(Narrador Omnisciente)

Un Jungkook de 16 años daba vueltas de un lado a otro mientras buscaba su celular, que estaba casi seguro lo dejo sobre su cama.

Bajo casi corriendo las gradas, viendo a su hermano Soobin de 10 años hacer su tarea muy entretenido en la sala.

- ¡Papá! - Grito asustando a su hermano por el repentino grito.

- No grites Kookie, Papi está en el jardín - Le dijo su hermanito.

- Gracias enano - Claro que Soobin parecía que sería un chico alto, pero por el momento Jungkook lo era.

Jungkook salió al jardín y pudo ver a su padre con su teléfono en mano mientras fruncía el ceño y un Jimin riendo divertido por la situación.

- ¡Ya!, ¡Papá!, ¿Por qué tienes mi teléfono? - Preguntó un furioso Kook.

- ¿Por qué tienes contando con Kim Yugyeom?, ¿Desde cuándo hablas con él?, Y lo más importante Min Jungkook, ¿Desde cuándo mi conejito es novio de ese animal?

Los celos de Yoongi eran evidentes, él quería seguir creyendo que sus bebés eran eso, unos bebés, que no podrían salir con nadie, incluso creyó que Jungkook tendría algo con Lany, pero resultó que ambos le iban al bando contrario, Lany las chicas y Jungkook los chicos, algo que es más que obvio, no molesto a los padres de ambos.

Pero si algo no toleraba Yoongi es que sus hijos le ocultaran cosas, tampoco les exigiría que le contarán hasta cuándo van al baño, pero eso era importante, sobre todo porque al parecer Jungkook tenía un año de relación con aquel chico que le hizo la vida imposible de niño.

- Responde Jungkook, te estoy haciendo una pregunta.

- No tengo porque responderla y tú no eres nadie para meterte en mis cosas, no fastidies Min - Fue la respuesta de Jungkook quien estaba a punto de darse la vuelta si no fuera por el llamado de Jimin.

- Detente ahí mosoco engreído y mal educado - La voz de Jimin sonó severa y Jungkook supo que había metido la pata, pues Jimin casi nunca se molestaba con él - Ven aquí ahora mismo - Exigió el nuevamente rubio.

Jungkook no tuvo de otra que darse media vuelta y entonces supo que si había cometido un error al ver la mirada gacha de Yoongi y claro que notó esa lágrima rodar de sus ojitos, se sintió mal, culpable y sabía que lo era.

- Pídele disculpas a tu padre - Ordenó Jimin, con su semblante serio.

- Lo siento papá, no quise decirte eso, es que... Tenía miedo de sus reacciones, se que Gyumie no es bienvenido en esta casa y no lo quieren, pero...

- Jamás nadie le ha prohibido la entrada a ese chico en esta casa Kook - Dijo Jimin - Tú nos lo has ocultado por un año o quizá más hijo, ¿Qué hicimos para que desconfiaras de nosotros? - Preguntó Jimin.

Jungkook pensó y pensó durante largos segundos y no tuvo respuesta alguna, pues sus padres nunca le dieron motivos para dudar de ellos o desconfiar. Fue el mismo quien los hizo dudar e investigar por si mismos.

Entonces se acercó a Yoongi y se arrodilló frente a él, para después abrazarlo y pedirle disculpas.

- Lo siento papá - Susurró. Yoongi lo abrazó fuertemente, sin querer soltar a su bebé.

- No quiero que crezcas conejito, quédate chiquito, como cuando eras niño y yo tenía que  protegerte, que era a mi a quien pedías ayudarte con tus tareas o si alguien te gustaba me lo decías siempre, quiero a mi conejito, aquel pequeño que llegaba a casa y se lanzaba a mis brazos para ser cargado y llenado de besitos, ¿Es mucho pedir tu confianza al menos bebé?

Yoongi extrañaba a su pequeño, desde hacía un par de años, dejó de contarle sus secretos, dejó de buscarlo para dormir con ellos por alguna pesadilla, dejó de abrazarlo y pedir mimos cuando llegaba a casa, Jungkook había crecido, estaba madurando y es lo que más lastimaba a Yoongi, comprender que su conejito, ya no es un niño.

