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~ Pasado ~
(Narrador Omnisciente)
La sociedad es un lugar, lleno de perjuicios, contradicciones, personas que saben más que juzgar y señalar con el dedo si eres de clase baja media o alta.
Eso no debería importar nunca, todos somos iguales, no importa que, sin embargo, aquello no parecía importar y menos para los señores Min, unas personas con un odio hacía todo aquel que no fuera de su mismo nivel.
Los padres de Yoongi, vivían con resentimientos, odio y despreció hacía los demás, sin importarles, las consecuencias de sus actos.
- Yoongi - La madre del pelinegro, había mandado a llamar a su hijo, quien refunfuñando y quejidos llegó a casa de sus padres - Debemos hablar de algo muy importante querido - Dijo la señora.
- ¿Qué tan importante debe ser para que me hayas exigido venir hasta aquí madre?, Sabes que me fui de esta casa con la intención de no regresar.
- No dirás lo mismo cuando te digamos y escuches lo necesario hijo - Dijo un implacable señor Min.
- ¿A que te refieres con eso?, ¿Puedes hablar ya? - Yoongi estaba fastidiado y odiaba los rodeos de sus padres.
- Escucha esto y luego hablamos - Dijo la señora Min, mientras le mostraba a su hijo, unas grabaciones.
En dicha grabación, se podía escuchar claramente la conversación de los padres de ambos jóvenes, donde discutían sobre el separarlos a ambos, pero dicha conversación estaba manipulada por los señores Min, de lo cual Yoongi no se dio cuenta, en ello se escuchaba como los señores Park "Pedían" dos millón de dólares a cambio de separar a su hijo del mayor. Más otras cosas que no eran así y simplemente habían sido manipuladas, dejando a los Min como los inocentes de todo ello.
- ¿Qué es esto? - Preguntó Yoongi, desconcertado por lo que había escuchado.
Él no era tonto y sabía perfectamente que algo no estaba bien, sus padres eran unos manipuladores y estaba casi seguro que ellos eran los que tenían que ver más en ello, aún así lo que había escuchado lo dejo desconcertado y sin comprender nada.
- Los padres del mocoso ese, quieren dinero a cambio de separarte de él, claro que a nosotros nos conviene hijo, no queremos a ese niño contigo, es un pobretón bueno para nada, pero la cosa no termina ahí - Dijo la señora, mostrando algo muy diferente en su lugar.
Si, era una conversación pero que está vez helo por completo los huesos de Yoongi.
~ - Tú solo buscas el dinero de Yoongi, ¿No es así? - Se escuchaba la voz de la señora Park. ~
~ - Si - Fue la respuesta de Jimin. La cual fue lo que empezó a desmoronar el corazón del mayor. ~
~ - ¿Lo amas? - Preguntó la señora Park. ~
~ - Claro que no - Se escuchó una respuesta, llena de repudio en la voz del menor. ~
Fue ahí, cuando el corazón de Yoongi se destrozó, su felicidad se vino abajo y su amor se vio destruido, por alguien que no quería nada más de él que su dinero, que jamás lo amo y que sólo se burló de él, así como él mismo lo hizo durante años.
Yoongi creyó que esa era una venganza de Jimin hacía él, por todo el daño que le hizo durante años y creyó que se lo merecía, que merecía ese dolor por qué él había causado más dolor en Jimin desde que eran unos niños.
Sin embargo el pelinegro, amaba con el alma su pequeño Minnie, su ángel, su bebé, el amor de su vida. Lo amaba, lo adoraba y creía que si hablaba con él, podría resolver aquello y que el mismo Jimin le dijera que que era falsa aquella grabación.
- Yo... Debo hablar con Jimin, eso no puede ser verdad, lo pudieron forzar y...
- No seas ingenuo hijo, ¿Crees que esa no es una venganza por todo lo que le hiciste en años? - Dijo despectivamente la mujer.
- ¿Tú cómo sabes...?
- Siempre te hemos tenido vigilado Yoongi - Dijo el hombre - Sabemos que todas esas travesuras, las hacías tú y culpabas al mocoso, aunque claro, no creímos que te enamoras de él al final, ¿En serio crees que te ama?, Tú eres de clase alta, un Min, mientas él es un pobre interesado, es lo único que vio en ti, tu dinero y no amor, ¿Tan imbécil eres hijo?
