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XL - No more distrust

40.- No more distrust.

Mis gritos y los de Sebastian se escuchaban, lo más probable, por todo el piso del edificio donde residíamos. Ambos dominados por la cólera no hacíamos más que manifestar palabras con el fin de hundir al otro. Ciertamente, la disputa, con el pasar de los minutos, se comenzaba a tornar bastante calurosa entre ambos.

—¡Ya no te soporto, maldición! —Me gritó el rumano, totalmente enfurecido. —¡Siempre es lo mismo! ¿hasta cuándo desconfiarás de mí? ¡Qué más quiere que haga por ti! —Me reprochó batiendo sus brazos con exacerbación.

—¡¿Y cómo quieres que lo haga si siempre hablas con Madeline?! —Gimoteé. —Dime que no me amas y listo. Sería todo más fácil. —Lloriqueé. — ¡Nos ahorraríamos lágrimas y esta estúpida pelea!

—Contigo no hay caso, __________. —Murmuró, mirándome fijo a los ojos. Negó ligeramente. —Madeline no es nada. Entiende.

—Es tu ex. —Le recordé. —En algún momento de tu vida fue algo.

—¿Y qué hay de ti con ese tal Erick, uhm? —Contratacó. —¿Quién me dice a mí que tú y el no tienen nada? —Alzó una ceja, esperando impaciente mi respuesta.

Le miré, totalmente iracunda y a punto de explotar en un grito colmado de rabia y tristeza. Éstas peleas no se daban seguido en nuestra relación, al menos no las que tenían como fin, celar al otro. Pero, era sabido que al rumano no le gustaba la presencia de Erick en nuestro hogar y ante ello, él no dudaba en tornarse totalmente arisco con el joven.

Chaqueé la lengua, cabreada y con la intención de terminar con la discusión. No contesté, no había necesidad de hacerlo si íbamos a seguir peleando. Me dispuse a caminar y dejar la riña atrás, más Sebastian, tomó de mi brazo con fuerzas, casi incrustando sus dedos en mi piel.

—¡Sebastian! —Chillé, adolorida, mirando su mano ejerciendo aún más presión. Su rostro se había endurecido y sus ojos azules, aquellos de tonalidad bebé y destellante en ternura, se habían vuelto negros y colmados de ira.

—¿Con qué cara me vienes a hacer escenas de celos si tú te revuelcas con ese idiota? —Cuestionó, murmurando entre dientes. Sus palabras me dolían, puesto que yo, jamás había pensado en engañarlo.

Entre abrí la boca, sorprendida y pasada a llevar. Tomé su mano y la retiré de mi brazo. Respiré profundo y, sin si quiera pensar en lo que sucedería después, abofeteé su mejilla, creando un sonido agudo que logró resonar en todo el departamento.

—No me vuelvas a hablar más, Sebastian Stan. —Le apunté con mi dedo índice, acusadora y severa. —Da esta relación por terminada.

Y, entre lágrimas salí del departamento que ambos compartíamos. Lo último que escuché fue la puerta del departamento cerrarse con furia.

*******

—¡Es un idiota! —Gruñó mi amiga, totalmente indignada al escuchar la historia de mi reciente ruptura. —Quizás es él quien te engañan a ti y su infidelidad la proyecta en ti... —se encogió de hombros, analizando desde otro punto de vista la situación. —De igual forma, te mereces algo mejor, __________.

—Noami, sé que Sebastian nunca te ha agradado, pero, aún lo quiero. —Musité. —Pese a todo, lo quiero aún. —Suspiré, abrumada.

La muchacha entre cerró sus ojos y negó lenta y ligeramente.

—Nunca entenderé la lógica de tu relación, ___________. —Suspiró la castaña. —Si habla con su ex, es porque hay algo allí. ¿Qué no te das cuenta? ¡Es obvio!

Aspiré profundo y, entre aquel proceso, tapé mi rostro, sin saber qué pensar ni qué hacer al respecto.

Me tomé mi tiempo durante una semana viviendo con mi amiga quien, siempre que tenía la oportunidad, me aconsejaba dar por terminada la relación y comenzar desde cero. Ella estaba convencida de que el rumano tenía una aventura oculta con la que fue su ex novia y yo, más confundida no podía sentirme.

—No te ha llamado. —Me dijo Noami pasado los días. —¿Qué otra señal quieres? Si él te quisiera y estuviese arrepentido de haber discutido contigo, te buscaría. —Comentó, seria e indignada. —Pero no lo ha hecho. —se encogió de hombros. —Está más que claro el asunto.

—Noami, ¿sabes que no me ayudas en nada, cierto? —Cuestioné con el ceño fruncido, cansada de escuchar sus especulaciones que, aunque no me gustase, no dejaban de parecer ciertas. —Yo tampoco lo he llamado... —Murmuré. — Debería hacerlo...

