Capitulo 8
El primero de septiembre había llegado, y con él nuestros nervios se hacían más notables.
¿Y si nos perdíamos? ¿Si no llegábamos a tiempo? ¿Qué haremos para saber dónde carajos está la plataforma 9¾?
Dumbledore nos dió unos boletos de tren, pero estos decían que para abordar el tren a Hogwarts había que llegar a la plataforma 9¾. ¡Y que yo sepa sólo hay plataforma 9 y 10!
También nos dijo las instrucciones que debíamos de seguir, pero no confío en ellas. Dijo "Tomen un vehículo hasta la estación de King's Cross, acérquense a los letreros que indican las plataformas nueve y diez, para cuando ustedes lleguen, ya estará alguien ahí para mostrarles lo que tienen que hacer para entrar a la estación, tranquilos, enviaré a una persona". Pff.
Durante los días que tuvimos libres para empacar nuestras cosas y organizar todo, leí diferentes libros sobre Hogwarts, la historia de la magia, hechizos, criaturas mágicas y también investigué un poco sobre el tema de las varitas, ¡He incluso había un bebé que se había vuelto famoso por sobrevivir a una maldición imperdonable! Sí que tuvo suerte.
De los nervios que tenía me levanté a las 7:05 AM, y sin alarma, ¿Pueden creerlo?
Simon nos dijo que tenia todo arreglado para que nuestra carrera cómo artistas siguiera su camino mientras estábamos en Hogwarts, habíamos acordado que en las vacaciones de fin de año haríamos los tours, y en las vacaciones de navidad iríamos a nuestra casa en la ciudad para que las personas normales no sospecharan. Además de eso, teníamos que mantenernos activos en nuestras redes sociales para no levantar sospechas. Estaba todo más que arreglado.
Bajé a desayunar, serví cinco tazones de cereales ya que luego iría a levantar a los chicos, terminé de desayunar y subí a las habitaciones de los chicos con una botella de agua que tenia una tapa con varios agujeros, perforándola.
Entré a la habitación de Louis, lo sacudí un poco.
- Louis, despierta. Hoy vamos a Hogwarts, quiero que te vistan y te prepares, por favor - dije con delicadeza, sólo me respondió con un gruñido. Sonreí de lado, podría utilizar mi botella, así que eso hice. Lo rocié con el tarro, sacudiendo la botella de un lado a otro para que el agua lograra salir.
- ¡Aaagghh, Scarlette! - se cubrió la cara con su almohada - Está bien, está bien. Ya voy - dijo sentándose en la cama, sonreí victoriosa y dejé de lanzarle agua.
Me dirigí a la habitación de Liam he hice lo mismo que con Louis, sólo que no tuve que tirarle agua ya que él sí se paró casi inmediatamente.
Fui con Niall que se veía que dormía plácidamente, además roncaba. Así que sin siquiera preguntar, empecé a tirarle agua, hasta que quedó completamente empapado y el tarro quedó medio vacío. Y aún así no se levantaba.
- ¡¡NIALL DESPIERTA, EL DESAYUNO ESTÁ LISTO!! - grité con todas mis fuerzas, Niall alzó la cabeza aún medio dormido, significa que a penas y se descifró mis palabras.
- ¿Susurraste algo? - preguntó con los ojos entrecerrados y voz ronca.
- Que te levantes, te bañes, te arregles que hoy vamos a Hogwarts y no pienso llegar tarde por tu culpa - dije rodando los ojos, Niall volvió a recostar su cabeza en la almohada y a cerrar los ojos. Tuve que recurrir a mi arma secreta. - Y ya está servido el desayuno.
Cómo por arte de magia, Niall se levantó de la cama cómo flash y bajó al primer piso a desayunar.
Por último, me dirigí hacia la habitación de Harry. Éste estaba tendido en la cama usando sólo boxers y las sábanas las había tirado por toda la habitación, seguro le dio calor anoche, siempre hace eso inconscientemente mientras duerma cuando hace calor.
