3
Poco a poco, el grupo de nuevos estudiantes han comenzado a acostumbrarse al ajetreo de la universidad. Los estudios los han hipnotizado de manera en que deseaban dar lo mejor con tal de salir bien en sus materias, sin importar si son los mejores; habían aprendido que pasar es pasar.
Aunque por eso mismo, se daban el lujo de relajarse un poco, por ello SooBin había decidido ir con unas cervezas al cuarto de YeonJun, interrumpiendo la sesión de estudios de este.
—Ni te atrevas, Choi —amenazó el castaño desde su cama.
SooBin sonrió inocente— Es solo una bebida refrescante que te ayudará a concentrarte.
—Agregaré eso a la lista de mentiras que has dicho.
Pronto los dos amigos estuvieron sentados en la cama, SooBin no se rendiría fácil en cuanto a compartir algo con su amigo. YeonJun siguió leyendo su libro, pero su vista fue obstaculizada por el rostro de SooBin que se había recostado sobre este— ¿Qué lees?
—Hamlet.
—Oh ¿Y eso? No creí que leerán literatura en historia.
YeonJun suspiró derrotado, sabía que su amigo no se rendiría— Pasame la lata —SooBin sonrió triunfante, se sentó y rápido hizo lo indicado—. Hamlet es de las obras más representadas en el mundo, por lo que es necesario conocerla.
El pelinegro comprendiendo asintió— ¿Hay musicales? Me gustaría aprender alguna pieza que tenga que ver con esa obra.
La puerta fue abierta, interrumpiendo la conversación de los amigos. TaeHyun entró y saludó a ambos con un movimiento de cabeza— ¿Cuándo se mudará SooBin?
Esté sonrió divertido, tanto TaeHyun como él se han comenzado a llevar cada vez más— Cuándo YeonJun me deje dormir cada noche aquí.
—Deja rectificar mi pregunta ¿Cuándo se casan?
—¡Cuando me dé el anillo de la sultana Hürrem! —gritó YeonJun.
TaeHyun rió, mientras SooBin hizo su cabeza hacía atrás— Eso pasa cuando lo hago ver novelas junto a mí. —comenta antes de darle otro sorbo a la cerveza.
El rubio nota las bebidas y decide acercarse— ¿Tienen extra? Me hace falta.
YeonJun le extiende una después de abrirla— ¿Sucedió algo en clase?
—En serio que no tienen idea de como pueden ser egocéntricos los estudiantes de gastronomía, se creen Gordon Ramsey y solo están en segundo año; en serio tengo terribles sunbaes.
Los mejores amigos se vieron comprendiendo un poco a TaeHyun, también se habían topado con sunbaes no tan agradables— ¿No hay ni uno bueno?
TaeHyun pensó un poco— Bueno, hay uno de tercer año, muchas veces nos da consejos y como ya cocina también nos comparte su comida, ese hombre en serio es un ángel.
—Ya me dió hambre.
Y con esa charla se decidió ir por algo de comer a la cafetería, la mayoría de puestos estaban cerrados ya pero una tienda se mantenía abierta todo el tiempo y se operaba sola por lo que podían comprar aperitivos ahí, también se podía comprar afuera con tal no rebase la hora de cierre.
—JiSung dice que llegará con la comida en unos minutos —por mientras la espera, SooBin fue a la tienda y compró onigiris para calmar el hambre—, si tenían de atún con mayonesa —le extiende su onigiri a YeonJun, ya abierto y listo para comer.
El castaño lo recibe feliz y comienza a comer. Si bien ha pasado un tiempo ya, TaeHyun sigue un poco asombrado de los detalles que suceden entre YeonJun y SooBin, había confirmado que son solo amigos, pero no podía evitar ver eso y pensar en la buena pareja que harían.
—YeonJun —llamó— ¿Estás saliendo con alguien?
Los amigos lo miraron sorprendidos por la pregunta. YeonJun incluso dejó de masticar por un milisegundo, pero continuó— No, dudo tener tiempo para salir con alguien.
