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Maratón (1/3)
(Narrador Omnisciente)
Jimin no sintió el momento en que tomó a su pequeño en brazos y corrió hasta dentro de la cocina para esconderse del hombre fuera de la cafetería.
Sentía su corazón bombear a mil por segundo, su respiración acelerada y con los nervios apoderándose completamente de él.
Jungkook lo veía con curiosidad y confundido por lo que su papi había hecho, no le gustaba ver la carita de preocupación que tenía su papá, así que colocó sus manitas sobre el rostro del mayor y empezó acariciar suavemente, atrayendo la atención de este mismo.
— ¿Estás bien papi? — Preguntó el menor a su padre. Jimin trató de tranquilizarse y no asustar más a su pequeño, le sonrió y acarició su cabello.
— Si mi amor, estoy bien no te preocupes — Trató de sonar calmado hacía su pequeño.
— ¿Por qué nos escondemos papi? ¿De tío Jinnie? — La inocencia del menor era algo que alegraba a Jimin en cierta manera, aunque su curiosidad siempre lo atemorizaban, pues no quería que llegará el día en que pregunté por su otro padre.
— Si bebé, no estamos ocupando de tío Jinnie, para... — Al mayor no le gustaba mentirle a su pequeño, pero sabía que en esa ocasión era más que necesario.
— ¿Para qué te deje descansar? ¿Estás cansadito papi?
— Un poco bebé, pero pronto se me pasará — Sonrió Jimin hacia el pequeño Kook.
En ese instante la puerta de la habitación que era exclusiva para los descansos y los juguetes de Jungkook, se abrió, dejando ver a un curioso y confundido Jin.
— ¿Por qué saliste corriendo? Alguien vino a buscarte Jiminie, te está esperando haya afuera, lo dejé entrar por qué dijo que era urgente — Jimin sintió como empezaba a sudar fío y el terror de que el mayor vea a su pequeño lo tenía inmovilizado — abriré en unos minutos, así que sal atiendelo y deja a Kookie aquí...
Aquellas palabras hicieron entrar en si a Jimin, quien vio a su pequeño jugar con sus manitas y cerrar sus ojitos por segundos, entonces se le ocurrió que sería lo mejor dejarlo durmiendo en el sofá y así Yoongi no vería a su tesoro y nada malo ocurriría.
— Lo dejaré que duerma, Hyung... No dejé que Kookie salga, por favor, no quiero que ese hombre de haya afuera lo vea... — Jin sintió más curiosidad y sus dudas aumentaron — Le prometo que le explicó después, pero por nada del mundo ese hombre debe ver a mi bebé, por favor Hyung.
Entonces Jin entendió la referencia y su encabezado empezó a crear un sin fin de ideas, pero sobre todo, recordó lo que una vez Jimin le contó.
— No me digas que él es... — Jin señaló hacia la puerta y después a Kook, que estaba siendo acomodado en el sofá por su padre.
Jimin suspiró rendido, cubrió a su bebé con una frazada y después asintió hacia su Hyung, Jin abrió sus ojos en grande, para después fruncir el ceño, pues aunque no había conocido antes a Yoongi, siempre lo odio por todo el daño que le hizo a su amigo y el saber que lo había dejado entrar a su cafetería con la excusa de que era algo urgente para poder ver al rubio frente a él, lo molestó más, surgiendo el deseó de salir y correrlo a patadas de su cafetería.
— Cuidelo Hyung, yo... Regresó en unos minutos — Antes de que este saliera Jin lo detuvo.
— Se fuerte Jiminie y no dejes que una bestia como ese te atormente, ¿De acuerdo?, Si necesitas mi ayuda, iré con una sartén a darle en la cabeza para que se largué y de paso, dejarlo estúpido — Jimin río divertido y correspondió al abrazo que su Hyung le ofreció.
— De acuerdo Hyung y gracias por su apoyo, lo quiero mucho, ¿Sabe?
— Lo sé, ¿Quién no me querría? — Con una última sonrisa de parte de ambos y con los nervios reduciendo de parte del menor, Jin se quedó en la cocina y verificando cada cierto momento que Jungkook siguiera durmiendo, mientras Jimin, iba hacia su peor pesadilla.
El rubio salió sintiendo sus nervios hacerse presente nuevamente, deseando desechar todos sus sentimientos encontrados, pero debía aceptar que tener frente a él a quien le hizo la vida imposible pero sobre todo, a quien fue el amor de su vida, ahí sentado y viendo hacia afuera, jugando con sus manos y moviendo la pierna constantemente, le había revuelto uno y mil sentimientos.
