Hello there! Acá otro capítulo jejejjee

Padme se había enterado de la llegada de Anakin. Por curioso que fuera Rex le había avisado y ella agradecía eso. Tal vez Rex entendía que ella no estaba bien después de lo que había pasado y que guardar las apariencias era cada vez más difícil.

Rex también le dijo que Ahsoka no se había acercado a Anakin y que él había salido de allí antes de ver a la joven togruta. Eso era bueno, al menos su secreto estaría a salvo un poco más. 

Padme había logrado ponerse un vestido, peinarse y maquillarse para disimular las enormes ojeras que adornaban sus ojos. Usó maquillaje para el chupetón en su clavícula y rogaba al cielo no se saliera o si no estaría perdida.

Pero lo que más le preocupaba, era cómo vería a Anakin a los ojos. Cómo vería su mirada enamorada y sería capaz de mentirle en la cara.

Ella necesitaba decir la verdad, pero no podía. Quería confesarle a Anakin que lo había traicionado, pero sabía lo que ocurriría si lo hacía. Él la dejaría y ella no podía soportar perderlo. 

Tal vez era una  política decidida, valiente y que no temía nada, sin embargo, ante esa situación catastrófica se dio cuenta que si temía algo. Temía perder al hombre que amaba. Temía ver su mirada decepcionada, temía ver su mirada cuando se enterara que lo había traicionado, y temía que él se fuera. Sabía que lo correcto era decirle la verdad. Pero ella nunca había estado preparada para algo así.

Anakin siempre había dicho que estaría a su lado por siempre, ambos habían ciegamente asumido, que si alguien daba un paso al costado en esa relación sería Padme, pero Padme nunca se había planteado el ser ella la que cometiera un error y tener que verlo a él irse de su lado.

No podía soportar eso, el solo pensarlo hacia que le doliera el estómago, que su pecho se apretara y que sus lágrimas aparecieran nuevamente.

Esperar la llegada de Anakin fue casi un martirio, tanto que terminó apagando a C-3PO para que dejara de preguntar cosas innecesarias. 

Cuando sintió el lento aterrizaje de la nave de Anakin, su corazón saltó, y las lágrimas amenazaron con caer de sus ojos, sin embargo logró contenerse, y no arruinar el maquillaje que tanto le había costado realizar para mantener las apariencias. 

Lo sintió entrar a la casa y ella se mantuvo oculta tras la pared del salón, respiro una dos y tres veces. Sabía que él podía sentir su confusión a través de la fuerza. Sabía en el minuto en que él se quedó de pie en el salón que algo andaba mal.

- ¿Ángel?- escuchó su voz y ahogó un sollozo- ¿Ángel que ocurre? Siento tristeza en ti- dijo Anakin y claro que lo sentía, muchas emociones más también ¿Tal vez ansiedad y miedo? ¿Por qué Padme tenía miedo?

- Ángel-habló Anakin nuevamente- ¿Ángel que ocurre? ¿Algo está mal?- preguntó él preocupado pero sin querer invadir su espacio personal. Nunca había sentido a Padme así, y sabía que tenía que ir con cuidado.

Padme ahogó un sollozo y corrió hacia donde él estaba saltando a sus brazos. Él la sostuvo con fuerza y la cargó haciéndola girar mientras sonreía. 

Ambos se miraron y ella lo besó. Con un anhelo que él jamás había conocido de ella. Él respondió aferrándola con fuerza de la cintura y ambos sonrieron cuando se miraron a los ojos.

Sin embargo ella al ver su mirada enamorada se sintió la peor de la traidoras. Ella le había fallado a ese hombre maravilloso que ahora la sostenía entre sus brazos.

Padme escondió su rostro en el pecho de su esposo y sin poder evitarlo comenzó a llorar amargamente. Él solo la tomó entre sus brazos y la cargó hasta el sofá más cercano. La acomodó con cuidado en su regazo y solo se dedicó  a acariciar círculos suaves en su espalda reconfortándola.

- ¿Qué sucede ángel?- preguntó él suavemente y ella negó. Él solo esperó un poco más y preguntó nuevamente- Sabes que puedes confiar en mi, siempre

- Lo sé - susurró ella sintiéndose miserable- Lo sé- dijo ella sonriendo de forma casi imperceptible. 

- ¿Qué sucede?- preguntó él nuevamente en un susurro cuando ella estuvo más calmada.