Claramente las palabras del señor Min, fueron las que más destrozaron el corazón de Yoongi, las que lo hicieron aterrizar y darse cuenta de la realidad.
Aún si esa no era la realidad.
- Dejarás a ese mocoso, mañana mismo - Demandó la mujer.
El siguiente día, Yoongi y Jimin iniciarían a vivir juntos, incluso un par de pertenecías del castaño, ya estaban en el departamento del mayor, estaban por cumplir uno de sus sueños y al parecer se verían truncados por el odio, mentiras y patrañas de unos padres que no buscan realmente la felicidad de sus hijos.
- Pero... Jimin - Yoongi quería llorar, gritar, patear, quejarse, buscar a Jimin y enfrentar aquella situación, pero una parte de él, aún seguía siendo fácilmente manipulable para sus padres.
- Te estaremos vigilando Yoongi, lo dejarás y le harás la mayor humillación de su vida, si no lo haces, destruiremos el miserable negocio de los Park, los dejaremos en la calle, ese mocoso jamás en su vida podrá cumplir sus sueños como bailarín, ellos... Serán uno más que deban pedir limosna en las calles, ¿Te quedo claro? - Exigió y demandó el señor Min, tratando a su hijo hacer lo que le dijo, si o si.
Entonces fue cuando Yoongi, no tuvo más opción que hacer lo que sus padres querían, aún si aquellas grabaciones eran falsas o verdaderas, aún si Jimin haya dicho aquello o no, él, debía hacer lo que sus padres le decían, si no quería que los Park sufrieran las consecuencias.
Claro, que nadie se imaginó, que después de todo, las cosas no acabarían bien.
- Lo haré... - Dijo como últimas palabras el hijo de los Min.
- Esto no me puede estás pasando - Se repetía una y otras vez el castaño, mientras estaba encerrado en su baño.
Había llegado a casa de sus padres a preparar las maletas, que llevaría a casa de su novio, sabía que Yoongi dentro de un par de horas iría a casa de sus padres.
Jimin tenía más de una semana con mareos, vómitos, náuseas, dolores de cabeza, sabía que existían los donceles. Hombres que son dotados con el don del embarazo. Con temor y nervios decidió comprar tres pruebas y realizarse una a una, deseando que salieran negativas.
Sin embargo, en las tres pruebas, salía positiva y le indicaba que tenía dos semanas de embarazo.
Razón por la cual el chico, estaba asustado en su baño, con temor nervios y pensado si su novio se haría cargo o no, si aquello cambiaría su relación, la dificultará o ambos tratarían de salir adelante.
- Yoongi no sería capaz de dejarme, él me ama y todo estará bien, él nos cuidará mi amor - Se repetía el castaño una y otra vez.
- ¿Jiminie?, ¿Estás bien cariño? - Preguntó la señora Park, al otro lado de la puerta.
Jimin se puso de pie, pues se había dejado caer al piso por el terror que su cuerpo sentía, se aliso la ropa, se acomodó su cabello, escondió las pruebas y salió como si nada.
- Estoy bien mamá, ¿Qué ocurre? - Jimin inició a guardar algunas prendas faltantes en la maleta, mientras escuchaba a su madre.
- Hijo... - Inició la mujer - Quiero preguntarte algo muy importante.
- Dime madre - Respondió el castaño, sin dejar de hacer su trabajo.
- Tú... ¿Estás con Yoongi por su dinero? - Preguntó la mujer, deteniendo los movimientos de su hijo.
- ¿Qué?, Claro que no madre, ¿Como se te ocurre pensar eso sí quiera? - La pregunta claramente había molestado al menor.
- ¿Lo amas? - Preguntó nuevamente la mujer.
- Si... Lo amo más que a nada en la vida, él... - Los ojitos de Jimin brillaron y si radiante eyesmile apareció en su rostro - Es el amor de mi vida, mi mundo enteró y por quién siempre estaré dispuesto a todo, por quien daría mi vida y al único que amaré por el resto de mis días.
La mujer bajo la mirada y asintió, claramente sintiendo una culpa, que jamás podrá remediar y del cual ya estaba hecho, pues aquella conversación había sido grabada, por una llamada que tenía en ese momento con los Min, quienes después de encargaron de manipularla fácilmente.
