V Í C T O R

Para el pequeño Víctor la vida siempre fue sencilla: tenía unos padres amorosos que siempre le otorgaban lo que quisiera. Y no era para menos, puesto que era hijo único.

Sin embargo, su burbuja de felicidad explotó una madrugada plateada cuando, en el cuarto justo debajo de sus pies, su madre cometió un homicidio y suicidio disparando una bala de nueve milímetros en la sien de su marido infiel, y luego otra en la de ella.

Con tan sólo dieciséis años de edad se vio obligado a enfrentar la cruda realidad en que vivía.

Sin familia, sin hogar y sin dinero, el camino fácil fue su mejor opción: aprendió a infiltrarse en redes informáticas y realizar pequeños robos para satisfacer sus necesidades básicas.

El día en que estuvo a punto de rendirse completamente, llegaron los CoMPaS, y lo ayudaron a salir adelante.

Así que Víctor, con la necesidad de devolver ese favor, se unió a ellos.

Víctor fue una persona maravillosa, con dotes y deseos maravillosos. Su problema fue, quizá, el hecho de que vivía pegado al pasado.

Por más que intentó, él nunca pudo salir adelante.

Inconscientemente, se convenció a sí mismo de que era el culpable de la muerte de sus padres.

Era una pobre alma desgraciada. 

No pude evitar deleitarme con las tragedias que evocaba su atormentado espíritu.

Pero entendí que él tampoco merecía tanto sufrimiento. Así que le concedí lo que más anhelaba: desaparecer.

Ahora, el alma de Víctor es libre. Libre de rencores, libre de tragedias.

Es una lástima que no pueda aprovechar su libertad porque, a pesar de todo, no se libra de mi castigo.

Su alma fue apodada como El alma que cargaba desgracias ajenas. 

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ush, ¿quién crees que sea el siguiente en la lista de la bruja?