Al cruzar aquella puerta, todo lo que había parecía ser solo una habitación llena de computadoras y monitores que  controlaban la energía, ventilación, el tiempo y una proyección simulada del soleado cielo de Goldy Pond.

-¡Señor Lucas, por aquí!

Emma había encontrado una puerta que conducía a una especie de cueva subterránea, con un enorme estanque de agua dorada. Para Lucas no parecía ser tan profundo, pero le sorprendió como una rareza natural pudo formarse en un espacio tan cerrado.

Emma sacó su pluma para confirmar que ambos estaban en el lugar correcto. Y el mensaje en el holograma lo confirmó "Bienvenidos a Goldy Pond"

¿Realmente estuvo ahí todo el tiempo? Lucas se sintió desconcertado.

-Minerva quería que vinieramos a este lago, ¿No es así? No al parque de cacería.

"Si esto era lo que él quería quiere decir que ¿No fue para nada una trampa?"

Emma tenía razón. Podía ser que el lugar al que estaban destinados a llegar no era el parque de cacería. Si es así. ¿Qué demonios le sucedió a este lugar?

Sobre el agua había también una cabina flotando, a simple vista parecía solo una ilusión óptica. La parte mas extraña fue que al tocar el agua para comprobar su profundidad esta evitaba todo contacto con las manos, retrocedía, rebotaba y desaparecía. Lucas y Emma pudieron cruzar la charca sin mojarse la ropa hasta llegar a la cabina.

La puerta estaba abierta y lo que había tras ella era una habitación con lo que parecía ser un extraño elevador. Estaban tan sorprendidos que creyeron en primera instancia que aquel elevador podía cruzar los dos mundos y llevarlos a todos al mundo humano.

La idea parecía absurda y graciosa. ¿Un viejo elevador? ¿Sobre todas las cosas?

No era tan absurdo como sonaba, de hecho era tangible que aquella fuera escencialmente la medida para cruzar la frontera y poder ir al mundo humano.

Junto al elevador había un pequeño tablero de control cuya llave tenía escrito "Lápiz" en código morse, para indicar que solo podía abrirse con la pluma de Emma. Ambos estuvieron de acuerdo en que no perdían nada con intentarlo.

Emma introdujo su pluma, y ambos escucharon el ruido de los engranajes correr. Miraron hacia las puertas del elevador, expectantes de que realmente fueran a abrirse.

Emma estaba rogando por que aquello funcionara.

Pero sus esperanzas no pudieron llegar muy lejos cuando el sistema se trabó y en la pantalla de control apareció la palabra "Suspendido". Emma sintió ganas de vomitar.

Curiosamente fue ahí cuando se percataron de que en la misma habitación, un teléfono había comenzado a sonar.

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Capítulo XXV

⸙ ⸙ ⸙

Dos horas después de caer la noche y haber dejado la torre, todos fueron reunidos en aquella sala, luego de que Lucas y Emma convocaran una reunión.

La mirada en sus ojos era indescifrable, al igual que en la de Oliver y Emma quienes estaban a su lado. El veterano finalmente puso su mano sobre la mesa y habló.

—La verdad es... que les he mentido. No existe una villa humana más allá de estos muros.

El ambiente se sintió tenso entre todos los presentes tras aquella declaración.

—Les he mentido por un largo tiempo, por que quería darles esperanzas de que un día íbamos a escapar de este lugar.

Las miradas de desconcierto eran evidentes en cada uno.

—Retrasé por mucho tiempo esta fuga, por que no estaba seguro si valía la pena destruir el lugar donde encontraríamos las respuestas de como volver al mundo humano.—Confesó.—Sin embargo llegamos demasiado tarde.

Emma tomó la pluma y la giró, mostrando un gran holograma con un mapa de la villa y muchas pequeñas ventanas de información en él. Pestañas que explicaban desde su funcionamiento, hasta su ubicación y el recorrido del mapa que había que seguir para llegar a A08-63.

—Originalmente este lugar fue hecho para ser un refugio de los rebeldes que consiguieran escapar de las plantaciones. Capacitado y preparado para albergar una gran cantidad de personas.

Explicó Emma.

—No solo eso. Sino que justamente en esta habitación...

Presionó uno de los ladrillos de la pared. Activando un mecanismo especial que dejaba abierto un pasadizo a una escalera en espiral.

—¿Un pasadizo?

Quiso saber Gillian.

—¿A dónde lleva?

Replicó Nigel.