La mujer se acercó a su hijo y lo abrazó fuertemente, derramando lágrimas en el proceso. Jimin sonrió por lo sensible que es su madre.
- Perdóname hijo, por favor... Perdóname - Decía la señora Park.
- ¿Por qué me pides perdón madre? - Preguntó el menor.
- Solo Perdóname mi niño, por no aceptar tu relación con Yoongi, desde el inicio y por no confiar en ti, por todo... Perdóname mi amor - Dijo la mujer, quien dejó un beso en la frente de su hijo y salió de la habitación, con el alma y corazón destrozado.
Jimin no comprendió la actitud de su madre, pero solo pensó que ella suele ser muy sentimental y debia estar vulnerable por qué se iría el siguiente día.
- Tendrás una abuela muy sensible mi bebé, ¿Sabes que ya te amo y tu papi también lo hará mucho? - Decía el menor, mientras acariciaba su plano abdomen.
Aquella bella sonrisa, estaba a punto de desaparecer y él... No lo sabía.
La mañana llegó, Jimin estaba feliz, nervioso y con cierto miedo de decirle aquella noticia a su novio, sin embargo, la emoción le ganaba y estaba más que seguro que ambos brindarían de felicidad.
Jimin se extraño mucho cuando su novio no paso por él, para que fueran a la Universidad juntos, pero pensó que llegaría después o que ya estaba allá, así que se fue en bus, aunque lo había intentado llamar desde la noche anterior y este no atendió, le texteo y jamás respondió.
El castaño sentía un revuelto en su estómago, quería vomitar, pero trataba de calmar sus malestares.
Cuando llegó a la Universidad, entró y busco a su novio por todos lados, hasta que lo vio en la cancha, corrió muy sonriente hasta él y lo abrazó por la espalda, dejando un cálido beso sobre esta.
La piel de Yoongi se erizo y su nerviosismo creció, debía actual tal y como su madre le había dicho, aunque no quisiera hacerlo.
- Hola mi amor - Saludo un sonriente Jimin - ¿Por qué no pasaste por mi cielo?, Bueno, no importa, tengo una estupenda noticia que darte... - Jimin sólo logró sentir el fuerte impacto que se llevó al caer de bruces al piso y sentir un ardor en su brazo derecho al detenerse con él.
Levantó la mirada y notó algo que le helo la sangre. Aquella mirada en Yoongi... Era igual a la que siempre le mostró cuando eran niños, cuando no eran pareja, aquella mirada que por años lo aterro y le dió lastima, pero sobre todo, odió.
- ¿Qué te sucede Yoon...? - Los ojitos de Jimin empezaban a humedecerse, sintiendo no solo el dolor físico si no también emocional y solo esperaba que aquel golpe en su cadera no afectará a su bebé.
- Alejate de mi cerdo apestoso, no te quiero cerca de mi, eres un fastidioso que no sirve para nada más que ser un estorbo en mi vida - Decía con despreció el pelinegro.
- Yoongi... - Jimin sentía como poco a poco su corazón se iba rompiendo en mil pedazos.
- ¿Creíste que no me daría cuenta que solo me querías por mi dinero?, ¿Tan idiota me crees?, Tú no eres más que un imbécil Park, un pobretón muerto de hambre que solo quería darse los lujos que no merece.
La multitud en aquel lugar empezaba hacer acto de presencia, muchos reían y se burlaban de las palabras de Yoongi hacía Jimin, otros sentían lástima por el chico que aún seguía en el piso, muchos otros, solo ignoraban, o gozaban de la escena montada.
- ¿De qué... hablas Y-oongi? - Preguntó Jimin, con lágrimas siendo derramadas de sus ojitos.
- Deja de hacerte la víctima Park, no me costó conquistarte, ¿Sabes? y tampoco es que me haya costado llevarte a la cama, eres tan fácil, que cualquiera de aquí, lo lograría en un instante, abres las piernas fácilmente y te regalas al que sea...
Yoongi no sintió el momento en que Jimin se puso de pie, con dolor en su cuerpo y corazón, para después abofetearlo fuertemente en el rostro, logrando ladear hacía un lado, la cabeza del mayor.
- ¿Qué... C-rees que estás diciendo M-in? - El llanto y dolor de Jimin era enorme, estaba siendo denigrado, insultado gente a toda la Universidad, lo estaban humillando de la manera más cruel y vil que puede existir.