Me lancé a la cama, quedando arriba de su espalda, ya que estaba boca abajo, pude escuchar cómo se quejó levemente.
- Harry, despierta, hoy vamos a Hogwarts. Debes bañarte y prepararte o se nos hará tarde - moví levemente su hombro, pero sólo recibí otro gruñido de su parte. Recurrí a mi plan B, con la botella hice exactamente lo mismo que con Louis, sólo que únicamente en su espalda, pero sólo gruñó un poco más fuerte ésta vez. Bien.. plan C? Improvisaré entonces.
Empecé a hacerle cosquillas a Harry, ya que es muy cosquilloso, éste se retorció por toda la cama, pero no se logró librar de mi, bien el plan C estaba dando resultados. Sin previo aviso fue Harry quién se puso arriba de mi y me empezó a hacer cosquillas, el problema es que yo también era muy cosquillosa.
Empecé a dar patadas a todas las direcciones posibles y a reír muy fuerte, mientras sentía un gran dolor de estómago, ya me estaba quedando sin aire. Harry también reía levemente mientras me veía.
Hasta que por fin paró de hacerme cosquillas, y pude respirar, mi respiración era agitada así que traté de normalizarla, con mis brazos traté de quitármelo de encima y lo logré así que me senté a su lado.
- Oye, intentemos algo - propuso mirándome cómplice. Acepté sin siquiera saber de qué se trataba.
Sí, Harry técnicamente me obligó a hacer lo de la foto de arriba.
En el último intento, pierdo el equilibro bastante y terminé cayendo sobre Harry, sacándole todo el aire. Oops.. fue su idea.
Miré la hora: ¡¡¿8:56 AM?!! ¿En qué momento pasó eso?
Le avisé a Harry de la hora y le dije que se arreglara, salí de la habitación de Harry corriendo, tenia que bañarme.
Me duché y me puse un vestido color verde de mi marca favorita de ropa muggle, Mattelsa. Es que simplemente la amo, es tan perfecta y tienen de todo, para toda ocasión y justo lo que deseo (De hecho no sé lo que deseo hasta que lo veo en Mattelsa). Combiné el vestido con unos converse completamente blancos. Quizá no combinaba bien desde el punto de vista de otras personas, pero a mí, me encantaba.
Aplanché mi cabello, porque la primera impresión es lo que importa(Sin contar el hecho de que siempre que salíamos, nos fotografiaban) . Me maquillé con algo simple, ya que no iba a ser tan necesario estar maquillada por allá, así que sólo delinee mis ojos, me hice la raya en la esquina del ojo que todas se hacen, y por milagro me quedó bien hecha, me eché corrector, base y polvos para que mi cara no se viera tan.. ogro.
Bajé al primer piso dónde Harry era el último que estaba desayunando, además de que veía televisión y no se había bañado. Me empecé a alterar al verlo ahí sentado cómo si nada.
Ya Liam y Niall ya estaban duchados y vestidos y ya habían bajado y Louis cómo siempre ataba sus cordones al pie de las escaleras.
- ¿Alguien me dice la hora por favor? - pregunté sin mirar, caminando de un lado a otro.
- 10:30 AM - dijo Louis al terminar de atar sus cordones. Ya estaba listo.
Fui directo a la sala furiosa, dónde se encontraba Harry.
- ¡Harry Edward Styles Cox! ¡Ve a arreglarte ahora mismo o me conocerás enojada - grité poniéndome frente al televisor, tapándole la vista a éste a Harry.
- ¿Pero no estás enojada ya? - preguntó relajadamente.
Asgaujaljupe pero es que a este man le ENCANTA hacerme enojar.
Desconecté el televisor con algo de brusquedad, y le quité el tazón de cereales (que ya estaba vacío) de las manos. Alcé una ceja y me crucé de brazos viéndolo.
