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☆ three.

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♡◞ chapter three 𓂃 «new couple»? no way... 😵‍💫💘

arda no es tan raro como creí

Chelsea se quedó mirando fijamente a Arda como si le acabase de confesar un asesinato, mientras que él estaba comenzando a preguntarse si había dicho algo malo o por qué lo miraba así.

¿Quizá sonó muy lanzado? ¿Tal vez no le agradó su sugerencia? ¿O simplemente seguía enojada por la actitud que había tenido con ella?

La expresión de Chelsea era inexpresiva, pero llena de interrogantes en la mente de Arda. Trató de recordar cada palabra que había dicho, repasando mentalmente la conversación en busca de alguna pista sobre lo que había provocado esa mirada intensa.

Dudaba que su sugerencia hubiera sido tan descabellada como para generar una reacción tan fuerte. Además, ella no parecía ser del tipo de persona que se ofendía fácilmente. Aunque no podía descartar la posibilidad de que algo en su tono o manera de expresarse hubiera sido inapropiado.

De repente, la posibilidad de que Chelsea todavía estuviera enojada por su actitud anterior comenzó a tomar fuerza en su cabeza. Sin más, Arda decidió enfrentar la situación y preguntar directamente.

- Okay... noto que me estás mirando de una manera extraña -mencionó, frunciendo el ceño-. ¿Sucede algo? ¿Hice o dije algo que te haya ofendido?

Chelsea dejó escapar un suspiro lento y profundo antes de responder.

- No, no es eso. No has dicho nada malo o inapropiado, simplemente me tomaste por sorpresa.

Arda se sintió aliviado al escuchar eso, aunque aún se sentía confundido.

- ¿Tan imprevisto fue?

Chelsea mantuvo su mirada fija en él mientras hablaba en voz baja.

- Sí, obvio. Mucho más después de que me hayas estado ignorando todo el tiempo.

Arda sintió un nudo en el estómago al escuchar sus palabras. Había sonado realmente estúpido y ahora se sentía avergonzado.

- Lo siento, de verdad. Sé que nada lo justifica, pero tengo mis razones de todos modos.

Chelsea asintió lentamente, no dándole mucha importancia y esperando a que en algún momento él le dijera sus razones. Al fin y al cabo, Arda había podido superar lo que sea que le atormentara y ahora le estaba hablando, que era lo importante.

- Sí, no te preocupes. No estoy enojada contigo -le aseguró, regalándole una sonrisa de boca cerrada.

Arda se sintió aliviado al ver que Chelsea no estaba enojada con él, pero aún seguía levemente preocupado por que ella siguiera pensando mal de su persona, así que ahora estaba dispuesto a cambiar la imagen que esta tenía.

- Me alegra saberlo, pero de todos modos quiero explicarte el por qué de mi actitud -prosiguió él, haciendo que ella se cruzara de brazos, indicándole que estaba esperando a que hablara-. Pero no aquí... ¿Qué tal si vamos a alguna cafetería? No conozco muchos lugares de la ciudad, así que realmente te agradecería si me dijeras alguno.

- Qué lindo, pero tendrá que ser otro día. Lo siento -se disculpó Chelsea, provocando que el contrario la mirase extrañado-. Aún me quedan varias compras por hacer. Además, cuando llegue a casa debo hacer unos trabajos de la universidad, así que hoy estoy realmente atareada.

- Oh... entiendo. No hay problema, podemos hacerlo otro día entonces. No quiero interrumpir tus planes.

Arda intentó disimular su decepción, pero Chelsea pudo notarla con claridad en su rostro. Se sentía un poco culpable al mentirle con respecto a que tenía planes, pero ya no había vuelta atrás.

Por lo poco que había visto, Arda le parecía dulce, pero tenía claro que debía hacerlo esforzarse un poco más si realmente quería salir con ella.

- Lo siento realmente, Arda. Pero definitivamente otro día será mejor. Te aviso cuando pueda.

Él asintió, intentando lucir relajado, pero su expresión de constipado lo ponía de inmediato en evidencia.

- Está bien, lo entenderé. Esperaré a que me avises entonces.

Se despidieron con una sonrisa amigable y cada uno siguió su propio camino. Arda se sentía un poco desilusionado, pero también entendía que Chelsea tenía sus propias responsabilidades. Prometió esperar pacientemente por su mensaje y tener la oportunidad de explicarle su comportamiento pasado.

Hasta que de repente, luego de analizar detenidamente sus palabras, pudo notar algo que no encajaba del todo.