- Ahora te haces el difícil, el dolido y humillado, pero sabes que digo la verdad, ¿Creíste que aceptaría a un muerto de hambre en mi departamento?, Por favor Park, no sueñes, ubicate y date cuenta que eres un fácil y regalado.
Cuando Jimin estaba a punto de lanzar una bofetada más en el rostro del pelinegro, este lo empujó, tirándolo al piso una vez más.
- Háganlo - Dijo Yoongi, metiendo sus manos a sus bolsillos y presenciando todo lo que ocurrió después.
Unos chicos empezaron a tirar cosas encima del pobre e indefenso Jimin. Harina, leche, huevos, miel, muchos productos grasosos, mal olientes y que sabrá Dios de dónde salieron, hasta dejarlo empapado.
Otros le lanzaron globos con harina, con pintura, con agua sucia y disfrutaban el momento.
Yoongi observó todo, de inicio a fin, con un dolor indescriptible en su corazón, pero siendo testigo de cómo sus padres lo observaba desde un punto ciego y lejano, donde ellos también y más que nadie, disfrutó de la humillación que Park Jimin vivió aquella mañana.
- Déjenlo, ya es suficiente, con eso creo que aprendiste la lección que un Min, jamás se fijaría en un pobre muerto de hambre como tú y no me buses Park, por qué para mí... No eres nadie.
Después de aquellas últimas, hirientes y fuertes palabras, Yoongi dio la media vuelta, se retiró del lugar y no volvió a ver a Jimin.
Mientras tanto, el castaño, lloraba silenciosos, con dolor, en sus caderas, con dolor en su pecho y alma, que no se compraba con el físico, sintió cada uno de aquellos golpes y siempre vio, como Yoongi no hacía nada para defenderlo, como observaba en silencio.
Ahí, fue cuando Jimin se juro, jamás perdonar a Min Yoongi y jamás decirle sobre la existencia de su pequeño bebé.
- Algún... D-ía te arrepentirás Min... P-ero será demasiado tarde para pedir perdón - Susurró Jimin, en medio de su dolor.
Se puso de pie, sintiendo los mareos, ganas de vomitar y náuseas. Hasta que tanto dolor hizo que se desmayara y quedará totalmente inconsciente, para ese momento los Min, se habían marcacho del lugar y Yoongi no presenció la escena.
Jimin fue trasladado a un hospital y ahí, le dijeron que su embarazo sería de alto riesgo y que debía pasar al menos tres meses en cama. Por esa razón, no asistió a la Universidad los meses restantes, terminó el línea, agradeció pues así no volvió a ver a quienes lo humillaron y jamás a quien más lo lastimo durante muchos años.
Jimin sufrió heridas externas e internas, pero nada comparado con el que sintió, al darse cuenta que el hombre en quien confío, a quien amo, lo daño, lo lastimó y lo dejó solo, con un embarazo, un bebé que había sido fruto de "su amor" que fue fruto de una relación linda, que llegó a su fin, de la manera más cuel y despiadada posible.
Desde entonces el corazón de Park Jimin se mantuvo cerrado, a cualquiera que intentará algo con él.
¿Era justificable el hecho que Jimin no quisiera perdonar del todo, aún a Yoongi?
Lo era y a pesar de todo... Park Jimin aún amaba como a nadie a Min Yoongi.
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¡Hola amigos!
¿Qué les pareció este capítulo?
El más esperado y aclamado por todos está aquí✨
¿Fue cruel?
Lo sé, a mi también me dolió la forma tan inhumana y cruel en que Yoongi trato al bebé de Minnie, pero ahora saben cómo sucedieron las cosas.
¿Creen que Yoongi merece que Jimin no lo perdón aún?
Esperó que realmente les haya gustado el capítulo amigos, lo hice con mucho amor para ustedes💜
¡Feliz navidad chiquillos!🎄
Esperó que estén teniendo bonita Navidad junto a su familia🥺 besitos para todos y cuídense mucho amigos✨
Pdt: Les prometo que seguiré está obra hasta el final, por quienes si la aman, siempre les traeré buenos capítulos chiquillos.
Sin más que decir...
¡Nos leemos pronto!
Bye💜
No olviden dejar su estrellita si les gustó el capítulo ⭐
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