al auto, yo me subí al asiento del copiloto, con ayuda de Tyron.

—Quédate aquí, iré a buscar a los chicos.

Asentí lentamente, tal vez me podría dormir aquí.

Mi mente inició a volar y paro en la hermosa imagen del tipo —diría chico pero no creo que sea adolescente, por lo menos no se mira como uno—, en sus hoyuelos, su barba, su sonrisa y como olvidar sus ojos azules claros.

Definir la perfección sería él en una sola imagen, en serio espero volver a encontrarlo pero estamos en una ciudad demasiado grande. Eso prácticamente sería imposible, a menos que frecuentara este tipo de lugares.

Tyron se estaba tardando un poco, me aburría aquí arriba y se que dije qué tal vez dormiría fácilmente, pues ahora se que eso no ocurrirá. Tenía frío, encendí la calefacción y eso me calentó un poco.

Algo captó mi atención, era una pareja, los chicos se comían el uno al otro, con este frío ellos se estaban besando, pero lo consideré un tanto asqueroso ya que el chico no dejaba de meter su lengua en la boca de la chica. Era como si una maldita serpiente sacara la lengua y la introdujera en un hueco, pero eso no fue lo peor de todo, el chico era el novio de Emily.

Decidí tomar algunas fotos para comprobar que no estaba alucinando, me encargué de que su rostro se mirara con claridad, obviamente sin usar la luz trasera. Pero después por mi mente pasó una enorme duda, ¿ellos aún son pareja? Muchas cosas pueden cambiar en una semana; finalmente le envíe un mensaje a Sophie preguntándole si ellos aún eran pareja.

No recibí mensaje alguno de su parte, pero si me llamo.

—Son pareja, ¿por que preguntas? —soltó por primera vez después de yo haber aceptado la llamada.

—No se si estoy alucinando, pero miro a un chico besándose con una chica y parece ser el novio de Emily.

No mencione su nombre porque no lo recuerdo, tampoco me interesa saberlo y volverlo a escuchar.

—Déjame ver —pidió.

Eso hice, abrí la videocámara y le mostré la image de la pareja.

—¿Segura que es el? —volvió a hablar después de segundos de silencio.

—Físicamente se parece demasiado a él, tal vez podría ir y preguntarle su nombre, pero tal vez me reconozca. Le dijiste a él que se alejara de Emily, ¿verdad?

—No seas estupida, el de seguro te recuerda y respecto a la pregunta; lo olvide.

Pues yo tendría que decirle ahora mismo que se alejara de Emily.

—Mira, yo tendré que decirle que se aleje de ella —dije borde.

—Bien, dile eso, yo haría eso si estuviera frente a mi, haz que se aleje de Emily, no importa que sea mi familia, yo no soportaré a cabrones poco hombres.

Mierda, eso no lo esperaba de Sophie. Su carita de ángel y estatura la hacen parecer una muñequita, pero esta muñequita aveces parece ser una endemoniada.

Termine la llamada y baje del auto haciendo estallar la puerta del auto al cerrarla. Ellos de inmediato vieron hacia mi dirección, oh si tórtolos, se acabó el espectáculo.

—¿Jade?— murmuró sorprendido. Claro que es el, ¿Quien demonios más sería?

—La misma Jade que de hoy en adelante estará presente en tus pesadillas, hijo de perra —estire mi puño hacia su cara, haciendo que de su nariz saliera un poco de sangre —. Pensaste que nadie notaría lo qué haces pero estás demasiado equivocado.

—¿Hacer que?

¡Oh por dios! ¿Está bromeando? No debería, por lo menos con una mujer como yo enojada.

—Pensé que serias un poco más inteligente.

—Bien, se lo que hago pero eso no te da permiso para meter tus narices en donde te mencionan —¿En serio? ¿Donde queda ser amiga de Emily?

—Quiero que te alejes de Emily, y lo digo en serio. ¡A-LE-JA-TE!

Los chicos venían a nuestra dirección corriendo, de seguro piensan que lo mataré, ganas de matarlo es lo que está de sobra, solo que es un lugar muy expuesto, no podría hacer eso aquí.

—¿Que mierda pasa aquí?—preguntó Matt.

No respondí, de seguro aún no reconocía al novio de Emily, pasaba la vista de un lado a otro, mirando constantemente mi puño y la nariz del chico.

—¿Por que lo golpeaste? —volvió a preguntar.

—Por idiota —me encogí de hombros —, ya te dije muñequita, más te vale que lo hagas o haré que te saquen de la ciudad.

Lentamente pasó saliva por su garganta, ¿realmente sabría que soy de la mafia? No lo creo.

Me di la vuelta y caminé hacia mi auto, no sin antes darle un rodillazo en su estómago, eso lo dejo sin aire unos segundos.

Me puse el cinturón de seguridad mientras intenté dormir en el auto pero Matt lo evito.

—¿Que pasó allá? —preguntó al encender el auto.

—Ese maldito es novio de Emily, la chica y el se estaban besando en mis narices. Le dije que se alejara de ella y lo demás se cuenta solo.

—¿Por que no nos dijiste? — ahora preguntó Tyron.

Por lo que veo Tyron también le tomo cariño a Emily.

—Lo quiero vivo, no en piezas.

—¿Que harás? —me leyó la mente mi querido hermano mayor.

El realmente sabe cuando pienso en algo macabro, él ya sabe que tengo todo un plan para destruir a un idiota.

—Quemarlo y sacarlo del camino, no lo quiero volver a ver.

—¿Lo matarás? —Tyson estaba tan asustado que note que le tembló la voz al hablar.

—Aún no lo se, pero no lo creo. Sophie no me lo perdonaría. Después sabré que hacer con la basura.

Estoy lista para decirle a Emily lo que realmente es su novio, un idiota, un hijo de perra, una basura, muchas cosas inútiles.