Jimin se acercó hasta quedar justo frente al mayor, se sentó y dejó sus manos bajo la mesa, desviando la mirada hacia la calle, que le parecía más interesante al hombre que tenía frente a él, quien sentía que estaba viendo a un ángel.
Yoongi no sabía cómo iniciar hablar, ver a su amado Jiminie frente a él, le removió muchos recuerdos y sentimientos. Lo veía más hermoso de lo que ya es, tan tierno, lindo, pero sobre todo... Diferente.
El mayor sabía que Jimin había cambiado, quizá para bien, pero le dolía saber sobre la indiferencia de este, le dolía saber que Jimin lo detestaba y no soportaba tenerlo cerca, que es el culpable de la nueva personalidad arisca del menor.
— Minnie...
— Jimin — Interrumpió el menor — Para usted es Jimin, así a secas — El corazón de Yoongi se estrujó y sintió un dolor ya conocido recorrer todo su cuerpo.
— Jimin, yo quiero... Pedirte perdón por todo el daño que te hice, se que... Quizá es demasiado tarde para hacerlo, se que no merecías nada de todo lo que te hice, tú jamás de hiciste nada, nunca me lastimaste de ninguna forma, en cambio yo...
— Tú hiciste de mi vida, una miseria, desde que entre a esa mugrosa escuela, conocí lo que es el bullying, conocí lo que es sufrir sin razón, sin que te hayan hecho nada, vi y sentí en carne propia, los maltratos físicos y verbales de tu parte, caí una y otra vez en tus mentiras, sufrí... — Jimin sintió sus ojitos picar, el nudo en su garganta hacerse presente, su corazón achicarse ante el recuerdo, cerró sus ojitos y trató de regular su respiración — Sufrí por ti, sufrí las consecuencias de enamorarse de un niño rico, consentido, hijo de papi y mami, sufrí... Las consecuencias de enamorarme de un Min, perdí todo Yoongi, perdí todos mis sueños por tu maldita culpa, no vengas a pedir perdón ahora... Por qué ya es demasiado tarde.
Yoongi sintió su corazón encogerse, sus lágrimas acumularse en sus ojos, sus manos echas puño, demostraban la impotencia de saber cuánto dolor causó en la persona que más ama, que destruyó sus sueños, sus ilusiones, sus anhelos... Destruyó por completo al único que lo hizo feliz durante un año.
— Jimin... Yo — El mayor no sabía que decir, su corazón le pedía a gritos que rogará por el perdón del chico, pero su subconsciente le decía que tomará las cosas con calma y si realmente quería el perdón sincero de Jimin, debía ganarse su confianza otra vez, pero haciendo bien las cosas — Quiero realmente ti perdón, de verdad quiero hacer las cosas bien y créeme que no me importa las veces que me rechaces, que me insultes, hasta que me golpees si es necesario, yo no me daré por vencido, perdóname por qué tendrás que verme más seguido de lo que piensas, pero no pienso perderte una vez más mi amor, no más.
El interior de Jimin se removió con aquel último apelativo, su corazoncito estaba acelerado, sus ojitos brillaron por un segundo del cual Yoongi fue testigo, siendo así lo que necesitaba ver para poder iniciar a formar un camino hacía el corazón del amor de su vida.
— No me molestes en horas laborales, tú tienes tu trabajo, yo el mío, supongo que eres uno de esos cascarrabias que se molesta hasta por qué entran sin tocar a su oficina, pues a mí me molesta que me interrumpan en mis horas laborales, si consumes, pues bien, pero si vienes solo a molestar, es mejor que no vengas.
Yoongi no necesitaba más para saber que Jimin casi le estaba dando autorización de verlo, nunca le mencionó que no lo moleste fuera del trabajo y si llega a esa cafetería y consumía, podía verlo, diariamente, aún si no le habla, ese puede ser un buen inició para poder tener el corazón del menor otra vez.
— Jiminie — Jin llamó la atención del menor, quien rápidamente volteó a ver, esperando que su pequeño este bien — Abriré en unos minutos — Anunció, esperando haber salvado a su amigo de tan incómodo momento.
— Debo trabajar, así que te pido amablemente que te retires — Jimin se puso de pie, con la intención de alejarse del mayor y de todos sus sentimientos encontrados.
Yoongi no perdió el tiempo de tomarlo de la mano, sintiendo la suavidad de estas, notando que tenía puesta una esclava que el mismo le dió hace más de cuatro años, cuando iniciaban su relación. El mayor sonrió y acarició el dorso de la mano de este, sintiendo una luz de esperanza instalarse en su pecho. Jimin se dio cuenta de ello y apartó rápidamente su mano, sintiendo sus mejillas sonrojar, pues aunque quiso muchas veces aquella esclava no se la pudo, ni quiso quitarse nunca.