- Siempre seré tu bebé papá, siempre seré tu conejito y te contaré todo como antes, necesito un experto en el amor como tú, que me cuente cómo conquistó a papi, que me enseñe sobre la vida, perdóname por alejarme de ti, no volverá a suceder - Respondió el menor.

Jimin los observaba con una hermosa sonrisa en su rostro, sabía que aquellas palabras las necesitaban ambos, pues Jungkook se había alejado de Yoongi, más no de él.

Jimin sabía sobre la exigencia de Yugyeom, sabía que su hijo tenía una relación con aquel chico, pero él se había enterado hacía dos semanas y fue sin querer cuando fue a recoger a sus hijos a la academia y vio a Jungkook despedirte de Yugyeom con un beso en los labios.

El rubio tuvo que guardarse aquella escena, pues no le molestó, pero si le dolió que Jungkook no tuviera la confianza de deciles nada sobre su novio.

- ¿Aún así... Me dejan estar con él? - Rogó Jungkook, con sus ojitos de Bambi.

Jimin y Yoongi se voltearon a ver, el rubio sonrió y el mayor comprendió que no podría jamas negarle nada a su hijo, estaba grande y debía cometer errores para seguir adelante, que debía experimentar el amor, para saber cuáles es el correcto, que debía tropezar un par de veces para seguir y comprender la vida.

- Traelo a casa, que venga a cenar y después hablamos - Dijo Yoongi.

Para Jungkook eso fue más que suficiente, sabía que para Yoongi era más fácil el aceptar a su novio, pues no lo veía como un buen partido, sobre todo después de todo lo que sucedió cuando era un niño. Pero sabía que Jimin lo apoyaría y lo ayudaría con su papá, quien a regañadientes tuvo que aceptar.

- Lo llamaré ahora y que venga pronto - Dijo un entusiasmado Jungkook. Corrió hasta su habitación, dejando a sus padres sin palabras.

- ¿Kookie ya les dijo sobre Yugyeom? - Dijo el pequeño Soobin, llegando hasta sus padres.

- ¿Tú ya sabías mocoso? - Indago Yoongi.

Soobin se rió y asintió, se fue esta donde estaba su papá Gigi y se sentó sobre sus piernas, mientras dejaba sus peicitos sobre los muslos de su papi Minnie.

El pequeño Soobin era muy confianzudo, igual que Yoongi también, los dos pequeños Min, habían salido a Yoongi, aunque físicamente Soobin se parecia más a Jimin.

- Soobinie, te prohibo tener novia o novio cuando crezcas, ¿Entendido? - Sentenció Yoongi.

- Ni siquiera quería - Respondió el menor.

Jimin río y supo que Soobin sería menos dolores de cabeza para ellos. Desde que nació, no dio problemas nunca, siempre ha sido un niño tranquilo y amoroso con sus padres, Jungkook también, pero ahora está creciendo y era entendible su actitud.

Jungkook llegó nuevamente hasta sus padres y tomo asiento frente a ellos, viendo a su hermano casi acostado sobre las piernas de sus padres, mientras estos lo veían casi escaneandolo de arriba abajo.

- ¿Aún eres virgen Kook? - Preguntó Jimin, así de la nada.

- ¡Papá!

- ¡Jimin!

Gritaron Jungkook y Yoongi, el nombrado río bajo y se encogió de hombros, solo quería saber y no es como si su hijo menor no supiera sobre el tema, si es muy preguntón.

- ¿Qué?, Sólo quiero saber, has estado más de un año con ese chico y las ganas no siempre se aguantan - Yoongi rodó los ojos y tomo la mano de su esposo, mientras elevaba sus piernas y las dejaba sobre Jungkook.

Eran un enredo entre ellos, pero les gustaba hacer eso, estar uno encima del otro, decir puras tonterías y tener esos momentos familiares muy seguido.

- Ya, responde conejo - Dijo Soobin, siendo apoyado por Jimin y Yoongi.

- Dime qué al menos te has protegido Kook, por qué no quiero se abuelo tan joven, tu sigues siendo un niño - Dijo Yoongi, ya resignado a la respuesta de su hijo mayor.

- Dejen el dramático a un lado, ¿Quieren? - Respondió Kook, mientras se recostaba en el asiento y subía sus piernas sobre las de Jimin.

Este último rodó los ojos y solo vio como sus amores hacían siempre lo mismo, era como copia y pegue en ellos, tan idénticos que no se dudaría jamás que son hijos de Min Yoongi.