«¿Trabajos de universidad? ¿No se supone que ya se acabó el ciclo académico?»

Arda comenzó a cuestionarse las palabras de Chelsea. Si el ciclo académico ya había terminado, ¿por qué seguía teniendo trabajos de la universidad? Parecía una excusa bastante débil para rechazar su invitación. ¿O quizá era indicación de que debería esforzarse un poco más para conseguir una salida con ella?

Sí, definitivamente podía ser eso.

Por parte de Chelsea, lo primero que hizo al llegar a su apartamento y entrar a su cuarto fue tirarse en la cama y marcarle a su mejor amigo. Solían contarse absolutamente todo, sin importar qué tan tonto fuera, así que evidentemente esta no sería la excepción.

- ¿Qué onda, Chels? -no tardó en escuchar la voz de Fede al otro lado de la línea-. ¿Pasa algo?

- Me encontré a Arda en el super -confesó, haciendo una pausa antes de continuar para añadirle más suspenso-. Y me habló.

- ¿Cómo? -el contrario no pudo ocultar su sorpresa-. Nah, no te lo puedo creer. ¿Es posta? ¿Qué te dijo? Contame todo, pelotuda.

La emoción en su tono de voz era evidente, lo que hizo extrañar levemente a la contraria. ¿Por qué le alegraba tanto que Arda por fin se haya atrevido a dirigirle la palabra? Ni que le hubiese confesado que estaba perdidamente enamorada de él.

Obviamente, Chelsea no tenía ni la más mínima idea de que la euforia de Fede se debía a que todo estaba marchando como debería, de acuerdo a su plan para juntarlos.

- Bue, no hablamos mucho... -decidió clarificar, en caso de que su amigo estuviese imaginándose una escena romántica de película americana-. Simplemente me ayudó a alcanzar una salsa a la que no podía llegar, hablamos un poco sobre eso y luego vimos que unas pibas nos estaban grabando, así que me propuso que fuéramos a hablar a un lugar más privado.

- ¿Cómo? -soltó él, casi que en un grito-. ¿Y qué le dijiste?

Chelsea frunció el ceño antes de responder. ¿No debería ya tener claro cuál había sido su respuesta? ¿O es que de verdad la creía así de estúpida?

- ¡Qué no, boludo! -exclamó, ligeramente ofendida-. ¿Vos qué crees, Federico? ¿Cómo iba a decirle que sí de una luego de cómo se comportó conmigo? Yo tengo amor propio.

- Bueno, tenés razón -pudo reconocer Fede-. Y me alegra ver que ahora sí tenés tu amor propio en cuenta, eh.

- Ya, no hablemos de eso -su amiga quiso evadir el tema rápidamente-. Y bueno, no alcanzamos a hablar de por qué me ignoraba, pero seguro la próxima vez que nos crucemos me lo dice -mencionó, esperando pacientemente a que él le dijera algo más. Al no recibir respuesta, no pudo evitar formar una mueca de confusión-. ¿Fede?

Sin embargo, el susodicho permaneció en silencio. Chelsea estaba comenzando a preocuparse y pensar lo peor, hasta que de repente, la voz de su mejor amigo se volvió a escuchar en el altavoz.

- Chels, tenés que ver esto.

Y justo cuando Fede pronunció aquellas palabras, casi enseguida el teléfono de Chelsea vibró por una notificación de Instagram. Rápidamente, le dio click a esta para ver de qué se trataba, preguntándose qué podría ser para que él sonara tan sorprendido.

Al momento en que sus orbes captaron lo que Fede quería que viera, no pudo evitar abrir sus ojos de par en par, no pudiendo creer lo que estaba en pantalla. Era una publicación de una página de chismes con varias fotos de ella y Arda en las que justamente lucían como dos tontos enamorados, y como descripción tenía «¿El surgimiento de una nueva pareja?».

Chelsea sintió una mezcla de frustración e impotencia frente a la intrusión en su vida personal. No podía entender cómo alguien podía sacar conclusiones tan precipitadas y malintencionadas solo por ver un par de fotos. Se preguntaba si sus expresiones de amabilidad hacia Arda durante esa breve interacción habían sido malinterpretadas o exageradas por la página de chismes.

El enfado empezó a transformarse en indignación. ¿Quién les daba el derecho de especular y difamar sobre su vida privada sin ningún fundamento? Se sentía vulnerada, expuesta a juicios y opiniones ajenas. Ni siquiera era una figura pública, pero estaba rodeada de varias personas que sí lo eran, y sabía bien que eso conllevaba a una pérdida de privacidad, pero no justificaba que se inventaran historias basadas en suposiciones sin fundamentos.

