Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 24

Volví conduciendo hasta mi casa con el rostro mojado e hipando de pensar cómo mi madre me ha podido traicionar de esta manera. Mi madre, Dios Santo, pero qué madre lástima de esa manera a su hija.

Aparqué el coche y empecé a caminar hasta el apartamento de Joel. Dentro se encontraba él en la cama con Ciara, y para no variar retozando. Sacudí mi cabeza pensando en lo idiota que es Joel. ¿Cómo puede dejarse atrapar por los encantos de Ciara si ella solo lo está utilizando? Conclusión, que Elian no le da caña, y viene a buscar sexo con Joel, o es que es muy zorra. Una de dos.

Mejor paso del tema y me voy para la cocina y ha prepararme un bocadillo de Salami mientras espero que esos acabasen para hablar con Joel.

Le doy el primer bocado al bocadillo, empezándose hacerse una bola en mi garganta. Era tan doloso todo lo que me estaba ocurriendo que tan sólo de pensar en la traición de mi madre, mis defensas se derribaban tan rápido que ni Sansón, el hombre más fuerte del mundo podría soportarlo y no dejarse vencer por la tristeza.

De pronto escuché la puerta abrirse, me sequé rápido mi cara viendo como Ciara me miraba con cara de lástima.

-Samia, ¿cómo estás? Por favor hablame, no quiero verte así.

Me quedé observándola durante unos minutos echándolo al pinto pinto si le dirigía la palabra o no. -Suspiré antes de hablar.-Ciara, mi madre me ha lastimado. Ha cobrado un cheque que Alena le dió para separarme de Marcos. Y ahora el cree que soy lo peor.

-Samia, Marcos cree lo que dicen los papeles y no ha su abuela. Yo misma escuché como discutía con ella, pero Alena le enseñó unos papeles y ahí fue donde Marcos tuvo que callarse.

-¡Será Japuta la vieja! Pero que quiere de mí. Dios, si la tuviera delante le retorcía el pescuezo como las gallinas.

-Che, para el carro Rambo. Primero debes aclarar las cosas con Marcos y después le retuerces el pescuezo a la vieja. -Desde luego Joel no se toma nada enserio.

-Samia, Joel lleva razón debes hablar con Marcos.

-Si, no se como, no me escucha y si lo hace ni me cree.

-Déjame eso a mí, yo me ocupo. Mañana te llamo y te cuento.

Bueno, dentro de lo malo hay algo bueno. Y pienso que ser unos egoístas rencorosos no nos llevan a ningún lado. En fin, que me terminé el bocadillo de Salami hablando con Ciara. Es increíble pero acabemos haciendo las paces. Me despedí de mi amiga algo más relajada después de haber hablado con ella. Después decidí ponerme a ver alguna película.
Pero me parece a mi que mejor me quedo observando el cuerpo fibroso, músculoso etc, etc...de Joel.

--Desde luego, para fiarse uno de las mujeres.--Dijo en tono burlón Joel ofreciéndome una cerveza sentándose cerca de mí.

--Vale, ya sé por dónde vas, y dirás qué soy tonta. Lo admito, pero que saco con guardar rencor porque ella se casó con un tío que me lo pidió a mí primero y yo estoy enamorisquiá de otro.--Suspiro--Joel, todo lo que me ha echo mi madre me ha dejado sin defensas.

--Anda ven que te doy un abrazo de oso amoroso.--Pues tampoco le iba decir que no. Me acurruqué poniendo mi cabeza en su pecho. Estaba tan bien que incluso me pareció notar que a Joel se le aceleró un poco la respiración. No sé, serán ideas mías. Sentí de nuevo su mano acariciando y jugando con mi cabello, susurrándome como me encontraba.

--Mal, Joel. --Fue lo único que pude contestar antes de empezar a ver borroso y dejar libres mis lágrimas.