- Pero responde Kookie, dime, ¿Cuántas veces lo han...?

- ¡Papá!

- ¡Jimin!

Recriminaron una vez más, Jimin río y guardo silencio, esperando respuesta de su hijo.

- Dejen ese interrogatorio...

- Si no respondes tú, sabes que le preguntaremos a Yugyeom, así que tú elijes - Dijo Jimin. Jungkook soltó un sonoro suspiró y decidió hablar.

- Soy virgen, ¿Satisfechos?, No hemos pasado de besos y abrazos, nada más - Dijo con seguridad el menor.

- Eso me alivia - Se escuchó a Yoongi - Pero ten cuidado conejito, de besitos y abrazos no nacen los niños, además tú sigues...

- Siendo un bebé, ya lo se papá, tú eres más dramático que cuando papi Minnie encuentra zapatos en el paso - Jimin hizo un sonido indignado, pero le dio la razón a su hijo.

- De cumpleaños te daré una caja de condones y tú papá un bote de lubrinate, porque digo, el doncel eres tú, el que cargará bebés serás tú y ya sabes, antojos y todo eso, aún no cariño, espera tantito y...

- Me sorprende la cantidad de boberías que puedes llegar a decir mi amor - Dijo un perplejo Yoongi, escuchando la risa de Jungkook y Soobin.

- Ay ya,~ es cierto, nosotros la primera vez no usamos y mira, ahí está el mocoso, ahora anda de novio y no quiero que le pase lo mismo - Se encogió de hombros el rubio.

- Ustedes de verdad nacieron uno para el otro - Afirmó Jungkook, viendo a sus padres discutir de un tema tan delicado pero que ellos lo decían como si nada.

Jungkook pensó que eso era un ejemplo de la confianza tan reforzada que existe entre ellos. Los años de conocerse eran Increíbles para Jungkook, quien a la edad de 14 años se enteró todo lo que sus padres vivieron, supo a más profundidad todo lo que tuvieron que pasar para poder estar juntos, era increíble que desde que tenían cerca de 10 años, ellos se conozcan, tengan una historia que contar.

Miles de anécdotas, tanto buenas como malas, sus padres eran su ejemplo a seguir, los ama más que a nadie, ellos son su motor, para Jungkook la música es su vida y agradece haber heredado el gusto por ella, tal y como sus padres la poseían.

Aunque Jimin nunca logró su sueño, siempre se aseguraba que sus hijos si lo cumplieran, que hicieran lo que más aman. Pues después de haber terminado su rehabilitación, no pudo bailar como antes, así que se dedicó abrir su propia academia de baile, con ayuda de su esposo claro, era una de las más reconocidas de la ciudad y vaya que admiraba las habilidades de Jimin.

Aunque por las noches debía colocarse hielo, tener masajes por su esposo o hijos, Jimin era feliz con enseñar a más chicos lo que él tanto amaba, el baile.

Jungkook veía a sus padres reír, tomarse de las manos, besarse cariñosamente, notaba ese brillo el los ojos de ambos, que aún existía después de años y años de conocerse y estar juntos.

Jungkook, quería ser como sus padres.

Para él, no hay amor más puro, sincero y lleno de confianza como la de ellos, sin perjuicios, sin más errores, sin miedo, todo era amor real entre ellos.

Después de todo, él es fruto de aquel amor, que existió y existe cuando solo era dos chicos peleando por un primer lugar.

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¡Aquí termina Second Place!

¿Qué les pareció este epilogo?

En verdad esperó que les haya gustado, en esta obra no existieron conexiones con otras así que quise dejar a un Jimin parecido con el de El Omega de la mafia.

Si alguien lo noto, diga yo🤭

Iba a dejar más dramático el capítulo, pero decidí dejarlo más tierno, cursi y divertido, pues ya es el final y solo quería alegría y felicidad para la pequeña familia Min🥰

Una vez más, gracias por su apoyo a Second placer, denle amor a esta obra y espero seguirlos leyendo en las 2 que quedan por teminar y espero que también pronto en una nueva^^

Si llegaste hasta aquí y te gustó mucho esta obra, deja tu corazón 💜 y sabré que amaste está obra tanto como yo.

¡Nos leemos pronto amigos!

Bye💜

No olviden dejar su estrellita si les gusto second place ⭐