—¿Y tu SooBin?
Este dejó de agitar la botella de ketchup en su mano y negó— No, pero ya ando tardando.
TaeHyun no comprendió y YeonJun solo asintió de acuerdo— ¿A que se refiere?
—SooBin es un picaflor, dónde ves una flor bella y reluciente, ahí está él buscando picarla y no en el sentido sexual.
—Ahh, entonces por eso pasas con YeonJun todo el tiempo.
Otra vez el rubio se ganó las miradas de los amigos, una era confundida y la otra un poco arrugada— ¿Qué? —cuestionó YeonJun confundido.
—¿Qué? YeonJun es bello y reluciente, no es de extrañar que sean grandes amigos si a SooBin le gustan las personas así.
Mientras el castaño se sonrojaba por tener un halago tan directo, SooBin en cierta manera se sentía ofendido— Oye, no somos amigos solo por eso.
—¿Entonces si lo soy?
Llegando en el momento justo, JiSung llegó junto a BeomGyu, este lo ayudaba con las bolsas de comida— Espero que sigan teniendo hambre.
—Chicos —habló TaeHyun— ¿Verdad que YeonJun es bello y reluciente como un sol?
Los recién llegados rieron un poco por la repentina pregunta, supusieron que era algo de broma que estaban haciendo pero al ver que los tres en la mesa esperaban la respuesta dejaron de reír.
—Qué tan de repente esa pregunta.
—Solo respondan.
BeomGyu y JiSung miraron a su amigo, que los veía entre esperando la respuesta, tímido por tener tanta atención, llegando al punto de mejor apartar la vista.
—Si lo es —comienza BeomGyu—, le he dicho mil veces que podría ser modelo pero no me cree, ya sería rico para mantenernos a este punto.
—Es cierto —sigue JiSung—, la semana pasada que fuimos al mall, dos tipos le pidieron su número y él no se dió cuenta que eran para ligarlo, es bello pero ciego.
—Les dije.
—Eso ya lo sabíamos —interrumpe SooBin, comenzando a abrir las bolsas—, hay que comer.
—SooBinie.
Después de comer y pasar un rato todos, YeonJun y SooBin volvieron a dormir juntos en la cama del primero. SooBin hizo un sonido, ya medio adormilado, pero se volvió a despertar cuando YeonJun se dió media vuelta quedando ambos cara a cara.
—¿Estás molesto?
—¿Por qué lo dices?
—Parecías un poco incómodo con lo que dijo TaeHyun sobre mí.
Después de esa charla todo fluyó normal en la comida, excepto para YeonJun que conocía muy bien a su amigo. Notó el cambio de humor cuando esa conversación inició y las ligeras señales durante el tiempo que estuvieron en la cafetería.
—No me molesta lo que dijo de ti ya que es verdad —inició—, pero me molestó un poco como lo dijo. No estoy a tu lado solo por ser bello y resplandeciente, lo estoy porque eres el mejor amigo que alguna vez pude desear ¿Lo sabes, no?
—¿Así que si soy bello? —Un golpe fue dejado en la frente de YeonJun en respuesta, pero este solo rió— Lo sé Binnie, en ningún momento lo tomé de esa manera.
Para cualquiera que no conociera a SooBin tanto como él, una preocupación así por parte de este le sorprendería, pero en verdad era SooBin. Se preocupa por lo más mínimo por sus seres queridos, en especial si se trata de YeonJun.
Este podía ver ese pequeño indicio de tristeza o preocupación por lo que dijo TaeHyun, para YeonJun no fue nada o ni siquiera lo pensó así, pero para su amigo fue un pequeño susto que lo llevó al pensamiento que tanto odiaba.
Perder a YeonJun.
La plática terminó en un gran abrazo, dónde YeonJun se perdió en el pecho de su amigo mientras este buscaba protegerlo con sus brazos.
—¿Y si me doy de baja?
SooBin miró a TaeHyun quien se había sentado en la misma mesa, estaban en la cafetería.
—¿Sucedió algo?
—Los sunbaes, usualmente no los vería pero su cocina se arruinó y usan la de primer año, aunque ni cocinamos aún cuando pasamos por ahí nos presumen que sí pueden y que solo con ellos esa cocina verá buena comida ¡Es que no los soporto!
El contrario hizo una mueca de molestia, se imaginó la situación y sabía que estaría incluso más molesto que el rubio— ¿Estarán mucho tiempo ahí?
—Según hasta el martes, es que en serio solo por sunbaes como los de tercer año le tengo fé a los de mi carrera —el pelinegro le extendió su bebida la cuál tomó sin dudar—. Por cierto ¿Y YeonJun? Creí que comerías todos.
—Está en la biblioteca estudiando, tiene examen y quiere prepararse bien.
En ese momento YeonJun renegaba porque habían tantas obras de Shakespeare y porque necesitaba tener un examen sobre estas. Solo se sentía tranquilo al pensar que solo le faltaba estudiar sobre una más y podría darse por hecho sobre este estudio.
Tomó el libró y siguió con su lectura, ignorando los sonidos que su estómago hacía debido al hambre. Se ocultó detrás de las hojas rogando que el silencio de la biblioteca no delatara su falta de comida pues ni tuvo tiempo de desayunar esa mañana.
Había llegado a la mitad del libro cuando su concentración se vió interrumpida por un delicioso aroma. Hambriento, olfateó el aire y bajó el libro para encontrarse con un joven en la silla frente a él, este tenía en su regazo un recipiente de comida el cuál estaba abriendo.
El desconocido levantó la vista y saludó a YeonJun— Hola, disculpa, sé que esto es raro pero ¿Podrías darme tu opinión sobre esta sopa? No creo que me haya quedado muy bien.
Debido a la ropa del joven, YeonJun rápido pudo deducir que era un estudiante de gastronomía, tenía un uniforme igual al de TaeHyun pero con una insignia algo diferente.
—No soy un experto en comida —su idea era negarse, pero el olor y su hambre pudieron más—, pero podría hacerlo.
Aunque solo estuviera sirviendo la sopa en una tapa de un termo, el desconocido lo hacía con una gracia que hacía notar la experiencia que tenía. Con cuidado colocó la tapa llena de sopa y una cuchara— Espera ¿Eres alérgico a los mariscos? —preguntó—, es que es sopa de mariscos.
YeonJun negó repetidas veces— ¡Es mi favorita! —Ahora sabiendo eso el castaño tomó con más ganas la sopa en sus manos. El joven lo veía expectante mientras probaba el primer sorbo, un alivio recorrió su cuerpo cuando la expresión del estudiante fue de gozo— ¡Está deliciosa! ¿En serio la hiciste tú?
—Sí —respondió el desconocido antes de mirar su reloj y darse cuenta de la hora—. Oh, se me hace tarde.
Por estar comiendo, YeonJun no se dió cuenta enseguida pero el desconocido había dejado el termo en la mesa. Esperó por un rato por si regresaba a recogerlo, la sopa se había acabado y su estómago ya no gruñía, pero el joven nunca volvió y le tocó guardarlo en su mochila.
Cuándo salió de la biblioteca miró a todos lados buscando al joven chef, pero solo se encontró con SooBin que venía a buscarlo— Iba por ti, hay que ir a comer.
—¿No comiste?
—Poco. —La verdad es que dejó espacio para poder llenarlo junto a su amigo.
—Oh, yo comí una deliciosa sopa de mariscos —dijo con una sonrisa alegre.
SooBin lo miró confundido— ¿Dónde conseguiste eso? Hoy no está en el menú.
—Un chico de gastronomía me dio la sopa que hizo, pero podemos ir a que comas un poco más.
Un sentimiento intranquilo cayó en SooBin, pero decidió ignorarlo. Tomó la mejilla de YeonJun y jaló de esta— ¿Qué te ha dicho tía de aceptar comida de extraños?
—Auch, es que olía delicioso.
Se viene maratón
No le digan a Nissbu uwu
<3
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