- Te extraño tanto...

Susurró Jimin al ver la foto de su abuela colgada en el gran cuarto con tonos amarillo y naranja pastel. Después de salir del cuarto en el cual se estaba quedando con Jungkook, Jimin tuvo la fuerza de por fin visitar el cuarto de su abuela. Cuando la mayor falleció, la familia Park decidió cremar el cuerpo, por lo cuál ahora las cenizas estaban en un frasco muy elegante con la foto y nombre de Madam Min-ho. El castaño lamentablemente, no se había atrevido a entrar a ese cuarto hasta ese momento ya que, sabía que podía llorar y desbordarse si lo hacía, por suerte ahora se sentía más calmado y con la valentía de afrontar la situación. Abuela Min-ho había fallecido y a pesar de que él no pueda hacer nada para revertir esa situación si podía honrar su falta recordándola con una sonrisa.

- Te traje tus favoritas - Jimin sacó de su espalda unos girasoles envueltos en un ramo y las puso al lado de su foto.

- Te encantaban, decías que tenían la fuerza de darte nuevas ideas y hacer mejores creaciones. - Jimin vió fijamente todo el cuarto analizando cada pequeño detalle y recordando cada hermoso momento que vivió ahí.

- Estoy estudiando en Agnés Dubois y si me esfuerzo lo suficiente podré ir a la academia de París justo como tú. Además conocí personas increíbles que me quieren tal como soy y me ayudan a mejorar mis habilidades - El castaño sonrió con orgullo y sacó una pequeña lágrima que amenzaba con salir de sus ojos- Y hasta creo que me estoy enamorando... -

Jimin miró directamente a la foto nuevamente y se acercó para darle un beso.

- Lo siento por no venir antes, vendré a visitarte para tu cumpleaños abuela, te amo y desde ahora prometo poner en práctica todas las cosas que me enseñaste, cumplir mi sueño y sobre todo... Ser feliz.

La mente y consciencia de Jimin quedaron tranquilas al salir de ese cuarto. Se sentía completo de nuevo y con el valor de hacer las cosas que tanto amaba con coraje y con un bello recuerdo en mente.

- Jimin, te estaba esperando. Vamos a cenar, ya están todos en la mesa.

Sin darse cuenta, ya había pasado bastante tiempo mientras recogía las flores e iba a el cuarto de su abuela. De repente ya eran las 8 de la noche y era hora de cenar.

- Preparamos postres deliciosos con tu tío, sabe mucho de pastelería nos dió algunas lecciones - Jimin sonrió al escuchar lo que decía Yoongi y siguió caminando hacia la mesa donde todos se encontraban hablando mientras los chicos y el tío terminaban de servir.

La mesa estaba decorada con un pavo al centro con salsa de champiñones y en otra mesita más chiquita habían muchos tipos de postres diferentes que los chicos habían preparado en la tarde.

- Se ve delicioso - Todos voltearon a ver a Jimin a la vez, acción que lo hizo soltar una pequeña risita mientras se sentaba en una de las sillas. Los chicos estaban con sus delantales perfectamente puestos y totalmente pulcros. La mamá, el papá y la hermana de Jimin, por otra parte estaban ya sentados observando atentamente cada acción de los otros chicos.

- Todos excelentes, me trajiste unos perfectos ayudantes Jimin - dijo el tío mientras sonría un poco. El mencionado solo fue rápido a abrazarlo, ya que era la primera vez que lo veía desde que había llegado por la mañana.

El tío Kan, era el hijo mayor de la abuela Min-ho, hermano mayor de su madre. Siempre había sido su tío favorito ya que, al ir a visitar siempre la tienda de su abuela lo veía constantemente. Él ayudaba a Madam Min-ho a preparar las creaciones y aunque su estilo fuera bastante diferente complementaba a la perfección con el de la mayor. Era un señor de mediana edad con unas cuantas canasy una sensación de calidez que hacía que Jimin se sienta en paz.

- Excelentes y guapos - agregó la mamá de Jimin riéndose por lo bajo con Lisa mientras el papá negaba con la cabeza viéndolas.

- Hay que comer, se me está haciendo agua la boca

Después de lo dicho por su padre todos empezaron a probar las creaciones, todo estaba delicioso nadie podría negar que esos chicos eran expertos preparando postres. Los sabores eran intensos, pero se sentían tan bien fusionados que era una verdadera fiesta de sabores que contaba una propia historia.