- Te amo- dijo ella apretándose contra él- No tienes idea de lo mucho que te amo

- También te amo- sonrió él, sintiéndose pleno de escuchar sus dulces palabras de amor.

- Te he extrañado demasaido- dijo ella llorando  y él sonrió con nostalgia

- ¿Es por eso que lloras?- preguntó él emocionado.

Ella sintió un nudo en el estómago con su pregunta, y asintió. Sabía que debería haber dicho la verdad, que debería haber dicho la verdad y esperar lo que fuera, pero no había tenido el valor.

No había podido romper así su corazón. ¿Cómo se lo diría? ¿Cómo le diría que lo traicionó? ¿Cómo le diría que lo engañó con uno de sus mejores amigos? ¿Cómo podía hacer eso?

- No estés triste- sonrió Anakin besando su frente- Estamos juntos ahora- dijo él sonriendo y ella se abrazó a él aún más fuerte.

No lo merecía. No merecía su cariño, su amor incondicional. No merecía a ese hombre que la abrazaba y la amaba de la forma más sincera que ella había conocido.

¿Cuánto tardaría Ahsoka en decirle la verdad? Ella necesitaba hablar con ella, necesitaba rogarle que no dijera nada. ¿Si le explicara que no tenía idea como había sucedido ella le creería? Padme no lo sabía. Lo único que sabía era que Anakin no podía enterarse de la verdad.  Ella no quería perderlo. Quería disfrutar de estar entre sus brazos, de que la sujetara con fuerza y le dijera que la amaba. Necesitaba a su esposo. No podía imaginarse estar sin él por un error que no sabía como había cometido.

- Te he extrañado- dijo ella casi en un sollozo, pero mirándolo a los ojos con una mirada que solo él podría comprender.

Cuando él se abalanzó sobre ella y la besó con pasión, ella solo pudo responder de la misma manera.

Lo necesitaba, necesitaba su amor, su cuerpo, su pasión, su locura, su amor. Ella necesitaba olvidarse de todo lo que ocurría. 

Cuando él quiso cargarla y llevarla hasta la habitación ella negó. No quería ir allí. No quería recordar que en esa cama lo había engañado. Intentó no pensar en eso, y solo pensar en sus húmedos besos sobre su piel. En sus hábiles y fuertes manos desabrochando lentamente los botones de su vestido. 

Ella lo besó y se dejó llevar por sus besos y caricias. 

- ¿Estás seguro de que aquí está bien?- preguntó él entre jadeos mientras se acomodaba sobre su cuerpo.

- Por favor Ani, hazme el amor- pidió ella rogándole que la amara. Que la hiciera suya. Que la hiciera olvidar todo lo que pasaba.

La mirada de él se oscureció de deseo y sonrió.

- No tienes idea lo mucho que te amo ángel- dijo él acariciando su rostro y entrando suavemente en ella.

Ella se perdió en las sensaciones y cuando ambos cayeron rendidos abrazados uno sobre el otro, solo pudieron sonreír.

- No tienes idea lo mucho que te había extrañado- dijo él besando su frente con adoración.

Ella se levantó suavemente para mirarlo con una sonrisa enamorada.

- Oh, lo siento por eso- dijo él y ella lo miró confundida

- ¿Por qué?- preguntó ella

- Por eso- dijo Anakin mostrando la clavícula de Padme, en el lugar que ella sabía perfectamente que había una marca pero claramente no era de él- Sé que tenemos que ser discretos, pero creo que no me di cuenta, en ya sabes, la pasión del momento- dijo él disculpándose.

Padme ahogó un sollozo y negó, intentando que él no notara que su cuerpo había comenzado a temblar.

- N-no importa- dijo ella

- ¿Qué ocurre? Cariño estás temblando- dijo él y ella negó. 

- No es nada- dijo nuevamente y antes de que él pudiera seguir preguntando se abalanzó contra él y lo beso.

- Wow, realmente me extrañaste ángel- dijo él cuando sintió como ella besaba su cuello y luego bajaba un poco más allá. 

Ella quería olvidar, quería amarlo, quería perderse en su cuerpo, y pensar que todo lo demás no había sido más que una horrible pesadilla. Pero sabía que no lo había sido.

Y también sabía que la verdad saldría a la luz tarde o temprano. Pero no sería aún.