Lucas hablando:

10 de julio del 2000.

(Hace 22 años)

Después de tantos meses fuera, estar de vuelta en casa era lo que necesitaba para recargar energías.

Era una calurosa tarde de verano, los días así me encantaban porque solo podían significar una cosa…

—¡Lucaaas! ¡No te demores más grandísimo demorón!

—¡¡Ahh ya voy Luci!! ¡¡El lago no se va a ir de ahí!! —Le grité con todas mis fuerzas.

¿Por qué siempre me quedo de último?

    Corrí entre los árboles, pasé por un estrecho camino donde tenía que quitar las ramas de los arbustos de en medio para poder caminar. Anoche llovió a cántaros, por lo que el camino estaba lodoso y resbaladizo, pero nada de eso importaba si mi destino era nuestro lugar favorito.

   Caminé unos pocos metros más, hasta que al fin llegué…

El lago Willow...

Sus aguas tranquilas eran de un hermoso color turquesa, tan cristalinas que se podían ver los peces nadando en él. A su alrededor, una exuberante vegetación con árboles frondosos y coloridas flores danzaban con la suave brisa. Y las colinas que lo rodeaban, creaban un escenario natural impresionante.

Este lugar me encanta, aquí hemos pasado toda nuestra niñez, nuestra adolescencia, y aún siendo unos adultos nos seguimos reuniendo aquí cada verano para pasar el tiempo juntos como en los viejos tiempos.

—¡¡Vamos!! ¡¡Lánzate Lucas!! —Su voz se escuchaba tan lejana por la distancia.

—¡¡Sí!! ¡¡Es muy lindo alentar a saltar de un precipicio cuando tú lo haces todos los días Ahab!! —Le grité desde la punta de la colina en la que estaba.

   Saltar, siempre era la parte complicada...

   Sí, sé nadar, pero en todo el año no me lanzo de este precipicio de al menos unos veinte metros de altura, la verdad, siempre me ha sido difícil hacerlo, no sé porqué, pero verme parado en la cima, mirando hacia abajo y viendo lo diminutos que se ven los chicos en el agua pone a trabajar a mi corazón a mil por hora.

—¡¡Salta, Lucas!! ¡¡No vamos a estar todo el día aquí amigo!! —Gritó Ian.

—¡¡Sí, para ti es muy fácil, Ian!! ¡¡Eres campeón de clavados!! —le grité.

—Jajaja —Escuché las carcajadas de los tres.

—¡Salta, salta, salta!  —Gritaron a coro.

  Y salté…

    Mi cuerpo acalorado entró en contacto con la fría agua del lago, era una sensación que  extrañaba y que me hacía sentir tan bien que una vez que saltaba lo quería hacer una y otra vez.

—¡Vaya! ¡Pensé que nos ibas a hacer esperar todo el día! —bromeó Ahab.

—Jah, jah, jah, muy gracioso Ahab —Respondí mirándolo de reojo.

—Creo que mamá y papá no debieron dejarte ir a estudiar a la ciudad, hermanito, te estás oxidado —habló Luci.

—No tanto como tú, Luci, escuché que una bruja te trae vuelto loco —Contra ataqué y él me dio un puñetazo en el hombro en forma de juego.

—Te extrañamos, Lucas —Habló Ian y me abrazó fuerte para luego hundirme bajo el agua.

   Nadamos, nos lanzamos del precipicio una y otra vez, competimos en ver quién llegaba primero a la orilla y nos pusimos al día sobre todo lo que nos había ocurrido en los últimos meses…

   Resulta ser que a mí no me había ocurrido nada interesante, en cambio, Ahab al fin se le había declarado a Helena, la chica más hermosa de la manada, Lucian había conocido una bruja muy hermosa llamada Tarah, e Ian está a punto de casarse con Genevieve, una amiga de toda la vida.

—Deberíamos volver, mañana alguien va a ser coronado Alfa —Dijo Luci sonriente y volteó a ver a Ahab.

—¿Qué pasa, Ahab? —Habló Ian al ver lo serio que se puso nuestro amigo.

—Nada… —Suspiró —Tengo miedo de no poder proteger a la manada como lo ha hecho mi padre todos estos años.

—¿No puedes estar hablando en serio? Hiciste un trato con el clan de los demonios para que se mantuvieran a raya, además, de los cuatro eres el único que se lanza de ese precipicio todos los días, y eres el único que se ha enfrentado a un Huargo solo y has vivido para contarlo y ¿Dices no poder proteger la manada? ¡No digas tonterías Ahab!  —hablé.

—Así es, amigo —Puso su mano en su hombro —Eres la persona más valiente que conozco —Agregó Luci.

—Lucian, tú sí que eres valiente, siempre dices lo que piensas y peleaste contra un clan de Blinds tú solo y no dejaste a uno solo vivo.

—Vale, vale —Interrumpió Ian —Los dos son valientes, tú serás un gran líder, Ahab, y aquí vamos a estar para apoyarte, y tú, Luci, vas a ser un gran guerrero, uno muy temido por todos, de eso no tengo dudas.

—Vamos a ser unos grandes guerreros, amigo mío —Aclaró —¿Te recuerdo la puntería que tienes con el arco y las mordidas que das cuando eres un lobo? —Dijo Luci.

—Vale, vale —Interrumpí —Si siguen así me voy a deprimir —Los tres me miraron sonrientes —No soy bueno para nada.

—Jajaja —Rieron los tres.

—Eres nuestro hermano pequeño —habló Ian.

—¡Ahh! ¡Solo por un año Ian!

—Jajaja —Volvieron a reír y me sacaron unas cuantas carcajadas porque ya los extrañaba un mundo. 

—Los quiero chicos, los quiero mucho —Hablé.

Actualidad…

—No eres valiente Luci, eres un cobarde —Me sequé las lágrimas que se asomaban en mis ojos.

   Aquí estaba, parado frente a su cuerpo pálido, frío e inerte. Odiándolo por hacer todo lo que hizo, cavando un hueco para enterrarlo porque aún así era mi hermano y no podía dejar que se lo comieran los cuervos y los animales salvajes.

—¡¡Eres un cobarde Luci!! ¡¡Te odio!! —Volví a gritar y agradecí habérmelo llevado bien profundo en el bosque donde nadie me viera llorar.

—Nunca voy a perdonarte… —Puse su cuerpo con cuidado dentro del hoyo —¡¡Asesinaste a nuestros hermanos, Luci!!  ¡¡Asesinaste a Helena! ¡Asesinaste a la madre de tu hijo! —Lloré como hacía tiempo no lo hacía —¡¡Fuiste un cobarde!! —Comencé a hechar tierra sobre su cuerpo hasta dejar solo su rostro al descubierto.

—Pero aún así, eres mi hermano.

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Hola, hola.

¿Cómo están chicos y chicas?

Sí lo sé, he alargado esta historia más de lo que hubiera pensado pero ¿Qué puedo hacer? ¡¡Es mi primera historia y estoy amando tanto escribirla como no pueden imaginarse!!

Quise poner un flashback de hace 22 años de Lucas, Lucian, Ian y Ahab, quise dejar claro los buenos amigos que eran antes de que todo se fuera a la mierda. Fue un capítulo sin acción, más bien fue algo un poco más sentimental (si no les dió sentimientos lo siento a mi sí jajaja)

  No podíamos dejar a Lucian pudrirse en el bosque. (Sorry por se tan blandita ) Alguien tenía que enterrarlo y ¿quién más que su hermano Lucas para hacer ese trabajo?

Bueno si les gustó no olviden votar y comentar :)

Los quiero ❤️