- Tu postre está delicioso Jeon - dijo Jimin tratando de parecer frío tal y como era Jungkook al hablar de los postres de Jimin, pero no le salió por por lo rico que estaba. "Brownies de chocolate con crema de avellanas y pecanas."

- Sé que te encanta Jimin no lo niegues - El pelinegro levantó una ceja divertido y le dió un pequeño golpe con su hombro a Jimin haciendo que el otro ría mientras rodaba los ojos.

Sin darse cuenta todos se habían quedado viendo la escena entre los dos chicos. Jimin solo bajó su mirada para seguir comiendo y Jungkook lo siguió haciendo lo mismo. A los padres de Jimin les sorprendía que tan de repente el castaño se viera tan cercano con una persona. Él siempre había sido muy social y extrovertido, pero aunque se juntara con mucha gente siempre se había negado a traer a personas a su casa. Por otro lado, sus amigos trataban de no reirse por lo tímidos que se veían los dos chicos de repente.

- Bueno chicos, gracias por su ayuda con los postres para la tienda. Nosotros nos encargaremos de limpiar esto, ustedes pueden ir a divertirse.

El tío de Jimin se acercó a él después de dar esas palabras y susurró en su oido.

-Hay algunas latas de cerveza en la alacena trasera.

Jimin río por lo bajo mientras veía a sus amigos de reojo que parecían curiosos por lo que dijo su tío, pero no sé alcanzó a escuchar.

- Gracias por la comida. Vámonos vengan por acá

Los chicos agradecieron como es debido y luego de eso siguieron a Jimin mientras lo veían curioso.

- ¿A dónde vamos Park? - preguntó Yoongi pasando un brazo por el hombro del castaño amistosamente.

- Hay cervezas en la alacena trasera ¿Quieren?

Tae levantó la ceja divertido ante tal declaración y Hoseok rodó los ojos al ver a Kim.

- Todo bien si Tae no toma mucho, porque luego se pone más pesado que nadie.

Todos los chicos presentes tenían 17 años excepto Jimin que tenía apenas 16, pero a esa edad ya habían empezado a tomar moderadamente.

. . .

- Entonces, ¿Cómo fue tu primer beso Jeon? Escupelo

Tae río mientras se echaba totalmente en el pasto y veía a sus demás amigos. Los 5 chicos estaban en el gran patio con unas cuantas cervezas y música bastante fuerte. Cómo Hoseok había dicho Tae se puso demasiado directo cuando empezó a tomar y lo tenía que estar controlando a cada rato, a pesar de estar tomando también.

Min Yoongi, era el mayor así que trataba de moderarse para cuidar a los demás que según él eran "niños que necesitan cuidados".

Jungkook y Jimin por último se habían puesto melosos y Park en especial se portaba como un bebé con Jeon y el último no hacía más que consentirlo lo más que podía.

- ¡No quiero hablar del primer beso de Jungkook! - refutó Jimin haciendo un pequeño puchero mientras hacía un puño en la camisa del pelinegro.

Los 5 chicos se reían por la repentina actitud del castaño que probablemente le avergonzaría el día siguiente, pero como todos habían tomado era lo de menor importancia.

- Lo tiene que decir - refutó Tae y extrañamente Hoseok lo apoyó.

- Dilo Jeon, todos queremos saberlo

Jungkook por último río y dejó un beso en la mejilla de Jimin antes de empezar a hablar.

- Sook-he en la fiesta de bienvenida en 2do año

Las voces de sorpresa resonaron en todo el gran patio mientras los chicos reían por la gran revelación. Sook-he era la chica más popular de 4to año.

-Todo un galanaso - se burló Hoseok y Jimin solo gruñó apretando el brazo de Jungkook con clara molestia. El castaño quería ser consentido y justo ahora, las declaraciones no le habían sentado nada bien.

- Ya basta están alcoholizados malditos mocosos, todos a sus cuartos ahora - Al escuchar la voz seria de Yoongi, los muchachos se pararon sin refutar mucho y empezaron a recoger las latas de cerveza. Ya eran las 2 de la mañana y no valía la pena seguir ahí por mucho más tiempo para evitar conflictos.

- J-jungkookie.. llévame.. - la voz de Jimin era suave y sus mejillas totalmente sonrojadas. Jungkook definitivamente no podía negarse a las peticiones de ese precioso castaño.