—Lleva a una cede de túneles subterráneos que conducen a una sala de control. Donde monitorean este lugar, por eso siempre es primavera. Porque Goldy Pond es un refugio bajo tierra y está ambientado de manera que pueda simular el exterior.

Explicó Lucas.

—¿Una sala de control?, ¿¡Es así como dirigen este lugar!? Eso es enfermo.

Replicó Pepe.

—No siempre fue una trampa. Inicialmente era un refugio de fugitivos. Incluso Minerva diseñó todo este lugar y se aseguró de hubiera la forma de llegar a un ascensor que conducía directamente al mundo humano.

—¿¡Que!?

—Había.

Se corrigió.

—Hasta que uno de sus aliados lo traicionó.

⸙ ⸙ ⸙

Todos en la sala estaban incrédulos, era demasiada información para retener.

—Llevé a los túneles subterráneos, donde hace tiempo descubrí una puerta sellada, la cual solo se podía abrir con una pluma. La habitación en si albergaba una sala de controles como ya lo expliqué. Pero más allá había un tunel que conducía a un poso de agua brillante. Y flotando sobre él, en una pequeña cabina.

Explicó Lucas.

—Cuando entramos en ese lugar, lo primero que vimos fue un ascensor subterráneo y una especie de mecanismo para activarlo junto a un teléfono.

—Pero por alguna razón cuando intentamos activar el mecanismo este comenzó a fallar. Y justo después, sonó el teléfono.—Prodedió Emma. —Era un mensaje pre-grabado de Minerva en persona. Disculpándose con nosotros por que el ascensor no funcionara, ya que había sido traicionado justo antes de que su plan estuviese completo.

—Osea que alguien se dio cuenta de lo que estaba pasando.

Asumió Zack. Emma asintió.

—Sin embargo nos dio esto.

Mostró la pequeña chapa al reverso de la pluma.

—Eso significa que...

Nigel jadeó y Emma volvió a sonreír.

—Esta pequeña tapa contiene toda la información necesaria para que volvamos al mundo humano.

Habló con seguridad.

—Así que por lo pronto y con esta nueva información, aún hay esperanza para nosotros.

Aquellas palabras me dejaron sin aliento. Lucas se incorporó, mirándonos a todos y cada uno de nosotros en silencio. Estaban esperando que lo dijera. Finalmente era el momento.

—Destruyamos este lugar.

Todos abrieron los ojos en grande, incluida yo. Se sentía irreal.

—Y vayámonos todos...

—¡Al mundo humano!

⸙ ⸙ ⸙

Ninguno podían sentirse menos emocionado. Finalmente tanta resistencia y meticulosa planificación daría su fruto.

—¿Qué sucede?

Violet puso una de sus manos sobre los hombros de Emma, quien se mostraba apenada.

—Bueno, es solo que estaba aterrada de que cuando supieran la verdad sobre las villas humanas reaccionaran... ¿Cómo decirlo?

—¿Los íbamos a mandar a la mierda?

Inquirió.

—Bueno, sé que muy en lo profundo de mi corazón yo habría reaccionado de ese modo.

Sonrió, avergonzada.

—No lo creo, eso sería irracional.

Emma se sorprendió ante su respuesta.

—No hay villa humana, pero en su lugar sabemos que existe un mundo entero lleno de humanos. ¿Esa no es acaso una gran noticia?

Cuestionó, con una sonrisa confiada.

—Aunque a decir verdad yo estaba un poco molesto de saber que todo este tiempo nos mintieron.

Pepe bufó, a su lado Nigel yPaula estuvieron de acuerdo.

—Pero la cosa es que, todos nosotros confiamos en Lucas.

Aunque no pudiera verlo, estaba feliz de saber que Paula estaba sonriendo. Oliver por su parte se mantuvo junto a Lucas, aunque su atención de vez en cuando se desviaba hacia el chico sentado sobre una de las cajas. Su mirada al hojear las páginas de la libreta, seguía siendo indescifrable él.

En algún punto llegó a notar que Lucas eventualmente lo miraba también, pero Tahiel seguía inmerso en sus propios asuntos.

—Muy bien, atención todos. El tiempo ha llegado, pondremos nuestro plan en marcha.

Oliver puso ambas manos en la mesa atrayendo la atención de todos.

—En la siguiente cacería pondremos un fin a todo esto.

—La última vez se llevaron a 4 más, por lo que si siguen el mismo programa de los últimos meses. Deberían volver en dos o tres días, creo que será tiempo suficiente. Tengamos todo listo antes de eso.

