Fuerza a los afectados por el terremoto de anoche :c les deseo de todo corazón que en serio espero que no les haya ni les vaya a pasar nada u.u los amo mis amores rezaré por ustedes *3*

Capítulo dedicado a mi bro Carlo132

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ARCO 10: Vieja obsesión

Narra Amy

Aquella fantástica semana a su lado había terminado y ya era hora de volver a Northamer. Pero ya nada era igual... obviamente íbamos a irnos a vivir juntos, como una verdadera familia. Aún no sabíamos en donde vivir; si nos mudábamos a Athens significaría dejar a la mayoría de nuestros amigos y de nuestros más valiosos recuerdos. Pero si nos quedábamos aquí en Mobius, seguramente tendríamos que vivir en Yurashia ya que al casarse, Sonic se ha convertido en el rey.

Habíamos llegado por fin a Green Hill. Después de dejar las maletas en el departamento de soltero del erizo, fuimos directo a la casa de mi mejor amigo y su prometida, donde nos estarían esperando con nuestra hija. Rory muy contenta corrió a abrazarnos y Sonic la tomó en brazos dándole varios besos tronados en el cachete.

-¿No les causó molestia alguna? -Pregunto mirando a mi mejor amigo.

-No, para nada. Es una niña muy tranquila -Me responde sonriente.

-Su presencia aquí ha sido de mucha ayuda para ir practicando. -Agrega "disimuladamente" Honey.

-¿Practicando? -Pregunta Sonic con aire de confusión. Segundos después de mirar con atención el como Honey llevaba una mano hacia su vientre, capté.

-Honey, no me digas que...

-¡Sí, Amy! ¡Honey está embarazada! -Grita con entusiasmo el armadillo.

En eso, nos dimos emocionados un abrazo grupal, tal y como en los viejos tiempos. Al separarnos, nos invitaron a sentarnos en los sofás y comenzamos a platicar.

-Pero Honey, ¿No crees que fue muy temprano para que supieras? -Pregunto.

-Sí, pero...

-No sé si recuerdes que en Athens, Honey tenía unos cuantos problemas de principios de anemia -Interrumpe Mighty. -Pues hace unos cuantos días fuimos al hospital a que le hicieran una muestra de sangre para ver si le recetaban alguna dosis de hierro más elevada. Pero al parecer, nos salió una sorpresita en los estudios -dice aún sin quitar la sonrisa de su cara.

-Vaya, pues parece que últimamente las cosas van muy bien -comenta Sonic.

De repente, el móvil de Sonic suena. Él me entrega a Rory en brazos y se levanta a contestar hacia el salón donde se encuentra el comedor; no sin un "Con permiso" antes.

-Honey dice que nos casemos cuanto antes, jeje -Dice Mighty.

-¿Por qué la prisa? -Pregunto.

-¡¿No es obvia la respuesta?! ¡No quiero verme panzona el día de mi boda!

Mighty y yo reímos ante lo que dijo la ojiazul. Sonic regresa mientras cuelga la llamada. No se vuelve a sentar.

-¿Quién era, amor?

-Tenemos que irnos, Ames, mis padres están aquí en Green Hill y les urge vernos.

-¿Es grave?

-No creo, mi madre se escuchaba tranquila, pero no sé con exactitud para qué nos necesitan.

***

Llegamos al restaurante del lujoso hotel en el que se hospedaban los padres de Sonic, mis suegros (aunque no me guste mucho usar esa palabra). No sólo se encontraban ellos, también se encontraban en la mesa Manic y su prometida Daiana, así como Sonia y su novio Bartleby , el cual me lo presentaron el día de mi boda con Sonic. Según tengo entendido gracias a mi cuñada, Bartleby es un viejo novio suyo de la adolescencia, pero al parecer retomaron la relación hace unos cuantos meses. Es hijo adoptivo de la alcaldesa de la ciudad y no se lleva muy bien con sus ahora cuñados. Pero bueno, nada importa más que lo que uno siente cuando está enamorado.

La cena estaba exquisíta, todos platicábamos a gusto mientras la reina, como siempre, estaba embobada con su nieta haciéndole demasiados cariñitos, cosa que a Rory le molestaba un poco y ver sus reacciones era muy gracioso. Acerca de Barleby, ahora sé por qué no se lleva mucho con Sonic y Manic, pues es un poco pesadito en cuestión de personalidad. En eso del postre, Manic sacó aquel tema.

-¿Y dónde tienen pensado vivir? -Pregunta.

-Aún no lo hemos decidido... -Dice Sonic.

-Pues ya va siendo hora... -Comenta Sonia.

-Por eso mismo es que los hemos citado esta noche. Tu padre y yo lo teníamos todo previsto, por eso les hemos preparado una sorpresa -Dice Aleena.

-¿Una sorpresa? ¿Qué es? -Pregunta Sonic.

-Mañana lo sabrán... -Dice el rey Jules. -Sabemos que no tienen mucho aquí y de seguro están cansados. Ahora tienen que descansar para la gran sorpresa de mañana, los necesitamos temprano aquí.