- Harry.. Sabes que odio llegar tarde a algún lugar, podrías por favor pararte he ir a arreglarte lo más rápido posible - mi voz sale más tranquila y pausada de lo que planeaba.
Al final Louis ha terminado persiguiendo a Harry hasta su habitación con una escoba. ¿Que esperaban? ¿Que fuera yo? Perdón mis amores, pero no voy a arruinar mi cabello. Antes muerta que sencilla, bebé. 💅
A las 10:43 AM Harry ya estaba duchado y listo a mi lado. ¿Cómo era eso posible? Si yo tardé cómo dos horas en organizarme, agh.
En fin, tomamos nuestras cosas y pedimos un taxi, cómo pudimos metimos nuestras cosas en la cajuela del taxi. Adelante con nosotros iban Percy y Atila. Eran las "mascotas" que habíamos comprado en el callejón diagon.
Percy es una majestuosa lechuza (casi escribo lechuga) blanca cómo la nieve y la punta de sus plumas son color azul; con unos hermosos ojos negros. Percy era pertenencia de todos nosotros, ya que sería raro si camináramos por las calles muggle con cinco lechuzas, una por cada uno; además con una era suficiente para el uso de todos. Mientras que Atila es mi gata, es una linda siamés con pelaje largo y sus ojos azules claros característicos de ésta clase de gatos; lo que la diferenciaba de los demás gatos, es que tiene un pequeño lunar cerca de su hocico con forma de luna.
En menos de 8 minutos ya estábamos en la entrada de la estación de King's Cross. Al salir del taxi me puse mis gafas de sol, ya que descubrí que había un paparazzi entre los arbustos y no quería que el flash me cegara.
Los chicos y yo sacamos nuestras maletas y las demás cosas. Niall llevaba a Percy y yo me encargué de Atila, ya que es mi bebé y jamás la dejaría sola.
Caminamos hacia el interior de la estación, por suerte, dentro de ésta no estaban permitidos los paparazzi, eso era lo que me encantaba de King's Cross.
Tomé el brazo de Liam para sentirme un poco más segura, mientras con el otro brazo cargaba a Atila.
Seguimos las instrucciones de Dumbledore y estábamos esperando bajo los letreros que nos indicaban las plataformas nueve y diez. Intentamos disimular lo más que pudimos ya que sería raro, miramos hacia los lados de vez en cuando y fingíamos hablar varias veces.
- ¡Chicos! ¡Hola, por aquí! - escuché la voz de Molly Weasley e inmediatamente me giré, le sonreí cómo saludo para luego quitarme las gafas de sol y llevarlas en mano. - ¿Cómo están? Me imagino que bien, es una alegría volverlos a ver por aquí. Dumbledore me pidió que los guiara para pasar a la estación.
Nos sonrió amablemente, nosotros le devolvimos la sonrisa, estábamos agradecidos de que fuera verdad lo que había dicho Dumbledore. No es que no le hubiéramos creído, pero siempre queda la duda.
Molly nos explicó que había que atravesar la pared, pasando entre los números nueve y diez. No le creíamos hasta que Percy Weasley pasó y verdaderamente cruzó la pared sin golpearse.
Al parecer tenemos el hábito de no creer nunca.
Luego pasaron los gemelos, y justo cuando íbamos a pasar nosotros un chico interrumpe.
- Disculpe, ¿Podría decirme cómo... cruzar? - me dediqué a detallarlo mientras Molly le explicaba con una sonrisa. Cabello negro azabache, ojos azules, gafas, ropa holgada y un poco sucia.
Los chicos y yo cruzamos hacia la estación, y efectivamente estábamos en la plataforma 9¾, había una gran multitud apresurada, padres despidiéndose de sus hijos, estudiantes subiendo sus baúles y familias dando la triste despedida.
Lamento no actualizar, pero les prometo que todos los fines de semana, intentaré subir un capitulo.
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