⸙ ⸙ ⸙

Cuando todos se reunieron en aquella habitación de nuevo, el niño solo entró con el incentivo de recuperar su cuaderno. Y de hecho se quedó un par de horas después hasta que Emma la abandonó para ser llevada personalmente por Gillian y Paula a tomar una ducha y cambiarse de ropa.

No tenía intención de responder preguntas incómodas así que cruzó la puerta para hacer lo mismo, hasta que una mano sobre su hombro lo detuvo y lo hizo retroceder sobre sus pasos para girar y ver al responsable

-Acompáñame.

No tuvo más remedio que seguir a Pepe a un lugar donde pudo tomar una ducha y después recibir ropa nueva y cómoda, aunque no le encantaba la idea de la ropa nueva se negó a quitarse los visores. Ya eran parte de él desde hace mucho, así que Pepe no pudo hacer mucho para convencerlo.

Al tratarse de sus heridas no dejó que tanto Sandy o Zack se acercaran, simplemente se atendió solo. Y a la hora de cenar, se mantuvo ajeno a la conversación todo el tiempo evadiendo intentos de los demás por acercarse a él.

Se sentía raro entre tantas personas luego de estar acostumbrado al exterior.

⸙ ⸙ ⸙

Comida caliente, camas cómodas, duchas y ropa limpia. Fueron las primeras cosas que recibió esa noche...

Tahiel se había acostumbrado a cazar, sobrevivir y avanzar solo o acompañado. Estar en ese lugar significaba estar lejos de todo lo que conocía desde pequeño.

Curiosamente, lo que podría considerar familiar era aquel diario desgastado que ahora ya no estaba en sus manos desde que vio aparecer a su primer autor.

Tahiel se contuvo a todo intento de acercarse o entablar conversación por parte de él. Incluso se mantuvo ajeno a los demás chicos.

Pero a pesar de que en parte estaba agradecido, era difícil adaptarse cuando su naturaleza era esquiva desde muy pequeño.

Él no tenía la sangre tan ligera como Emma que consiguió familiarizarse con todos en solo unas horas. De hecho tal vez si hubiese crecido rodeado de otras personas habría notado que su comportamiento era un poco inmaduro, pero el niño sencillamente no estaba acostumbrado a estar entre tantos chicos mayores que él.

Por lo que al menos su primera noche, fue extraña.

Aunque Lucas por su parte tampoco pasó una muy buena noche...

Tras quedarse solo en su despacho miró durante un largo tiempo la libreta desgastada, de páginas abultadas y algo sucias. Sentía una gran inquietud por tomarla en sus manos y leer su contenido.

A pesar de que él sabía que la libreta ya no le pertenecía, y desconfiaba que el mismo dueño actual le permitiera hurgar en sus páginas.

Lucas estaba experimentando por primera vez el sentimiento de saber que tenía un hijo de su propia sangre del que no supo de su existencia en años. Tenía tantas dudas en su mente, que al mismo tiempo no se atrevía a presionarlo.

Tahiel le guardaba resentimiento, o eso le parecía a simple vista desde su primer encuentro. Pero para Lucas, era inevitable no verlo y sentir que en su pecho se formaba una sensación cálida.

Quería saber todo sobre él, quería conocer a su hijo y poder abrazarlo sin sentir rechazo. Pero lo detenía esa barrera de abandono, que los volvía a ambos simples extraños.

Era el sentimiento agridulce, de una verdad incómoda.

Pero lo que más demandaba saber Lucas, era sobre su madre, quien teniéndolo en su vientre lo sacó de Goldy Pond para llevarlo al exterior y cuidar de él... sabía por Emma que si. Pero quería saberlo por boca del niño.

Esa era por mucho la pregunta más difícil de responder y la más importante que Lucas quería hacer a su hijo.

⸙ ⸙ ⸙

Al no poder dormir Tahiel había abandonado su cama para vagar por los pasillos hasta encontrar un lugar lo suficientemente silencioso y oscuro donde no iban a buscarlo. Necesitaba pensar y poner su corazón en orden.

El niño se sentó sobre las escaleras y recostó su espalda sobre la pared, llevando ambas manos a su cabello y permitiéndose estar solo con sus pensamientos durante casi dos horas, hasta quedarse dormido.

No despertó hasta que la puerta a sus espaldas se abrió y pudo ver una gran silueta cubrir su sombra. Despertó por instinto buscando un arco y flechas que no estaban en sus manos, cuando lo vio de pie, mirando con curiosidad su reacción.

—Tranquilo, no voy a lastimarte.

Todo lo que pudo pensar fue que no estaba listo para tener esa conversación aún.

-Hola, Tahiel... Tienes a todos buscándote allá afuera, están preocupados por ti.