Desvió su mirada hacia otro lado, intentando fallidamente de controlar sus emociones y sus nervios, sobre todo de apaciguar el sonrojo en sus mejillas.
— Me voy Jiminie, pero ten en cuenta que volveré, todos los días, hasta que me perdones.
Yoongi se puso de pie, quedando al lado del menor, quien en ningún momento quiso voltear a verlo a los ojos, por qué sabía que perdería toda su fuerza de voluntad. No dijo nada, esperando a que el mayor se fuera, personal no sentir que se alejará, volteó a verlo, no sabiendo si hizo bien o arrepentirse.
Sus miradas se encontraron, notando el dolor que estás demostraban, la tristeza, el arrepentimiento, sin embargo, ambos notaron un brilló de esperanza, de anheló y de amor, un amor que por más que Jimin quisiera negar, aún sentía por el hombre frente a él.
El mayor no perdió el tiempo, tomando desprevenido a Jimin, planto un sonoro, húmedo y largo beso en la mejilla de este, quien se quedó quieto, sorprendido y sin saber cómo reaccionar. Sintiendo un nido de mariposas revolotear en su interior, su corazoncito palpitando rápidamente y tragando grueso por atrevimiento, del cual no reaccionó mal en ningún momento.
Yoongi al ver el estado de Jimin sonrió, satisfecho por saber que un remueve sentimientos en el corazón de su bello chico. Antes de irse dejó un beso más en la frente de este, pasando sus manos sobre sus brazos.
— Cuídate mi bello ángel.
El mayor se fue y Jimin sintió sus ojitos picar, recordar cuando Yoongi le dijo que sería su ángel por la eternidad le tocaron el corazón. El menor se sentía tan vulnerable, se preguntaba constantemente, ¿Qué hizo mal para que todo acabará de aquella manera?
Sintió unos brazos rodearlo, no aguantando más se hecho a llorar en el hombro de su Hyung. Jin lo consolaba, acariciando su espalda, sabiendo que la llegada o más bien aparición de Yoongi, empezaba a revivir el pasado de Jimin, sabiendo bien que nada de eso fue feliz y cuando creyó que todo estaría bien, terminó de la peor manera posible.
Jin conocía toda la historia, pues él mismo Jimin se la llegó a contar, sabía lo doloroso que es para el menor, hablar del padre de su bebé, más ahora que este había aparecido a su vida y corría el riesgo de que conociera la identidad del equipo Kook.
— No estás solo Jiminie, se que ya eres un hombre adulto y sabes tomar tus propias decisiones, pero aún así, siempre estaré para ti, cuando necesites un consejo, estaré siempre disponible para ayudarte, ¿De acuerdo?
Jimin asintió aún con sus lágrimas bajando de sus ojitos, estuvo en aquella posición un par de minutos, antes de decidir que no era momento y que si mañana debía empezar diferente.
— Gracias Hyung, no sabe cuánto apreció que este para mí, cada que lo necesite.
— Tú me ayudaste en su momento Jiminie y ahora es mi turno, y no digas que ya te pagué, por qué, jamás será suficiente para agradecerte el haberme salvado de volverme loco junto a esta cafetería — La sonrisa de Jin, transmitió tranquilidad en Jimin — Anda, que Coffee Kookie no se atiende solo.
— Gracias Hyung.
Jimin estaba seguro que su tortura daba inicio, sabía que el mayor empezaría hacer acto de presencia otra vez en su vida, sabía que nada de esto saldría bien, sin embargo, haría todo lo posible para que su pequeño Kookie no salga lastimado.
Jimin sabía que su corazón le decía lo enamorado que seguía de Min Yoongi, pero su lado racional, le recordaba constantemente su pasado y que debía pensar antes de actuar, no dejarse llevar por los impulsos.
Mientras tanto, Jimin tendría que pensar cómo hacer para que Min no supiera de que tienen un hijo juntos y que el pequeño no sabe tampoco que tiene dos padres y no sólo uno.
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¡Hola amigos!
¿Qué les pareció este capítulo?
Espero les haya gustado muchísimo. 🤭
Iniciamos con una pequeña maratón, la cual prometí que publicaría.
Sólo diré una cosa en cada capítulo.
¡¡FELIZ CUMPLEAÑOS PARK HERMOSO JIMIN!!
🥳😍🐣💜💛
Denle todo el amor del mundo a esta maravilla de personita por favor 🥺🤭🐣
Ese hombre me trae loca, miren no más que belleza😍💜
¡Nos seguimos leyendo amigos!
No olviden dejar su estrellita si les gustó el capítulo ⭐
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