-Esa acción habla muy bien de ti, mejor marido para su hija no pudo haber encontrado, bueno eso es todo, vayamos a nuestra casa, nuestra familia espera por nosotros.

-Salieron de la empresa, su padre quedó convencido con lo que dijo su hijo, pero Eduardo no estaba tan seguro de que su hermano hubiera dicho la verdad, pero por esta vez le iba a dar un voto de confianza a su hermano, reflexiono que su hermano no les había dicho la fecha en que su suegro iba a regresar el dinero.

-Mañana mismo le pregunto, ese dinero tiene que estar de vuelta cuanto antes, si es posible yo mismo le cobro al señor Pacolla.

Tanaka salió muy afligido de la empresa, ahora que iba hacer, ya no había joyas en la casa de dónde echar mano, sin duda su mujer había cambiado de lugar las alhajas que quedaban, esa noche no pudo dormir, pensando y pensando cómo hacer para sacar el dinero y para colmo de males, la substancia ya se le iba a terminar y el proveedor cada día le subía más el precio de la misma, por fin recordó algo.

-El seguro de vida, ese puede ser mi salvación, aunque para eso tenga que matar a Cecilia, son cinco millones de dólares, cinco millones, tengo que pensar muy bien cómo la voy a matar sin que las sospechas recaigan en mí.

-Así era la adición de fuerte, las personas adictas, pierden los sentimientos por los amigos, sus seres queridos, sus padres, hermanos, esposa inclusive sus hijos, sólo importan ellos y más nada.

Después de pensar muy bien las cosas eligió, envenenar a su esposa, en el laboratorio se manejaban venenos poderosos para la fabricación del perfume y otros productos que se fabricaban, el como hijo del dueño tenía acceso al área restringida donde estos se encontraban, las substancias peligrosas.

El conocía un veneno la cantarella, en la fábrica lo usaban para matar ratas y ratones, como ya es del conocimiento las ratas son muy dañinas para todas las fábricas ya que estas comen todo lo que encuentran a su paso, después de ingerido el veneno la muerte es rápida se sube tanto la presión que termina matando a la persona de un infarto.

Pero a él, no le importaba el sufrimiento de su mujer a él sólo le importaba el dinero que iba a recibir, por la muerte de su esposa, al siguiente día su hermano fue a verlo a su oficina.

- ¿Se puede?

-Pasa hermano ¿en qué te puedo servir?

-ayer a mi padre y a mí, se nos pasó preguntarte en qué fecha tu suegro va a pagar su deuda.

-Creo que máximo en tres meses

-Lo siento mucho por tu suegro, pero no podemos esperar tanto tiempo, queremos el dinero en un mes a partir de este día, si no paga el dinero en esa fecha, me voy a ver en la necesidad de cobrarle yo mismo.

-Le voy a comunicar lo que me acabas de decir.

-Te lo voy agradecer, sí el no paga en ese tiempo, tu como su aval vas a tener que reponer ese dinero de tu propio bolsillo.

-Descuida hermano en esa fecha tendrán su dinero.

-Dirás tendremos no olvides que esta empresa es familiar, ya que toda la familia vivimos gracias a la administración que tenemos.

-Así es hermano hoy mismo le digo a mi suegro que necesitamos el dinero.

-Eso espero hermano, tu sabes el dinero tiene que circular

Cuando Tanaka quedo solo, pensó

-Hoy mismo tengo que darle el veneno a Susana, los trámites para cobrar el seguro de vida, no es tan rápida, la muerte de Susana me va a dejar un margen más de tiempo, mi padre no se va a animar a reclamar su dinero a un hombre consumido por la pena de perder a su hija.

Y así lo hizo esa misma tarde, preparo el veneno, no había peligro de que su esposa sospechará nada ya que el veneno es incoloro y sin sabor, iba aprovechar esa noche ya que iban a tener invitados, él le iba dar la dosis de veneno a su esposa en una copa de vino, el veneno de cinterella mezclado con otro ingrediente, no cambian los síntomas, , simplemente sube la presión tan alta que provoca el infarto en pocas horas.

Esa noche, llegaron los invitados eran cuatro matrimonios con ellos cinco, cenaron pasaron a la sala, la velada transcurrió como todas las reuniones de amigos contando anécdotas, riendo y tomando algunos tragos, Tanaka espero cuando estaban a la mitad de la velada vertió el fatal veneno en la copa de vino de su mujer, ella dejo su copa a un lado de la de él, enseguida fue al sanitario, Tanaka platicaba cordialmente con uno de los invitados, este le estaba enseñando algo, cuando llego Susana tomo la copa de vino, enseguida él tomo su copa y dijo.

-Brindemos por esta amena velada es un gusto tenerlos en nuestra casa, ¿verdad mi amor?

-Claro que sí, siempre es un gusto.

Todos levantaron su copa y brindaron, todos bebieron su copa hasta el fondo, Tanaka no despegaba la vista de su mujer, sabía que en cualquier momento su esposa iba a sufrir el efecto del veneno, pero ella seguía tan contenta como cuando empezó la velada.

El primer matrimonio, se retiró, y Susana seguía tan fresca, sin embargo Tanaka, se empezó a sentirse acalorado, al poco rato se retiró el segundo matrimonio, sólo quedaron dos parejas con ellos, a Tanaka le empezó a latir el corazón muy fuerte, sintió que se le termino el aire y cayo sin sentido, entre los dos hombres, Ernesto y Joel lo subieron rápidamente a un coche y lo llevaron al hospital más cercano, los doctores lograron que recobrara el conocimiento, le pusieron una mascarilla para que pudiera respirar, mientras tanto Susana había avisado a sus padres estos fueron rápidamente al hospital, el doctor les dijo que podían hablar con el paciente, pero solo una persona, el primero en entrar fue su padre, con la voz pausada le contó su falta, como fue víctima de una maldita adición lo que lo llevo a cometer incalificables actos, cuando termino de contarle todo, le pidió perdón, el como buen padre lo perdono, el hijo moribundo pidió ver a su madre, esta entro al cuarto de hospital y le dio la bendición a su hijo lo abrazo y expiro en sus brazos, su madre lanzo un grito de dolor.

-HIJO MÍO, MI HIJITO NOOOOO.

Su esposa y sus hermanos al oír a su madre gritar y llorar desconsoladamente sabían que su hermano había fallecido, el diagnostico, ataque al corazón masivo, paso el sepelio Susana cobró el seguro de vida que dejo su marido por cinco millones de dólares.

Ella nunca supo de la adición de su marido, y, que gracias a que se equivocó y tomo la copa de su marido y el tomo la de ella, la muerta hubiera sido ella y no su esposo, esos son los designios de Dios.

Del desfalco que hizo a su familia, eso nada más lo supieron, él difunto, Eduardo su hermano y su padre, posteriormente mi madre, mi padre le contó toda la historia sin omitir nada y la última en saber fui yo, gracias a mi cuarto secreto.

Olivo

-Qué barbaridad, este diario sí que esta grueso, tanaka era mi antepasado pero que bueno que recibió su merecido, mira que tratar de envenenar a su esposa para seguir con su adición en vez de pedir ayuda, profesional en fin esto pasa hasta en las mejores familias.