En lugar de dejar que el enojo se apoderara de ella, decidió canalizarlo de manera tranquila. Había aprendido que no podía controlar lo que los demás pensaban o decían, pero podía controlar su propia reacción. Tomó una respiración profunda y decidió cerrar la aplicación, disponiéndose a no darle importancia a esas estupideces, y mucho menos si venían de una página de chismes.

- ¿Estás-?

- Quiero partirle la cabeza a alguien -se apresuró en cortar la oración de Fede, expresando su frustración-. Es que no es posible, boludo. ¿Por qué siempre me pasan estas cosas?

Si algo era cierto, es que Chelsea era como una especie de imán para esas situaciones.

Al principio, cuando la gente no conocía bien qué tipo de relación mantenía con su mejor amigo, solían etiquetarla como «la otra» en la relación de Fede y Mina, tanto así que inclusive Mina tuvo que salir a aclarar públicamente que esos rumores eran completamente falsos, y que Chelsea y ella se llevaban de maravilla porque era como una hermanita para ella. Lo mismo fue con Fede.

Luego, cuando comenzó a hacerse más unida a Rodrygo, la gente empezó a afirmar que mantenía una relación de tipo amorosa con él. Así también había sido cuando la habían visto interactuar por redes con Pedri y Gavi. Y la lista seguía...

- Y, ni modo -prosiguió Fede como si nada-. Míralo también como algo bueno, Chels. No puede ser tan malo, ¿o sí? Me parece que hasta pegan ustedes dos, eh.

Chelsea no dijo nada. Simplemente largó un suspiro antes de ponerle fin a su llamada.

Después de una intensa sesión de entrenamiento, Arda, Jude y Brahim se encontraban sentados en el césped del campo de fútbol, disfrutando de un merecido descanso. El sol de la tarde bañaba el lugar con su cálida luz, creando un ambiente relajado.

- ¿Les puedo decir algo? -inquirió Arda, desenredando los cordones de sus botines.

Jude y Brahim intercambiaron miradas de manera fugaz antes de volver a mirar a su compañero y dar un asentimiento de cabeza, la curiosidad asomándose por sus rostros.

- Ayer por fin hablé con Chelsea, y... no lo sé. No hablamos mucho, pero me sentí bien con ella. Aunque ahora me siento algo raro.

Brahim se quedó en silencio, como si estuviese analizando detenidamente sus palabras. Y es que, al no tener un muy buen nivel de inglés, le costaba más entender ciertas cosas. Podía defenderse, sí, pero le faltaba para dominar el idioma.

Jude, lógicamente, entendió de una vez, así que no tardó en mirar a Arda con diversión mientras esbozaba una sonrisa de medio lado.

- Raro, ¿eh? ¿No será que ya te flechó?

Ante la mención de aquello, Arda entreabrió sus labios con sorpresa mientras sentía cómo poco a poco su rostro se iba enrojeciendo.

- No, no es eso -negó rápidamente-. Creo... -dijo para sí mismo, sintiéndose un tanto incómodo por la insinuación de Jude.

Brahim, al ver la reacción de su amigo, decidió intervenir para aliviar la tensión. Se las había podido ingeniar para entender de qué hablaban, así que consideró oportuno añadir algo.

- No creo que sea flechazo, Jude. Tal vez solo le agradó la compañía de Chelsea y eso le provocó cierta confusión, ¿verdad, Arda? -habló, costándole esto un poco, pero pudo lograr que ellos le entendieran.

Arda asintió lentamente mientras fruncía el ceño con extrañeza ante la mirada fija de Brahim sobre él.

- Sí... eso es justo lo que siento -admitió-. Me sentí bien hablando con ella, pero también me sorprendió esa sensación. No sé qué sea, pero es confuso.

Jude asintió con complicidad.

- Entiendo. A veces los sentimientos pueden ser confusos, y yo más que nadie lo sé, pero no te preocupes. Con el tiempo podrás darte cuenta de que estás flechado.

- Que no estoy flechado -contradijo Arda con expresión de cansancio-. Ella es linda y agradable, pero apenas la conozco. Además, ahora solamente quiero enfocarme en el fútbol.

- Eso también decía yo -molestó Jude, soltando una risita socarrona.

No muy lejos de ambos, se encontraba Rodrygo observándolos fijamente con el ceño fruncido, en especial a Arda.

No es que le cayese mal, simplemente se le hacía algo extraño y la idea de Fede definitivamente no comenzaba a agradarle. No entendía ni siquiera por qué él lucía tan encantado con alguien que apenas conocía.