—Pero se supone que diste por terminada la relación. —Rodó los ojos.

—Y-yo, bueno... —Me rasqué tras la oreja, sin mirarla. Bien sabía que me estaba escrutando con su mirada, algo que me molestaba, por cierto.

Noami iba a manifestar su descontento, pero fue el timbre de su hogar el que la detuvo, rompiendo el incómodo ambiente que se sentía entre ambas. La muchacha se levantó para atender el llamado y yo, me quedé en la cocina, deliberando qué hacer con mis pensamientos, con mi vida y mi relación que, hasta ese momento, pendía de un hilo.

Estaba sentida; los mensajes entre el rumano y su ex no dejaban de ser algo que me atormentara día y noche, pensando en que efectivamente ambos habían vuelto a tener una aventura a mis espaldas. Pero, ¿qué explicación le podía dar a la forma en la que me hacia el amor? Era extraño pues, dentro de la infidelidad, tenía entendido que aquel acto puro de amor no era más que solo saciar la necesidad física y no demostrar la devoción para con el otro.

Pero todo era tan confuso. Estaba abrumada; las palabras de Noami no dejaban de ser ciertas, pero tampoco cien por ciento verdaderas.

Volví a suspirar, totalmente abatida y con mis pensamientos hechos una maraña sin sentido. Fue el sonido de un gruñido el que me sacó de mis pensamientos, gruñido que, bien conocía a la perfección.

Me encaminé hacia el living, entusiasmada y con el corazón totalmente desbocado.

—¡Amor! —Gimió el rumano en cuanto me vio cruzar la puerta del living. Mis ojos se llenaron de lágrimas, remontándome al día que tuvimos la discusión. —Tenemos que hablar... —Musitó, apesadumbrado.

Noami me miró y alzó una de sus cejas. Asentí ligeramente en respuesta, gesto que ella entendió perfectamente y de mala gana.

Con el rumano permanecimos en silencio, ninguno se atrevía a hablar. El ambiente era incómodo, pero colmado de deseos. Bien no sabía qué tipos de deseos, pero si tenía algo claro; estos no tenían ninguna pizca de ser negativos.

—T-te amo, muñeca. —Musitó el rumano, cabizbajo. —Y no quiero que esta relación se termine. —Suspiró, desanimado. —Te dije cosas hirientes, y te juro por el amor que siento por ti, que nunca las quise decir. No son ciertas, ninguna de ellas. —Manifestó con desesperación.

Respiré con dificultad, sintiendo las primeras lagrimas surgir.

—Entonces, Madeline y tú....

El rumano carcajeó y, con cautela se acercó a mí.

—No... —Susurró. —Es mi ex, mi pasado, y ahora una amiga muy lejana. No tengo nada con ella, _________ y jamás lo tendré si tengo a una mujer excepcional a mi lado. —Dijo, y yo comencé a llorar conmocionada por sus palabras. —No me perdonaría nunca en la vida mi infidelidad. Te amo tanto, no sabes cuánto amor albergo en mi alma por ti. —Rio. —No lo puedes creer.

—¡Cariño! —Lloriqueé, lanzándome a sus brazos, finalmente, envolviendo su anatomía en un abrazo y su rostro de besos por doquier. —Te amo... mucho, mucho. —Besé sus labios. —¿Por qué demoraste en venir?

—Creí que era mejor tomar un tiempo para apaciguar la tensión. —Dijo. —Además, sé que no me ibas a recibir. Conozco tu orgullo. —Carcajeó.

—Demoraste mucho.

—Prometo no demorar la próxima vez. —Besó la punta de mi nariz. —Por cierto, Erick ha ido a la casa y...—Tosió incómodo. —Me siento un total idiota por desconfiar de ti. —Reí, divertida. Más el rumano agachó la mirada, avergonzado.

—Te quiero, tonto. —Acaricié su mejilla con ternura. —Demasiado como para dar por terminada esta relación.

Nos fundimos en un abrazo y beso reconciliador, aquel que, durante la noche, en nuestro departamento, dio génesis a las mejores caricias que pudimos sentir. Nos amamos como nunca, y juramos no desconfiar del otro nunca más. 






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Wey! Anhelo un hombre así  :( But, la vida me odia ah.

Dedicado a ExtremelyRadioactive
<3  Espero te haya gustado el OS C: 

Ahora, una pregunta jeje : ¿Hay algún OS del que quieran leer segunda o tercera parte? si es así, díganme cual :) y si es que tienen una idea, igual. Les dedicaré el capítulo y daré crédito por la idea <3 Quiero hacer algo más participativo <3. 

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