- Sube querido... - Jimin sin pensarlo dos veces subió a la gran espalda de Jungkook y rodeó su cuello con sus dos brazos.

- J-jungkookie..- El pelinegro se sorprendió al sentir los susurros de Jimin en su cuello y solo se removió mientras entraba a la gran casa tratando de no hacer mucho ruido.

- ¿Qué pasa Park? No quieras aprovecharte solo por haberte tomado un par de latas de cerveza - Jungkook sonrió divertido pasando por los largos pasillos e identificando al instante el cuarto en el cual se estaban quedando.

Apenas llegaron, Jungkook puso a Jimin en su cama y cuando estaba apunto de irse a la suya el castaño lo jaló para evitarlo. Park lo miraba de manera descarada y mordía su labio mientras lo hacía, era obvio lo que quería, pero Jeon no sé lo daría tan fácil, especialmente porque él también estaba tomado y no quería sobrepasarse con el chico con el que prometió "ir lento".

- J-jungkookie.. ven conmigo.. aquí en la cama - Jungkook obedeció al escuchar la voz temblorosa pero a la vez necesitada de Jimin y apenas lo tuvo cerca lo apretó en sus brazos.

Lo que no había previsto es que Jimin juguetonamente se treparia encima de él sentandose ahí con las piernas abiertas al costado de las de Jungkook.

Sin perder más tiempo, Jimin empezó a besar al pelinegro de manera pasional. Sus labios se movían suavemente pero de manera exigente haciendo que Jungkook suelte algunos jadeos roncos.

- Solo tienes permitido besarme a mi - gruñó Jimin en medio del beso mientras acariciaba lentamente el pecho de Jungkook haciendo que el otro soltara una risita por lo dicho.

El pelinegro empezó a acariciar la cintura de Jimin que tanto le gustaba y a darle pequeños apretones suaves y firmes. El castaño solo seguía besando a Jungkook mientras aumentaba la intensidad deseando que es momento no acabará. Los dos chicos compenetraban tan bien y había tanta química que hasta ellos mismos se sorprendían. El más alto bajó lentamente sus manos a la espalda baja de Jimin mientras empezaba a dejar besos cortos y húmedos en su cuello.

- ¿Puedo? - Murmuró Jungkook intentando sacarle el polo a Jimin y dejando uno que otro chupetón en su hombro. - ¿Lindura? - Y antes de que Jeon pudiera completar su labor de sacarle la prenda se percató de que el más bajo se había quedado dormido en esa posición.

Jeon negó con la cabeza divertido y lo bajó de su encima con delicadeza para ponerlo a su lado mirándolo.

- Me besas y luego te duermes - Susurró el pelinegro al mismo tiempo que rodeaba sus manos en la cintura del más bajo para verlo mejor. Sus labios hinchados y sus ojos cerrados, era la mejor imagen que Jungkook podría haber visto antes de dormir. El chico más precioso que había visto jamás.

- Te quiero...

. . .

Un Jimin muy adormilado se estiró un poco hasta que sintió sus manos chocar con un cuerpo adelante suyo.

- ¿Q-qué? - Susurró confundido y cuando levantó el rostro recordó todo. Ayer estaba besandose con Jungkook en la cama y.. y..

De pronto no se acordaba nada más. Jeon estaba abrazándolo de la cintura posesiva mente y Jimin en su pecho empezó a moverse aún tratando de recordar. ¿Qué mierda había pasado ayer?

- Ya despertaste... - Una voz ronca muy cerca de su oreja alertó a Jimin. Jungkook acababa de despertar al sentir como se removía el castaño en sus brazos. Lo miró fijamente disfrutando cada pequeño expresión del mayor, completamente confundida. Era definitivamente exquisito estar asi y aún más cuando era la primera vez que dormían juntos.

- ¿No te acuerdas acaso lo que pasó ayer? ¿No duele.. abajo? - Preguntó Jungkook divertido tratando de confundir a Jimin y bajando un poco su mano de su cintura a su espalda baja dejando leves apretones.

- ¿De que hablas Jeon? - Park abrió grande los ojos, pero aunque tratara de asimilarlo no sentía ningún dolor. Lamentablemente o afortunadamente todo indicaba que entre ellos dos había pasado algo más que besos esa noche, pero Jimin no lo recordaba.

Jungkook lo vió expectante con ojos profundamente negros, mientras pasaba una de sus manos hasta sus nalgas dejando un ligero apretón.

