Esta semana los niños saldrían más temprano de la escuela debido al festival de otoño que había iniciado. Debido a eso, luego de que llegaron de la escuela y se cambiaron el uniforme fuimos a la plaza donde era el festival, todo estaba decorado con colores cálidos que iban a tono con las hojas de colores de los árboles por esta temporada. Habíamos venido con los hermanos de Tae, la mayoría de las personas se encontraban aquí mirando las manualidades hechas por unos, los talleres creados por otros y exquisitos platos para el paladar.

Muchos niños corrían de un lado a otro, SoYi quiso participar en el juego de arquería, tenía una excelente puntería, YuLi había jugado con SeJoo arrojando algunos aros a un grupo de botellas, mi madre no dejaba de reírse con las ocurrencias de YuLi, Jin y WonYoung habían ido a un puesto de comida mientras que NamJoon con YooJung y la niña fueron a ver qué tipo de talleres había.

—Appa, ¿Me compras un algodón de azúcar? —EunHo señala aquellos algodones de colores pasteles, va tomando de la mano a Tae.

—¿De qué color lo quieres?

—¡Yo quiero uno de formas! —YuLi se acerca—Quiero uno de flor.

—Tú no puedes comer mucha azúcar porque enloqueces más—acaricio su cabello— ¿SoYi quieres uno?

—Sí—asiente.

—Compraré dos y lo compartirán con sus hermanos—TaeHyung saca algo de dinero de su cartera pidiendo los algodones para los niños. EunHo y SeJoo piden uno con la mitad azul mientras que la otra mitad es blanca representando sus dos colores favoritos, el algodón de azúcar con forma de flor de las niñas es morado y amarillo— ¿Te apetece algo, AeRin?

—Tengo algo de sed.

—Buscaré algo de beber, ya regreso—se aleja. Me agacho a la altura de SeJoo y EunHo ayudándoles a dividir el algodón por partes iguales.

—¡Hola niños! —HeeJin sonríe con sus manos metidas en los bolsillos de su suéter, viene acompañada de Joy— ¿Qué están comiendo?

—¡Algodón de azúcar! —EunHo sonríe dándole un mordisco.

—Omma, ya vuelvo—SoYi se aleja.

—¿Dónde está TaeHyung? —HeeJin me mira. Era la única de los hermanos Jeon que quedaba en este pueblo ya que sus hermanos habían tomado rumbos diferentes, bueno, Somi estaba en Seúl estudiando y SoYeon seguía en Seúl sólo que ahora vivía con Hoseok, su pareja.

—Fue a buscar algo de beber, ¿Todo bien?

—Todo bien—asiente—Hoy es mi día libre en la veterinaria, quise venir para distraerme un poco, me conseguí con Joy en el camino...

—¿Quieres un poco, Joy? —escucho a EunHo ofrecerle a la chica, ésta sonríe enternecida y acepta encantada.

—Muchas gracias, cielo.

—Oh, hola, señora Song—HeeJin hace una reverencia a mi madre.

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Los niños se encuentran por allí con TaeHyung y NamJoon. WonYoung tuvo que regresar a casa junto a Jin ya que estaba teniendo náuseas sintiéndose indispuesta, YooJung comía un trozo de tarta de calabaza, mi madre veía los puestos de artesanales con interés, estaba en un banco con una mesa acompañada de YooJung y HeeJin.

Joy había regresado a casa.

—Esa amiga tuya es algo rara—dice YooJung a la chica veterinaria.

—¿Joy? —ladea su cabeza—Ella es muy amable.

—Para AeRin no lo es.

HeeJin me mira confusa.

—¿Ocurrió algo?

—No.

—Mentira, a ella le incomoda esa fascinación que tiene la chica por el niño y por TaeHyung.

—Oh, no—sonríe divertida y algo nostálgica—Quizás sea porque le trae recuerdos, perder a las dos personas que amas no es sencillo—bebe un poco de agua de su botella mientras YooJung y yo esperamos a que continúe— ¿Qué?

—¿A qué te refieres con que perdió a las dos personas que amaba? —pregunto—Ella nos dijo que había venido a Winter Bear porque tuvo problemas en Seúl...