El niño no respondió

El hombre encambio cerró la puerta a sus espaldas y se acercó, para sentarse junto al menor, quien evadió su mirada dirigiendo su rostro hacia otra dirección, sus músculos aún estaban tensos.

-Seguramente no es fácil verme ahora mismo. Lamento lo que ocurrió.

El niño nuevamente no respondió. Lucas dejó salir un suspiro y dejó caer su mirada sobre el bastón descansando sobre la escalera.

-Saber que tenías mi cuaderno fue una extraña noticia; tuve que verlo con mis propios ojos para creerlo. Pero cuando te ví, me quedé sin palabras.

Confesó.

-No tenía idea de que existías. Realmente lo lamento... debió ser muy difícil para ambos.

El niño cruzó los brazos sobre sus rodillas y ahí apoyó su mentón sin mirar hacia el lugar donde estaba el adulto.

-Tú... ¿Piensas en ella desde que se fue?

Lucas se conmovió de escuchar la timidez de su pregunta. Miró hacia otra dirección y dejó escapar un suspiro silencioso mientras su mente traía de vuelta el recuerdo de aquellas cicatrices morenas.

-Cada día... No hay forma en que la olvidara.

⸙ ⸙ ⸙

Al amanecer Oliver había tenido la sospecha de que el niño realmente no había abandonado el molino, así que esperó el momento para ir a buscar a Lucas y hacérselo saber, sin embargo, Lucas ya lo había previsto mucho antes que él. Así que cuando cruzó el pasillo y vió la puerta de la armería abierta, adivinó dónde estaba.

Se acercó para tomar el pomo y comprobó que la puerta de los túneles estaba semi cerrada, pero la voz familiar de su mentor se podía escuchar desde afuera.

-¿La querías?

-Aún la amo.

-¿Entonces por qué le mentiste?

Oliver supo que no debía interrumpirlos, justo iba a cerrar la puerta, cuando un mal impulso de curiosidad lo detuvo tras escuchar parte de la conversación

-Tú sabías que no existe una villa humana allá afuera, ¿Por qué no se lo dijiste cuando se fué?

El adolescente se detuvo.

⸙ ⸙ ⸙

-Cuando... tu mamá me encontró había estado escondiéndose durante muchos años. Estaba asustada, y no creía posible escapar de este lugar.

Lucas se sobó la nuca, aún sin obtener respuesta alguna del pelirrojo sentado a su lado, evitando mirarlo.

-Estaba convencida de que tarde o temprano nos encontrarían aquí. No tenía esperanzas, ni fuerzas para cambiarlo, había días en los que solo se quedaba junto a mi hasta que todo acabara y ellos volvieran a desaparecer... Estuvimos casi tres años bajo el mismo techo hasta que logré convencerla de escapar e ir a un lugar donde estuvieramos a salvo... Yo no sabia de tu existencia hasta que apareciste.

El hombre suavizó su tono de voz, con melancolía

-Nunca le dije la verdad.

-Tampoco cumpliste tu promesa.

Su mirada se dirigió al menor

-Le mentiste, le hiciste creer que iría a un lugar donde estaría a salvo... Dejaste que fuera al mundo real sola, porque no fuiste capaz de ir con ella. Le prometiste que en un año ibas a buscarla... Pero no lo hiciste.

Había rencor en sus palabras, eso tocó lo profundo del hombre a su lado, haciéndole sentir ese mismo vacío en su pecho

-Se las arregló sola para llegar a B06-32, esperó un año por ti, nunca llegaste. Entonces ese hombre bastardo-... nos dejó a nuestra suerte.

Cada palabra era más difícil de decir, pero estaba tan sosegado por su propio rencor que no sentía necesario parar hasta terminar de desahogarse

Lucas estaba asimilando todo de golpe

-Te esperó por muchos años hasta que un día se convenció de que habías muerto. No tienes idea cuanto tiempo cargó con eso y con todo lo demás sola... Mientras que todo este tiempo estuviste aquí, vivo.

Tahiel se puso de pie y miró a su padre con un pie sobre el escalón de la puerta, la vaga iluminación de la sala de armas le permitió ver las lágrimas en su mentón junto a la mirada de decepción en sus ojos

-Incluso si yo no hubiera existido... Ella no merecía esto.

-Tahiel.

-Y no te atrevas a decirme que no hubieras podido hacerlo. Ví tu cuaderno, leí todos tus pensamientos, planes, estrategias... Te conocí a través de esas páginas. Y todo este tiempo, te dí por muerto.

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