24.

Julio.

Casi dos meses de que la pareja se encontraba disfrutando de su luna de miel, Jungkook se había encargado de recorrer junto a Taehyung casi todo Paris, el castaño se encontraba soñado con aquello y poco a poco sus recuerdos comenzaban a unirse junto a los nuevos, Taehyung había comprado casi todo parís de recuerdos, ahora se encontraba sentado en la habitación del hotel mientras esperaba a que Jungkook llegara con la comida del día, su teléfono sonó en alguna parte de la recamara, se sonrojo ante la idea de que la noche anterior lo aventó sin saber para poder hacer el amor con Jungkook.

¿Su vida sexual? De maravilla, casi dos meses consecutivos haciendo el amor en la noche antes de dormir es la mejor cosa que puede pasarle, según Taehyung.

Contesto su teléfono al notar que se trataba de Seokjin.

—Hola Hyung. —Dijo contento y pudo escuchar el gritito de felicidad de Seokjin.

—¡Taehyung me caso! —Grito sobresaltando al castaño.

—¿En verdad? Espera necesito una videollamada. —Dijo mientras cambiaba la llamada de voz a una videollamada.

Taehyung pudo ver a Seokjin en la tienda de Hoseok mientras le mostraba su segundo anillo de compromiso.

—Eso no es todo. —Dijo emocionado y apareció Hoseok mientras le enseñaba su anillo.

—¡He said yes! —Grito emocionado y de la nada comenzaron a llorar los tres.

—Estoy tan contento por los dos. —Dijo mientras limpiaba sus lágrimas.

—Taehyung, quiero que vengas a mi boda, quiero que estes aquí, mi familia vendrá, mi madre lleva llorando dos días desde que le dije y me dijo que no moriré solo, tienes que venir, quiero que seas mi padrino de bodas. —Dijo Seokjin y Taehyung asintió.

—Claro que sí, le daré la noticia a Jungkook en cuanto llegue con la comida, por favor apártenme un traje y mi lugar. —Dijo emocionado y ambos chicos por el teléfono asintieron.

—La boda es el cuatro días Taehyung, tienes tres días para regresar y si no llegas te odiare por siempre. Tienes que estar en mi despedida de soltero —Dijo Seokjin y Taehyung asintió mientras soltaba una ligera risa.

—Iremos de inmediato, los quiero, ya nos sentaremos a hablar. —Dijo el castaño y mando besos para después colgar.

Cuando Jungkook entro a la habitación encontró a su esposo sentado en la esquina de la cama mientras miraba a la nada con una sonrisa, como si pensara en aquellas posibilidades y acertara en cada una de ellas.

—¿Amor? ¿Qué pasa? —Pregunto ligeramente preocupado y Taehyung lo miro con sus ojitos brillando.

—Seokjin Hyung y Hoseok se van a casar, Seokjin quiere que estemos en su boda, se casan en cuatro días, a decir verdad, quiero estar ahí, por que he recordado quien es Seokjin y que puede ser una persona con demasiado ego, puede ser el mejor amigo que he tenido y un esposo falso cuando lo requiere, Jungkook he recordado quien es mi mejor amigo. —Dijo y soltó una risa de felicidad mientras por su mente ligeros recuerdos le azotaban su mente uno tras otro.

Jungkook dejo las bolsas de comida en una mesita y corrió a Taehyung para abrazarlo, lo abrazo con una gran sonrisa, por que al fin su chico estaba recordando a todos aquellos que han esperado pacientemente el regreso de los recuerdos del castaño se separó de su chico y lo beso.

Taehyung sabia que el alma gemela no es alguien que entra en tu vida en paz, es alguien que llega a ponerle dudas a las cosas, que cambia tu realidad, alguien que marca un antes y un después en tu vida.

No es el ser humano que todo el mundo ha idealizado, si no una persona común y corriente, que se las arregla para revolucionar tu mundo en solo un segundo.

Por qué había recuerdos, recuerdos en las cenizas de un corazón que amo, ama y amara a Jeon Jungkook toda la vida.