***

A la mañana siguiente, Sonic y yo nos preparamos junto con Aurora para ir de nuevo hacia el hotel en el que habíamos cenado la noche anterior. La familia de Sonic (que ahora se ha convertido en mía también...) nos esperaba ya ansiosos en la entrada. Sonia se nos acercó alegre como siempre y nos vendó los ojos para subirnos a una lujosa camioneta roja perteneciente a Manic. Tras unos quince minutos, éste se detuvo y nos ayudaron a bajar para no tropezarnos.

-¿Preparados? -Preguntó Sonia.

-Sí -Respondimos a la vez.

Nos quitaron las vendas, ante nosotros había una preciosa casa... elegante pero moderna a la vez. El rey Jules le entregó unas llaves a Sonic y otras a mí.

-Mis queridos hijos, ésto es para ustedes -dijo con gran cariño.

-Esto es... demasiado -Exclamé boquiabierta.

-Nada es poco para ustedes, además estoy segura que Rory no será la única nieta que tengamos -Dijo la reina dándome un abrazo.

-Así que ya saben lo que hay que hacer -Rió Manic.

La casa era realmente bonita... un camino de adoquines llevaba desde el buzón con las iniciales de nuestros nombres hasta la entrada, a una gran puerta de madera de cerezo. La planta baja era inmensa, una cocina decorada en colores vivos con lo último en electrodomésticos, un baño pequeño, dos estudios, y un salón-comedor inmenso, totalmente amueblado a nuestro gusto, pues Sonia nos dijo que Honey y Rouge habían trabajado mucho para ello.

Abrimos una puerta que se encontraba cerca de la cocina y vemos el sótano totalmente vacío y amplio, la cerramos y volvemos para embobarnos con un hermoso cuadro en el salón principal pintado por la mismísima Cream, en donde Sonic, Rory y yo nos encontrábamos pintados. Vaya, realmente pinta bien

Unas elegantes escaleras llevaban al piso de arriba. Había un baño grande, una habitación para invitados, tres habitaciones más, un vestidor y la habitación principal. En la parte de atrás de la casa había un hermoso jardín rodeado por setos para nuestra privacidad, con una pequeña piscina. Al lado de la casa, se encontraba el garaje.

-Pensamos que necesitarían su privacidad como pareja y como familia, por lo que pensamos que era lo mejor para ustedes -Comenzó el rey.

-Sí, además, imaginamos que no les hubiese gustado estar lejos de sus amigos. Por eso decidimos que estaría bien que se quedaran en Green Hill. -Agregó la reina.

-Padre, madre, no sé cómo agradecerles que hayan hecho por nosotros todo esto. En serio, muchas gracias -Sonrió Sonic a la vez que abrazaba a sus padres.

-No tan rápido jovencito, eso no quiere decir que no tendrás obligaciones como el rey que eres. Tu padre y yo aún podemos quedarnos a cargo más tiempo en Yurashia, pero cuando se te necesite, tendrás que estar allí sin excusa ni pretexto.

-Sí, sí -Bufó. -No se preocupen por eso.
***

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Pasaron tres semanas desde que nos instalamos en la nueva casa. Le habíamos dejado a Silver y a Blaze mi casa para que dejaran de rentar departamento, pues habíamos escuchado que se la pasaban peleando porque el departamento era un tanto pequeño y el desorden que dejaba Silver en el suelo se veía más grande de lo que realmente era y eso a Blaze le estresaba. Encantados aceptaron la propuesta.

Ya había llegado el gran día, Mighty y Honey se casaban. La misa no fue tan larga como pensaba, pues el padre Vicent ha mejorado y ha hecho lo mejor para que no se haga aburrida la ceremonia. Las chicas habíamos soltado unas cuantas lagrimitas cuando se dijeron el gran Acepto. Al fin mi mejor amigo podrá ser felíz, al fin todos lo podremos ser...

La fiesta fue en un bello restaurante con decoración italiana con grandes candelabros alumbrando el lugar. Después del brindis y de una romántica sesión de vals y de música clásica, la fiesta empezó a prenderse. Bailábamos sin parar al ritmo de la música, hasta podría decirse que era como en los viejos tiempos, cuando en grupo íbamos a las discos y la pasábamos bien. Ahh, que tiempos.

-Entonces... ¿Cuando inauguramos la casa eh? -Pregunta Knuckles un tanto alegre por las copas que lleva.

-Paciencia bro, que apenas nos hemos mudado y ya quieres destruir medio jardín -Ríe Sonic.

-Oh vamos, tan siquiera una de esas cenas elegantes que hacen los adinerados.

-Ya, ya. Luego será, lo prometo. ¿O qué acaso ya han olvidado quién era el rey de las fiestas en la preparatoria?

-Hey, chicos... -En eso, llegan Cream y Tails con una sonrisa de oreja a oreja. Bajo mi mirada hacia sus manos entrelazadas. Ya sabía yo que ese tiempo juntos demás en el taller de Tails no era "sólo trabajo".

