Tristes noticias, este fic solo tendrá entre 15 y 20 capítulos, así que lamento decirles que se acerca el final, los adoro por ser acosadores de este fic y apoyar esta pareja, ¡VIVA EL MANIALBA!

Semanas después, los ascos de Albafica habían aumentado, sumándole vómitos diarios, pero se negaba a ir al doctor, aunque Manigoldo intento llevarlo varias veces fue en vano, en las empresas Cáncer, Manigoldo escribía en su escritorio, vio fuera de su oficina en escritorio de Albafica, pero este no estaba, se sorprendió y salió, vio a todas partes pero Albafica no estaba, vio a Dégel pasar
- oye, ¿y Alba-chan?- pregunto Manigoldo
- en el baño seguramente, últimamente no se le ve muy sano, deberías hacer algo.- dijo Dégel
- he intentado llevarlo al hospital pero el no se deja, intentalo tu.- dijo Manigoldo
- ¿por que yo?- pregunto Dégel
- eres su amigo, por favor, mínimo intentalo.- dijo Manigoldo
Dégel suspiro y se frotó bajo los lentes
- esta bien, lo intentare.- dijo Dégel
- te lo agradezco, hielerita.- dijo Manigoldo sonriendo
Poco después, Albafica volvió a su escritorio, Dégel se acerco sonriendo
- hola, ¿terminaste tus pendiente?- pregunto Dégel
- si, por ahora, ¿y esa pregunta a que de debe?- pregunto Albafica
- me han dicho que te has estado sintiendo mal estos días, deberías ir al doctor.- dijo Dégel
- me niego, le temo a los doctores.- dijo Albafica
- ¿que tal si es algo grave, que ta si dejas a Vanessa sola?, no creó que quieras eso, Manigoldo también esta asustado, debemos ir mínimo a verificar que no tienes nada.- dijo Dégel
Albafica se quedo pensando, lo que decía Dégel era verdad, no dejaría a Vanessa sola, sabia que Manigoldo cuidaría de ella, pero desea compartir esa felicidad con ambos, no tenia otra opción, debía tragarse el miedo
- esta bien, iré, solo por ellos.- dijo Albafica
- perfecto, vamos ahora, Manigoldo lo entenderá.- dijo Dégel
Albafica afirmo, los dos fueron al estacionamiento, llegaron a un camioneta pequeña cuatro puertas azul, al entrar se pusieron los cinturones y Dégel intento encenderla, pero para su sorpresa... no encendía
- no me lo puedo creer...- dijo Dégel
Albafica no pudo evitar reír, Dégel sonrió ante la situación, se bajaron, Dégel romo su celular y marco un numero
- ¿a quien le llamas?- preguntó Albafica
- a Kardia, para que me preste su auto.- dijo Dégel
- ¿que les ocurrió?- pregunto una voz
Los dios vieron a Sisifo con unas cajas, este se acercó a ellos
- vamos al hospital para que revisen a Albafica, pero el auto no encendió.- dijo Dégel
- que mala suerte, pero también buena, yo también voy al doctor, si quieren los dejo ahí y cuando salgan los traigo conmigo.- dijo Sisifo
- eres un ángel, gracias.- dijo Albafica
- no hay de que, siganme.- dijo Sisifo
Los tres llegaron a un carro cuatro puertas rojo, dejaron las cajas en la cajuela y subieron, al encender se fueron, Albafica iba de copiloto, Sisifo manejaba y Dégel jugaba con el vidrio de la puerta, Albafica vio una foto en el compartimiento abajo del estéreo, era una foto de Sisifo con El Cid, y dos niños, uno tenia el pelo café y ondulado como Sisifo, ojos café y piel blanca, el otro era un niño de cabello oscuro, verdes, piel blanca, Albafica sonrió
- ¿son sus hijos?- preguntó Albafica
- si, el mayor es Shura, el menor Aioros.- dijo Sisifo
- son tan tiernos, mira Dégel.- dijo Albafica
- cierto, son muy lindos, Aioros se parece muchos a ti.- dijo Dégel
- es verdad, me alegra que al menos el si se pareció a mi, yo quise que tuviéramos un hijo igual a mi, así que después de que nació Shura, le pedí a El Cid que tuviéramos otro hijo.- dijo Sisifo
- ¿a que edad tuviste a Shura?- pregunto Albafica
- creo que... a los 16 años, hoy el pequeño tiene 13 años.- dijo Sisifo
- ¿tan joven, no tuviste problemas con tus padres?- pregunto Dégel
- de hecho no, yo siempre fui muy responsable en la escuela, El Cid ya trabajaba medio turno cuando salíamos, cuando me entere que tendríamos un hijo, el rápidamente le pidió a mis padres que lo dejaran mantenerme a mi y nuestro hijo, fue tan tierno, dejo de estudiar para que yo pudiera seguir, cuando nació Shura rápidamente le pedí que el también terminara sus estudios, cosa que hizo.- dijo Sisifo
Albafica bajo la mirada, Sisifo miro esto y sonrió
- en eso nos parecemos, pero menos mal ya encontraste a alguien que te aprecia y ama, ¿no es así?- dijo Sisifo
- si, es verdad.- dijo Albafica
- otra cosa, ¿a que vas al doctor?- preguntó Dégel
- es que debo ir a una consulta.- dijo Sisifo
- ¿estas enfermo?- pregunto Albafica
- no, resulta que tendré a mi tercer hijo y deseo que todo salga bien.- dijo Sisifo tocándose el vientre
Esto sorprendió a los dos pasajeros, Sisifo rió ante sus expresiones
- ¿es enserio?- pregunto Dégel
- si, es verdad, si es niño se llamara Aioria, si es niña Sasha.- dijo Sisifo
- enserio me sorprende que alguien tan tranquilo como tu sea tan... calenturiento.- dijo Albafica
- no me juzgues.- dijo Sisifo
Llegaron al hospital, después de minutos de espera, llego él doctor con los resultados de Albafica, Dégel y Albafica estaban nerviosos porque saldría, el doctor se acerco y se sentó en el escritorio de su consultorio
- bueno, señor Piscis, puedo ver que tiene un buen historial medico, no abusa ni de las drogas o el alcohol así que creo que no afectara en nada su estado, solo debe descansar un poco mas.- dijo el doctor
- ¿mi estado?- pregunto Albafica
- así es, lo que tiene no es una enfermedad.- dijo el doctor
- entonces... ¿que tiene mi amigo?- preguntó Dégel
- esta en cinta, es todo.- dijo el doctor sonriendo
Esto sorprendió a los dos, esa no era la respuesta que estaban esperando, Albafica sabia que ese era hijo de Manigoldo, no había estado con nadie mas, Albafica tocó su vientre sonriendo
- felicidades, señor Piscis, espero se alimente bien, le daré unos suministros de ácido folico, espero se los tome, le harán bien a su hijo.- dijo el doctor
- claro, no se preocupe, muchas gracias.- dijo Albafica
- no es nada.- dijo el doctor
- no puedo creerlo... tendré un hijo con Manigoldo...- pensó Albafica