- ¿Qué haces? -Vini lo sorprendió de repente apareciendo a su lado, lo que lo hizo dar un pequeño respingo que le robaría una carcajada a su amigo-. Pareces un acosador.

Él le dirigió una mala mirada antes de volver su vista al nuevo fichaje de su equipo, quien ahora reía en compañía de sus otros dos compañeros.

- Es que en serio no entiendo por qué Fede cree que Arda es para Chelsea -le dijo, cruzándose de brazos-. Ni siquiera se hablan.

- Te equivocas -su amigo le hizo saber, a lo que Rodrygo lo miró con curiosidad-. Hace un rato, escuché a Fede decirle a Jude que su plan iba de maravilla porque Chelsea y Arda ya se hablan.

- ¿Qué? -Rodrygo abrió sus ojos de par en par-. ¿Es en serio? ¿Qué brujería hizo o qué?

Vini se limitó a encogerse de hombros, dándole a entender que no tenía los detalles en ese momento, pero que Fede había logrado que Arda y Chelsea empezaran a interactuar de alguna manera. Porque sí, la realidad era que su breve interacción en el supermercado se había dado gracias a Fede.

Rodrygo se quedó pensativo, tratando de comprender cómo pudo haber sucedido. Mientras tanto, Arda continuaba riendo y divirtiéndose con el resto del equipo, ajeno a las sospechas que su compañero tenía sobre él.

Pasaron unos cuantos días y Rodrygo no pudo evitar seguir observando a Arda. A medida que lo iba conociendo mejor, empezó a darse cuenta de que no era tan extraño como había pensado inicialmente. De hecho, comenzó a apreciar su personalidad divertida y carismática. Parecía ser una persona genuina y amable, lo cual lo hacía aún más confuso para él.

De todos modos, según Vini, seguía comportándose «odioso» con él. No es que lo planeara, ni tampoco quería serlo, simplemente que en el momento le salía ser así. No era algo que pudiera controlar.

- ¿Sabés una cosa? Estos días he estado hablando más con Arda -le comentó Chelsea luego de darle un sorbo a su malteada de fresa-. Es buen pibe, muy al contrario de lo que pensaba de él al principio. Y ni siquiera es tan tímido, ¿viste? Solo es cuestión de que se sienta más a gusto acá, como apenas llega y es un ambiente re diferente.

- Últimamente hablas mucho de Arda -le dijo Rodrygo, riendo levemente-. No me digas que el plan de Fede está funcionando.

- Ya sabés que a mí los planes de Fede me chupan un huevo -le aclaró ella al instante, riendo de vuelta-. Está logrando que me caiga bien, sí, pero hasta ahí. Yo ahorita estoy enfocada en otras cosas.

Rodrygo asintió sin más. No estaba muy convencido de su respuesta, pero decidió no seguir tocando el tema. Después de todo, habían decidido salir para pasar un buen rato juntos en compañía de Vini, quien se había ido al baño hacía minutos atrás, así que no era momento de hablar de Arda.

- Pero bueno, ya que lo mencionás... -Rodrygo miró a Chelsea con atención-. ¿Te cae mal Arda o algo? No sé, me das esa impresión.

- ¿Quién? ¿A mí? Para nada -se apresuró en negarlo-. Es más, si me lo encontrara ahora mismo, lo invitaría a-

- Vaya, no pensé encontrármelos aquí.

Rápidamente, ambos se voltearon en dirección a donde provino esa voz, quedándose anonadados ante su mágica aparición.

- ¿Arda? Qué coincidencia -rió Chelsea-. ¿Qué haces aquí? Ven, siéntate con nosotros.

Antes de que Arda pudiera hacer algún movimiento, se quedó sobre su lugar y decidió clavar su mirada en Rodrygo.

- Si a Rodrygo no le molesta...

Ante su mención, el susodicho formó una mueca de confusión. ¿Acaso había estado siendo muy obvio con sus actitudes? ¿Quizá se había pasado de odioso con el pobre Arda?

Bajo las miradas atentas de Chelsea y Arda, Rodrygo soltó un suspiro y forzó una sonrisa.

- No, para nada.

HOLAAAAA, finalmente volví!! sé que me desaparecí por mucho, pero no les miento cuando les digo que cada vez que intentaba actualizar pasaba algo 😭

gracias a eso me dio un bloqueo y me costó más volver, pero finalmente estoy aquí y seré mucho más constante!! además, ya casi es el debut de arda 😝 recemos para que no le pase nada 🙏🏻

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