-No me digan que al fin... -Dice Rouge con un ligero brillo de emoción en sus ojos.

-Jeje, sí, Cream y yo ya somos novios.

-Sabía que terminarían juntos -Comento.

-¡Eso es todo, hermano! -Dice Knuckles levantándose y dándole un coscorrón al pequeño zorro. Bueno, ni tan pequeño, ya que a pesar de lo flaco que está, es muy alto, hasta arrebasa a Sonic ya.

Hace tanto que no la pasábamos así de bien. Hace un año pareciese que jamás volvería a vernos a todos nosotros reunidos así, como loa buenos amigos que fuimos, somos, y que siempre seremos... La celebración ya casi acababa y ya quedaban muy pocos invitados, entre ellos todos nosotros. Sin dejar de lado mis pensamientos, tomo mi copa de vino que estaba sobre la mesa en la que estábamos sentados, y le doy un largo sorbo. Repentinamente, siento como todo me da vueltas y ka vista se me nubla muy rapido... y sin aviso alguno, caigo.

-¡Amy!

***

Lo siguiente que recuerdo fue la habitación del hospital de Central City, lugar de la reciente boda... Me encontraba en una blanca y sencilla habitación en la que el ramo de rosas rojas que había en la mesilla era la única nota de color. Tenía una vía en mi brazo derecho con un líquido transparente que, seguramente, sería suero. Sonic entra en la habitación, seguido por una loba morada con una bata blanca. Se veía muy joven para ser doctora, le calculaba unos 25 años.

-Buenos días, señorita Amy. Soy la doctora Ashley y yo la he atendido, ¿Cómo se encuentra? -Pregunta mientras Sonic se sienta a mi lado y me besa la frente.

-Cansada...

-Bueno... pues ahora mucho descanso y nada de estrés... -Dice la loba.

-No lo entiendo, Ames. Estabas bastante bien...

-Créeme que yo tampoco sé qué fue lo que ocurrió.

-Quería hablar con los dos y, puesto que no lo saben, darles las noticias.

-¿Qué noticias? -Pregunta el ojiverde, extrañado.

-He hecho unas pruebas de sangre rutinarias, y han revelado algo muy interesante. Les doy mis más sinceras felicitaciones -Dice con una sonrisa.

Los ojos del erizo azul se abrieron como platos al escuchar aquello, después buscaron los míos. La sonrisa en mi cara confirmó lo que la doctora decía... El grito de alegría de Sonic asustó a nuestros amigos, que estaban fuera, y entran todos de golpe.

-¿Qué pasa, Sonic? -Pregunta Tails desconcertado.

-¿Amy está bien? -Pregunta Cream.

-¿Están todos bien? -Pregunta Mighty entrando con su esposa.

-Sí, estamos bien, perfectamente -Digo sonriente.

-Estamos mejor que bien -Dice Sonic felíz de la vida.

-¿Van a contarnos de una vez qué es lo que pasa? -Grita Rouge.

-¡Amy está embarazadaaaaaa! -Grita Sonic emocionado.

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Al siguiente día, la amigable doctora Ashley, me dio de alta, no sin antes darme algunas medidas y esas cosas. Más felíz no podíamos estar, pero Sonic irradiaba alegría con tan sólo entrar a alguna habitación. Pues se preparaba para volver a ser padre, pero ésta vez, como tenía que ser...

Pasaron dos meses de aquella maravillosa noticia. Esa tarde, Tails le pidió ayuda al erizo en su taller, y, aunque éste último no quisiera mucho, lo tuve que convencer de que fuera, yo estaría bien. Rory quiso ir con él, así que se la llevó. Estaba un poco aburrida en casa, y aunque Sonic me dijo que no le gustaba que saliera sola, decidí tan sólo pasearme por la misma calle en donde vivíamos. Quería un momento de soledad conmigo misma y mi futuro pequeño o pequeña. Aún no se me notaba mucho el embarazo, pero si mirabas detenidamente, apenas se podía presenciar una pequeña pansita.

Fue el peor error...

Salir esa tarde sola, fue el peor error.

Esa desafortunada tarde al que llamo... El día del Volvo negro...

Su recuerdo me causó miedo... No creí que lo volvería a ver, creía que si algún día me lo volvería a encontrar, ya no me recordaría o de perdido, ya habría encontrado a alguien más... La cara de piscópata al decir aquéllas palabras me hicieron recorrer por todo mi cuerpo un escalofrío tremendo...

-¿Pero por qué me rechazas? ¿Es que acaso no recuerdas la promesa que te hice la última vez que nos vimos... bomboncito?

Nikki...

[Leer capítulo 27-28 del antiguo libro para recordar]

Por cierto, siento la tardanza xD pero mejor tarde que nunca :3

El título es porque no encontré otro mejor xD se refiere a que después de tantas buenas noticias, llega algo que echa a perder todo :v lol

Ya saben como me gusta el salseo y hacerlos sufrir con amorts *3*