- ¡Ah! ¿Qué haces J-jungkook? - de pronto el pelinegro empezó a reír y se sentó en la cama alejándose un poco de Jimin.

- ¿No lo recuerdas? Ayer estabas tomado y cuando viniste nos empezamos a besar, pero te quedaste dormido. - Agregó Jungkook mientras veía la cara de Jimin suavizarse - No hice nada... Tranquilo, además ¿Sería tan malo?

Jimin negó rápidamente con la cabeza y se paró de la cama dándose cuenta que solo estaba con un gran polo y las piernas completamente desnudas dándole una gran vista a Jeon.

- No es eso. Solo que... si pasara algo, quisiera recordarlo. En serio me asustaste.

Jimin nerviosamente agarró su pantalón ancho y se dirigió al baño a cambiarse, dejando a un Jungkook fascinado por lo que había visto babeando en la cama.

. . .

- ¿Ya están? - Después de arreglarse, los chicos fueron a desayunar. Eran las 10 de la mañana, ya que habían madrugado el día anterior, no pudieron levantarse muy temprano.

Para sorpresa de todos Jimin estaba más tímido que nunca con Jeon y ya no se veían tan cercanos como el día anterior. Esa era una de las cosas que más le preocupaba a Jungkook, cada vez que pasaba algo con Jimin o daban un paso más el chico se ponía tímido y parecía no querer haberlo hecho, probablemente sería algo que hablar en un futuro, pero por el momento decidió darle su espacio.

- Gracias por venir Jimin, espero que me visites más seguido. La casa se siente vacía ahora que abuela Min-ho no está y tú no vienes con tanta frecuencia.

El chico le dió un gran abrazo a su tío mientras los otros 4 chicos se despedían y Tae coqueteaba con la hermana de Jimin en una esquina, por suerte Park estaba concentrado en su tío.

- Ten.. ella te lo iba a dar cuando crezcas un poco más, pero creo que te va a servir más ahora. - Jimin vió sorprendido a su tío cuando le entregó una pequeña libreta amarillo pastel que decía "Min-ho" en una esquina. - Es su recetario, nunca lo abrí porque no encontré la llave y no quise romperlo. Si tú la encuentras o incluso quieres tenerlo como recuerdo estoy bien con eso, sé que para tí la abuela era muy especial.

El castaño se lanzó a los brazos de su tío una vez más apunto de llorar, pero mantuvo todas sus emociones y solo esbozó una pequeña sonrisa emotiva.

- Gracias.. Enserio por todo - Susurró el más bajo con voz temblorosa y el mayor asintió con una sonrisa

- Ahora váyanse antes de que se haga más tarde. Gracias por venir chicos.

Los 5 chicos agradecieron y se despidieron como es debido. Tae empezó a pelear con Jimin en el camino de vuelta ya que, al parecer de pronto se hizo súper cercano a Lisa, pero los chicos estaban tan confundidos a su manera que al final se quedaron callados absortos en sus propios pensamientos.

- ¿Están bien? - preguntó Yoongi confundido por el repentino silencio. Generalmente todos siempre estaban o peleando por algo o diciendo algo completamente innecesario.

- Si.. - respondieron todos en unísono y Jungkook aprovechó para abrazar a Jimin con una de sus manos y acercarlo a su cuerpo.

El pelinegro, a pesar de no tener mucha paciencia y muchas veces ser considerado frío nunca se cansaría de intentarlo si era con Jimin. Aunque se avergüence, le de pena, retroceda y vuelva a avanzar Jungkook empezaba a anhelar cada parte de Jimin y para ello tendría que cuidar y conquistar cada una de ellas.

- ¿Estás bien? - Susurró en la oreja del castaño dejando un pequeño besito.

- S-si - Jimin asintió y se echó en el pecho de Jeon tratando de ignorar los latidos de su corazón.

- Está bien entonces..

Los dos chicos se quedaron así un momento más hasta que por fin llegaron a su destino y volvieron a ser distantes, pero cercanos como siempre. Sintiendo sus corazones a su manera y por primera vez más unidos que nunca.

. . .

A veces retroceder a recordar personas o momentos en tu vida no te "retrasa", por el contrario te hace avanzar ahora con más fuerza y anhelo. No le teman a intentarlo, porque cuando lo logren van a agradecer haber probado un camino diferente 🌻.

Atte: Sullivan ❤️