—Te estaba esperando.

Eun dijo con una voz seria al ver a Jungkook entrar por la puerta.

El ambiente pesado rápidamente inundó la habitación, Jungkook ya se imaginaba lo que había sucedido.

—Hol-

—Ven aquí.

Interrumpió al pelinegro. La chica se mostraba enojada, estaba cruzada de brazos y tenía un sobre en la mesa.

—¿Sucede algo?

Preguntó Jungkook.

—¿Que si me sucede algo?

Agarró aquel sobre en sus manos y lo abrió antes de sacar unos documentos.

—Esto me sucede.

Extendió aquellos papeles mostrando el coraje que tenía. Jungkook los recibió y al leerlos, su rostro se puso completamente pálido.

Las escrituras del departamento que tenía con Jimin.

Mierda, mierda, mierda.

—Resulta que Namjoon hizo una visita.

Eun Bi empezó a hablar mientras buscaba algo en su celular.

—No sabía que teníamos un departamento con vista al río Han.

Jungkook estaba helado.

—¿Por qué vino Namjoon?

Preguntó sin tratar de sonar nervioso.

—Se iba a mudar, y no quería que aquel importantísimo papel se le perdiera.

Habló antes de tomar aire.

—Tuviste el descaro de ponerlo a su nombre para que no me enterara de tus escapadas con tu amante.

Habló furiosa. Jungkook no sabía qué decir, estaba completamente en blanco.

Ni siquiera pudo negarlo.

Extendió su celular de una foto de él y Jimin entrando al edificio en el que se encontraba el departamento.

—No...

—¡Cállate maldito imbécil!

Gritó con enojo.

—¡No soy estúpida, yo misma los vi!

Lágrimas empezaron a caer por el rostro de la mujer y Jungkook solo pudo retroceder unos pasos.

—Hablé con los recepcionistas, y ustedes llevan más de un año viéndose...

Jungkook simplemente soltó un suspiro.

No lo iba a negar.

—¡Me engañaste con el esposo de mi amiga!

Su llanto era cada vez más fuerte, y Jungkook la miraba sin decir ni una sola palabra.

Dejaría que le diga todo lo que le tenga que decir.

—¿No dirás nada?

Jungkook relamió sus labios antes de verla.

—No se que quieres que diga.

Eun se acercó a Jungkook y lo agarró de los hombros.

—Dime que es mentira...dime que es un malentendido, que estoy mal, dime eso...

Jungkook bajó la mirada y la chica lo soltó.

—Me das asco, Jeon.

Golpeó su pecho con sus manos hechas puños.

—Te odio.

Sus lágrimas caían y ella golpeaba aquel pecho antes de simplemente alejarse de él.

—Me dan asco, ustedes, se atrevieron a vernos la cara mientras hacían quién sabe qué cosas...

Jungkook sentía sus manos temblorosas, pero no era por lo que su esposa le decía, era por lo que podría ser capaz de hacer después.

Le contaría a todos sobre ello, y eso perjudicaría a Jimin.

Él no quería eso.

—Eun, yo...

—Cállate, Jungkook, solo cállate.

La mujer tomó un poco de aire mientras se tranquilizaba y Jungkook permaneció ahí parado.

—Ustedes...¿se acostaron?

Preguntó de repente y Jungkook soltó un suspiro.

—No te lo negaré.

Eun lo miró con los ojos cristalizados, su esposo, a quien creía el mejor hombre, la había engañado de esa forma.

—Pero, Eun...

—¡Que te calles!

Cubrió su rostro por unos segundos y soltó un largo suspiro.

Estaba desesperada, se sentía estúpida, pero lo amaba, seguía amando a aquel imbécil.

—Jungkook, no diré nada.

Dijo de repente, a lo que Jungkook no pudo evitar sentirse tranquilo, Jimin no sufriría.

—Pero nos iremos, Jungkook, vamos a Estados Unidos.

Y la cara de Jungkook mostraba total sorpresa.

—Tu padre está ahí, iremos y dejaré esto en secreto.

Jungkook negó rápidamente antes de acercarse a Eun.

—No me puedo ir, Eun yo...

—Lo ignoraré...haré como si nada de eso hubiera pasado, pero nos vamos, Jungkook.

Habló, su voz se notaba débil y temblorosa, realmente Jungkook se sentía como un completo imbécil.

Era un completo imbécil.

Pero no quería irse y dejar a Jimin.

—Yo...

—Si quieres seguir conservando tu reputación y mantener el apellido Jeon en alto, más te vale que esas maletas estén listas rápido.

Las ganas de llorar se le notaban, pero ella no quería perderlo.

—Eun...

Susurró.

—Eso...está bien.

Aceptó aquella propuesta.

—Lo haré...

Jimin estaba involucrado, y no quería que todo se vaya abajo, aparte de que su nombre sería fuertemente manchado, Jimin sufriría por todo el alboroto que se podría armar.

El solo quería el bienestar de Jimin, aunque no pudiera seguir a su lado.

Al final, tal vez aquellas almas gemelas no hayan sido destinadas a estar juntas.

Pero una cosa era segura: jamás se olvidarán.

Tal vez en una próxima vida ambos tengan un reencuentro.

Tal vez en la próxima vida ellos se amen tanto como lo hacen ahora.

Tal vez en la próxima vida ellos podrían ser felices.

F I N

[...]

Saben que cuando leí el capítulo me recordó a la canción de Cristian Nodal KAJSJA, la de "No te contaron mal" creo que así se llama xd

En fin, espero les haya gustado jsjs y hayan disfrutado la lectura.

No olvides dejarme tu opinión para poder mejorar mis futuras historias y así jsjs

Bye ♡

[♤♡]