--Samia cielo, no quiero verte así. Me destroza el corazón verte así tan triste. Tú eres fuerte, valiente y muy especial.--La voz de Joel se volvió un murmullo clavando sus ojos marrones en los míos. Me quedé mirándolo fijamente viendo como cambiaban de color, su respiración se aceleró bajando su mirada a mis labios. Empecé a sentir un cosquilleo por todo mi cuerpo, me humedecí mis labios tocándole su cara. Deseaba besarlo, el se aproximó a mí muy despacio, sus labios rozaron los míos, sus manos rodearon mi cintura atrayendome más hacia él. Nuestras respiraciones estaban acompasadas, el deseo era palpable y nuestros cuerpos exigían unirse.

¡Mierda! La vecina llamó a puerta interrumpiendo el momento tan especial que iba a tener con Joel.

Joel se levantó algo apurado, se recompuso el paquete aclarándose la garganta y se fue auxiliar a Enriqueta. Al parecer se le había olvidado las llaves dentro y Joel debía saltar de su terraza a la de ella para abrirle la puerta.

Después de socorrer a la mujer, los dos volvimos a entrar en casa, pero esta vez como unos completos adolescentes que le habían cortado el rollo y ahora no sabían cómo actuar.

--¿Joel quieres un café?--Pregunté para romper el silencio que se había formado.

--Samia yo...quiero decirte que lo que ha...esto...

--Joel, tranquilo, lo tenía todo bajo control. Además sabes que no me gusta recoger las babas de Ciara.--Desde luego menuda estupidez había dicho. Al final nos echemos a reír como si lo que hubiera pasado hace un momento no tuviera ni la mínima importancia. Cuando en realidad para mí si lo tuvo.

A la mañana siguiente me levanté temprano para ir a trabajar. Casi apenas había dormido pensado en todo lo que me está sucediendo. Primero mi madre, segundo mis sentimientos hacia Marcos y tercero lo que me ocurre cuando estoy cerca de Joel me hace sentir. Qué me explique alguien quien puede dormir con tanto dilema.

Me fui hacia mi oficina y comencé a trabajar, por lo menos el trabajo me despejaría en un sentido. Alrededor del mediodía, me llamó Ciara avisándome que había concertado una cita con Marcos avisándome donde quedaríamos en vernos después del trabajo.

Agradecí el detalle a Ciara, a la misma vez que percibí un dolor en mi pecho. Pensar que iba a ver a Joel y hacer el amor con él, aquella idea me escocía lo suficiente como para llegar a pensar que me estaba enamorando de Joel.
Sacudí mi cabeza quitándome esa absurda idea de mi cabeza y pensando en cómo sería el encuentro entre Marcos y yo.

Pues bueno, llevo una media hora esperando a que Marcos haga su aparición, pero me parece a mí que me voy a quedar como la novia, vestida y descompuesta.

--Hola Samia.

Esa voz tan familiar, hizo que mi vello se eriza contrayéndose mi estómago. Me giré despacio, muy lentamente me levanté mirándola a los ojos.

--Alena. --Dije seria y atónita de encontrarme con la puñetera vieja.

--Me da mucho gusto verte Samia.

--Pues a mi no me da gusto de verla fíjate por donde.

--Samia, vengo a hablar contigo.

--Señora, lo siento pero no estoy por la labor de escucharla. Ala hasta la feria.

--Quieta y escúchame. Tú madre te ha mentido. El dinero que le di fue para pagar las deudas que tú padre le dejó. No quería que te enterases y monté ese lío, mientras yo resolvía las deudas que os dejó tú padre mandé a un crucero a tú madre y su pareja. Escúchame Samia, hay algo que debes saber.

--Mire Alena, usted está como unas maracas y yo no le creo nada. ¿Qué tiene que ver mi madre con usted?

--Celia es mi hija.

--¿¿Qué?? -- O esta mujer ve muchas telenovelas o a mi me están tomando el pelo. -- A ver Alena, quiere decirme que yo soy su nieta. Venga ya, eso no me lo creo ni harta de vino.

--Samia, escúchame, es la verdad. Celia es mi hija.

--Joder...esto si me lo cuentan digo que es una cámara oculta o algo así.

