Jaemin siempre ha sabido que pelear por mensajes es la mayor estupidez que puedes cometer con tu pareja, claro, lo de ahora no es una discusión siquiera, pero...

Su estómago está dando vueltas raras y las náuseas le están pegando fuerte.

Solo hablaron malentendidos, aunque Na siente que hizo algo peor.

No sabe el qué.

Quiere saberlo porque sino vomitará apenas deje de sobre estimular su mente con cuatro pantallas, música y coca cola fría.

Tiene ganas de llorar y lo odia.

Detesta los malentendidos porque la ansiedad casi lo obliga a distanciarse de los demás si está en un grupo.

Quiere desaparecer.

Quiere irse a dormir, mas no puede.

Extraña a Jeno, pero le dijo que no viniera hasta unos días más para no molestarlo y pedirle que lo acompañe al psicólogo.

Jaemin juraría que al pelinegro realmente no le agrada mucho la idea de ir por dos horas y luego esperar una más mientras la sesión se lleva a cabo.

Quiere pedirle perdón.

Perdón.

Amor, lo siento mucho.

Ahora es de madrugada, incluso si quisiera, no puede molestar, ya que mañana Jeno trabaja.

Dios, no sabe qué hacer.

Quiere arrancarse la piel de la cara.

Matarse a mordiscos.

O podría simplemente llorar hasta secarse y sentirse mal consigo mismo por no saber qué hacer.

Nunca sabe qué hacer.