—Ella perdió a su esposo y su hijo en un accidente—explica. Ambas guardamos silencio escuchándola—El auto cayó a un lago, Joy intentó sacar a su esposo y su hijo, pero no lo logró.

—Dios mío—YooJung cubre su mano con su boca.

—¿Ellos...se ahogaron?

—Así es, ella se vino aquí queriendo alejarse de todo—me mira—Pensé que conocías la historia considerando lo rápido que los chismes vuelan en este pueblo.

Mi mente procesa aquello unos minutos, sé perfectamente el temor de perder un hijo porque enloquecí cuando las niñas tuvieron aquel accidente en moto y cuando SoYi estuvo en coma, pero no conozco esa sensación de haber perdido un hijo. Joy nos había dicho que tuvo algunos problemas en Seúl, pero no dio detalles, en su casa no había fotos de ellos, supongo que la herida seguía abierta en ella.

—¿Cuántos años tenía su hijo?

—Exactamente la misma edad de EunHo.

Aquello me causa un dolor en el pecho, por eso su adoración al niño, no es porque intente quitarme a TaeHyung ni porque intente molestarme, es que ellos dos les recuerdan a las dos personas que perdió.

Sin ser capaz de preguntar más, guardo silencio.

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Hace mucho que no me sentaba en el porche a mirar las estrellas, cuando llegué a Winter Bear y no podía dormir esta era una costumbre que me gustó seguir cada noche. Balanceándome despacio en el banco fuera de casa me abrazo a mí misma con algo de frío por la suave brisa, respiro profundo mirando el cielo oscuro donde pequeños puntos brillantes se encuentran.

—¿AeRin? —una voz ronca me hace voltear. TaeHyung viene somnoliento y con una manta cubriendo sus hombros. Sonrío un poco dejando que se acerque, me cubre con la manta y es como si nada hubiera cambiado— ¿Qué haces aquí?

—¿Qué haces despierto a esta hora? —miro su cabello moverse por la brisa.

—Cuando giré en la cama no pude abrazarte—hace un puchero rodeándome con sus brazos— ¿Estás bien?

—Ujum.

Ante eso me mira frunciendo el ceño un poco.

—Te conozco, ¿Qué ocurre? —su voz sigue siendo un poco ronca por el sueño.

—¿Tú...sabías sobre Joy? —pregunto en voz baja mirándolo—HeeJin nos dijo cuando estábamos a solas que ella tuvo un accidente en Seúl—su ceño está ligeramente fruncido—Ella perdió a su hijo y su esposo en ese accidente.

—¿Qué? —parpadea varias veces un poco más despierto—No sabía nada de eso, sólo sabía que había salido de Seúl hacia acá, nada más—me mira— ¿Eso es lo que te tiene pensativa?

—Me siento mal por haberla visto como una enemiga—respiro profundo mirando algunos arbustos moverse con la brisa—No puedo imaginarme lo terrible que debió haber sido para ella no poder salvarlos de ese auto.

—¿Otro auto los embistió? —pregunta.

—HeeJin dijo que el auto cayó al lago—niego con la cabeza—Ella no pudo salvarlos—lo miro—Sabes lo mal que me sentí cuando las niñas tuvieron ese accidente en moto, sabes lo asustada que estuve de perderlas y más aún cuando SoYi cayó en coma.

—Lo sé—acaricia mi espalda y recuesto mi cabeza en su hombro—Sé perfectamente cómo te sentiste, todos lo sabemos—besa mi cabeza—No tienes que torturarte, AeRin.

—No estoy torturándome, sólo pienso que si algo así ocurriera con mi familia...no podría tolerarlo—mis ojos arden un poco, Tae toma mi rostro entre sus manos depositando un corto beso a mis labios.

—No pienses en cosas negativas, tu familia está aquí, estamos contigo y seguiremos contigo, ¿De acuerdo?

—De acuerdo—sonrío un poco dejando que me rodee con sus brazos una vez más, ambos nos quedamos en silencio mirando las estrellas, una costumbre que habíamos perdido un poco.