--Samia, escúchame te lo suplico. Celia es mi hija, quedé embarazada antes de casarme y mi padre me obligó a que me deshiciera de mi bebé. Al oponerme, mi padre me quitó a mi bebé nada más nacer. Después me casó obligada con mi marido. Busqué durante años a mi hija, hasta que antes de morir mi madre me confesó donde estaba mi hija. Cuando encontré a mi hija, tú madre estaba casada y tenía problemas económicos. Tú eras una niña cuando te vi por primera vez. Entonces tú madre nunca aceptó mi cariño, me echó de su vida hasta que tú padre murió y me enteré que tú eras mi nieta. Desde ese día intenté ganarme el cariño de tu madre ayudándola con todos los gastos y problemas.

-- Ya, Entonces ¿ porqué me quitó el local? ¿Y porqué narices me quería casar con Elian?

--El local yo no te lo quité, de echo se van a construir nuevas viviendas para la gente que se haya quedado sin sus casas tengan unas viviendas nuevas. Y yo quería casarte con Elian para que manejases la empresa. Quería darte tú lugar en mi familia, el lugar que os corresponde.

--¿Y que más da que me case con Elian que con Marcos?

--Porque Elian necesita más una mujer como tú a su lado. Además mi hijo Jacobo ya cobró su parte de la herencia, mientras que Elian se la manejo yo porque es un cabeza hueca que no piensa más que en divertirse. Me entiendes ahora Samia de mi exigencia en que te casarás con Elian.

--Pues mire Alena, me ha conmovido su historia, pero si quiere que le diga la verdad, déjeme tranquila con mi vida como la llevo. Se lo agradecería mucho.

--Samia, no me odies por favor.

--Yo no la odio, todos somos en ocasiones víctimas y otras veces consecuentes de nuestros actos.

--Samia desde que supe que eras mi nieta, he echo lo posible por ayudarte, si no cómo crees que estás trabajando en un empresa tan importante de arquitectura. Porque Rosell y yo nos conocemos, y si tienes tú propio piso es porque le pedí a Joel el hijo de uno de mis guardaespaldas que cuidara de ti. Samia siento que te enteres así, pero eres mi nieta y ya no quiero vivir con este dolor que me está matando.--Su voz sonaba sincera, sus ojos eran más cristalinos y llenos de suplica. Cerré por unos segundos mis ojos, intentando asimilar lo que Alena me había confesado. Lo único que pude decirle antes de marcharme fue que me diera tiempo. Su sonrisa y ese pequeño brillo en sus claros ojos, consiguió que me diera lástima y me acercase hasta ella para darle un beso en su mejilla.

--Hasta luego Alena--Pronuncié en un hilo de voz dándole la espalda comenzando a caminar hasta salir fuera a la calle.

Miré mis manos como temblaban junto a mis piernas, me encontraba sentada en banco impactada con todo lo que me estaba sucediendo. Siempre me habían dicho que fuera fuerte, pero como se podía ser fuerte viviendo situaciones que resultan ser otras. Mi vida a sido una mentira. Primero mi padre, jugador de póker, después mi madre que prefiere mentirme a sinceridarse conmigo, y pa' postre me entero que soy nieta de Alena y lo más detestable es que Joel me hubiera mentido. Ahora resulta ser que es mi guardaespaldas, que no tiene otra cosa mejor que hacer que acostarse con mi mejor amiga. O mejor dicho a su ex mujer. La cual sólo lo quiere para satisfacerse en la cama. Todo me parece tan irreal, tan detestable, de que las personas que me rodeo me mientan como bellacos.

¡Ah no!Hasta aquí hemos llegado, ya me cansado de ser buena.

Con la ira que tenía en ese momento me limpié mis lágrimas, tampoco voy a sacar nada dándome pena a mi misma y todo por ser una ingenua que le están mintiendo tocándome como una boba. Pues eso ya se acabó, se quieren que sea fuerte lo seré, pero ahora van a saber quién es Samia López.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro